Los mejores comics de 2013. Y alguno de los peores, también.

De este 2013 que termino esta semana se podrán decir muchas cosas, pero no que fuese malo para el mundo del comic. Es verdad que se han publicado comics malo, algunos realmente muy malos, y que hay editoriales que parecen decididas a suicidarse creativamente hablando, pero si hacemos un balance general de lo que se ha publicado este año, yo diría que lo bueno que hemos leído supera con mucho las decepciones que nos hemos tenido que tragar.

Quizás no sea el mejor cómic de 2013, pero me atrevería a decir que si que es la mejor portada de todo el año

De lo que no ha sido el año es de los crossovers. No se puede acusar a Marvel de no haberlo intentado con todas su fuerzas, en verano tuvimos Age of Ultron, la serie con la que Brian Michael Bendis se despedía de los Vengadores y que desearía no haber leído. Pese a que no tenía un punto de partida especialmente original yo esperaba encontrar al menos algo entretenido, pero no hubo manera, lo que nos encontramos tras su lectura fue una historia sin demasiado sentido y estirada de forma infame de la que es difícil destacar algo bueno. Bendis volvió a intentarlo tras el verano en compañía de Jason Aaron y Brian Wood con Battle of The Atom, la saga que aglutinaba a las principales series de mutantes. Esta historia empezó realmente bien, era divertida, la historia avanzaba a buen ritmo y te dejaba con ganas de mas, pero hacia el final se desinflo de mala manera y dio la impresión de que todo había sido una simple excusa para sacar a los X-Men originales de la escuela de Logan. Y luego esta Infinity, un evento tan rematadamente malo del que ya no sabemos que mas decir… Excepto que tú antes molabas Hickman.  Y de este último no podemos olvidarnos de sus Vengadores, ya que Hickman ha conseguido que la que había sido mi franquicia favorita de la editorial se convirtiera en una estiradísima paja mental que deja en pañales a su S.H.I.E.L.D.

De los crossovers hay que huir como de la peste

DC por su parte ha seguido en su línea habitual de los últimos años, línea editorial que parece consistir en imitar lo peor de lo peor de la década de los 90. Aunque la diferencia con aquella década es que aquí en lugar de ver como tus artistas de renombre se largan y tienes que reemplazarlos por gente mediocre, DC se ha dedicado a dar trabajo a los mediocres y espantar, o directamente despedir a grandísimos autores como Kevin Maguire, JH Williams III, James Robinson o Rags Morales… En serio ¿Qué es lo que pasa por la cabeza de esta gente? De sus “grandes eventos” como el mes de los villanos o Forever Evil casi mejor ni hablar, están consiguiendo que cosas como “Underworld Unleashed” parezcan obras maestras, y mejor que nadie me pregunte lo que me ha parecido la mamarrachada que han hecho con la Justice League 3000…

Definitivamente esta panda siguen siendo de lo peor de todo el año y seguramente lo sean del 2014 que acaba de comenzar

Pero afortunadamente no todo ha sido malo en el mundo del cómic, en la propia DC aun queda algún comic que otro que vale la pena leer como el All-Star Western de Palmiotti y Gray o los ambientados en mundos alternativos como Batman/Superman Beyond e Injustice. La línea Vertigo por su parte pese a estar medio desmantelada y que se las han arreglado incluso para espantar a Karen Berger, aun publica alguna cosilla interesante que otra. The Wake de Scott Snyder y Sean Gordon Murphy, Federal Bureau of Physics, El Trillium de Jeff Lemire, el Tom Strong de Sprouse o la nueva etapa del Astro City de Kurt Busiek son lecturas que valen la pena aunque estén muy lejos de la edad de oro del sello editorial. De aquellos tiempos lo único que nos queda es el prometedor regreso de Neil Gaiman a su personaje más famoso en Sandman: Overture acompañado por JH Williams III en el que será su último trabajo para DC en una larga temporada.

¡Un cómic bueno de DC!

Marvel por suerte mantiene mejor el nivel que su eterno rival y pese a los lamentables crossovers, muchas de sus series regulares mantienen un nivel altísimo. Es imposible hablar de lo bueno de este año sin mencionar el impresionante trabajo que está haciendo Dan Slott con Spiderman. Desde el, para algunos, polémico cambio que ha supuesto el Superior Spiderman, esta se ha convertido en una de las lecturas imprescindibles del cómic estadounidense. Un cómic divertidísimo en el que por mucho que se empeñen algunos, lo que se nota a cada página es el inmenso cariño que siente Slott por Peter Parker. Mark Waid por su parte nos ha dado una de las etapas más divertidas y emocionantes que Daredevil ha tenido en muchísimo tiempo, gracias en parte al inestimable trabajo de grandísimos dibujantes como Chris Samnee, Marcos Martín o Paolo Rivera entre otros.

Lo que esta haciendo Slott con Spiderman esta siendo memorable

Thor es otra serie que este año ha empezado de forma inmejorable. Jason Aaron ya había demostrado en Wolverine and the X-Men que era un gran escritor, pero es que en Thor ha sido capaz de dejar en pañales a todos los que se han encargado del personaje desde que Walter Simonson dejo la serie hace décadas (bueno, eso si no contamos el Mighty Avenger de Roger Langridge y Chris Samnee) en una serie de historias a cada cual mas épica que la anterior. Y si el Dios del Trueno está disfrutando de una buenísima etapa, una de las series en las que aparece no lo está haciendo nada mal tampoco. Los Uncanny Avengers de Rick Remender, pese a encontrarse algo marginados por la editorial, o quizás precisamente gracias a eso, han conseguido convertirse para mí en LA serie de los Vengadores, un comic en el que los personajes parecen ellos mismos y viven una serie de aventuras que casi parecen una montaña rusa y de las que Hickman debería tomar nota. A Remender debemos agradecerle también su etapa en el Capitán América, una etapa que se preveía difícil ya que le tocaba tomar las riendas de la serie tras la larguísima etapa de Ed Brubaker. Pero hasta el momento Remender  ha conseguido aguantar el tipo con una etapa que ha comenzado de la mejor manera posible, homenajeando al Gran Jack Kirby, y en la que estaos viendo como el Capitán América tiene que replantearse su vida tras perder todo lo que le importaba y eso enfrentándose a una nueva amenaza tras otra sin poder tomarse un respiro .

Menos mal que aun queda alguna serie de los Vengadores que merece la pena leer

No podemos olvidarnos tampoco del trabajo de Kieron Gillen, quien tras su grandísima reinterpretación de Loki en las páginas de Journey Into Mystery, se había puesto el listón muy alto y quien ha seguido su camino en Marvel de una forma un tanto irregular. Por un lado tenemos un Iron Man descafeinado con más buenas intenciones que resultados. Se agradece la idea de añadir nuevas capas al personaje y descubrirnos nuevas facetas de Tony Stark, pero entre lo horrendo del trabajo de Greg Land y que parece que Gillen aun no acaba de pillarle el punto al personaje, esta serie es algo sosilla siendo generosos. Pero por otro lado tenemos su (cortísima) etapa en los Young Avengers, en la que junto a su viejo amigo y compañero de fatigas Jamie Mckelvie, retoman las aventuras de estos héroes juveniles de los que Marvel se acuerda de forma intermitente y en las que recupera a Kid Loki. Aquí sí que encontramos al Gillen que sabe como emocionar a sus lectores y dejarles con el corazón en un puño… para luego destrozarlo a pisotones.

Ha sido una etapa corta pero muy intensa

Pero este año quienes sin duda se ha llevado el gato al agua han sido los comics publicados fuera de las “dos grandes”. Para Image el 2013 ha sido un gran año, ya que pese a que Robert Kirkman se esta desinflando a pasos agigantados y parece incapaz de recuperar el buen hacer que tenia antaño, la editorial no esta falta de talento precisamente. Pero es que aparte del talento de quienes se encuentran detrás de otras series, lo otro que debemos agradecerle a Image es la gran diversidad de sus títulos. De entrada nos encontramos con que el Saga de Brian K. Vaughan y Fiona Staples sigue siendo uno de los comics mas sólidos del mercado, pero es que además de esto nos encontramos con el desolador, y aterradoramente realista, futuro que nos presentan Greg Rucka y Michael Lark en Lazarus, el espionaje nostálgico de Ed Brubacker y Steve Epting en Velvet, ese vistazo diferente a los superhéroes que nos presenta Joe Casey en Bounce y Sex, los científicos locos de Manhattan Projects y esa guerra entre la humanidad y el apocalipsis de East to West que nos recuerdan que Hickman cuando quiere sabe escribir, la revisión de los mitos sobre los espartanos del Three de Kieron Gillen y Jordie Bellaire, la ciencia ficción retrofuturista del Black Science de Rick Remender y Mateo Scalera, la supermujer del futuro de la Mara de Brian Wood, las aventuras pulp del  Five Ghosts de Frank J. Barbiere y Chris Mooneyham o la para mi gran sorpresa del año, la alocada comedia sobre sexo y superpoderes del Sex Criminals de Matt Fraction y Chip Zdarsky entre muchas otras. Y eso que dejo fuera muchas que aun no he tenido tiempo de leer, pero no se puede negar que ahora mismo Image en cuanto a calidad y diversidad ha superado con creces a las tradicionales dos grandes.

Lo de Image este pasado año ha sido impresionante

Pero no se queda en Image la cosa, de Dark Horse me gustaría destacar el trabajo de Brian Wood, su The Massive continua con buena calidad pero un ritmo en ocasiones insoportablemente lento, pero a mejor ritmo va su visión de los personajes de Star Wars en donde nos cuenta que les sucedió tras la destrucción de la primera estrella de la muerte. En Oni Press tenemos un particular encuentro en la tercera fase en el Letter 44 de Charles Soule y un inquietante thriller de ciencia ficción en The Bunker de Joshua Hale Fialkov. Top Shelf por su parte nos trae la última entrega ambientada en el mundo de The League of Extraordinary Gentlemen en las páginas del Nemo: Heart of Ice de Alan Moore y Kevin O’Neill. Y no podemos olvidar uno de los mejores comics del año, el Private Eye de Brian K. Vaughan y Marcos Martin, quienes pasando de editoriales, están distribuyendo digitalmente a cambio de la voluntad las aventuras de este particular detective privado en un futuro en el que la privacidad es algo más que un derecho, es una obligación.

Si hubiéramos hecho un top tradicional esta serie estaría en uno de los primerísimos puestos

Es cierto que siguen habiendo grandes meteduras de pata, comics que debería ser delito malgastar papel en publicarlos y directivos de editoriales a los que se debería alejar de cualquier puesto de responsabilidad (¡Si, te estoy mirando a ti cúpula de DC!) Pero lo que nadie puede negar es que resulta más que evidente que el 2013 ha sido un año inmejorable para el mundo del comic. Desde Brainstomping solo nos queda desear que el 2014 nos traiga vacaciones más duraderas y que los comics que leamos sean incluso aun mejor, aunque eso suponga que acabemos con los ojos sangrando de tanto leer.