Querido diario:
No veas tu la cara que llevaba el pesado de Marce Ventoso cuando lo tiramos por la ventana, ¡me encanta ver cómo los sobraditos esos se dan cuenta de que ya no tienen suelo bajo los pies! Seguro que mientras iba cayendo 130 pisos iba pensando que iba a poder salvarse de alguna manera milagrosa gracias a la fuerza o algo parecido, porque claro, estas cosas siempre les salen bien. No tienen vergüenza estos sinvergüenzas ni nada, menos mal que ya no me queda mucho por soportarlos. Que, otro que tal fue el moco verde cansino ese, vendedor de motos profesional con la profundidad filosófica de una galleta de la suerte y que aun así se me acabó escapando, el muy. Seguro que pensó que con pegarse un rato conmigo y dejarse tirar unos cuantos escaños encima ya cubría el expediente, pero todos sabemos muy bien que lo que es es un puto vago que no ha dado un palo al agua en su vida y esta vez solo quería escurrir el bulto otra vez. No tiene morro el nota ni nada… Que sí, que ha sido un día en el que han pasado muchas cosas, pero yo te quería hablar de otra cosa.

Porque se me ha vuelto a suicidar mi psicólogo, y me he dado cuenta de que lo mío no es hacer terapia con un ser vivo, que mejor la hago con un ordenador. Así que por eso escribo aquí y santas pascuas, que total si mi terapeuta me tiene que guardar el secreto mejor lo haga mi ordenador personal que éso no lo va a leer nadie, ¿no? Quiero decir, no es como si un jedi pudiera leerle la mente a un ordenador, en un ordenador los datos están seguros hasta que alguien entre aquí, no lo pueden leer de lejos con nada, hay que meter la llave y si no va. Creo. Bueno, que como siempre me lío, yo iba a hablar de que creo que me he pasado. Igual. Un poco. Que cuando uno se pone y se lo está pasando tan bien y ve que todo encaja a las mil maravillas, pues como que igual pierde un poco la perspectiva. Yo sé que no soy ningún santo, pero los jedi esos tampoco lo eran, que sé de sobra que lo mío ha sido legítima defensa, o ellos o yo. Que ya le vi yo la mirada asesina a Marcelino, que en cuanto se enteró de que yo usaba la Fuerza de maneras más creativas que él enseguida quiso matarme, ni juicio ni consejo de guerra ni gaitas, matarme en el sitio y santas pascuas. Porque me consideran «peligroso». A mi. Yo. Peligroso, ¡anda por ahi! ¡Si llevaba años sin matar a nadie con mis propias manos! Un santo varón en lo que soy, ¿tú sabes la de veces que he tenido el cuello de la petarda de la Amidala a mano y ni siquiera lo he retorcido un poquito? Ni un arañazo, ni un mordisco, ni un pisotearlo un poco asín como por descuido, nada. Todo sonrisas y buenas palabras, y éso que sé de sobra que la muy está votando en contra a todas mis propuestas legislativas. Que me hace oposición pero así, a lo bajini, a escondidas, como si tuviera miedo de que la detuviera o algo. Que a ver, no me des excusas, ¿eh? ¡Que yo encantado de ejecutarla por alta traición! ¡Que me digan dónde que firmo ahora mismo!

Pero bueno, que éso. Que igual me he pasado. Que quieras que no la chica me cae gorda aunque esté como un palo anoréxico, ¡si es que es cabezona la tía, no sé lo que ve Ani en ella! Y sí, éso, Ani. Que creo que me he pasado con él. Que a ver, sí, tenía que defenderme, tenía que ser más listo que nadie y hacerme amigo de éste y del otro, ¡cogerle cariño al Ani ha sido un daño colateral! Bueno, a ver, cariño. Entendamos «cariño». Que tengo que ser honesto para que la terapia funcione, ¿vale? Yo me descojonaba vivo cuando se enteró de que había matado a la madre de sus hijos después de haber traicionado todo lo que creía y a todos los que quería solo para poder salvarla, pero chico, ¡es que era tan gracioso! Lo veías ahí gritando nooooooooooo, noooooooooooooo como el niñato con problemas afectivos que es, con un padre ausente (que juro que no soy yo, ¿eh?) y una madre más ausente todavía porque lo separaron de ella antes de tiempo. Que mira que son zoquetes los jedi, separar a un niño de su madre cuando piensan que es el elegido superpoderoso y no sé que sandeces. ¡Si es que me lo dejaron botando! Yo vi al niño con más midiclorianos que neuronas y dije «tate, a ejercer de abuelito entrañable» y el chaval picó con nada. Es que no tuve ni que esforzarme, porque los jedi estos son unos acelgas que no le daban cariño ni nada. En nada lo tenía comiendo en mi mano, ¡la de veces que le regalaba cosas por su cumpleaños que tenía que guardar en mi apartamento para que no se las confiscaran los amargaos esos!

En fin, que al principio hacía gracia pero ahora el chaval es un muermo. Se arrastra por las esquinas y a veces lo oigo llorar dentro de su armadura de setenta millones de créditos (y eso sin ajustarlo a inflación, que la guerra no ayudado) así que pues me tengo que preguntar cosas, ¿sabes? Porque igual le he destrozado la vida demasiado. Igual podía haber salvado a su mujer, o algo. Que la verdad es que tampoco tengo mucha idea de que ha sido de ella, que dicen en el pueblo que se murió en el parto y no sobrevivió ni ella ni el niño, pero allí lo mismo mienten que son mucho de eso, no te puedes fiar de esos traidores. Que ahora que lo pienso, también podría clonarle a su señora y decirle que es ella, que la hemos resucitado con el poder de la Fuerza o algo así, igual éso lo anima un poco.
Pfff… ¡A quién quiero engañar! ¡El niñato era el primero que habría ido a por mi de haber podido! Además, seguro que cazando unos cuantos jedis se desahoga y se olvida enseguida de la petarda esa. Total, después del churruscamiento pocas gónadas le deben de quedar para echarla de menos, que seguro que todo lo que siente son reflejos esos de los amputados, ruido fantasma o algo. Si es que a veces me preocupo por nada…
«Somehow, Diógenes returned»
Ha sido publicar esto y morirse el papa, ¿casualidad?
😂😂😂😂 (Vamos a irnos al infierno de cabeza todos😅 …vale que dicen que está allí toda la gente divertida)
El universo te manda señales
Voy a tener que escribir sobre Trump o Putin…
No sé que había en los huevos de pascua que te has comido hoy, pero yo quiero!
La verdad es que últimamente me ha dado por escribir sobre gente muy siniestra; Palpatine, Rob Liefeld…
🧐