Tan cerca y tan lejos – Los 4 Fantásticos: Primeros Pasos 2.ª Parte

Seguimos donde lo dejamos ayer, con el repaso a los personajes protagonistas de la película y a los problemas que ha tenido esta. Un aspecto, el primero, en el que me duele reconocer que el personaje al que más ilusión me hacía ver en pantalla, y en cuyo actor más confiaba, me haya decepcionado un poco, pero no por problemas de este, sino por unas tijeras que han sido peor enemigo para el grupo que el mismísimo Doctor Muerte. Así que, sin más rodeos, vamos a entrar en faena y analizar qué ha fallado aquí, que por suerte ha sido poco.

¿He dicho ya que me gustaría vivir en ese mundo?

Lo de Ben me ha dolido, ya que tras ver a Ebon Moss-Bachrach en The Bear tenía claro que podía llegar a ser una versión perfecta de Ben Grimm, y eso es algo que ha demostrado a la perfección en la película en cada escena en la que ha aparecido. Por desgracia, también es el personaje que más ha sufrido los recortes en el metraje de la película, ya que, aunque cada vez que aparece es todo un placer. Aquí tenemos a un Ben que ya lleva unos cuantos años siendo la Cosa y que ya se ha acostumbrado (o resignado) a su apariencia, que es en cierto modo el alma del grupo y que es todo un gustazo cuando se junta con Johnny y vemos esa relación fraternal entre ambos, chinchándose cada vez que pueden, como cuando este quiere forzar a Ben a decir cierta frase que todos estamos deseando escuchar. Pero a diferencia del resto de sus compañeros, su arco argumental personal ha quedado bastante truncado.

Vaya pareja

A lo largo de la película vemos momentos en los que parece que aún sufre por su transformación, pero que no acaban teniendo un mayor desarrollo, y ese recorte donde más se deja sentir es en su faceta sentimental. Y es que, aunque al final Natasha Lyonne sí que interpretaba a su interés romántico, esta no es Alicia Masters, sino una maestra de primaria llamada Rachel Rozman (sin duda un homenaje a Rosalind «Roz» Kirby), la relación entre ambos apenas se esboza, compartiendo solo dos pequeñas escenas (y una tercera en la que se miran de lejos) que parecían apuntar a algo más, pero que se quedan de nuevo en nada. Algo que es casi un crimen teniendo en cuenta lo desaprovechadísima que está ella (que es una actriz increíble que podría haber dado muchísimo juego), y cómo afecta al papel de Ben en la película, pero sobre eso volveré más adelante. Y, por supuesto, me tengo que quejar de esa decisión incomprensible de destrozar lo que había sido durante casi toda la película un diseño perfecto del personaje, mejor de lo que ha lucido nunca fuera del cómic, con esa espesa barba rocosa.

Es trágico que nos e profundizase mas en esto

Siguiendo con el repaso a los personajes de la película, no podemos dejar de lado a Silver Surfer y Galactus. Con la primera hubo muchísima polémica (por parte de los de siempre, sigh) al mostrarnos en esta versión cómo había sido Shalla-Bal y no Norrin Radd quien se había convertido en heraldo de Galactus. Pero cambios cosméticos a un lado, tras ver la película hay que reconocer que hemos disfrutado de una gran Estela Plateada, pese a que, por desgracia, también sufre un tanto de no disponer de más tiempo en pantalla. Julia Garner consigue transmitir a la perfección esa lejanía emocional del personaje tan característica suya, y cómo esta se resquebraja poco a poco gracias a alguien de la Tierra.

Aunque pese a todo espero ver a Norrin en el futuro

Pero como en esta película han prescindido de Alicia y a Rosalind le han recortado tanto su papel que apenas sale, le ha tocado a la Antorcha Humana ser quien reviva la bondad de Shalla-Bal. Un aspecto en el que se entiende que cambiasen a Norrin por ella para justificar el interés de Johnny por ella (que si llegan a hacer a Johnny bi, entonces sí que se hubiesen cabreado los de siempre), que sin llegar a ser una relación romántica, el interés está ahí. Pero, en resumidas cuentas, esta versión de Silver Surfer ha terminado siendo, después de todo, una traslación más que digna del personaje, pese a los cambios, y de la que lamento que no tuviese más tiempo para desarrollarse.

Esto ha funcionado mejor de lo que esperaba

Y, cómo no, el más grande para el final, un Galactus inmenso en todos los sentidos. Es cierto que con el personaje el listón estaba un tanto bajo, habiendo sido sus apariciones fuera del cómic escasas y en algunos casos atroces, pero Ralph Ineson nos ha dado un Galactus increíble y en muchos aspectos tremendamente clásico. La voz grave y profunda de este ha transmitido a la perfección la majestuosidad del personaje, esa sensación de estar ante algo a lo que hay que temer, pero al mismo tiempo ha sabido darle a su personaje una cierta cercanía que no siempre ha poseído. Porque en esta película Shackman y su equipo se han acercado más a la versión original del personaje que a caracterizaciones posteriores que nos lo mostraban más frío y distante, como un dios que apenas percibe lo que le rodea.

Aun no me creo que le diesen un traje de verdad y no se limitasen a enfundarle en uno de esos monos de captura de movimiento

Este es, como en los tiempos de Lee y Kirby y a falta de un término más apropiado, mucho más “humano”, más presto a dejarse llevar por sus emociones, a cegarse por la ira y por su hambre sin límites. Un retrato que Ineson ha bordado pese a estar oculto bajo un aparatoso traje y capas de efectos especiales, dejándome con unas ganas tremendas de ver dónde y cuándo le veremos de nuevo. Algo que ha quedado algo lastrado por un CGI que en el tramo final de la película no ha estado tan pulido como debería, ya que, sin llegar a ser algo sangrante, sí que daba la sensación de que el equipo responsable hubiese necesitado algo más de tiempo para dejarle perfecto, algo que parece una constante en este tipo de películas que dependen tanto de los efectos digitales.

Se ve bien, pero podría verse mejor

Pero ese es un problema menor al que es más fácil dejar un tanto de lado, no como sucede con esos recortes que aparentemente ha sufrido la película. Los rumores apuntan a que esta ha terminado contando con unos quince o veinte minutos menos de duración de lo previsto, algo basado en la duración prevista que se anunció en algunas cadenas de cines estadounidenses, además de que en algunos momentos resulta evidente en la pantalla. Porque dejando a un lado muchas escenas de los tráilers y demás avances que no aparecieron en la película (y que puede que en algunos casos se rodasen exclusivamente para estos), o el ya mencionado arco argumental de Ben, hay otros momentos que sufrieron la tijera.

En internet hay fotos para todo, hasta de las que duelen

John Malkovich, a quien habíamos visto en los primeros tráilers y que se ha confirmado que iba a interpretar al Fantasma Rojo, acabó desapareciendo por completo de la película, quedando de su presencia en esta solo el cameo fugaz de uno de sus super simios. Pero también ese recorte se deja sentir en otros momentos de la película, hay transiciones entre escenas algo bruscas, momentos en los que el ritmo es un poco raro, en los que da la sensación de que a la película le hubiera venido bien algo más de espacio para respirar, casi como si dichos recortes hubiesen sido algo de muy última hora. Y aunque eso no hace de esta una mala película ni mucho menos, sí que se resiente un poco de forma puntual y evita que sea todo lo redonda que podría haber sido.

Entre las cosas que nos cortaron esta el flashback con sus trajes del comic, aunque hay gente que jura que aparecen fugazmente

Pero problemillas aparte, Los 4 Fantásticos: Primeros Pasos ha sido una película que me ha hecho sentir casi como un niño, en la que tanto los momentos más familiares como la acción superheroica han brillado, en la que hemos visto unas ideas loquísimas que solo en este contexto funcionan sin fisuras y que, como hizo la reciente Superman para DC, ha recordado al gran público que los superhéroes son más que historias oscuras y violentas, que sobre todo son algo que rezuma optimismo y que espero que marquen el rumbo a seguir en el futuro cercano.

Te acabas creyendo que son una familia

Una película en la que hemos contado además con la genial participación de Michael Giacchino componiendo la banda sonora, de quien pensaba desde que escuché su trabajo en Tomorrowland que sería perfecto para los 4F y que aquí nos lo ha confirmado por todo lo grande, especialmente con ese tema principal que dan ganas de ponerse a gritar “Fantastic Fouuuur”, y una BSO que en conjunto ha transmitido a la perfección el tono heroico y optimista que caracteriza a los personajes

Giacchino es demasiado bueno

Así que, confiando en que corrijan eso en el futuro con una versión extendida (aunque no lo esperaré sentado), Los Cuatro Fantásticos: Primeros Pasos ha sido no solo la mejor adaptación de los personajes fuera del cómic (aunque eso no era algo complicado de conseguir), sino también una gran película de superhéroes (no perfecta, tristemente) que parece confirmar lo que ya se apreciaba en Thunderbolts, que en Marvel por fin han conseguido enderezar el rumbo. Así que solo queda confiar en que esto se mantenga, esperar a ver qué le deparará el futuro a los personajes en Avengers: Doomsday, y que esta película sea el comienzo de como poco una trilogía, porque estos 4F me han dejado con muchísimas ganas de más.

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Antonio Jota Comu
4 meses han pasado desde que se escribió esto

La verdad es que no concuerdo casi nada con esta crítica, y me gustaría comentarlo no por dar la nota, sino por intercambiar opiniones y/o para que me corrijáis si se me está pasando algo por alto (aviso que haré algo de ‘spoiler’).

Entre que, como dices, se notan mucho los machetazos en el montaje, y muchas cosas ocurren muy deprisa, no termino de conectar emocionalmente con ninguno del cuarteto en esta versión. Sé que esto que voy a decir es una herejía, pero casi que prefiero los de Tim Story: son bastante más estúpidos y hasta desagradables, pero tienen personalidades y arcos de transformación más marcados y pasas más tiempo conociéndolos entre las escenas de acción. De hecho, otro aspecto que (para mí) perjudica a esta nueva iteración es que se nota muchísimo que intentan hacerles lo más ‘perfectos’ y agradables posibles, a costa de limar muchos de los rasgos y defectos de carácter que los hacen tan interesantes en los cómics (p. ej., Ben no tiene la misma ‘mala leshe’ -aunque sí clavan su parte más melancólica- y la impulsividad de Johnny nunca tiene consecuencias negativas).

Tampoco termina de funcionarme el discurso de Susan: viviendo en un mundo donde una cantidad importante de gentuza está dispuesta a justificar (o a restarle importancia) a los miles de niños, niñas y bebés asesinados en Palestina, no termino de creerme que Sue convenza tan rápido a la multitud allí reunida, aun presuponiendo que se debe a lo diferente que es la sociedad de la Tierra-828 y a la confianza que han ganado allí los 4F.

El diseño de Ben me encanta (tanto sin barba como con ella), pero el CGI empleado para animarlo no siempre me convence, y hay momentos donde me ha parecido directamente falso.

Tampoco me gusta el carácter que le han dado a Galactus. No sólo porque sea más humano o menos frío y distante, sino porque es cruel y hasta faltón. Por muy desesperado y frustrado que esté por su hambre eterna, no encaja con mi concepción del personaje que pille a Reed y lo estire hasta su límite mientras le mira con sadismo, o que le haga un ‘Darth Vader’ a su Silver Surfer. Sumado a que también es menos poderoso que en los tebeos, no me parece tan amenazante y si bastante más despreciable. Y, aunque no me disgusta la manera que tienen de derrotarlo, le leí a otra persona describirlo como una “trampa para conejos” y, desde entonces, no puedo evitar pensar en ello.

Es una peli que me ha gustado, me ha resultado simpática y quiero volvérmela a ver en un futuro próximo… pero, al mismo tiempo, también me ha decepcionado un poquillo, porque me esperaba más de ella. Yo no diría que es una “gran película de superhéroes”, no me parece mejor (o siquiera tan buena) como ‘Thunderbolts*’ y tampoco la consideraría “la mejor adaptación de los personajes fuera del cómic”: las series animadas que han tenido a lo largo de las décadas, por tontas que sean algunas (especialmente la de los 90), para mí tienen mucho encanto. No obstante, espero saber más de esta versión de los personajes (y espero que a sus actores les vaya muy bien)

Diógenes Pantarújez
Admin
4 meses han pasado desde que se escribió esto
Responde a  Antonio Jota Comu

«viviendo en un mundo donde una cantidad importante de gentuza está dispuesta a justificar (o a restarle importancia) a los miles de niños, niñas y bebés asesinados en Palestina, no termino de creerme que Sue convenza tan rápido a la multitud allí reunida»
Sí, nosotros vivimos en ese mundo de mierda en el que tenemos genocidios, pero los 4F viven en otro universo. Uno mejor, uno en el que han dejado atrás la guerra fría en los 60, uno en el que la ONU es lo que se soñaba que fuera. La piedra sobre la que se cimenta la película es precisamente el hecho de que los 4F han cambiado el mundo a mejor, y éso lo avisan en el montaje del principio, llegando a ir hasta mucho más allá de lo que son capaces de hacer en los cómics. Son el potencial del grupo totalmente desbloqueado, no comprometidos por la idea de compartir universo con otros superhéroes y tener que mantener cierto nivel de parecido con el mundo real. Ése retrofuturismo utópico es lo que le choca a demasiada gente, el no ser capaces de que éste es un mundo que ha cambiado mucho respecto al nuestro. No nos engañemos, en el mundo «real» los 4F seguramente habrían ocultado que Galactus se conforma con quedarse con Franklin.
Lo triste es eso, que nos resulte tan complicado creernos la Tierra 828 por la mierda en la que vivimos en el mundo real. Pero los 4F, el género de superhéroes, va precisamente de eso, de gente haciendo lo correcto en todo momento y aun así salvando y mejorando el mundo.

Sobre Galactus… Sí, me hubiera gustado más un Galactus distante, ese que no hablaba con nadie más que con el Vigilante, pero una vez no tienes a este último en la ecuación y colocas al gran devorador en una posición en la que no viene a la Tierra a comer si no a «curarse», digamos que su posición es bastante más personal que la del Galactus de su primera aparición.

Roger
Roger
4 meses han pasado desde que se escribió esto

No comento porque la semana que viene voy a verla, y entonces opino.