Sé lo que debe estar pensando todo el mundo, que he vagueado todo el fin de semana y que, como me tocaba esta semana escribir un lunes, para devolverle el capote (guiño) que me echó Diógenes el miércoles, he apañado algo a toda prisa para salir del paso sin tener que comerme mucho la cabeza. Pero nada podría estar más lejos de la realidad, si hoy he querido tocar este tema es porque se trata de algo que siempre me ha parecido muy interesante y llevaba mucho tiempo rondando por mi mente, y casualmente ha sido esta semana cuando por fin he podido ponerme a ello. ¿Cuela?

Pese a lo que decían en Watchmen o en Los Increíbles, con sus alegatos en contra de las capas, estas forman parte intrínseca del género superheroico desde sus inicios y existen numerosísimos personajes que, sin ellas, parecerían desnudos. Capas que en ocasiones poseen capacidades extraordinarias de naturaleza mística o tecnológica, que aportan a quienes las lucen un aire de majestuosidad o de recuerdo de eras pasadas, o que simplemente confieren a estos personajes unas siluetas icónicas. Porque, ¿alguien podría imaginarse al Doctor Muerte, con su atuendo clásico de corte pseudomedieval sin su capa? ¿A Magneto? ¿Superman? Así que hoy no solo quiero reivindicar esta pieza de vestuario denostada en ocasiones, sino hacer un pequeño ranking personal de mis favoritas dentro del género superheroico.

MENCIÓN DE HONOR: LA CAPA DE THE CAPE
Incluyo aquí a The Cape como una mención de honor porque, pese a tratarse de un superhéroe que me hizo pasar unos cuantos buenos ratos, al que echo mucho de menos y que siempre lamentaré que su serie no contase con seis temporadas y una película, no nació dentro del cómic pese a la inmensa inspiración de estos. Un héroe atormentado que tenía como villano a un émulo de Norman Osborn y que fue entrenado por alguien que era algo así como el hermano perdido de Thaddeus Brown. Su capa había pertenecido al mayor artista en fugas de todos los tiempos y estaba compuesta por una seda de araña muy especial que la hacía más resistente que el kevlar pese a ser increíblemente fina. Esta podía estirarse de forma increíble, utilizarse como si fuese un látigo, desplazarse de un lado a otro balanceándose con ella como Spiderman o protegerle del impacto de armas de fuego. Una capa tremendamente versátil que, pese a su corta existencia, se ganó el derecho a aparecer en esta lista.

CAPA TELEPORTADORA DE CRÓTALO
Aunque Crótalo es un villano que de por sí nunca me interesó demasiado, la idea de un criminal reuniendo a todos los villanos cuyas identidades y poderes estaban basadas en serpientes, y algún que otro reptil, para formar la Sociedad Serpiente siempre me pareció algo divertido y, con los años, inocentemente encantador, más propio de la Edad de Plata que de la década de los ochenta. Pero la reciente aparición del personaje en Captain America: Brave New World, pese a estar interpretado por el enorme Giancarlo Esposito, fue un tanto decepcionante. Porque allí lo que nos encontramos fue a un señor con ropa de combate genérica, armas de fuego y algunas armas blancas de adamantium, y que lideraba a un grupo de mercenarios de lo más corrientes. Y claro, eso parecía la forma en la que la CW adaptaba a muchos de los personajes de DC, ya que no había ni rastro de su pintoresco uniforme, su grotesca máscara y especialmente sangrante fue la ausencia de su capa teleportadora, que le permitía a él y a sus secuaces escapar de la justicia y convertirse en un enemigo tan escurridizo como la serpiente cuyo nombre había adoptado. Así que, en memoria de otro personaje descafeinado en su salto al medio audiovisual, aquí está mi pequeño homenaje a la capa de Crótalo.

LA CAPA DE CAPA
En un repaso a las mejores capas del cómic de superhéroes hubiera estado feo dejar fuera a alguien que se llama precisamente Capa, así que le tenemos aquí. Un personaje al que, junto con Puñal, les he tenido mucho cariño desde que les descubrí en aquel anual de Marvel Team-Up en el que sus caminos se cruzaban con los de Spiderman y los Nuevos Mutantes. Y aunque técnicamente su capa no es nada especial (aunque algún guionista ha dejado caer que igual la capa sí que es algo especial y que ha tenido otros portadores en el pasado), solo un trozo de tela que da forma a la oscuridad que controla este, la imagen de Capa surgiendo de la nada, envolviendo a criminales en sus sombras o sirviendo como portal a la Dimensión de la Fuerza Oscura de la que extrae sus poderes, es tan icónica que tenía que estar aquí.

CAPA DE SOMBRAS DEL EXTERMINADOR DE DEMONIOS
A este personaje lo conocí de forma indirecta en la muy recomendable etapa del Capitán América de J. M. DeMatteis y Paul Neary, cuando la Hija de Cráneo Rojo y el Barón Zemo manipularon mentalmente a Dave Cox, un viejo amigo del Capitán, le dieron el viejo uniforme del Exterminador de Demonios, que habían robado del Proyecto Pegaso donde estaba guardado mientras el Exterminador se encontraba en prisión. Un uniforme que incluía su Capa de Sombras, un artefacto místico de origen desconocido que este obtuvo cuando fue miembro de una organización secreta que abandonó cuando descubrió que pretendían traer de vuelta a la Tierra una raza de demonios exiliados hace milenios. Y dicha capa permitía a su portador viajar a otras dimensiones, teletransportarse a cortas distancias en la Tierra y almacenar un arsenal de armas casi infinito que utilizar contra sus enemigos. Un objeto tan versátil que me volvió loco cuando lo descubrí de crío y que no he sido capaz de olvidar.

CAPA DE LEVITACIÓN DEL DOCTOR EXTRAÑO
Y claro, si hablamos de capas es imposible olvidarse de la Capa de Levitación del Doctor Extraño, una inspiradísima creación de Steve Ditko que le dio al personaje una de las siluetas más icónicas y míticas del cómic superheroico. Porque dejando a un lado sus increíbles capacidades, ya que no solo permite a Extraño volar, sino que en el pasado la ha utilizado a menudo tanto de forma defensiva como ofensiva, para mí es su exquisito diseño lo que la vuelve realmente importante. Envuelto en ella, Extraño posee un aire majestuoso y al mismo tiempo casi diabólico, gracias a esa especie de cuernos que coronan la capa, siendo un diseño increíble que, aunque a lo largo de los años muchos han intentado cambiar, nada ha estado a la altura de esa apariencia clásica a la que el personaje inevitablemente siempre vuelve, ya que por algo es uno de los mejores diseños del cómic superheroico. Y aunque es una pena que en su salto al MCU la capa perdiese parte de su esencia, en los cómics siempre podremos disfrutar de ella en toda su gloria, aunque ahora esté en manos de cierto usurpador latveriano.

LA CAPA DE BATMAN CUANDO LA DIBUJABA NORM BREYFOGLE
Pero si hablamos de siluetas icónicas me atrevería a decir que nadie en el cómic de superhéroes tiene una que supere a la de Batman. Desde que Bill Finger, muy sabiamente, desechó el horrible diseño de Bob Kane y decidió que Batman llevase una capa que recordase a las alas de un murciélago, esa silueta mítica ha estado ahí desde su primerísima aparición en Detective Comics 27 de 1939. Una silueta con la que infinidad de artistas han jugado, moldeándola a sus respectivos estilos, refinándola, deformándola, convirtiéndola en un elemento imprescindible del personaje. Y aunque son muchos los que han hecho maravillas con ella, para mí nadie ha sabido dibujarla mejor que el añorado Norm Breyfogle. En sus manos, la capa de Batman se convirtió casi en un ser vivo, en algo que fluía por las páginas como un personaje más, sirviéndole tanto como recurso narrativo para enmarcar escenas como para conferirle a Batman una estética sobrenatural que hacía que uno creyese realmente que su mera presencia infundía temor en los criminales. Por ello, para mí esta es la mejor capa de los cómics, del mismo modo que Breyfogle sigue siendo uno de los mejores dibujantes de cómics que hemos tenido, uno al que se echa mucho de menos.

Probablemente cada quien tenga su propio ranking de capas, o quizás nunca se hayan molestado en pensar en este tema, lo único que tengo más o menos claro es que cuando Diógenes haya visto esto publicado sin duda se habrá llevado las manos a la cabeza (de ilusión, por supuesto). Pero este artículo me ha recordado que hay aún muchos elementos en el cómic superheroico que merecen ponerse bajo los focos, que no puedo ser el único que se haya planteado aún cuáles son las mejores botas del cómic superheroico, los mejores cinturones o los mejores antifaces, por lo que en el futuro que nadie dude que habrá más artículos como este por aquí.
¿Ni una referencia a Spawn??
A mi es que Spawn me da mucho asco
A mí también, pero no se puede negar que es una de las capas más icónicas del cómic.
Pues debemos tener concepciones muy diferentes de lo que significa icónico, porque en la vida se me ocurriría considerarla como tal.
PERO QUE ESO NO ES UNA CAPA, ES PAPIROFLEXIA!
Siempre me pareció un diseño bastante feo, pero era adecuado para triunfar en aquellos días.
La capa como signo de «molonidad» (como esas cadenas tan noventeras). Aunque supongo que podemos decir que a McFarlane se le daba bien dibujar capas …ya lo apuntaba en Infinity Inc. (aunque la mayoría no se fugaron hasta Batman, sin embargo a mí no me gusta tanto su Batman), aunque allí estaba todavía verde …y sin embargo es quizá mi McFarlane favorito, cuando rompía la viñetas sin complejos y se esforzaba por intentar llegar más allá de lo que sus tablas le permitían.
A mí lo único que me gustó de la peli de Spawn era la capa esa molona.
La peli era un horror (y no en el buen sentido precisamente).
Al menos las capas de Capa y el Exterminador de Demonios sí son funcionales (😂😂😂 …y muy útiles además). La mayoría solo lucen bien y ya (y muchas ni eso).
Alan Moore y Dollar Bill nos dejaron claro que las capas pueden ser peligrosas. 😈 (E intentar ser «molón» resultar letal)
No se por que se le da el merito a Alan Moore cuando Steve Englehart ya planteo ese problema con el Nomada(Steve Rogers) en la coleccion del Capitan America(vale que el resultado no fue la muerte).
Probablemente precisamente por eso (fue una apelación sin consecuencias). Pero bien recordado.👌
Funcionalidad aparte, Batman sin capa (al contrario que muchos otros para los que es solo un añadido) no sería el mismo sin capa (esto lo sabía hasta el desnortado»Batman» brasileño😈). …E incluso ha sido muy raro que los «imitadores» de Bats (Caballero Luna, Catman, el Cat-Man de Holyoke, los distintos Halcón Nocturno,…) no hayan asumido lo de la capa (aunque algunos la podría haber evitado) casi como una necesidad (la evitó Trillador Nocturno, vale que tampoco era precisamente un gran diseño …aunque era un diseño que encajaba con el concepto de «combate» urbano). Suele pasar lo mismo (aunque con muchas más excepciones, ya desde la Golden Age) con los imitadores de Superman (aunque en estos no suele pasar de lo complemento estético …y encontramos entre estos por lo general pocos buenos diseños, supongo que ya en los cuarenta era difícil crear otro buen nuevo Superman, el mejor fue probablemente el Capitán Marvel de la Fawcett, y seguramente por crear pronto una mitología propia robusta, suerte tuvieron también de tener por allí a gente como Binder …y de qué el estilo de C.C. Beck, de aniversario estos días, fuese tan personal y característico, y lo fuese cada vez más, en contra de lo habitual ya entonces)
Una de las muchas cosas que no me gustaron de The Batman es que su capa ni siquiera recuerda las alas de un murciélago.
Batman tiene además la suerte de que desde Neal Adams ha contado con muchos dibujantes que han sabido usar la capa casi como algo vivo (como el a menudo infravalorado Norm Breyfogle …o Jim Aparo, que no siempre vamos a mentar los primeros a los que te dejan con la boca abierta como los Marshall Rogers, Michael Golden y Trevor Von Eeden de sus mejores días …o el querido Alan Davis).
Doctor Extraño también tuvo suerte: Gene Colan, Frank Brunner, Marshall Rogers, Philip Craig Russell,… incluso un poquito de B.W.S. …Incluso el fundacional Ditko, que era más minimalista y menos dado a esos esteticismos usó bien la capa (aunque destacó más en dibujar hechizos y efectos mágicos y esas dimensiones casi surrealista, escuela que seguirían con estilo Colan y Brunner).
La del Caballero Luna:
No sólo fue de los primeros en darle una funcionalidad (planear), sino que se convirtió en un elemento icónico inherente al personaje, con múltiples estampas en la que la capa dibuja una luna sobre el cielo.
Y tal vez The Hood: Aparte de los poderes inherentes a la capa, es un caso como el de Capa o The Cape, que el propio complemento define por completo la estética del personaje.
Tras la capa de Batman (que casi tiene identidad propia en manos de los buenos dibujantes) son las capas funcionales como las del Caballero Luna (aunque eso de ir de blanco plateado para que lo vean venir bien cuando actúa principalmente de noche…), Doctor Extraño (es la capa la que le permite volar para no tener que malgastar magia en hechizos), El Exterminador de Demonios, Capa (Cloak) o Capa (The Cape) las que se justifican solas.
Por decir alguna.
El jinete fantasma. Que es negra por un lado y Plateada refulgente por el otro, para hacer sus números de desaparición en la noche.
Un vaquero que le echaba inventiva con trucos de magia que parecían auténticos en su época.
Superman tendrá la capa más icónica posible. Tan icónica que debe ser la única que lleva el símbolo también en la espalda.
Si la cuelga en un perchero no se la lleva otro por confusión.
Estoy de acuerdo en que es raro que no se mencione la capa de Superman, aunque es más icónica que molona.
Sip.
voy a decir que me molaban mucho a mí las mangas de Tormenta cuando las dibujaba John Byrne. No es una capa (porque tapar a Ororo es un delito) pero casi.
Demon Slayer es un personaje infrautilizado, pero creo que tenía su gracia como asesino arrepentido.
Creo que no se acuerdan de él desde que le dejaron al borde de la muerte en Secret Invasion.
Norm Breyfogle era muy grande. No solo era la capa (yo creo que el miedo de los criminales ochenteros al Murciélago era 50% por esa capa con vida propia y diabólica). Batman en combate era puro dinamismo y furia. Amparo es de los pocos que se le puede comparar en la etapa clásica. Parecía que a los criminales les iba a explotar la cabeza con esos puñetazos.