Después de varias semanas hablando de Rob Liefeld y Hank Kanalz, digo yo que habréis agradecido el cambio de tema a Mark Bagley y otras cosas, pero como toca cambiar de Wizard, ahora toca hablar de Todd McFarlane, otro de los totems de Image y uno de los pocos que siguen ahí dándolo todo. La revista en aquel momento se había convertido en el boletín oficial de Image, y Gareb Shamus estaba encantado de ello, mostrando en casi todos estos números sus fotos junto a los fundadores de la editorial. McFarlane iba a ser una de las figuras más importantes de estos primeros números de la revista, y bueno, os voy avisando de que esta entrevista es más o menos interesante, aunque me da que no tanto por el contenido relativo a los cómics si no por todo lo demás…

Empezamos fuerte «Tu estilo de dibujo es revolucionario. Prácticamente has reescrito las reglas del dibujo de cómics y desde entonces te has convertido en uno de sus nombres más importantes. ¿Has tenido algún entrenamiento formal para desarrollar tu estilo?» le preguntan, y lo que yo me pregunto es cómo alguien puede hacer semejante artículo de opinión en una pregunta cuya respuesta parece que les da absolutamente igual o que, por lo menos, parece que están deseando que les responda que es todo por inspiración divina o algo parecido. McFarlane le responde que estudió diseño gráfico, y que en su etapa en Infinity Inc si que experimentó, pero no tanto en Hulk. Cosa que yo no acabo de ver, porque veo bastante más arriesgado su trabajo en Hulk, no digamos ya en Spiderman que en cuanto le quitan a McLeod se desmelena por completo. McFarlane admite además que sus capas no parecen hechas de tela si no de papel, pero que como muchos otros dibujantes saben hacer una anatomía mejor que la suya, él procura ceñirse a sus fortalezas… ¿Basadas en dibujar capas de papel? Bueno, tampoco nos engañemos, a la chavalería de la época le encantaban sus capas locas, éso era indiscutible, aunque yo las odiara.

Continúa diciendo que no le gusta la enseñanza formal, que lo que hace que los cómics «molen» no es algo que se enseñe. Que la gente mira a su trabajo o al de Jim Lee o Liefeld y ve manos tirando rayos o bazookas enormes que no existen, cosas que no vienen del mundo real. «¿Dibujo buenos cubos de basura? Seguramente no, pero hay tipos que lo hacen. (…) hay gente tan preocupada por dibujar correctamente que han olvidado lo divertido que es dibujar. (…) ¿A quién le importa que todos los tornillos y tuercas estén en su lugar o si los músculos donde deben estar con la tensión correcta? Los que pueden hacer todo eso generan interés, Jim Lee puede hacerlo. Tipos como él no aparecen a menudo». Sí, McFarlane admite no solo que tiene unas carencias fuertes como dibujante, si no que le da absolutamente igual… Porque tiene éxito. Y el éxito lo justifica absolutamente todo, ¿no? Más adelante habla de que no tiene problema de que le copien otros autores, de que vayan poniendo marcos en sus viñetas y otras innovaciones que «no creo que sean mías», lo cual le honra. Más, si cabe, cuando habla de que la creación de su serie de Spiderman en solitario fue una petición expresa de la propia editorial (implicitamente reconoce que para hacer caja) y que le pilló en un momento en el que le apetecía escribir una serie pero no seguir dibujando a secas.

Sobre Venom, habla de que Michelinie no le dijo nada sobre el personaje, que solo le dijo que era como el traje negro de Spiderman pero en un tipo mucho más grande. McFarlane dice que ni siquiera sabía que lo iba a llevar puesto una persona, así que le puso esa sonrisa enorme que, a medida que vio la reacción del público, se fue transformando en una mueca cada vez más inhumana (eso sí, antes de que alguien lo pregunte no, McFarlane no llegó a ponerle la lengua monstruosa, éso fue cosa de Larsen) «le gusta a los chavales», finaliza.

Pero pasando ya a la anatomía de la creación de Image, Todd reconoce que dejó Spider-Man sin saber que hacer y que Rob ya tenía claro que haría Youngblood, y que fue éso lo que lo motivó a volver a hacer cómics, a hacer algo por su cuenta. Que a Erik Larsen también estaba interesado en hacer algo de su propiedad, y de ahí empezaron a «reclutar» más gente. Preguntado sobre cómo creo a Spawn, McFarlane aclara que lo hizo unos dos o tres años antes de hacerse profesional, y que tampoco ha modificado mucho el diseño respecto a su concepto original. Que Spawn podría estar perfectamente en el universo de Marvel o DC, y que su cómic va a ser más «David Lynch», pero sin irse tanto de la olla porque lo están leyendo niños y tienen que poder entenderlo. Pero que meterá muchos flashbacks extraños, dará pequeñas piezas de información para elaborar un misterio mucho más complejo que cualquiera de las cosas que hizo en Spiderman. Preguntado sobre si habrá crossovers en Image a lo Secret Wars, McFarlane es escéptico no solo por el trabajazo que conllevan, si no porque también piensa que probablemente no cuadra con el personaje «Spiderman, Batman o Daredevil no deberían estar en un planeta alienígena. A veces es difícil mezclar superhéroes con ciertos villanos y que éso funcione. Prefiero serte sincero, lo suyo es mezclar a los personajes con otros que combinen con Spawn y viceversa, tal vez el crossover no debería hacerse con otros personajes de Image y si de otras editoriales. Hablé con Dark Horse y puede que acabemos teniendo un Spawn VS Aliens o Spawn VS Predator».
El mejor ejemplo de la mentalidad USA:
No importa lo que vendas mientras se venda.
No importa como ganes mientras ganes.
No importa lo que digas o hagas mientras eso genere beneficios.
Y aun así a la generación anterior de dibujantes -y casi diría que las posteriores- nunca les habrías oído decir burradas semejantes. McFarlane y sus compañeros de aventuras eran estrellas de rock, tuvieron la suerte de encontrarse con una burbuja que los catapultó arribísima y el olfato para explotar esa oportunidad.
Que en eso no podemos discutirle nada a McFarlane, como empresario es mucho mejor que como dibujante.
Los noventa fueron años de excesos (en todos los sentidos).
un numero de MAD analizaba lo que McFarlane habia robado de otras editoriales y personajes, algrado de brularse que no podia imaginarse nombres de personas, y la Cagada de Chapel vs Priest cambia ando incluso eso numeros. Por cierto tuvieron la bajesa alguno «image» de usar el VIH como un faro de oportunismo
Básicamente es la falacia del éxito. si tiene éxito es lo correcto.
Chesterton con su mala leche habitual desarma la tontería en un párrafo.
«Para empezar, no hay tal cosa como el éxito. O, si lo quieres poner así, no hay nada que no tenga éxito. Que algo tiene éxito sólo quiere decir que algo es: un millonario es exitoso siendo un millonario y un burro es exitoso siendo un burro. Cualquier hombre vivo ha tenido éxito viviendo, cualquier hombre muerto puede haber tenido éxito cometiendo suicidio. Pero, pasando de la mala lógica y la mala filosofía de la frase, podemos tomarla, como lo hacen estos escritores, en el sentido ordinario de éxito en obtener dinero o posición social.»
Pues no… ese éxito fue muy perjudicial ya en el corto plazo. La riqueza fue para unos pocos espabilados en hacer caja rápida aprovechándose de una carambola de circunstancias. Pero dejaron una desolación horrible detrás.
Pena que Alan Davis no hiciese Año Dos enterita.
Y aparte. Que mal dibujado estaba todo.
La escena de la reja… todas esas manos horriblemente perfiladas.
Las que están hacia abajo. Hulk, Batman, Wonder Woman son idénticas entre sí. Parece que hizo solo una y luego las calco todas haciendolas más estrechas o musculosas para diferenciarlas. Seguramente hizo eso.
Vaya patada a la anatomía humana.
Y segúramente lo hizo pensando que estaba creando una nueva obra referencial del noveno arte. ¡Qué voy con Dave Sim, Gaiman y Moore! ¡Paso!
Con lo peor de Sim, Gaiman, Moore y Miller, claro.😈