Todas las películas, en mayor o menor medida, establecen un contrato con el espectador. De que va a ir la película, que puedes esperarte de ella, etcétera. Si una película nos establece que es de terror y acaba convertida en una comedia, nos sentimos estafados. Si una película nos avisa de que no todo es lo que parece y al final de la misma nos engaña, dejándonos claro que si nos hubiéramos fijado habríamos podido ver el engaño, no podemos culparla por ese engaño. Y no, Wonder Woman 1984 no pretende engañarnos ni nos plantea ningún engaño, con lo que no podría ser más honesta.
Así, la película establece su contrato mediante una escena en la que una niña compite al mismo nivel en un triatlón amazónico con gente que la dobla en edad y en tamaño. El mensaje que te da la escena está claro, tienes que creerte esa escena para poder disfrutar de la película. Si no te lo crees, la película no es para tí, da media vuelta y a otra cosa. No pasa nada, no vas a ser ni mejor o peor persona, ni más tonto ni más listo. Ésto es lo que es y ya está, porque la escena es mensaje puro, esto es casi una fábula de animalitos, es una niña -alguien que está aprendiendo- pensando que puede hacer trampas en la vida, tomar atajos y descubriendo que no, que la realidad, la verdad, es más importante que la recompensa. La escena podría haber funcionado perfectamente si esa niña hubiera tenido 20 años como el resto de las amazonas, pero el mensaje de que esa niña se está autosuperando y está en pleno proceso de aprendizaje, de que está en formación es muchísimo más claro y directo de esta forma, del mismo modo en el que si en una fábula muestras a un conejo y una tortuga compitiendo, sabes directamente que el uno es un animal rápido y el otro uno lento. WW84 te dice desde un principio que la película es, en resumen, una fábula sobre la verdad. Y también un cómic de Wonder Woman de 1984, uno pre Crisis.
Y así es cuando la película pasa a la «actualidad» de 1984 se sumerge en muchos de los estereotipos de aquellos tiempos; la mujer independiente pero «sola», la friki inadaptada, el ejecutivo «ganador» con pies de barro; todos son tópìcos de la época que se mostraban en el cine de aquellos tiempos, escenarios como un centro comercial, gente haciendo deporte con calentadores, trabajadores de un museo que se hacen con un objeto misterioso… No estamos ante un homenaje por el homenaje de aquellos años, si no exploración sorprendentemente desapasionada de la época; televangelistas, yuppies, capitalismo desbocado y hasta un punto de guerra fría en el que la población ha sido engañada para creer que todo va bien, que todo está correcto, «la vida es buena pero puede ser mejor». A posteriori el personal se dio cuenta que los excesos de aquel tiempo se pagaron después, que la adoración de ciertos millonarios con pies de barro puede tener consecuencias terribles, pero WW84 nos sitúa en aquel periodo superficialmente idílico (sin hablar de la destrucción del movimiento obrero, el SIDA o las drogas, solo de lo «idílico» para la nostalgia ochentera) y hace algo en lo que el cine de superhéroes no se había prodigado mucho hasta ahora; hablar de si mismo.
Porque, como decía, la directora Patty Jenkins es consciente de que estamos hablando de los 80, y en los 80 se hacía un cine de superhéroes muy diferente del actual; el referente principal era el Superman de Donner capaz de hacer que el mundo entero vaya atrás en el tiempo, el Batman de Tim Burton y sus mundos oníricos; WW84 trata de ser el eslabón perdido de aquella época, la película que nos «robaron» y que Wonder Woman con toda justicia debería haber tenido durante aquella década. Su lenguaje, su colorido, su forma de entender los personajes es la de aquel tiempo, y por eso parece un perro verde comparada a la Rocketeer monotonal de la primera parte o al cine del género que se hace hoy en día. Wonder Woman trata de ser su propia bestia, trabajar con las «casualidades» y la dichosa suspensión de la incredulidad que la escena de aquella niña paticorta te exigía. En última instancia da igual que habilidades que apenas habías usado de repente hagan cosas maravillosas cuando el mensaje principal de la película es exactamente el contrario (aunque hasta esto es discutible, porque ocurre en un tramo de la película anterior al desengaño), que la propia Diana haga cosas realmente egoistas contrarias a su identidad o que los anacronismos salten por todos lados (aunque en una película sobre autoengaños, estos anacronismos en realidad están dejando pistas para una realidad más triste, no son en absoluto casuales excepto el de Operation Wolf, ése si que no lo perdono); seguimos hablando de una fábula, de un cuento moral, de los superhéroes en su dimensión más pura, de caer para aprender a levantarnos, de reaprender las lecciones de la infancia. Y en eso WW84 ha venido para dejarnos claro que sí, que los superhéroes van de salvar gente.
Y es que incluso antes de la primera aparición de Wonder Woman en la pantalla ya la tenemos salvando gente una y otra vez. Personajes pintorescos de aquellos tiempos son salvados de muertes seguras en un centro comercial más caótico que la fábrica de cemento de Mario, con una Wonder Woman más fiel al original ochentero que usa como única arma su lazo de la verdad, consiguiendo al fin su propia identidad visual; lucha y se mueve con el lazo, combinándolo con sus brazaletes y tomándose la licencia de lanzar en muy contadas ocasiones su tiara. Es una Wonder Woman con acento en lo de «wonder», en maravillar a los espectadores respecto a lo que son los superhéroes, gente que salva a la gente hasta de si mismos. Y al final éso es lo hermoso de WW84, que es una película sobre un personaje basado en la verdad, en la identidad, en ser genuinamente nosotros mismos y lo da todo por ello. En una época en la que todo se sacrifica por una estética, un tono, una solemnidad vacía y el autoengaño, WW84 es todo espíritu sin miedo al ridículo, un todo o nada a un mensaje, a una idea, a entender a los superhéroes como lo que empezaron siendo hace 80 años, defensores de nosotros mismos, inspirarnos para ser mejores personas a pesar de que todos tengamos pies de barro.
Por supuesto y como toda apuesta, todo contrato o toda fábula, hay cosas que pueden salir mal. A la película le sobra metraje, se recrea demasiado en algunas escenas y hasta sufre un impass «nolaniano» al final de su primera hora -entendiendo esto como no conseguir la suficiente fluidez como para que el primer acto enlace con el segundo, algo que le pasa a Nolan en casi todas sus películas-, además de desdibujar algún que otro personaje en algunos momentos llegando casi hasta a tirarlo a la basura y no dándole una resolución completa a su trama cuando tal vez le dediques demasiado tiempo a otros. No es una película perfecta que merece muchas de las críticas (otras no) y seguramente no sea comprendida en estos tiempos, pero creo que con los años va a crecer entre los espectadores y tal vez hasta tenga suerte, porque el haber sido estrenada directamente en streaming en gran parte de los mercados le va a venir bien, ya que a la chavalería esto le va a encantar y la van a ver un millón de veces.
Poco más que deciros; me podría meter a hablar sobre ese Maxwell Lord que no es Maxwell Lord (aunque en esencia es el mismo personaje, ojo), esa Cheetah que tampoco es ella misma y todo aquello, pero… ¿No hacían exactamente eso las películas de los 80? ¿Recoger lo que querían del cómic original y reinterpretarlo como les venía en gana para contarnos una historia completamente aislada del universo original? Lo dicho, no es «simplemente Superman 2», es un análisis del cine de superhéroes de los 80, una cápsula del tiempo de aquel momento, la película perdida. Aquí la tienes, firma el contrato si quieres verla y si no no pasa nada, a otra cosa y todos tan contentos. Disfrutadla vía VPN, que de la política de HBO en europa ya hablaremos otro día…
Eso sí, Hans Zimmer se sale.
Pues no esperaba nada de esta peli, y me tragué los spoilers y escenas.
Solo decir que si, a pesar de algún momento que es exagerado en general se ve increíble su estilo de lucha, lo que me alegra es que ya hay una muestra actual de que Diana efectivamente no necesita de otras armas. Resultaba cansino la excusa de que es una guerra y es lógico que lleve una espada y escudo.
Ahora solo espero un estilo de lucha para Batman y Superman, que del último con los efectos actuales debería ser maravilloso.
Más Superman y menos Son Goku, que Superman supuestamente no rompe ni la mitad de cosas y están obsesionados con que lo revienta todo!
Claro que sí, si uno quiere ver eso que se vea man of steel, yo voy más por el ingenio de superman a la hora de usar sus poderes, tipo como reeve o en Superman return a la hora de salvar gente, que es lo poco que me gusto de esa película.
«Superman Returns» tiene para mí dos momentos gloriosos: el rescate del avión durante la prueba del transbordador espacial y sus intervenciones en Metrópolis tratando de minimizar los daños causados por el plan de Luthor. Lástima que la película en general es aburridísima, porque luego ves a Brandon Routh retomando el papel en la adaptación televisiva en «Crisis On Infinite Earths» y lloras ante lo que podría haber sido.
Cabe decir que, por mucho que en Dragonball les guste reventarlo todo, quedarse sólo con la parte de la destrucción es obviar buena parte del carácter de Son Goku, del que quizás la escena que me parece más representativa es cuando, tras vencer a Freezer en Namek, después de que éste se ponga a suplicarle que no lo deje allí tirado para perecer con la destrucción del planeta, primero Goku se escandaliza de que Freezer tenga la desvergüenza de pedirle clemencia después de todas las maldades que ha cometido… pero luego decide transferirle a Freezer parte de su energía vital para que tenga una posibilidad de sobrevivir. ¡Oportunidad que luego Freezer no aprovecha, para que veamos hasta donde puede llegar en su perversidad!
La clremencia de Son Goku suele ir más por las ganas que tiene de pegarse con alguien más fuerte todavía que por su propia humanidad; que ojo, tampoco es que el mate a sangre fría, pero a algunos esbirros de Freezer y demás los reventó sin ningún miramiento. Y fíjate, éso es algo que cuidan bastante más en Dragonball Super, normalmente procuran que sea Vegeta o el malo de turno el que se cargue a los esbirros y no el propio Son Goku.
Qué horrible es Super.
GT fue malaza, pero al menos se la jugó por algo distinto… Y ese cierre que le dieron a la serie fue perfecto e insuperable… Y la banda sonora por la chucha… pa volverse locos!
A mi no me molestaría que Superman peleara a todo su poder, si nos mostraran que antes de lanzar un golpe, usa su visión de rayos X o lo que sea, para calcular que no hay vidas en riesgo si conecta el golpe… Se tomara el tiempo de salvar personas o animales, pese a que le estén dando una paliza.
Si se viera a obligado a darlo todo, pero siendo primero Superman.
Viendola lo que se me ocurría era “esta es la película de cómics más película de cómics que he visto”.
Y a la vez, se la nota desde el inicio como si olvidadiza, donde empieza contando que el ingenio cuenta en la primera parte de la carrera para que luego el atajo sea hacer trampa. Y en ese descuido se desconectan escenas, se pierden trozos de guión y como dices los actos no fluyen tan bien como deberían.
Por cierto, soy de los que aceptó lo de la niña con pies juntos, que hay que ser tiquismiquis para señalar algo que tiene razones narrativas por todos lados (especialmente en una película de superhéroes). Como señalas, el contrato depende más que nada de la capacidad narrativa de los elementos que se usen (si está contando algo pertinente a la historia difícilmente romperá el contrato), por eso creo que pasa eso de que no se puede ser sentencioso cuando se habla de una película que le falta tanto como le sobra (10-20% para que quede claro que la película no está mal, simplemente no es un home run).
Eso sí, el diálogo es un poco flojo. Supongo que por lo que mencionas de los personajes. Visualmente, consigue prácticamente todo lo que se propone (que no es poco).
No sé como se la verá en tiempos venideros, pero creo que se merece ser reconocida como mejor que la primera, ¿no? El villano es mejor, el sacrificio es menos innecesario, no hay ninguna influencia del zaqk (visual o en la historia) y se arriesga más incluso.
Sí, yo diría que es mejor que la primera pese a que parece que la opinión mayoritaria va por otros derroteros… Pero claro, a la gente no puedes darle «algo distinto» sin que se quejen; ellos iban con una idea y se han encontrado otra cosa, algo que ni siquiera entra en la horquilla actual «Marvel/DCEU»; si hubo gente que se quejó de que Shazam era demasiado «familiar» con esta les puede dar una taquicardia. Pero el problema al final es suyo, por su cortedad de miras; la mayor parte de los problemas que le han ido achacando no son tales si se pone un poco de atención.
Pero si yo he leído en internet que esta es la peor película que ha estrenado DC en años!
Es un pequeño spoiler, pero uno de mis momentos favoritos de la pelicula fue este:
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Ahora que deje de usarla en los cómics, que ya es hora!
Cn lo errática que es DC son capaces de ponerle una espada en cada mano en los comics…
Amputarle las manos y que una lleve una espada y en la otra una metralleta,
Debe ser la crítica.más magnánima sobre esta peli infumable que he leído en todo Internet. Yo me quedo que en los agradecimientos a los autores de los títulos de crédito, en lugar de dar las gracias a Keith Giffen, JMdeMatteis y Kevin Maguire deberían pedirles perdón por el destrozo que le han hecho a su personaje (Claro que si lo comparamos con lo que hizo Geoff en los comics es nada).
Ojo, que este Max perfectamente se puede montar una JLI después de esta película, y precisamente ésa es una de las cosas que más me han gustado de la película, el que sin ser fiel al cómic ha dejado al personaje en un lugar estupendo.
Pues incluso Maguire parece contento con esta version de Max https://twitter.com/maguirekevin/status/1342753944162848771
Maguire no morderá la mano que le da de comer, ya que supongo habrá cobrado buenos royalties por la aparición de Max en la peli. Y lo que he leído en el tweet tiene razón. Lo único bueno de la peli es que el personaje acaba de una forma que es plenamente recuperable para crear una JLI, afortunadamente (Aunque si se sacan de la manga que el hijo ese repelente no existe y era producto de su imaginación mejor). Por supuesto Pascal no puede seguir siendo Max. Qee traigan por favor a Sam Neill y lo rejuvenezcan con efectos digitales como hace Disney en Star Wars si hace falta! 😀
Pero hombre, ¡si Pedro Pascal está estupendo como Maxwell Lord! Déjalo hacer de Max, que rango ha demostrado tener de sobra y deja los pegotes digitales para otros actores del Mandaloriano!
Sí, por eso decía lo de que al lado de lo que le hizo Geoff lo de Jenkins es nada, y efectivamente lo único bueno es que el personaje queda en una situación recuperable y reciclable para una hipotética JLI, pero sigue siendo un destrozo de arriba a abajo. Al personaje de Maxwell Lord le pasa lo mismo que al de Amanda Waller. Después de, respectivamente, Giffen y Ostrander, parece que los autores que han tratado a ambos o no se han leído la JLI/Escuadrón Suicida, o no les han gustado esas etapas, o las ignoran completamente. O lo que es peor, no han entendido nada. Esto va para gente, entre otros, como Dan Jurgens, Geoff Johns, el elemento indeseable que escribió el origen post Flashpoint de Max Lord, Jeph Loeb y los directores y guionistas de la peli del Escuadrón y ésta de WW. Normalmente siempre los escriben reduciéndolos al absurdo, como villanos, locos, sádicos, gente malvada, personajes negativos… No entendieron una mierda de la rica gama de matices con las que Giffen y Ostrander fueron construyendo a ambos, convirtiéndolos no en meros buenos muy buenos o malos muy malos, si no en personas con parte buena y parte mala, como si fuesen personas reales.
Yo solo te digo que Johns es coguionista de esta película, y es con mucho su mejor versión de Max, un tipo con sus propios fallos que en última instancia hace lo correcto. Y siendo él coguionista y con la analogía con Trump de por medio, pues como que podría haber sido infinitamente peor.
Pensaba en lo mismo… Y sería maravilloso.
Hasta me gustaría que Jenkins la dirigiera (antes de que se termine de pasar al lado Disney de la fuerza)
A mi, me encantó la propuesta y amo lo que Paty Jenkins quiere hacer con Wonder Woman y el Universo DC, donde recupera el colorido, la fantasía y lo geek de los cómics. Un mundo donde las cosas pueden ser mejores, si tenemos guías como WW (O el Superman de Donner) para inspirarnos.
Ahora… Sentí que faltó presupuesto en lo estético, ya sea arte, foto o el CGI… O es que me he acostumbrado mucho a la asombrosa calidad visual de Marvel?… También he pensado que era parte de la propuesta, para que sintiera así ochentera. Bueno, no es el problema mayor.
El último acto me pareció flojo. Entiendo la idea, donde no se tenía que resolver la forma convencional de superhéroes modernos (destruyendo 3 ciudades y media con poderes a lo loco), pero creo que el montaje, la cantidad de planos, los tipos de planos, los diálogos de Diana, no tienen la fuerza que deberían. Era el momento de generar una gran secuencia, pero resulta algo bien plano y poco emotivo. Y claro, la película es bien cursi, bien rosa, y no me molesta, pero hay un factor determinante que se cayeron feo; el casting del hijo de Maxwell, la actuación del niño y sus pésimos diálogos. El vínculo padre e hijo se explota muy mal y el personaje del infante es nada memorable (en la Maravillosa competencia (?), en cambio, tuvieron una niña que encantó a todos los espectadores y con un par de planos y dialogos, se los echó al bolsillo; «te quiero 3000»).
Pero finalmente, me entregué a ver una peli fantástica, rosa, estereotipada, con una sátira clara, pero que llega a oler a Wonder Woman, expandiendo su universo y agigantando su leyenda.
Es una peli polarizadora, parece que la gente la ama o la odia, pero yo insisto que para ser una peli que tanta gente ha visto en streaming, el personal no se ha parado a «rascar» más allá de la superficie, y muchos de los errores que se le achacan se solucionan al darse cuenta de que el aspecto onírico de la película -y la relación con Sandman- no es en absoluto casual. Pero vaya, no será la primera ni la última vez en que la gente le echa los perros a una película por no molestarse en verla.
Me quedo con esa sensación de que sigo digiriendo la peli… quizás tenga que verla otra vez.
A ver…. Me estás diciendo que el maxwell, está cumpliendo los deseos de todo el mundo en el universo DC de 1984…. Incluyendo la de los villanos que estén en ese periodo de tiempo… Es decir que gente como el pingüino, por ejemplo, ha tenido un deseo!! Esto no tiene sentido, lo siento está película es mala, miren esos ordenadores ochenteros transmitiendo a todo color cuando solo tienen un verde electrónico, no hay por dónde salvar eso.
Si yo deseo ser el rey del mundo y el vecino desea ser el emperador de Australia, ¿se cumplen los deseos de los dos a la vez? Patty Jenkins ya ha dejado claro que en la película no muere absolutamente nadie, la fuente de los deseos está hecha de arena… Creo que no estamos haciendo muchos requiebros mentales para llegar a la conclusión de que lo que está pasando no es del todo real.