De Cuarentena con Supergirl, la Legión de Superhéroes y la amenaza del Virus Carmesí – Adventure Comics 313 (1963)

Ultimo día laboral de la semana pero no de la cuarentena ni mucho menos. Y mientras yo me dispongo a terminar esta semana casi temática con todas las enfermedades (reales o no) que han rodeado la vida del Hombre/Joven de Acero y allegados, Diógenes sigue a lo suyo envuelto en una manta isotérmica convencido de que eso le protegerá de los germenes. Y para terminar la semana he reservado una historia muy especial en la que el protagonismo recae sobre una Supergirl que tiene que lidiar con una misteriosa villana y una aun mas misteriosa amenaza que pone en peligro la vida de la mismísima Legión de Superhéroes (aunque no tan peligrosa como el Bendis actual).

En el Siglo 30 la Legión de Superhéroes continua con su misión de utilizar sus extraordinarios poderes para ayudar a los demás, algo a lo que se suma ocasionalmente Superboy como esta ocasión en la que ha viajado en el tiempo para ayudar a Mon-El a desviar dos planetas a punto de chocar (deben ser dos que ni Superman ni Supergirl se acordaron de destruir en el siglo 20) Pero mientras eso sucede una tras otra todos los miembros femeninos del grupo caen repentinamente enfermas, incluidas las que pertenecen a la Legión de Héroes Sustitutos.

Pero como en el futuro no hay doctores de esos del Siglo 20 que se inventaban enfermedades, la Legión decide no arriesgarse y sin inventarse ningún diagnostico envían a todas sus compañeras al Planeta Cuarentena para que se encuentren aisladas y confían en encontrar una cura para ellas antes de que sea demasiado tarde. Una solución que hace que nos preguntemos que a cuantas epidemias se han debido enfrentar en el futuro para que exista un planeta dedicado única y exclusivamente a servir de aislamiento para los enfermos en cuarentena.

Y es justo en ese momento tan oportuno cuando aparece una misteriosa mujer que quiere unirse a la Legión para reemplazar a todas las Legionarias enfermas… Satan Girl. Un nombre muy apropiado para unirse a ese grupo de superhéroes, solo un poco mejor que Hitler Girl. Pero cuando Sun Boy se niega a ello ya que sus compañeras se curen volverán al grupo (y que no debe fiarse mucho de alguien que se hace llamar Satan Girl) esta se ríe en su cara afirmando que jamas encontraran una cura, y que ella lo sabe porque es quien las ha infectado… Si ya decía yo que no te puedes fiar de alguien que se hace llamar Satan…

Una Satan Girl que no lleva nada bien el rechazo, y ante la negativa de la Legión de aceptarla en sus filas (te haces llamar SATAN Girl ¿Que esperabas?) decide ir al Planeta Cuarentena para rematar a las Legionarias enfermas, y para asegurarse de que no la siguen utiliza su superfuerza para destruir la nave espacial de la Legión y marcharse volando a cumplir su amenaza… Que digo yo ¿Solo tienen una nave? ¿No hay ninguna otra nave en el planeta que puedan pedir prestada? Que seguro que si le comentan el caso a los Planetas Unidos o a la Policía Científica les dejan una…

Por suerte Cosmic Boy tiene una idea, llamar a Supergirl para que les ayude a detener a esta misteriosa villana, quien aparece instantes después porque había ido a visitarles justo antes de recibir la llamada. Esto si que es una situación afortunada y lo demás son tonterías. Y tras ponerla al día y nombrarla líder honoraria del grupo (creo que ella les hubiese ayudado igual sin tener que recurrir a eso), Supergirl repara la nave de la Legión y juntos parten hacia el Planeta Cuarentena para salvar a sus compañeras.

Y mientras tanto en dicho mundo podemos comprobar como la sanidad funciona mucho mejor en el siglo 30 que en el 20, ya que en lugar de inventarse diagnósticos y resignarse a la muerte de sus pacientes, los enfermeros robots del Planeta Cuarentena tratan de curar a sus pacientes, aunque de momento sin mucho éxito. Pero ese tratamiento dura poco ya que Satan Girl hace acto de aparición, utiliza su visión calorífica (que hay que ver lo familiares que son los poderes de esta Satan Girl) para inutilizar a los robots y utilizando un rayo propio acelera los efectos del Virus Carmesí para matar de una vez a las Legionarias, algo que solo interrumpe la oportuna llegada de Supergirl.

La villana y la heroína se enzarzan en un combate sin cuartel en el que Supergirl se sorprende al descubrir que Satan Girl rivaliza con ella también en cuanto a fuerza y velocidad, por lo que debe ser otra Kryptoniana, probablemente alguna criminal fugada de la Zona Fantasma (miedo me da pensar a que conclusión hubiese llegado Superboy en su lugar viendo los precedentes de su “lógica” en los días pasados)

Convencida del origen de Satan Girl Supergirl se lleva del laboratorio del Planeta Cuarentena unas muestras de Kryptonita en polvo que allí utilizan para tratar enfermedades (pero que no pille eso el Ultraman del Sindicato del Crimen) y que Supergirl quiere utilizar para incapacitar a su enemiga, pero para su sorpresa esta es completamente inmune a la Kryptonita. ¿Se ha equivocado Supergirl en cuanto al origen de esta misteriosa villana?

Y aprovechando la confusión de Supergirl y que esta no puede seguirla por culpa de la Kryptonita que ella misma ha lanzado a la entrada de la cueva en la que Satan Girl se escondía, Satan Girl utiliza su superfuerza para abrir una nueva salida al asteroide en el que se encontraban mientras Supergirl esperaba pacientemente en la otra entrada a que su enemiga saliese, dándose cuenta demasiado tarde de lo que sucedía… Realmente los primos El no son los mas espabilados del Universo. Aunque curiosamente mientras Satan Girl escapa piensa que debe darse prisa ya que aparentemente solo le quedan 48 horas de vida y que antes de que transcurra ese plazo las Legionarias deben morir.

Algo que queda parcialmente demostrado cuando Supergirl y la Legión se llevan a sus compañeras a un lugar seguro y por el camino deduce que su enemiga no es Kryptoniana al ser inmune a la Kryptonita y que no puede ser de Daxam porque su mascara es de plomo para ocultar su identidad y no la enferma como haría con cualquier Daxamita, por lo tanto la única alternativa lógica es que se trata de un androide… Igual debería recordar que Mon-El fue curado de su vulnerabilidad al plomo gracias a un suero creado por Brainiac-5 y que a lo mejor Satan Girl ha tomado algo parecido.

Al llegar a su destino se encuentran con un pequeño sistema solar oculto en una nube y poblado por unos seres esféricos saltarines con un aspecto realmente aterrador entre quienes Bouncing Boy se siente en su salsa. Y mientras el disfruta como un niño al mismo tiempo que sus compañeras se están muriendo, Supergirl parte a fabricar un arma para destruir a Satan Girl, que tiene que ser una androide a la fuerza.

Pero mientras Supergirl fabrica su rifle emisor de gas paralizante de androides (menuda arma) Satan Girl ha llegado a ese desconocido mundo tratando una vez mas de matar a las Legionarias, y ni los ataques combinados de Sun-Boy y Lightning Lad parecen afectarla. Todo eso mientras Cosmic Boy, poseedor de poderes magnéticos como todos los Braalianos, no mueve un dedo para ayudar, porque se ve que alguien que puede manipular el metal no va a ser de mucha ayuda contra una androide…

En ese momento aparece Supergirl armada con su rifle y una vez mas se lleva la desagradable sorpresa de que Satan Girl también es invulnerable a esto, nada parece capaz de detenerla. Por suerte para ellos esas bolas horrorosas deciden atacar a Satan Girl, quien parece incapaz de hacerles daño, y consiguen escapar de nuevo rumbo a otro planeta que Supergirl conoce y que esta vez seguro que si que Satan Girl sera incapaz de localizar (les va a encontrar de nuevo)

Para cuando Satan Girl consigue liberarse de los bichos bola esos gracias a su súper aliento, de nuevo nos recuerda que su plazo de 48 horas se esta terminando (y al acabar Nick Nolte la lleva de vuelta a la cárcel o algo) y parece convencida de que da igual a donde escape Supergirl, ella sabrá a donde va porque conoce cada secreto de su mente…

Y de nuevo la Legión aterriza en un mundo que esperan que sea un refugio seguro, el Planeta de los Titiriteros (enemigos mortales de la derecha española). Un mundo que sirve de lugar de juegos para niños pertenecientes a una raza de gigantes y que aparentemente se dedican a jugar todo el día con marionetas. (yo a estas alturas pensaría que Supergirl me ha echado droja en el colacao)

Pero antes de que pueden aclimatarse a ese extraño mundo Satan Girl aparece de nuevo (sorpresa) cargada con un montón de Kryptonita Verde dispuesta a destruir a Supergirl, a quien deja incapacitada, y casi aplastada, mientras loe Legionarios hacen lo que pueden para contenerla.

Mientras sus compañeros se enfrentan a Satan Girl, Lightning Lad ha rescatado a Supergirl de la Kryptonita y de pronto esta tiene una idea para detener a su enemiga. Dado que en el planeta de los bichos bola Satan Girl fue incapaz de hacerles daño, Supergirl “deduce” que la villana no puede hacer daño a los animales, por lo que la solución lógica consiste en viajar al Siglo 20 y reclutar la ayuda de Krypto, Streaky, Supercaballo y Supermono (Ed Hamilton debió olvidarse de que se llamaban Comet y Beepo respectivamente) ¡La Legión de Supermascotas! (que locos estaban en esos años en DC) Un plan que sorprendentemente funciona y Satan Girl es finalmente derrotada, ya solo queda averiguar de quien se trata…

Y tras desenmascarar a la villana resulta que… ¡SATAN GIRL ES SUPERGIRL! Al parecer cuando Supergirl llego al Siglo 30 para visitar a la Legión apareció junto a un meteorito de Kryptonita Roja, esa que tiene un efecto diferente cada vez que un Kryptoniano se expone a ella, provocando en este caso que Supergirl se dividiese en dos, quedando la Supergirl original inconsciente. Su doble permaneció consciente y de alguna forma sabiendo que transcurrido el plazo de 48 horas ambas se fusionarían de nuevo, negándose a aceptar ese destino.

Para ello la doble de Supergirl desarrollo un artefacto que traspasaría los efectos de la Kryptonita roja de su cuerpo al cuerpo de los humanos, evitando así su fusión con Supergirl, y para ser mas retorcida aun decidió atacar solo a las Legionarias para confundir a Supergirl (Sin pensar que si hubiese atacado a humanos desconocidos en mundos remotos ni Supergirl ni la Legión se hubiesen enterado de nada y ella hubiese vivido)

Tras ello la doble de Supergirl se fabrico un traje de plomo (por si la atacaban con kryptonita o a Supergirl le daba por usar su vision de Rayos-X) con el que poder atacar a Supergirl y a la Legión y adopto la identidad de Satan Girl (para que se notase que era malvada) y asi no ser ser reconocida. Y con su plan fracasado por culpa de la Legión de Supermascotas, a Satan Girl solo le queda resignarse y desaparecer fusionándose de nuevo con Supergirl.

En esta ocasión contamos de nuevo con un equipo creativo familiar, el formado por Ed Hamilton y Curt Swan, a quienes hay que reconocerles que pese a lo enajenadisimo de la premisa y resolución de la historia y lo absurda que es esta por momentos (nunca llegamos a saber si Superboy y Mon-El llevaron a cabo con éxito su mision), acaba resultando bastante divertida pese a todo. (aunque yo personalmente prefiero a la Legión de los 70 en adelante) Y con la enésima repetición de “esta enfermedad no era realmente una enfermedad” finalizamos esta nueva semana de una cuarentena que parece ir para largo. Pero para que nuestros lectores se tranquilicen, que sepan que aun queda material de virus y epidemias para rato y que pese a las protestas de Diógenes yo seguiré en mi linea, que algo bueno debía salir de todo esto.