De Cuarentena con Superboy y el día en el que infectó Smallville con un virus de Kryptonita Roja

Comenzamos otra semana de cuarentena en la que los ánimos se encuentran relativamente fuertes en la Plantación Pantarujez pese a que Diógenes. ahora se dedica a construir un campo de béisbol en el jardín porque dice que si lo construye ellos vendrán y se lo llevaran de aquí. Pero como ya estoy acostumbrado a sus desvarios yo me voy a limitar a seguir a lo mio y lo mio son las epidemias (tengo que conseguir un caballo). Para hoy tenemos uno de esos clásicos de la DC de los sesenta que parecían de los cincuenta (jodido Weisinger) un cómic que no sabemos quien escribió (jodido Weisinger) y en el que Superboy infecto inadvertidamente a la población de Smallville con un terrible Virus de Kryptonita Roja…

Un día como cualquier otro en Smallville Lex Luthor temporalmente del reformatorio para construir una emisora de radio publica mientras una compañía petrolífera se dispone a perforar un pozo en la ciudad con la esperanza de encontrar petroleo, algo que llena de alegría a sus habitantes. Pero tras la perforación el petroleo a presión saca a la superficie fragmentos de Kryptonita Roja que se encontraban enterrados bajo el subsuelo que los ciudadanos de Smallville recogen rápidamente para que no hagan daño a Superboy, lo que viene a ser un día mas en una ciudad que es cualquier cosa menos normal.

Pero pronto la ciudad empieza a llenarse de fenómenos extraños, como cuando el jefe de Policía de la ciudad se convierte de pronto en un gigante. La única conclusión lógica a la que el pobre hombre puede llegar es que la Kryptonita Roja que recogió le ha afectado, pero Superboy sabe que esta solo afecta a los Kryptonianos, por lo que debe ser un misterioso virus espacial que venia acoplado al meteorito de Kryptonita lo que ha convertido al policía en gigante… Que gran futuro tendrían los dos como epidemiologos de twitter.

Y aunque los efectos de la mutación en el jefe de policía han sido temporales, estos siguen dejándose notar por toda la ciudad. Así es como horas mas tarde en en el instituto, durante la clase de química, Pete Ross comienza a expulsar fuego por la boca haciendo arder los productos químicos sobre la mesa y amenazando con asfixiar a sus compañeros de clase. Por suerte Clark Kent se encuentra entre ellos y aprovechando el humo para cambiar a su otra identidad y contener las llamas hasta que los efectos de la mutación en Pete demuestran ser también temporales. Y aunque Superboy sigue sin estar convencido del todo, Pete es otro de los que cree firmemente que la Kryptonita Roja le ha infectado.

Las cosas no mejoran al día siguiente cuando Lana Lang, paseando con Clark Kent, le cuenta como Lex Luthor, en su faceta de Disc Jockey radiofónico (en serio) tiene locas a todas las chicas del pueblo y que le escriben cartas pidiéndole que ponga sus canciones favoritas y que ella misma le ha escrito. Pero pronto Lana tiene otras preocupaciones como esos poderes elásticos que acaba de descubrir…

Aunque Lana ya debe estar curada de espantos y en lugar de preocuparse por estas nuevas habilidades decide utilizarlas para estirarse y entrevistar a unos obreros de la construcción que se encuentran trabajando en el armazón de un edificio, dándoles un buen susto que por suerte no acaba en tragedia. Y aunque ella sigue convencida, como todos los demás, que la culpa es de la Kryptonita Roja, Clark empieza a sospechar que hay algo mas detrás de todo esto.

En concreto Clark esta convencido de que el culpable de todo es Lex Luthor (no le podemos culpar por sospechar de el) Pero antes de que pueda desarrollar su teoría sus padres se ven afectados por esos extraños y aleatorios efectos secundarios que circulan por la ciudad y ambos se ven miniaturizados, algo de lo que por supuesto culpan a la Kryptonita Roja. Sin tiempo que perder Clark deja a sus padres en el interior de una casa de muñecas que vendían en su tienda (una casa tan completa que posee una cocina funcional que Ma Kent puede utilizar para preparar el desayuno, menudo lujo de juguete) y se dispone a llegar de una vez por todas a la raíz de esta misteriosa infección.

Pero las patrulla sobre Smallville no pueden interferir en su educación, así que tras revisar la ciudad sin encontrar nada, Superboy vuela hasta su instituto y cuando se dispone a adoptar de nuevo su identidad de Clark Kent se encuentra con que… ¿Este ya esta en clase? Un Clark Kent convertido en Bizarro se encuentra en su aula con su profesora y sus compañeros de clase… Y es solo ahora, cuando aparentemente la Kryptonita Roja le ha afectado a el cuando empieza a creer que efectivamente esta se encuentra detrás de todos los fenómenos extraños que han asolado Smallville los pasados días (Superboy negacionista, quien lo iba a decir)

Aunque sin saberlo en realidad Superboy había tenido razón todo el tiempo, no solo la Kryptonita Roja no ha afectado a nadie realmente, sino que Lex Luthor era la mente criminal detrás de todo. Un criminal que mientras cumplía su sentencia en el reformatorio fue contactado telepaticamente por un científico renegado de Atlantis que no debía tener nada mejor que hacer ya que por aquel entonces Arthur Curry no debía ser aun Aquaman y se había dedicado a ver en su pantalla (una de esas casi mágicas que no necesitan estar conectadas a cámaras para observar cosas) como Superboy derrotaba una y otra vez a Lex y quiere ofrecerle su ayuda para matar a Superboy (Definitivamente en Atlantis no debía haber mucho que hacer esos días)

Y con su ayuda Lex construyo esa emisora de radio que se mencionaba de pasada al principio y que en realidad era un emisor de ilusiones hipnóticas con el que Luthor ha estado implantando en las mentes de los habitantes de Smallville falsas imágenes que les han hecho creer que había Kryptonita Roja en la ciudad, un virus y que este había estado causando extrañas mutaciones entre ellos ¡Nunca hubo tal virus y Superboy siempre tuvo parte de razón!

Pero todo esto aun lo desconoce, y cuando confronta a Luthor este le convence de que es el quien esta infectando a sus conciudadanos, y que la única cura es exponerse a Kryptonita Verde para anular los efectos de la roja. Superboy vuela hacia donde Lex le ha dicho que puede encontrar Kryptonita Verde y se sacrifica para salvar a Smallville, momento que Luthor aprovecha para fundir con ácido las rejas de su celda y escapar descolgándose con una sabana. Pero antes de poder disfrutar de su ansiada libertad Superboy aparece vivito y coleando para arrestarle ¿Como ha sido posible si Lex le vio morir?

Superboy había sido de nuevo mas listo que Lex y había descubierto sus planes, le había seguido la corriente y había hipnotizado al científico Atlante para que le transmitiese a Lex una falsa imagen de su muerte antes de entregarle a las autoridades Atlanteanas y de volar de regreso a Smallville para poner de regreso entre rejas a Luthor. Y aunque este no entiende aun como es que Superboy descubrió la verdad tras su perfecto plan, no se imagina que fue el mismo quien se traiciono al crear una ilusión de Clark Kent convertido en Bizarro existiendo independientemente de Superboy, ya que Lex no conocía su doble identidad (porque Bendis aun no había nacido y no se había dedicado a malmeter con dicha identidad).

Pero claro, todo esto deja aun muchas preguntas en el aire, ¿como es que cuando Lex lanzo la ilusión de que Clark se había convertido en Bizarro este no creyó transformarse como les había sucedido a sus padres, a Pete o a Lana? ¿Donde estaban metido los Kent cuando creían ser miniaturas viviendo en una casa de muñecas? ¿Y quien es el misterioso guionista que escribió este cómic y a quien nadie acredito jamas? (jodido Weisinger) Lo único que sabemos es que el dibujo corrió a cargo de George Papp y que Diógenes. cree que el guion debió correr a cargo de Edmond Hamilton, del que se sabe que escribió la segunda historia publicada en este numero de Adventure Comics y protagonizada por la Legión de Superhéroes pese a que en ninguna de las dos aparecen créditos algunos como tristemente solía suceder en aquellos años.

Y si, he hecho un poco de trampa con el articulo de hoy ya que en realidad nunca existió ningún virus, ni infección ni epidemia, por lo que se lo quiero dedicar a Diógenes., quien sigue abominando de mi idea para pasar esta cuarentena, ya que técnicamente he hecho lo que tanto me ha suplicado, no escribir de eso que tanto le aterra. Yo por mi parte ante la acumulación de material del Hombre de Acero voy a dedicarle esta semana repasando algunas de las ocasiones en las que se ha visto afectado por alguna clase de virus o infección y recordando así de paso al publico que en casos como este todos podemos ser victimas, así de paso lo disfrazo como mensaje social y que se note menos que lo hago para enloquecer a Diógenes.