Cuando se anunció Daima, la nueva serie de animación de Dragon Ball creada por Akira Toriyama antes de su muerte, el pensamiento de muchos al ver aquel Son Goku de nuevo en su más tierna infancia fue el mismo: ¿seguro que esto no es Dragon Ball GT? Dragon Ball GT había sido la falsa secuela de Dragon Ball Z que hizo Toei tras la finalización del manga, queriendo seguir con el negocio y no teniendo ya material original en el que basarse.
En aquella serie Son Goku era revertido a su más tierna infancia gracias a unas bolas del dragón «oscuras», con lo que se veía obligado a buscar otro tipo de bolas del dragón para poder volver a su ser. Para ello, se juntaba con su nieta Pan y Trunks, el hijo de Bulma, para viajar por el espacio junto a un robot un tanto insoportable. Y hasta ahí toda la originalidad de GT, porque acabó derivando en todos los tópicos del Battle Manga en los que cayó la propia Dragon Ball, con transformaciones absurdas, enemigos hiperpoderosísimos a los que había que cascar y demás, con lo que la parte de aventura de los primeros episodios que trataba de remitir al arranque del cómic original se fue diluyendo a una velocidad vertiginosa.
Daima, por su parte y en sus lentos y primeros episodios, nos cuenta como unos demonios de otra dimensión ven a Son Goku y compañía como potenciales enemigos y deciden usar las bolas del dragón normales de toda la vida para infantilizar a Son Goku y todos sus aliados, provocando que Krilin, Vegeta o Piccolo acaben también infantilizados y algunos que todavía eran niños como Trunks o Goten acaben siendo bebés. Ésto algunos como Mutenroshi lo reciben como una noticia maravillosa, porque vuelven a ser críos, pero para Son Goku y Vegeta es un estorbo porque les deshace buena parte de su progreso como luchadores, a pesar de que me da la impresión de que Son Goku para el tercer episodio ya se ha acostumbrado a su nuevo centro de gravedad y no parece que tenga mucha necesidad de usar el palo mágico de sus años mozos.
Pero lo raro llega cuando descubrimos que, para «curar» a Son Goku y porque las bolas del dragón de la Tierra todavía necesitan varios años para estar funcionales, deben viajar al mundo de los demonios y usar las bolas de dragón de ese reino, obviando por completo la existencia de las bolas de Namek, que a priori deberían darle el mismo servicio. Pero si pensamos bien y damos por hecho que también están en barbecho y que por eso Son Goku tiene que pegarse este viajecito, lo que nos encontramos es a Son Goku niño con su personalidad de adulto (adulto algo infantil, no lo vayamos a negar) viajando con un trasunto de Trunks demoniaco (Glorio) y Kaio Shin, que no es Pan pero ejerce de «adulto» del grupo. Claro, son pocos episodios y es pronto para decir nada porque apenas ha pasado nada, pero supongo que a estas alturas podemos olvidarnos de que este anime sea el regreso a las raíces que nos habría gustado ver. Las sociedades de demonios son una de las grandes pasiones de Toriyama, y parece que éso precisamente es lo que nos va a contar esta historia, a pesar de que no sabemos si durará diez episodios, treinta o trescientos.
Con un humor tontorrón y unos personajes un tanto básicos, Daima disfruta de una de las mejores animaciones de las que ha disfrutado una serie de Dragon Ball, lo cual es todo un goce para los sentidos, pero a la vez hace más triste que el guión no acompañe. Una intercuela de los tiempos de Son Goku contra el ejército del Lazo Rojo o una época anterior habría tenido bastante más gracia, sobre todo porque esta historia no deja de ser (junto a GT y Super) la enésima continuación de Z que seguramente sea invalidada por la siguiente de una u otra manera. Lo que es peor, el manga de Super está «en pausa», no se ha cancelado ni mucho menos, con lo que esta intercuela entre Z y Super debe ser corta o exponerse a acabar «sobreescribiendo» a Super. Y éso sería una lástima, porque aunque Super empezó con todos sus defectos, acabó siendo una continuación más que digna que le dió cierta justicia a varios personajes completamente olvidados de la serie original.
Daima, de momento, ha vuelto a la esencia de que nos pone como protagonista principal a Son Goku, pero se olvida de que lo importante de aquel niño era que a su alrededor los personajes también eran divertidos y carismáticos, todos definidos por sus defectos sí, pero que daban mucho de si desde un primer momento. Daima podía y todavía puede darles la oportunidad de recuperar el foco de la serie que hacía posible que muchos de los conflictos no se resolvieran solo a puñetazos, si no con la cabeza y el diálogo. Un valor cada vez más infravalorado que solía ser uno de los principales objetivos didácticos de las series infantiles de antaño, todo sea dicho. En cualquier caso, creo que ha llegado el momento de darnos cuenta de que Dragon Ball nunca volverá a ser lo que era, porque la fuente de su éxito internacional vino precisamente de la época de las tortas y los músculos hipertrofiados, con lo que aunque Daima prometa una cosa, sabemos de sobra que acabará irremediablemente yéndose en otra dirección. Una pena, aunque ojalá me equivoque.
Lo he dicho muchas veces.
El problema de DB es que el nivel del poder se les ha ido de las manos.
No hay emocion porque sabemos que Gokuh vencera tranformandose en un enesimo cambio fisico.
Lo interesante de la primera etapa es que los personajes entrenaban para volverse mas fuertes.
Por otra parte desde la cancelacion del manga los personajes no evolucionan en lo personal, se quedan mas estaticos que los superheroes americanos.
Hay miedo al cambio, cuando el cambio es lo que hacia y hace interesante al manga y al anime.
El mejor episodio de Dragon Ball tras el estirón de Goku es ese en que Chichí se cabrea y manda a Goku y a Piccolo a sacarse el carnet de conducir, todo lo demás, gaitas.
Ese capitulo es un clasico y el mas comentado en mi epoca de instituto.
Lo cual demostraria que el publico no siempre quiere batalla tras batalla.
¿Que capitulo de Gokuh como niño igualaria a del carnet de conducir?
Yo voto por aquel en que ayuda a Nam a que su pueblo vuelva a tener agua.
La frase de Giran a sus subordinados es antologica. «Si me ha vencido(Gokuh en el torneo) pero solo ha sido él capaz de lograrlo»
Mas o menos creo que era asi
Igualar? Buf, casi toda la serie lo supera. El entrenamiento con Mutenroshi, toda la saga inicial con Pilaf… La gracia del capítulo del carnet de conducir es que remitía al tipo de historias de Dragon Ball a secas, antes del estirón.
Tal vez me explique mal.
Queria decir dentro de DB, de los episodios de relleno, cual era el mejor de la primera serie.
Porque hay que reconocer que algunos eran muy malos.
Por cierto tambien me gustó mucho la tercera pelicula de DB con Arale, que a pesar de no tener nada que ver con la serie (los personajes tenian origenes distintos) no paré de reirme al verla.
Eso siempre lo he dicho yo. Y la gente se lo toma a cachondeo, pero no deja de ser un episodio que tira para delante por los propios personajes, por enfrentarlos a una situación que no arreglan a mamporros o entrenándose para dar más mamporros.
Y éso precisamente es lo que se hacía en la DB original!
Es que contrasta un huevo con todo lo que se contaba en ese momento en la serie, que eran hostias y transformaciones, que sí, que para mi yo de 12 años molaban y tal, pero que a la vuelta de unos años dan pereza cuando revisitas la serie; y ese tono diferente alrededor de una cosa tan cotidiana y las interacciones que provoca te atrapan como no lo hacen los cambios de Célula.
Dragon Ball era una joya de época, pero que no se puede replicar en la actualidad.
Daima intenta recuperar ese carisma, en parte, pero no lo logra, con una serie de ritmo soso, demasiado contemplativa, muy explicativa con dialogos para presentar elementos que no se han desarrollado, pero probablemente se justificarán más adelante. Lo triste es que vemos pocas cosas nuevas, pues al final es solo un refrito de conceptos conocidos en esta franquicia.
Demasiado latigudo todo. Se deja ver y la calidad me parece superior a Super, pero decepciona que no se aproveche el potencial de esta minisaga.
Sobre GT, tenía más carisma inicial, pero menos sentido y su guion también era flojo. por eso rápidamente vuelven al tono de DBZ. Creo que tuvo un repunte desde la saga de Baby, para rematar apresuradamente con la saga de los dragones. Para mi, pese a sus yerros, es imposible darle un final más épico a la saga. Y más que una «falsa secuela», me parece más una secuela válida, como cualquiera del Multiverso de Dragon Ball.
La idea de volver a Gokuh niño no era mala, el problema venia cuando se supone que solo era el cuerpo lo que tenia de niño y la mente seguia siendo de adulto(es un decir en el caso de Goku).
Goku actuaba como un niño cuando en realidad no habia motivo para eso ni en el guion(Shenron solo lo devuelve a su fisico infantil) ni en el argumento(todos sabian lo que le habia pasado a Goku).
Tal vez si hubieran imitado la situacion de Conan Edogawa(Meitantei Conan/Detective Conan) la cosa hubiera sido mas interesante.
Aun asi la transformacion de Goku en Gorila/Humano rosa con el tiempo hasta me parece buena comparada con tanto cambio de tinte de pelo.
Era una buena idea, pero había que pulirla harto para que cuajara. Yo, dentro de todo, me tomé con liviandad la primera parte de GT y la disfruté como ahora hago con Daima. Pero no son productos del nivel de Dragon Ball original, ni tampoco de Z hasta la saga de namek.
Respecto al SSJ4, me gustó la conexión que hicieron entre la leyenda del SSJ y el Ozaru, para justificar la nueva transformación, una aún más poderosa y que rompiera las barreras de las transformaciones anteriores.
A mí me gustó siempre más dragon ball.
Dragon ball z hasta namek incluido está muy bien pero estiran batallas.
Ya la saga de célula y bu es respecto a la lucha demasiado. Eso sí, ver como crece gohan y la relación con videl era muy interesante.
Batallas sí pero sin estirar tanto.
Hace poco me he visto 7 deadly síns que son 100 capítulos. Empieza muy bien pero ya después abusa demasiado de luchas. Y la secuela tiene buenos personajes pero lo mismo.
Aprovecho a comprobar los mangas para ver por donde llega anime.
Es que despues de Freezer los enemigos a batir basaban todo su poder en que se regeneraban continuamente y eso en mi opinion le quita gracia a los combates.
Estoy de acuerdo la historia de Great Saiyaman era muy interesante pero la sombra de Goku es muy alargada y aunque toriyama siempre quiso eliminar a Goku (ya desde la saga de Freezer) ni la editorial ni la gran parte de los fans de la serie se lo permitian.
Que el Dragon Ball «bueno» desapareció hace décadas es indiscutible.
Pero es que la inmensa mayoría de sus consumidores solo se quedan con la sucesión infinita de peleas y de peinados y fusiones; anda que no se ha generado una mística para una cosa que solo tenía gracia la primera vez.
Cualquier producto dirigido a resucitar el espíritu original tendrá que hacer el viraje más tarde o temprano.
Y Dragon Ball era la genial galería de secundarios. ¿Cuantas veces Songoku solo está de espectador de las historias de otros?
Era el demencial ritmo en donde en 5 minutos pasaban más cosas que en 5 episodios de las series tardías.
Era la imprevisibilidad. Cada episodio era un romper expectativas y un no saber que esperar. Todo lo contrario de lo actual que sigue el procedimiento reglado desde hace ¡bufff!
Sí a todo.
Las series de Toriyama no estan pensadas paractener una continuidad larga, por lo que podemos decir que Dragon Ball ya estiro el chicle al maximo con DB Zeta, al punto que practicamente no quedaba más que contar.
Pero su exito era demasiado grande como para morir ahi, por lo que continuo con la saga de celula, que no deja de ser un refrito de terminator (thrunks es un transunto de John O’connor con supersayjin) con un malo final que era una mezcla de todos los protascen uno (el mimico o superskrull de turno para ser el enemigo definitivo). Todo esto da la idea que la serie estaba agotada pero el gusto por las batallas de Goku y compañia seguia por lo que sacaron la saga de Bu, que era en tono parodico a todo lo anterior, con unos personajes que ya demostraban estar muy poderosos para el universo en el que se movian.
Esta saga más o menos dejo un final digno con la esperanza de que se dejars descansar a la saga….pero no, se continuo con OVAs y con Dragon Ball GT que segun se rumorea, Toriyama boicoteo dando malas ideas al estudio a proposito con tal de que fracasara. Medio funciono, porque a partir de ahi se tomaron un merecido descanso sacando cosas de vez en cuando peeeeero esta saga era demasiado jugosa como para que se quedars alli.
Ahora sacan Daima, a mi me parece genial porque siempre me alegra ver Bola de Dragon, serie con la que he crecido y que siempre formara parte de mi vida, pero no tengo expectativas al respecto porque realmente, para mi, esto acabo con Z, en la batalla de Goku contra Frezzer.
Todo lo demas es un fanfic como la Divina Comedia a la Biblia.
Un saludo desde Asturias.