El caso de Steve Leialoha es uno curioso, porque no deja de ser uno de esos dibujantes/entintadores que trabajó en clásicos como el Warlock de Jim Starlin, Doctor Extraño junto a Roger Stern, los Nuevos Mutantes de Chris Claremont y Bill Sienkiewicz o, más adelante, en series como Fables, siendo el entintador de Mark Buckingham. ¿Ha tenido reconocimiento por su carrera? Sí, desde luego, han llegado a darle algún Eisner y otros premios, pero nunca ha sido algo espectacular. Y aun así, pues oye, no dejaba de ser un dibujante la mar de apañado.
Que recuerdo una carta a los Nuevos Mutantes en la que un lector airado le decía al pobre Profesor Loki lo mucho que odiaba a Leialoha como dibujante, que poco menos que si se lo cruzaba en un salón lo reventaba. Era una época un tanto «salvaje», porque quieras que no era cuando parecía estar de moda vituperar a los dibujantes de Nuevos Mutantes después de que se abriera la veda con el propio Bill Sienkiewicz (algo que en realidad no ha pasado de moda, porque la gente sigue siendo la mar de extrema). Pero donde Leialoha se curtió como dibujante fue en Spider-Woman, la serie sobre la detective Jessica Drew que se creó por una cuestión de protección de marcas y a la que misteriosamente -comillas comillas- muchos autores le cogieron cariño pese que nunca fue un cómic de gran éxito. Que sí, que todo lo que escribiera Claremont por la época era de gran interés para la generación de autores posterior, pero más allá de sus apariciones en Uncanny años más tarde, Jessica Drew hasta fue jubilada como Spiderwoman y fue sustituida por aquella impostora pelirroja de Secret Wars. Que, bien pensado, Secret Wars estaba lleno de sucesoras «por mis ovarios», pero supongo que éso ya es otra historia.
Para cuando se publica Spider-Woman 34 Leialoha ya lleva unos meses en la serie y es el dibujante regular, pero es el primer número de Claremont. El británico llega como el posible gran salvador de la serie, pero en realidad no se quedará más de un año y acabará llevándose a Leialoha a los mutantes, con lo que la pobre Jessica se quedará sin serie para el número 50. Claremont se estrena en la serie recuperando a Yunque y Martillo, dos villanos de lo más garrulo que habían tenido sus roces con Hulk y con Spiderman (a cargo del propio Claremont y con la organización de Moses Magnum, DRC, de por medio) y que no tendrían mucho más recorrido, porque el Azote acabaría limpiándoles el forro. Pero en el cómic que nos ocupa los dos están bastante vivos, y disfrutando del inmenso placer que es reventar un Rolls-Royce (y repito que se llaman Yunque y Martillo y no Hoz y Martillo, ojo).
Spiderwoman acaba hecha unos zorros porque pierde temporalmente sus poderes en media pelea y los dos pillos consiguen su objetivo de secuestrar a una de las tripulantes del vehículo, Amanda Sheridan, abuela a su vez de Samantha Sheridan, que también iba en el coche y comparte su mismo apellido porque… Yo que sé, si los Austrias pueden los Sheridan también. Jess acompaña a Samantha a su casa de Beverly Hills tras descubrir que el cateto de Yunque se ha dejado su carnet de empresa en la escena del crimen, revelando que los dos trabajan para la DRC del fallecido Moses Magnum. DRC que, curiosamente, está intentando una OPA hostil contra la empresa de las Sheridan y por eso la han secuestrado. Tras una pequeña conversación Jess convence a Samantha de que lo mejor para rescatar a su abuela es dejarla hacer, y de la misma pone manos a la obra a todos sus amigos para que le consigan una entrevista de trabajo en el complejo de DRC donde sospechan que está encerrada la abuela. No es que sea el mejor trabajo de detectives del mundo, pero a la hora de la verdad funciona y Spider-Woman acaba infiltrándose en el edificio.
Por el camino nos encontramos con el espinoso asunto de las feromonas; por la época y para poder funcionar en sociedad, Jessica tomaba unas pastillas para suprimir su poder de atracción animal y así poder vivir tranquilamente en sociedad, pero de un tiempo a esta parte su cuerpo ha desarrollado inmunidad a los efectos de las pastillas y ha tenido que empezar a tomar más pastillas, provocando así el efecto secundario de que sus poderes empiecen a fallarle y así es como durante la pelea que arrancó el cómic ella notó esos fallos en sus poderes. Convencida de que va a necesitarlos para la infiltración, decide no tomarlas y de la misma sus feromonas vuelven loco al entrevistador de la empresa, que no tarda en meter fichas y comerle los morros a la primera oportunidad:
Naturalmente, Jess se libra de él en cuanto puede y se patea todo el edificio hasta encontrar a la abuela, que como buen personaje femenino claremontiano no solo había conseguido ella sola escapar de su celda, si no que se había agenciado un mandroide para pasar desapercibida. Jess y la buena señora escapan de allí volando porque el tiempo es oro y la señora tiene que llegar a la junta de accionistas para evitar la venta de su empresa (esta gente siempre está estresada) por lo que los mandroides de DRC empiezan a perseguirlos por medio monte y hasta Yunque y Martillo reaparecen para desempatar, porque Jess ya se los había encontrado dentro del complejo y con sus poderes al 100% había conseguido tirarlos al vacio. Que, si lo piensas, es la mar de práctico eso de que tus enemigos estén unidos por una cadena, porque si tiras a uno el otro no tarda en caer detrás, sobre todo si la cadena que los une hace que todo lo que afecte a uno le afecte al otro también, que se lo digan si no al Azote. Pero estábamos hablando de Spiderwoman.
Porque precisamente lo que hace Spiderwoman para derrotarlos es usar su aguijón bioeléctrico a través de la cadena en cuestión, noqueando a una parejita que no volvería a aparecer hasta… Oh, su muerte a manos del Azote. Vaya. Y no, no los resucitaría nadie en estos cuarenta años, a este paso van a batir el record de Bucky. Jess y Amanda consiguen escapar finalmente y llegar a la junta de accionistas para evitar la venta, pero como había que hacer más dramática la situación uno de los miembros de la junta de Sheridan decide sacar una pistola para matar a Amanda porque… Yo que sé, le apetecía ir a la cárcel. Porque digo yo que si matas a alguien en una junta de accionistas el juez va a considerar que la operación financiera es cuanto menos sospechosa, con lo que no creo que a DRC le beneficiara mucho la situación. El cómic acaba con una bonita escena en la playa de Jessica con su amiga Lindsay McCabe que es interrumpida por Angar el Aullador, otro de los «refugiados» de trabajos anteriores de Claremont…
No es una gran historia de Claremont, es más una toma de contacto con el personaje y el dibujante que otra cosa. Leialoha es bastante efectivo y la historia se lee facilmente, pero narrativamente no pertenece tampoco a la «vieja escuela», que para entonces ya era la de John Buscema. Tenemos que entender que es un periodo de experimentación a muchos niveles y Leialoha no se corta en romper algunas de las reglas académicas para contar la historia, aunque en más de una ocasión las cosas no le salieran de la mejor forma. Lamentablemente, es precisamente éso lo que muchos lectores de la época no le perdonarían, pero a toro pasado éso ya nos da igual. La semana que viene demostraremos a la perfección aquel dicho de «otros vendrán que bueno te harán» y saltaremos a la otra serie que se creó por cuestiones de marca registrada, Savage She-Hulk. No, no va a ser bonito y sí, estamos a un par de semanas de algo peor…
Podía ser la mar de efectivo, pero dibujaba unas caras más feas que su padre, eso sí…
Ya digo que el odio a este dibujante en algunos casos rozaba casi lo patológico, había gente a la que directamente no le gustaba absolutamente nada mientras que con Sienki no pasaba nada.
Que la mayor parte de los lectores españoles de la época detestaba a los dos, eso sí.
En los correos americanos también ponían a parir a Sienki, pero en los españoles más (vale que igual porque a gente como Efepé no les hacía tampoco gracia el Sienki que ya no imitaba solo a Adams, que seguía más la mancha europea …y claro, si tienes en contra al que selecciona el correo…)
Hombre, él mismo solía decir en los correos que a él si que le gustaba Sienkiewicz, de hecho me acuerdo de una tira de aquellas Primicias Loki en el que aparecía metido en una jaula con un cartel de bicho raro mientras decía a un montón de lectores cabreadísimos que a él sí que le gustaba Sienkiewicz.
Me llama la atención que las dos mujeres millonarias en este cómic sean negras. Eso es bastante avanzado para la época.
Spiderwoman no es mal personaje,pero nadie sabía muy bien qué hacer con ella la primera época, por eso tiene como tres orígenes distintos (al principio debía ser una araña mutada por el Alto Evolucionador).
Parece que el Alto Evolucionador estaba metido en el origen de mitad de Marvel en los ’70 (se supone que un posible origen de Lobezno era similar a lo que mencionas, por supuesto que está metido en las primeras historias de Warlock y también en los retconeos originales de Wanda y Pietro).
En los ’90 Ostrander acabó usando la idea en sus Héroes de Alquiler para su versión de White Tiger.
Y ahora sale en Guardianes de la Galaxia 3. Como se nota que James Gunn se crió con cómics de los 70 y 80, eh?
Y lo bien que le han servido!
Sí, se llegó a barajar que Logan fuese un animal mutado y evolucionado, aunque originalmente era poco más que un soldado bien entrenado con equipamiento especial (las garras iban en los guantes con Wein y Trimpe, incluso para Claremont no fueron parte de su cuerpo inicialmente, solo cuando le preguntaron por el tema vio que era mucho mejor que formasen parte de él)
Lo de las garras siendo parte del cuerpo estoy casi seguro que escuche a Claremont contar que fue idea de Cockrum (“es algo asqueroso; ¡me encanta!” creo que dice de la idea, xD).
Lobezno necesitó mucho retoque y no solo por parte de Claremont y Cockrum (a quien no le gustaba el personaje… al igual que a mí! xD) sino que por supuesto por parte de Byrne.
Sí, buena parte de la esencia del personaje no llegó hasta Byrne (en parte también porque a Cockrum le importaba más bien poco …con Claremont ya tuvo suerte de pasar el corte tras el casting de Len Wein, no como Ave de Trueno y Fuego Solar).
Wein le dejó los X-Men a Claremont con demasiados personajes y problemas de redundancia. Entre eso y Cockrum por un breve instante hasta se parecían demasiado a la Legion, xD.
Y si no se parecía lo suficiente (al fin y al cabo la Legión de Levitz era una de las influencias de los X-Men de Claremont, de la misma forma que estos lo fueron de los Titanes de Wolfman) para eso Cockrum se inventó la Guardia Imperial Shiar (para que Marvel tuviese su propia Legión de Super-Héroes alienígena …y él pudiese dibujarla, claro).?
Avanzado… Y tristemente raro. Pero bueno, que se le va a hacer.
Incluso ahora siempre que sacan un millonario es blanco. Lo cual será realista, pero no integrador (creo que solo se salva la Pantera Negra…).
Hubo otra Spider-Woman (fuera de continuidad), la de Spidey Super Stories (la buena señora afroamericana del show de The Electric Company se encontraba uno de esos uniformes que el arácnido siempre andaba dejando tirados por ahí, lo customizaba e intentaba convertirse en la heroína del barrio, pese a no tener poderes …bastante simple…y bizarro). Serie bienintencionada y simplista para críos (me refiero al cómic, pero vale también para el show televisivo).
Y también hubo la de los Vengadores, Julia Carpenter. Que creo yo nunca ha coincidido con la original ni para un café.
En un comic de la Patrulla-X (de finales de la etapa Romita, creo), la Fuerza de la Libertad se enfrenta a algunos miembros de la Patrulla en San Francisco y Jessica Drew (que ya no tenia poderes) se indignaba al ver que alguien «le había robado el nombre».
Eso es como decir que Animal Man y Alan Scott se conocen por haber coincidido en el satélite del Monitor durante la Crisis… No creo que cuente.
Nunca generó mucha expectación (pese a su debut en Secret Wars). Tampoco apostaron demasiado por ella (además, su etapa vengadora fue principalmente noventera, lo que ya lo dice todo … principalmente su temporada en Fuerza de Choque, los sucesores proactivos de los Vengadores Costa Oeste, con Tony Stark y Wanda al frente). Otro personaje sexualizado. Luego la metieron en la spiderfamilia (pero la aprovecharon poco …incluso cuando sustituyó a Madame Web).
No creo que SpiderWoman fuera muy sexualizada (mucho menos que otras en la era de los Swimsuit especials). La usaron poco seguro. Incluso diré demasiado poco.
La experimentación artística es el aspecto más interesante de la serie ya fuera Infantino (no le conocía previo a leer Spider-Woman así que eso era experimentación para mi) o la evolución de Leialoha (me gusta como dibujante, me pareció muy bueno entintando a un ya decadente Silvestri en X-Men, no exactamente bueno con Milgrom en Secret Wars II, xD). Y no es por falta de escritores respetables: un Gruenwald rescatable (lo intenta, parece querer tomarse la serie en serio al menos, cosa que no sabría decir de Wolfman), Claremont por supuesto (reemplazando a un preferiblemente olvidable Michael Fleisher como ya había hecho en Man-Thing) e incluso Ann Nocenti cierra la serie (bien o mal, lo suyo era distinto). Pero lamentablemente a la serie le juega en contra la misma Spider-Woman; estaba muy mal definida en personalidad y habilidades desde su creación (otra cosa en la que es similar a Ms. Marvel además de derivar de otro personaje y ser escritas/rescatadas por Claremont) lo que hace difícil darle un enfoque a sus historias así como permitió que los autores hasta se tomaran ciertas libertades en crear ese enfoque. Por ejemplo los pasos de los tres ya mencionados parecen mas prueba de sus habilidades como escritores que del potencial de Spider-Woman como concepto y serie (ya fuera Gruenwald intentando darle una galería de villanos, Claremont creando secundarios y relaciones o Nocenti sacando secuencias surrealistas escalofriantemente realistas). O en otras palabras; el cómic no tenía más identidad que la del autor de turno.
El editor de este número es el mismo Denny O’Neil de Daredevil y para mi claramente no tiene la misma influencia en el personaje. Aunque Claremont/Leialoha es la mejor etapa de la serie y la que más se identifica con Jessica Drew, el nombre de O’Neil (a mí parecer incluso a esa altura de su carrera) está relacionado a un impacto mucho mayor en personajes, series y el medio entero (cuando se es tan grande la barra queda muy alta).
Yunque y Martillo me parecen el tipo de villanos perfectos para estas historias donde o había que rellenar o eran un escalón en una historia más grande. Unas víctimas de Azote (a manos de Byrne?) que como tantas víctimas de esa historia acabas lamentando más que celebrando.
Creo no equivocarme en que Angar era el novio de Screaming Mimi; la Songbird de los Thunderbolts de Busiek/Bagley. Quizás no el personaje (la caracterización de Busiek pocas veces me convence) pero el diseño de Songbird que supongo es de Mark Bagley (a veces se me hace parecido a uno de George Pérez pero “ligeramente noventizado”) siempre me gustó.
No he querido ser cabrón y por eso no he recordado lo que decía Shooter sobre el O’Neil de aquel momento, que le daba a la botella y solo le interesaban las series que estaba escribiendo. Y Spiderwoman era una de esas series incómodas, un encargo en toda regla. Imagino que la intención de Claremont era «salvarla» igual que había hecho con Ms Marvel, pero como tampoco estuvo mucho tiempo por allí más allá de convertirla en detective (tal cual lo que luego fue Jessica Jones, que empezó como una serie de Spiderwoman sin poderes) no pudo hacer gran cosa más. La serie volvio a ir de mano en mano entre editores hasta el cierre, sin que nadie en aquel momento la echara de menos.
Y sí, Angar era el novio de Songbird, de hecho Busiek hasta se curró una historia en retrospectiva contando como Angar moría y Zemo aprovechaba la circunstancia para ficharla.
Lo mismo pensaba de esa etapa de O’Neil; pero incluso no quise comentar la carga de trabajo fuera de Daredevil. Más que nada porque tampoco otros editores iban a hacer algo más con la serie y si el mismo Claremont como escritor no hizo gran cosa realmente hasta se entiende un poco que se inventaran otra Spider-Woman (Jessica Carpenter tenía un foco más claro, que no es decir mucho, pero lamentablemente le tocaron DeFalco, Roy Thomas en los ’90 y los mismos ’90).
Y la verdad, es una muestra del nivel de O’Neil y Claremont; porque para otros autores y editores (coff Oltnam coff OclaFeD coff) esta etapa de la serie sería un gran logro. Ahí está Hulka justamente para contrastar.
Hay muchos trabajos de rescate por estas épocas, no solo de Claremont (aunque lo suyo es muy reconocible); Marvel realmente se afianza ya con Simonson en Thor.
A mí me caía bien Julia Carpenter, aunque la usaron poco y mal.
Spider-Woman debía ser de las pocas colecciones femeninas de la época, y da la impresión de que todos los autores solo estaban de paso.
Julia Carpenter lamentablemente pasará a la historia (si eso) como la Spider-Woman de los ’90. Un título que ningún personaje querría tener.
Por un corto periodo de tiempo (alrededor de las fechas de estos cómics) Marvel publicaría tres series con protagonistas mujeres: Spider-Woman, Hulka y Dazzler. La mejor de todas siendo la Ms. Marvel de Claremont que es anterior a esa camada de colecciones, xD.
El propio O’Neil reconocería después en entrevistas que por aquella época se llevaba a la oficina el termo de café (cargadito de vodka).
Gruenwald también dibujaba y entintaba, pero está claro que lo suyo era editar y hacer de archivista con los Ficheros y similares (como los seriales de complemento sobre el pasado del Universo Marvel) y ocasionalmente de guionista (aunque ahora se lo pone un poco de más al alza, ahí hubo de todo, la verdad, no es lo del Escuadrón Supremo precisamente lo más representativo de su obra).
Su miniserie de Hawkeye no está nada mal. Cuando estaba bien, Gruenwlad realmente estaba bien (y malo, realmente malo sería solo en los ’90 cuando ya está agotado de ideas). Pero si que como editor era mucho mejor (era un excelente editor, aún con sus errores, y marcó mucho más y mejor la Marvel de Shooter que el maldito DeFalco).
Es una miniserie a la que le tengo cariño. No como a intentos posteriores de dar cabecera propia a Clint.
Gruenwald tuvo momentos muy inspirados, como sus DP-7. No era un gran escritor, pero si uno muy ameno. Desde luego algunos villanos que creó se han quedado como clásicos del Capitán América (como Calavera).
Algunos tenían potencial, como Calavera, Sin Banderas, Azote y Superia (u organizaciones como los Perros Guardianes o la de los polis blindados fascistas), otra cosa ya es que se supiesen utilizar. Y podrían haber dado mucho juego en el universo cinemático (pero se ha pillado poco de ahí y se ha usado poco y por lo general mal y con cobardía, lo menos politizado posible).
Luego se atan cabos en la serie de Los Vengadores. Y más tarde se recupera a Jessica Drew y su socia en la serie de Logan. Para volverla a ver como Spider-Woman ya habrá que esperar (mucho) a Los Vengadores de Bendis (con el lúbrico de Frank Cho). …La serie de Ms Marvel se revisita a día de hoy de forma más fácil. La de Spider-Wonan, la breve de La Gata (y el serial de Tigra) ya demandan algo más de esfuerzo. Pero se leen (la primera serie de Hulka en cambio es un sufrimiento).
En eso de las superheroínas aún hoy en día se está algo en el debe. Hay mucha tela que cortar si nos vamos al pasado, bastante más malo que bueno.
Pero si, los ’70 probablemente fue cuando Marvel fue más “proactiva” con el tema y ese intento al menos se agradece, creo. Ya si aquello era legible fuera de Claremont, ehhhhh. xD
Como se confirme lo de la Cosa femenina en la próxima peli de los 4F ya te puedes esperar la campaña hater. …Y sí, Marvel intentó hacer lo que pudo entonces, aparte de un último intento con los títulos de romance (aunque en los setenta ya hubo más reprints que nuevas historias, pero haberlas las hubo), hubo series o intentos de seriales en cabeceras de miscelánea con Ms Marvel, Spider-Woman, Enfermera de Noche, La Gata, Tigra, Red Sonja, Shanna la diablesa, Satana la hija del Diablo, La Cazadora (paso intermedio de Bobbi Morse antes de convertirse en Pájaro Burlón) o Lilith (la hija de Drácula, no la primera esposa de Adam y señora de la oscuridad)…incluso Romita quería seguir con lo de las Femizonas, pero no pudo ser. Pero la mayoría de personajes apenas tenían continuidad más allá de cómo secundarios (y personajes como Clea no pasaron de tener una o dos historias cortas propias de complemento …bueno, el marcador se quedaba más o menos igual también para Lilith, Satana, Las Hijas del Dragón y las Femizonas …y otros personajes tuvieron que esperar a los ochenta y tampoco fueron entonces mucho más afortunadas).
Que la protagonicen Shary, Ben, Johnny y Crystal, sin mencionar a Reed o Sue en toda la película. Y que en la postcréditos se cuente que todo el MCU es parte de la saga de los sueños!!!
No des ideas, hombre. Malvado.???
¡Ahí falta H.E.R.B.I.E.!
Con cameo de Steve Englehart con peluquín por supuesto!!
Sí, Angar era el de pintas de «Hell Angel» que acompañaba a Screaming Mimi (cuando ella no intentaba reunirse con otras malotas de medio pelo).
Eso de las malotas era idea de Gruenwald, DeFalco o Mantlo (me suena mucho a cosas del bueno de Mark pero en Marvel Two-in-One también andaban esos otros dos manazas, sin ánimo de ofender a los manazas, xD).
Y Macchio, que se arrimaba mucho a Gruenwald y DeFalco. Por entonces también a Shooter (eran coleguitas, pero el cuchara de plata y «Big Jim» acabaron odiándose en plan sórdido).
Macchio es a Gruenwald lo que Layton es a Michelinie, o algo por el estilo, xD. Si mencionas a uno el otro no debe estar lejos, xD.
La Spider-Woman de Wolfman no me hacía tilín, pero al lado de la de Fleisher…
Steve Leialoha fue uno de esos dibujantes que se hizo entintador porque le costaba encontrar trabajo continuado como dibujante por su estilo (y en los setenta y primeros ochenta Marvel sí necesitaba más de entintadores que de nuevos dibujantes, que les salían por las orejas). Caso también de P. Craig Russell (aunque este encontró su espacio en Killraven), Bob Layton, Bob Wiaceck Bob McLeod, incluso Dan Green …o Mike Mignola (al que tuvo que convencer de que había hueco también para su estilo en el comic-book comercial el editor Al Milgrom, también dibujante que había empezado a hacerse notar como entintador de su compañero de instituto Jim Starlin).
No he leído ni un solo comic de este volumen de Spiderwoman, y lo único que recuerdo con algo de enjundia del personaje es la la serie de Lobezno en Madripur también con la citada en el articulo Lindsay McCabe. Visto este tebeo desde fuera me parece lo que se suele denominar “comic con oficio”, nada del otro mundo, el estándar de la época, pero no parece tampoco algo aburrido. En fin, al personaje no le ha ido tán mal para haber sido parido sobre por un asunto de preservar marca. También que encuentro su diseño bastante chulo y efectivo, sobre todo ya sin la mascara y con melena al viento.
Y hablando de feromonas y feromonizadores marvelianos, ¿Lo de Hank McCoy y las suyas , aparte de en los Vengadores de Shooter se ve más?. Porque ahora que lo pienso creo que ese “poder” solo le duro el tiempo que se dedicaba a salir de parranda con Simon Williams.
Olvidadísimo. Claro que hoy en día también se han olvidado de la conciencia de Hank McCoy!
Sip.
Cuanto hemos cambiado. Un caso típico de «tu antes molabas»
Uniforme de Marie Severin (aunque con la máscara rediseñada después…que falta le hacía ese retoque). El de Ms Marvel era un diseño de Romita (con retoques muy ligeros posteriores, que al principio enseñaba incluso más carne …luego con también estupendo rediseño de Dave Cockrum con el uniforme negro, el que luego tomarían como referente Pérez y compañía para la la etapa de Busiek en Vengadores y Iron Man, con el personaje tomando alias aviar belicista?).
Estoooo, porque , claro, si eres un empleado de una empresa malvada y secuestrado a alguien por cuenta de la misma lógicamente te lo llevas a la sede de la misma y no a un almacén abandonado, una propiedad de una empresa Fantasma en una zona discretita o un local cualquiera bien alejado y alquilado en metálico.?
Toda la serie de She-Hulk es mala, no solo ese número. Incluso el #1 es siendo generosos muy del montón (se salva por John Buscema, que tampoco es que haga uno de sus mejores trabajos …pero es John Buscema). La serie es lo peor que he leído de Dave Kraft.
Creo que ya estabas por aquí cuando la repasé por el estreno de la serie de TV y sí, la conclusión es que no era gran cosa.
Pero es una obra de autor oye, que Kraft se la hizo hasta el final.
Sí, solo el #1 no es suyo (y me pregunto cuánto estuvo implicado Lee en el mismo).
Con Claremont era habitual lo de repescar personajes de trabajos anteriores (un buen número de apariciones entre Marvel Team-Up y las series mutantes desde luego). Alguno luego relevante, caso de Dientes de Sable que venía de Puño de Hierro (pero también las Hijas del Dragón, de las que cameos aparte hizo alguna historia tanto en los setenta como en los ochenta, con Marshall Rogers …los interesados a revisar la revista Aventuras Bizarras…o el tomo MLE Mujeres Marvel, en el que encontraréis más Claremont, pues también incluyeron allí lo de Lady Daemon de principios de los ochenta con Michael Golden, lamentablemente sin continuidad, también para los magazines…y la historia de Fénix con John Buscema …y su Satana con Vicente Alcázar) y Ave de Muerte que venía de Ms Marvel (y Carol …y Mística). Bueno, le gustaba repescar personajes femeninos, desde luego (Misty Knight, Colleen Wing, Jessica Drew, Lindsay McCabe, Ave de Muerte, Carol Danvers, Pícara, Mística, Alison Blaire, Betsy Braddock,…), aunque a muchas luego no les diese continuidad.
Las series con féminas al frente (salvo que sean directamente culebrones) siguen molestando a demasiada gente (con lo fácil que es simplemente no ver o leer lo que no te interesa), no hay más que fijarse en los casos recientes de She-Hulk (Abogada Hulka es un horror de título, por descriptivo que sea …o subtítulo, más bien) y de Velma (spin-off de Scooby Doo).
Samantha está soltera y Amanda es su abuela paterna. Por eso comparten apellido.
Y porque en 2/3 del mundo impera la costumbre bárbara de que las mujeres no tiene apellido propio.