Pues… Supongo que habrá que irse a Australia. Y para eso tal vez lo mejor sea preparar bien el viaje, fijándonos en lo que pasó con los mutantes en La Caída de los Mutantes, la Masacre Mutante o toda la guerra del bullpen con Factor X, tratando de asomarnos a la cabeza de Chris Claremont a mediados de los 80 y qué es lo que lo llevó a los desiertos Autralianos que tanto criticaron sus detractores. Así que sí, habrá que hacer el equipaje e irse a Australia.
Se suele decir que la etapa australiana de la Patrulla X fue una respuesta directa al espinoso asunto Factor X, cuando en 1985 a Marvel -entendiéndose a Marvel como un contubernio entre David Michelinie, Bob Layton, Roger Stern, John Byrne y el departamento comercial de Marvel, que quería una segunda serie de X-Men para ayer- se le ocurrió juntar en una serie a los miembros originales del grupo porque total, apenas salían en Uncanny X-Men. Daba igual que Cíclope fuera un personaje habitual en la serie, dejando de lado a la fallecida Jean Grey, los demás miembros del grupo -Bestia, Angel y el Hombre de Hielo- eran regulares de Los Nuevos Defensores y era una serie que no vendía muy bien, así que lo mejor sería cancelar una serie clásica de Marvel -iba por el número 152 y venía desde los tiempos de Englehart y Sal Buscema en los 70- para hacer otra serie de mutantes, aunque fuera a costa de cabrear a Chris Claremont y a Ann Nocenti, su editora en aquel momento.
X-Factor aparecería a finales de 1985 con fecha de portada de febrero del 86, el mismo mes en el que se cancelaba New Defenders y un mes después de que Cíclope abandonara el grupo principal tras un duelo por el liderazgo con Tormenta, dejando claro que su responsabilidad principal era para con su nueva familia con Madelyne Pryor… Para al mes siguiente dejarla abandonada porque, justo mismo mes en el que se estaba pegando con Tormenta, los Vengadores recuperaban el cuerpo de Jean Grey de las profundidades de la bahía de Jamaica y el personaje era recuperado justo a tiempo para que al mes siguiente apareciera X-Factor. Claremont se enteraría de esa resurrección en el último momento, a última hora y cuando el cómic estaba prácticamente imprimiéndose, y así de sopetón descubrió todo el complot.
Hasta aquel momento Claremont y sus editoras habían conseguido supervisar o bloquear todo el contenido mutante «externo» que se había realizado hasta ese momento, pero en 1986 la situación pasa a escapárseles de las manos; da igual que X-Factor sea un desastre absoluto como cómic, siendo prácticamente ilegible y que tenga que ser «rescatada» poco después por «elementos afines a Claremont» como Louise y Walter Simonson, el roto ya está hecho y si Claremont podía hacer una serie de Los 4 Fantásticos contra los X-Men, Roger Stern podía hacer una de los Vengadores contra los X-Men y cagarse en todo el desarrollo de personaje que había tenido Magneto hasta aquel momento. Si hasta entonces las pullas entre Byrne y Claremont habían sido pequeñas jugarretas y comentarios aislados, ahora la guerra era total, con bandos claros que se atacaban indiscriminadamente mientras el editor jefe Jim Shooter miraba para otro lado.
Y sí, la cosa no duraría mucho más porque, como decía, Factor X pronto pasó al bando de Claremont y tanto Byrne como Stern no tardarían en largarse a DC, con lo que de la noche a la mañana Shooter se encontró sin dos de sus mejores autores y a Claremont pasándose a la facción anti Shooter, con lo que cuando los nuevos propietarios de Marvel despidieron a Shooter en 1987, Claremont no tardó nada en entonar aquello del «Ding, Dong, The Witch is down», a pesar de que el propio Shooter había sido hasta ese momento uno de sus principales defensores a la hora de no devaluar el valor de la marca saturando el mercado con 30 series de mutantes a cargo de David Michelinie, Bill Mantlo o cualquier equivalente de Scott Lobdell que hubiera por aquellos tiempos.
Que tampoco nos vayamos a engañar, lo que está intentando hacer Claremont en los mutantes entre 1986 y 1987 es la mar de controvertido; Tormenta ya no tiene poderes y literalmente es una punki que se dedica a apalear maleantes, Kitty Pryde ahora es una ninja enseñada por un antiguo maestro del Lobezno samurai -pero como lo del samurai lo hizo con Frank Miller aquí todos punto en boca- y por supuesto, Magneto ahora es el director de la escuela de Xavier. La serie está demasiado alejada del canon principal, ya no tienen mucho que ver con el «all new- all different» de Claremont/Cockrum/Byrne que la había hecho triunfar. Seguía vendiendo bien, seguía siendo la principal vendedora de Marvel, pero aun así es lógico pensar que en el mercado había un hueco para una serie de mutantes más conservadora, más «normal». Los mutantes cada vez se han vuelto más macarras (que sí, que lo de Tormenta es literal) y hasta la dulce e inocente Kitty ha recibido la mala influencia de gente como Illyana, Rachel o la propia Tormenta y empieza a manifestar tendencias que se alejan de la figura de la «vecinita de al lado». Así, y aunque Factor X es un putadón para Claremont -aunque lógico desde el punto de vista comercial- con ello Uncanny queda libre para explorar ese cambio que Claremont ve necesario, y lo va a empezar a ejecutar justo durante esos dos años, primero con la Masacre Mutante y luego durante La Caída de los Mutantes y por fin, con Australia. Que al final no hemos ido a Australia, pero ya habrá tiempo.
Claremont era el que decía que la serie siempre debía estar cambiando, que mantenerse igual habría sido un error. Por otro lado recnozco que Ángel, Bestia y Iceman estaban desaprovechadísimos en los lamentables Defensores y en la PatrullaX de Claremont había tantos personajes ya que difícilmente había hueco para más. Supongo que lo más salomónico hubiese sido darle a CC la 2a serie mutante donde saliesen Scott Summers y los otros 3 fundadores.
Un día habría que recuperar Nuevos Defensores, que los tengo muy olvidados y creo que más de uno se iba a llevar una sorpresa!
Para mi que estaba por encima de Mantlo pero poco más, intentando ser rompedora pero quedándose en el camino.
Pues yo la pondría bastante por encima, pero no me voy a embarrar porque ya digo que primero tendría que repasarla. Si te diría que la repasé hará unos años a la vez que estaba escribiendo algunos posts sobre el Jim Lee de Alpha Flight y la diferencia me pareció tremenda.
La etapa de los Nuevos Defensores con los mutantes, tuvo momentos muy bizarros y muy buenos. No hay mejor ejemplo que el personaje de Nube, con sus cambios de sexos, amoríos y hasta raza. También Dragón Lunar tuvo sus grandes momentos.
Al menos no fue aburrida.
En su momento los leí junto al Alpha Flight de Mantlo y el recuerdo que tengo es de serie con intenciones que no conseguía despegar. Se me hace que se tiran muchas ideas en las épocas de Nuevos Defensores y ninguna mejor o mejor llevada que en épocas de Gerber. Que tampoco me tendría que embarrar, pero esto es la serie de Gerber ¡De Gerber! xD
Peter Gillis funcionó bastante mejor en Dr. Strange, donde lo arruinaron cambiándole el formato a mitad de la historia y aún así le sale más redondo (creo).
Bueno, yo entiendo Nuevos Defensores como una serie completamente distinta; habría estado bastante más justificado un cambio de cabecera y numeración que hoy en día, desde luego.
¿Nuevos Denfsores es donde aparecía la subtrama surrealista del Elfo con Pistola?
Eso fue entre Gerber y DeMatteis esencialmente. Puede que algún otro lo usara pero lo más importante creo que pasa con esos dos. Y creo que es antes de que los Defensores se volvieran Nuevos (pero puede ser que se volvieran Nuevos con DeMatteis justamente).
Yo creo que todos los autores post-Gerber intentaron mantenerla en esa esfera de no-grupo alternativo. Aunque si que la etapa con Iceman, Angel y Bestia es prácticamente una mucho mejor serie de los Campeones (los de Isabella…??).
Tony Isabella y Bill Mantlo, como para no petarlo la serie…
La sorpresa me la llevé yo cuando me la leí en el mes de confinamiento.
Pocas cosas mas delirantes me he pasado por delante. Aun no he logrado recuperarme del todo.
Hay que reivindicarla. Por mil motivos. Curiosa, atrevida, chanante, desvergonzada, echada para delante con todas las consecuencias…
No es una obra maestra, pero no descarto que dentro de mil años hayamos evolucionado lo suficiente para reconocerla como tal.
Mira, Alan Moore se queja mucho de que el principal problema del género de superhéroes es que nadie hace el trabajo de buscar una historia original. Que casi todos los autores se quedan esperando a que alguien saque las pepitas de oro a la superficie para poder quitárselas de las manos y explotarlas a placer, y por eso creo que hay que reivindicarla, por ser rara de cojones, distinta a cualquier cosa que hubiera en ese momento. Cojones, tu ves a la Gárgola y piensas «coño, si es Demon», pero luego es un tío rarísimo con una serie limitada más rara todavía…
Yo creo que toda la cole de los Defensores en sí es muy, muy reivindicable y original en cada etapa… desde Gerber, Kraft, Hannigan, DeMatteis y Gillis que cada uno da una impronta a su manera. La de Peter Gillis es la que estuvo más de lleno en la era de los Nuevos Defensores y es muy resultona, una pena que el guionista no haya tenido tanta fama solo destacando con esto y una etapa en Doctor Extraño.
Gillis es un tío irregular, pero tenía identidad propia. Y eso es algo la mar de raro de ver y más hoy en día, que las historias te vienen prácticamente forzadas por los editores.
No lo olvidemos, es el primero que le quitó los poderes al Doctor Extraño y lo obligó a hacer pactos raros, historia que luego han repetido hasta la saciedad desde Ellis hasta Aaron y no sé cuantos más. Hum, tengo que poner en la pila de pendientes el hacer un listado de las veces que los Vishanti le han obligado a buscarse las castañas por otro lado…
JM DeMatteis se luce sin Giffen si no recuerdo mal (con MD Bright Al dibujo??)
quizieron hacer un The Initiative 50 antes de la Civil War, incluso tuvieron a los Champios, los Rangers, The Rom, entre otros
Pues yo opino que los X-Men menores (Angel, Bestia y Cubito) tenían su propio mundo interesante en Defensores, lejos del mundo marginal de los mutantes. Y todo ello se borró de un plumazo por orden editorial. Lo cual es tan o más lamentable que cualquier burrada que le pasara Cíclope.
Defensores era una serie rompedora a su manera, con conceptos tan adelantados como un personaje no solo bisexual, sino transexual. el primero de la editorial. Claramente adelantado/a a su tiempo.
Se habla de Jean Grey como una víctima del 86. La víctima real fue Candy Southern, la compañera sentimental del Ángel. Brutalmente asesinada sólo para poder reproducir otra vez el manido triángulo amoroso Cíclope/Angel/Grey. Que ya aburría en los 60.
pero Candy fue asesinada mucho tiempo después, de la creación de xfactor, murio despues de fall of the mutantes, cuando Angel ya era Archangel, y ya no tenían ese triangulo amoroso, es más creo que al principio de xfactor, Candy cortó con Warren por la atención que este le daba a Jean,
Lo que he leído por ahí es que Angel aparta a Candy al principio de la serie (como Cíclope a su esposa). Luego la margina hasta que lo pilla abrazado a Jean y ella lo deja. Luego la mata un villano de forma bastante cruel. En total sale unas 4 veces muy poco espacio en 34 primeros números de X-Factor.
En conjunto, a los autores de X-Factor les sobró siempre la continuidad de New Defenders e intentaron borrarla del mapa. Mal hecho, en mi opinión.
Definir al personaje de Nube como transexual, dado lo que se conto al final sobre el, es discutible. Me gustaría saber si realmente pensaban que fuera así desde el principio, o acabo de esa manera por directrices de las altas esferas.
Pero estoy de acuerdo en que esa etapa de los Nuevos Defensores, fue bastante diferente de lo habitual.
Bueno, es que la creó DeMatteis en su etapa. Luego entró Gillis y cambió completamente el personaje. Hasta el punto que se crean sinsentidos. Como que el Imperio Secreto le contara una historia falsa en la que sus agentes mataban a sus padres (¿para que le cuentas eso si luego quieres reclutarla?).
Puse «transexual» por que no se me ocurre mejor forma de definirla. «Hermafrodito» tampoco es exacto.
Mira que lo de irse a Australia y la elección de Jackman está bien pillado!
Es lo único que explica que Silvestri se empeñara en dibujar a Lobezno más alto que a Tormenta!
y te quejas de la portada de xmen no 1 vol2 de jim lee, Ja…. XD
Ahora que me fijo, en la portada de La Caída de los Mutantes, todo el mundo está poniendo pose de Superman, menos Lobezno, que está extendiendo los brazos mientras pone cara de «Ay, que ostión me voy a dar».
El mejor es Longshot, que tiene asumido que está «muerto» y pone la pose apropiada de muerto viviente!
Dejando de lado que ésta es bastante más dinámica pese a las gambadas… Nadie ha dicho que sea la mejor portada de X-Men de la historia, mientras de la de Lee sí que lo han dicho 😀
¡CLAREMONT!
Claremont!Claremont!Claremont!
Post-Factor X no hay más Scott Summers, y se va camino a la creación del silo mutante con Angel, Iceman y Hank saliendo de los Defensores (que no era muy buena serie cuando la cancelaron, pero al menos no era un crimen como Factor X).
Indudablemente como Marvel trata a Magneto, Jean y Scott es una cosa tremendamente ignorante, fallando a las ideas que habían hecho a Marvel especial desde los primeros números de los 4F y Spiderman.
Si bien el maestro samurai es cosa que hace con Miller, lo de Kitty estoy casi seguro que es con Milgrom. Pero es en eso para mi que está el problema de esta etapa de los mutantes; todos los personajes o estaban tremendamente influenciados por o ya se estaban convirtiendo en Lobezno, volviéndose duros y estoicos (pero guardando profundos resentimientos), violentos y hasta herméticos. La cosa solo empeora con Factor X y Silvestri. La marcha a Australia con todos los artificios solidifica esa posición y la capitulación ante Harras que es Inferno acaba con los mutantes a mi parecer, porque ningún personaje actúa como personajes decentes ni que hablar como ellos mismos.
Es una lástima porque era mucho mejor lo que se estaba haciendo con Romtia Jr. con Freedom Force, Forge, la redención de Magneto, la marcha de Cíclope, Rachel Summers y demás ideas en los mismos EEUU. Pero con Factor X ya en manos de los Simonsons, se ve que la idea es el contraste de los públicamente aceptados X-Men originales (y como no son tan buenos) con los secretos X-Men de Australia (y como son más buenos), mientras la verdadera serie de X-Men al estilo original era New Mutants. El problema es que el daño ya estaba hecho; Factor X es inaceptable porque los lidera un asco impresentable y su novia zombi, Uncanny pierde dimensiones con Factor X al lado (se viene como a la mitad de las cuatromildoscientas que Claremont usualmente provee), y New Mutants le cae lo que a todas las series: Harras no iba a permitir que ninguna de estas cosas funcionase de todos modos.
Inferno se carga absolutamente todo lo poco bueno que podría haber salido de aquí.
Se nota todo esto cuando al fin sale Excalibur y se siente mucho más como una serie de X-Men que cualquiera de las series mutantes post-Factor X.
Y Uncanny se resiente un montón con Silvestri al dibujo, que para colmo los fill-ins los hace Rick Leonardi y se nota un montón la diferencia.
A mí el Silvestri de Uncanny me gusta mucho (luego vi trabajos suyos posteriores y me eché a llorar). Cuando le pone ganas, narra muy bien (esa Mole dejándose caer sobre Lobezno vista desde el punto de vista de Lobezno), y a veces te hace cosas como la splash page que es un primer plano de la libreta de bocetos de Coloso que eso jamás se lo verás a gente como Jim Lee.
Leonardi en cambio, era de esos dibujantes que yo me quedaba «no diré jamás que es malo, pero sí que no es de mi gusto». Quizás la saga de Genosha, con tanto ambiente high tech, no era precisamente la mejor historia para su estilo; curiosamente, Leonardi me gustó mucho en el «Tierra de Dios» de Coloso y en una historia de Daredevil donde salía Lobezno y que diría que publicaron como complemento en un Spiderman. Quizás el tono turbio que solían tener las historias de Nocenti le pegaba más. ¡Pero es que a los magistrados los dibujaba con pantalones de pata elefante!
A mi Silvestri me parece que Dan Green lo salva una enormidad primero, y segundo que si bien puede funcionar como narrador en lo grande (viñeta a viñeta), cuando toca los detalles le suelen salir los personajes (especialmente los personajes femeninos) muy similares. Al final no siento que los personajes sean personas diferentes cuando leo Silvestri.
Por otro lado Rick Leonardi, si bien tampoco es el genio del detalle, me parece que sí consigue hacerme sentir que son personas distintas sin tener regularidad dibujando a los personajes y por eso me parece que lo deja en evidencia.
Luego está que Leonardi es más fluido en dibujo y narración, mientras que Silvestri suele forzar primeros planos por la falta de detalle que mencionaba.
Claremont necesita un dibujante que pueda contar con planos generales y medios y ese no es el fuerte de Silvestri. De nuevo, no que Leonardi sea genial pero se las arregla mejor.
A eso se le puede agregar que justamente planos y detalles son herramientas narrativas, así que cuando Leonardi puede usarlos mejor cuenta mejor mientras que Silvestri tiene que recurrir a otros elementos como sombras y ángulos agudos que sumados a los primeros planos y la falta de detalle hacen que no sea demasiado sutil.
De todos modos, la mayor razón por la que se resiente Uncanny es porque era la serie de Cockrum, Byrne, Paul Smith, Romita Jr. y esos eran narradores intachables. Pasar de ellos a los chicos Image es un cambio demasiado drástico.
Mira, un número de los «Uncanny X-Men» de Leonardi que sí me gustó mucho, y quizás sea precisamente el primero que dibujó, es el inmediatamente posterior a la Caída de los Mutantes, el que está protagonizado por Dazzler, un cazarrecompensas amigo suyo, y Lobezno. Como he dicho antes, al ser una historia bastante sórdida de caza a un mutante asesino en serie, el estilo de Leonardi le pega muy bien.
Pero los números de los Cosechadores o el regreso del Nido para mí piden mucho más a un «chico Image» atado en corto, como el Silvestri de entonces, que un Leonardi. No negaré que el Silvestri de Uncanny se beneficia muchísimo de tener a Dan Green entintándolo.
Cabe decir que, como ya se comentó en un artículo anterior, Claremont parecía saber cómo adecuar las historias que contaba al estilo de sus dibujantes, lo que generó un pequeño milagro comiquero: ¡un número de Rob Liefeld que está moderadamente bien dibujado!
La historia que contaba era una parodia, claro.
Puede que esas historias particulares se sirvieran de Silvestri, pero la serie como un todo sufre, aunque claro, es un tema de opiniones porque me parece que estamos en lados opuestos en el espectro Leonardi-Silvestri, xD. Por mi parte no encuentro la ventaja del estilo noventero de Silvestri (sobrecargado en todos los lugares equivocados aún con Dan Green), y me parece que va muy poco con lo que se le da mejor a Claremont; la interacción entre personajes y la aventura con acción deliberada, es decir, lo contrario a dibujar personajes pegándose o disparándose rayos sin-ton-ni-son (que se comienza a ver más y más según nos acercamos a los ’90 llegando a la actualidad en donde ver acción que no sea solo «y entonces se pegan» parece mágico).
Y por supuesto, la única forma en la que Liefeld encaja en la realidad es considerándolo un chiste. Cualquier otra cosa (en especial tomarselo en serio) se hace a riesgo de perder la cordura, xD.
Quizás un factor (X) que me impidió apreciar a Leonardi fue que sus números fueran intercalados con los de Silvestri, cuando éste ya llevaba bastantes números dibujando Uncanny X-Men. con lo que al pobre Leonardi lo acabé viendo como una especie de suplente. Sí, por ejemplo, la etapa del 228 al 238 hubiera sido por entero de Leonardi, seguramente me habría caído más en gracia.
¿Has leído Spiderman 2099 o su Capa y Puñal? Dejando los guiones aparte, ese es un Leonardi que hace suya la serie, sobre todo en el caso de Spiderman. Una pena que no tuviera su propia etapa de Uncanny, vaya.
De «Capa y Puñal» sí que he leído algún número suelto suyo y ahí sí que Leonardi me encaja como un guante (como me encaja Bret Blevins). De la línea Marvel 2099 no he leído absolutamente nada, pero acabo de buscar unas cuantas imágenes de Spider-Man 2099, y también me está gustando lo que veo (me recuerda un poco al Frank Miller de «Ronin»), y viendo que Peter David guioniza, intentaré leer los primeros números.
Spiderman 2099 está muy bien hasta que la propia Marvel se la carga, pero ahi Leonardi estaba en su salsa.
Yo creo que estoy en una situación similar a Diógenes en cuanto conozco a Leonardi de Spiderman 2099. Mientras que a Silvestri le conozco ya sabiendo el artista que es ahora, que también afecta mi visión, yo diría que ese es el factor (X) en mi caso.
si mal no recuerdo, el número de la saga masacre mutante, donde la portada sale wolverine todo rasguñado, y dice wolverine vs sabretooh round 1 (uncanny xmen 212) es dibujado por rick leonardi
Tienes razón. Pero consulto los dibujantes de esa etapa, y veo que es un periodo de transición en el que el baile de dibujantes era considerable, porque después del número de Leonardi viene uno de Alan Davis y otro de Barry-Windsor Smith, seguido por otra vez Davis, ¡un par de Jackson Guice!, el primero de Silvestri, uno de Bret Blevins (que me gusta mucho, pero precisamente allí queda más raro que un perro verde) y luego empieza la etapa de Silvestri.
Hay uno de Walter Simonson. De Walter Simonson cuando estaba todavía haciendo Thor, oiga! En X-Men! Y no es el único número que hizo!
Yo soy muy de Leonardi, pero también hay reconocerle a Silvestri que en aquellos tiempos prometía tela… Que muchos hablarán de que la culpa es de perder a Dan Green de entintador, pero esos detalles narrativos no hay entintador que te los meta.
A Silvestri lo mató para la causa del buen cómic convertirse en un clon de Jim Lee, seguramente el mejor de todos sus clones.
Hacía los numeros de X-Men justo antes de que llegase Lee y las ventas se dispararon con Lee.
El camino a seguir se ha marcado. A reconvertirse toca. Una lástima.
Y sobre Leonardi, hizo un par de numeros de los Nuevos Mutantes que yo considero de lo mejor de su carrera. Quedaba como anillo al dedo.
Uno de los pocos que supo dibujar a Warlock; e Illiana (y los demas) tenían con él unas gamas de expresiones faciales y gestos magníficas. Mención especial para la tremenda sensualidad de Ruleta (Ahí esa mujer te lleva a la tumba) y las doncellas del Club Infernal.
Recordar ese número me resulta agridulce, porque el número en sí me gusta mucho, pero es también el penúltimo de los nuevos mutantes de Claremont, y además en poco tiempo todas las semillas que se plantaron en esa historia quedarán arruinadas con la patochada de los Arribistas. Aunque, antes que Ruleta, yo era más de Tarot, sobre todo después del desplante que le hacía Cifra.
Es que es lamentable. Personajes desarrollados durante años, con multiples capas de personalidad y facetados a base de dialogos finos como los de este cómic, que muestran como los Nuevos Mutantes y los Infernales en el fondo eran unos chavales que habían caido en un lado o en otro aleatoriamente y que en el fondo cada uno tenía sus virtudes y sus defectos.
Pues todos masacrados estupidamente; para mostrar lo terrible que es el villano nuevo más plano que un lenguado, del que hoy nadie quiere acordarse.
Que se supiese quien era ese chico de los Nuevos Mutantes del que Ruleta estaba colgada (aunque que se acercase a Doug tan tierna y que se disgustase tanto con el desaire ya dejaba claro el tema); o como continuaba la historia entre Illiana y
Émpata (¿Alguien se ha parado a pensar, que la relación más parecida a una relación sentimental que ha tenido Illiana con alguien del sexo opuesto es con Émpata? ¿Porque se acurruca tan gustosa en el pecho de Émpata? ¿Se la ha visto disfrutar tanto y tan malebolamente con otra cosa que cebandose con Émpata? A que va a ser que los gustos de Illiana van por lo sádico y en el fondo le iba un chico tan despreciable como Émpata. Yo lo dejo caer.)
En fin, mil historias por contar a la basura. por culpa de querer marcar época. Ineptos.
Yo es que creo que X-Men habría vendido más o menos lo mismo sin Jim Lee. Y lo digo sin filias ni fobias, ya sé que para alguno es una barbaridad, pero por la progresión que llevaba la serie y visto que la burbuja llegó a su estado álgido en ese momento, un nº1 de X-Men de Silvestri perfectamente podría haber llegado a los 8 milloncejos. Y esto lo digo en base a que New Mutants sí que vendío más con Liefeld (ugh) pero era una serie que vendía bastante menos, mientras que X-Men ya vendía muchísimo en aquel momento; joder, solo hay que ver los números posteriores a la marcha de Lee, se seguía vendiendo sola!
La burbuja estaba ya hinchadísima e imparable. Pero los que no tienen ni idea ponen a Jim Lee como el Dios bajado del cielo del cómic mientras que no conocen a otro autor; y yo me acuerdo del impacto que provocaron sus dibujos, una vorágine.
Todo sumó. Se aliniaron los astros para el desastre perfecto.
Los planes de Claremont siempre fueron en dirección a Australia o a un cambio radical a la altura del 230 de la serie, el problema no fue tanto el qué si no el cómo.
Las cabezas voladoras de la portada del «The X-Men vs The Avengers» me resultan inquietantes. ¿Magneto se ha subido a la mesa del tribunal?
Yo lo que tengo entendido es que, en parte, lo de mandarlos a Australia era para que resultara más difícil que le propuesieran crossovers o que aparecieran como personajes secundarios en manos de otros autores; lo que no sé es qué tal le salió el truco…
Hay bastantes razones y ésa era una de ellas, pero también está de por medio que Claremont empezó a viajar a convenciones por el mundo (Shooter cuenta que Claremont un día entró en su oficina cabreado preguntándole por qué no lo mandaba de vacaciones pagadas a una convención, y Shooter le vino a decir «porque no lo has pedido» o algo así) y es entonces cuando se dió cuenta de que por mucho que la serie tuviera un reparto internacional, seguían viviendo a unos pocos kilómetros de Nueva York, con lo que ya era hora de sacarlos del «círculo de confort». En un principio amagó con mandarlos a San Francisco, pero al final se fue a las antípodas…
Leyendo al principio el articulo pensaba, «jo, a ver si hablaís de la etapa anterior a la Australiana, que tiene mucha chicha para contar»… ¡y al final es de lo que trata! XD
Hace poco además he estado leyendo el primer OG de Factor-X y el séptimo de la Patrulla… y joer, la experiencia lectora es de lo mejorcito porque llega a un punto que las dos colecciones te las tienes que leer paralelas porque una hereda subtramas de la otra y Claremont no «especifíca» claramente de donde vienen.
Por otro lado le doy una mini-revindicación a la corta era de Layton en Factor-X, porque a ver, ilegible no creo que sea porque las aventuras que hace están más o menos entretenidas… el problema como ya se ha dicho muchas veces es la maldita premisa que crea para formar la dichosa organización «caza-mutantes» y la supensión de incredulidad que uno tiene que hacer (y los personajes) en jugar a dos bandas de manera tan estúpida. Aparte bueno, también gracias a que viniera Louise y sustituyera a un Búho mutado por un personaje de nuevo cuño que revitalizó un pelín la franquicia a lo tonto. XD
La mini Vs. los Vengadores yo no se mucho que pensar, porque a ver, tenía mimbres de quedar algo curioso pero Stern tenía que haber hablado antes con Claremont a la hora de ejecutar la mini aunque a saber si estaba ocupado por la otra de
Vs. 4F (que menuda joya que nunca se revindica lo suficiente). De hecho el final original que tenía pensado Stern para la mini iba a ser muy chanante metiendo también al Mandarín al final de la historia… aunque el número final que quedó publicado también se nota mucho las varias manos para intentar encauzarlo a lo que quería Claremont.
Finalmente (después del tocho que me he marcado), espero que no olvides que cuando lleguéis a la Masacre Mutante/Caída hableís del plan original de Claremont que fue echado por la borda por cierto barbudo de Northampton…
¡¡¡ eeeeiiiinnnn?????????
Yo también espero que hable de eso , porque acabo de quedarme a cuadros
¿¿¿ Alan Moore también tuvo algo que ver en todo este culebrón ??? Porque ahora es que me entero
Creo que la relación con Alan Moore tiene que ver con quién tenía pensado Chris Claremont que fuera el villano de la Caída de los Mutantes, que originalmente no era el Adversario.
Por ahí van los tiros… aunque también el que iba a perpretrar la Masacre Mutante iba a ser muy distinto en lo que quedó al final y que también era por poner a un personaje creado por Moore. Pero vamos, el porqué tuvo que cambiarse tiene su miga…
Que al final eso también explica que el malo de la caída fuera «el adversario» y el de la masacre «el señor siniestro». Que solo le faltó inventarse un personaje que se llamara MR PLACEHOLDER o algo así.
Lo malo de los comentarios es que siempre me spoilean la mandanga, mecachis la mar…
Sorry por la parte que me toca. 🙁
No te preocupes, es lo que tiene publicar posts por entregas 😉
Aun me acuerdo de como se le congeló la sonrisa a Layton cuando le di a firmar un número de Factor X. Muchos malos recuerdos le tuvieron que volver a la cabeza.
Factor X de Layton y compañía no era taaan mala. Es que era insulsa; romper tantas inercias positivas y provocar tantas noches de cuchillos largos en la Marvel para que el resultado fuese esto pues… un crimen.
Además, es que la tontería de fingirse cazadores de mutantes era tan estupida desde el minuto uno, que tenían que estar volviendo a explicarlo/justificarse cada diez páginas.
Y el montar el grupo de la nada era tan precipitado que tenias la sensación que faltaban veinte números de la serie por algún lado.
«¡Scott! Jean Grey ha resucitado. ¿Nos montamos todos ese falso grupo de cazadores de mutantes que nadie había pedido ni mencionado jamás?»
Scott: «¡Por supuesto! Espera un segundo que abandono a mi esposa y a mi hijo y voy.»
Si la conversación telefónica hubiese sido esta por lo menos nos habriamos reido.
¡No, no, lo que le hacen a Scott es mucho peor! ¡Tras descubrir que Jean Grey está viva, Scott se larga y queda en paradero desconocido durante unos días, y Warren y Jean acuden a Bobby y Hank para que lo encuentren (porque se ve que ellos no le conocen lo suficiente como para deducir adónde puede haber ido)! Scott acaba apareciendo deambulando por unos muelles con aspecto de no haberse afeitado ni cambiado de ropa en todo el tiempo que lleva desaparecido. Vamos, que todo indica que ha sufrido una crisis nerviosa. Y Hank y Bobby, tan buenos amigos suyos, en lugar de decirle «vete inmediatamente a ver a tu esposa y lo habláis», le dan la brasa con que le necesitan para su nuevo grupo de superhéroes. ¡Lo raro es que cuando volvió de Alaska tras descubrir la desaparición de Maddy, no se liara a rayos ópticos con sus «amigos» al grito de «¡Me habéis arruinado la vida, malditos!».
Lo más triste de «Factor-X» es que la premisa inicial se podía haber reconducido para contar más o menos lo mismo con más lógica. Por ejemplo, imaginémonos que Rusty Collins hubiera sido en realidad uno de los hijos de Sara Grey (la hermana de Jean), que ha alcanzado la pubertad y manifestado sus poderes mutantes (una forma limitada de telequinesis que le permite «excitar las moléculas del aire para crear fuego», su hermana podría más adelante manifestar otra forma limitada de telequinesis que sería a todos los efectos los poderes de Desliza). Sara le pide desesperada ayuda a Warren, quien decide contactar a sus colegas para que encuentren al chaval antes de que lo linchen. Maddy, evidentemente, no le pondría ninguna objeción a que Scott se marchara temporalmente a ayudar al pobre chico, y sería entonces cuando los Merodeadores intentarían asesinarla, lo que nos llevaría a la situación de la etapa Simonson.
Claro que todo esto habría hecho necesario NO resucitar a Jean. ¡Cuánto daño ha hecho la premisa «porque los fans lo pedían» (a ese respecto Alan Moore tiene muy claro qué es lo que hay que darle a los fans)!
Scott hizo con su desaparición un breaking bad. Finjo crisis nerviosas y reaparezco en bolas o vestido de bisonte asaltando el Capitolio, y así estoy libre de responsabilidad cuando actue como un gilipollas.
¿Qué no? Pues es lo más pausible.
Aun vamos a descubrir que tenía una furgoneta con un laboratorio escondido.
Bromas aparte la verdadera historia interesante fueron las puñaladas por la espalda que se metían unos a otros en las oficinas de la Marvel. En el circo romano los gladiadores tenían mayor esperanza de vida.
Es que el tema que Scott abandonara a su mujer e hijo tela, pero es que encima es una trama que se orquesta de manera rarísima entre las dos colecciones. Madeline desaparece de la escena en el X-Factor #1 y dé repente «reaparece» en el X-Men #206 comatosa por lo que me da que Claremont muy rápidamente quiso «llevarse» a su personaje de las garras de Layton y que no volvería a ver a su marido hasta Inferno. Ah, y del Hijo ni noticias, otro que tarda en reaparecer hasta un buen tiempo.
Pero también criminal que alargaran la subtrama que Scott no le dice a Jean que está casado… y que encima Simonson tarda en arreglar.
En descargo de Simonson hay que decir que el marrón era fino, hicieras lo que hicieras tu «santo patrón mutante» iba a quedar de pena. Y quedó de pena hasta cuando la madre de su hijo se convirtió en una diablesa asesina de niños!
Claremont veía todo X-Men como su creación personal, aunque entendía perfectamente que es una creación que debía recibir aportaciones de otros. Así que se mostró protector con todas sus criaturas.
Mismo hizo con Carol Danvers y con Spiderwoman.
Y es que todo fue un galimatias, cada uno usando las colecciones que tenían a su disposición como un juego de Stratego o de Risk para ganar posiciones y personajes a su causa. Yo me llevo a Ciclope, pues yo a la esposa y a todo el grupo a Australia, yo tal, yo lo otro, yo…
Pero lo llamativo es que todos ponían el limite en respetar la continuidad. Aunque ya estaba embarrada, pero se respetaba.
Tuvieron la decencia de no meter Skrulls.
Layton es mejor que Bendis. Impresionante.
Yo metería también como continuidad el que la caracterización de los personajes se corresponda con su comportamiento hasta ese momento. Si de sopetón se olvidan de su novia, su hijo, su abuela, su perro, el seguro dental y yo que sé que más, tienes que explicarlo de forma convincente o al lector le va a saltar un «éste no es mi zutanoman, que me lo han cambiado». Y éso es precisamente lo último que debería permitir un editor.
Voy a decir algo muy feo, pero al leer lo de la sonrisa congelada de Layton y el cómic de Factor X que le diste a firmar solo he podido pensar…
QUE SE JODA.
Con la de cómics que hacen burradas parecidas hoy en día y sus autores se van de rositas, por lo menos nos queda el saber que los responsables de aquella barrabasada se quedan con la «sonrisa congelada». Que se jodan.
Fue algo que me llamó la atención. Porque mientras iba firmando numeros de Iron Man estaba con una sonrisa magnifica y todo ufano. Pero fue ver el de Factor-X y automaticamente se le acabó el buen rollo. La sonrisa desaparecio e incluso hizo un gesto con la cabeza ladeandola.
Sabe Dios que se le pasaría por la idem.
Se fliparon y se creyeron que podían enmendarle la plana a Claremont. Que esos personajes vendían solos.
Y no.
Si he empezado por el juicio de Magneto es por algo, que en ese cómic ya sale cierto personaje que usted me dice 😉
En un par de semanas le dedico un post enterito a esa realidad alternativa!
Aprovecho la e-rrata de haberla llamado Lois en el artículo para contar algo que llevaba tiempo queriendo hacer. No sé si habéis visto en Disney+ (también se vio en abierto en m+) el docu de la serie Tierra-616 dedicado a las autoras de Marvel. Es tan condescendiente como de costumbre pero qué queréis que os digo, las apariciones de Louise/Weezie [Jones] Simonson y Ann Nocenti (hacia el final las dos juntas) me hacen caer una lagrimita. Qué tiempos aquellos, Curiosamente hablan sobre todo de su recorrido como escritoras y apenas como editoras.
¿Errata? ¿Qué errata? Yo no he visto ninguna errata!
Me habrá traicionado la vista, que soy muy mayor. Pero vamos, en serio, miraos el docu que tiene su aquél.
Hehehehee…
Sí, entre ese y el del Spiderman japonés son de lo más potable de lo de 616, por lo demás son unos documentables insoportables hasta para gente que nos pasamos el día leyendo sobre estas cosas.
El del Spidey Japo lo flipé muchísimo.
Lo mejor la escena de Stan Lee viendo el piloto y diciendo que lo quería más loco, más japonés!
Efectivamente. Sería lo que fuese pero el tío Stan tenía sus momentos.
Aunque Claremont tuviera sus motivos, se le puede criticar un intento de separar «su» universo mutante en un aparte del resto del universo Marvel. Se los lleva a Australia, donde no había apenas personajes de la Marvel (incluso el Canguro de Spider-man vive en NY), y podía tenerlos a sus anchas. Incluso hizo que el resto del mundo les creyera muertos y no podían ni salir por la tele por un conjuro.
Yo siempre digo que Magneto es un villano, y punto pelota. Un villano tridimensional, con motivaciones profundas. Pero un villano. Y no basta con que lo perdone Xavier para que cambie de bando. Deben perdonarle sus víctimas.
Para que un villano deje de ser un villano no tiene que recibir la absolución de nadie, tiene que empezar a comportarse bien. Las víctimas pueden estar devoradas por el dolor, el rencor o hasta las ganas de venganza, y pueden perdonarlo y ayudarle a alcanzar una cierta paz mental, pero lo que de verdad hará que un villano deje de serlo es simplemente que deje de hacer cosas de villano. No ya que se ponga a hacer cosas de héroe no, simplemente que deje de ser el malo.
«Para que un villano deje de ser un villano no tiene que recibir la absolución de nadie, tiene que empezar a comportarse bien». Ya, si sería lo ideal. Pero difícilmente puede seguir comportándose bien alguien si el mundo le sigue viendo como un villano porque la herida es demasiado profunda…
Iba a añadir que la prueba es que por mucho que Claremont le pusiera como arrepentido mentor de los Nuevos Mutantes, etc., al final los siguientes autores siempre acabaron volviendo a poner a Magneto como enemigo, ya que ni ellos quedaban convencidos de su redención… Pero ahí admito que quizá sería mezclar las consabidas churras con merinas: en el mundo de los guionistas de cómic-de-universos-con-muchos-años-de-historia, es más fácil que simplemente los nuevos guionistas sean nostálgicos de lo que leyeron de jóvenes y quieran recuperar ese status quo… Es otro tema (aunque fuera un poco el motivo de la creación de Factor X, supongo).
Pero precisamente ésa era la historia que Claremont trataba de contar, la de un tipo que quería hacer lo correcto a pesar de que casi nadie la había perdonado y hasta sus propios estudiantes lo seguían viendo como un villano y no precisamente como una modelo a seguir. La difícil que es hacer lo correcto cuando casi nadie cree en tí, cuando sabes que encima te lo has ganado a pulso y que es posible que de absolutamente igual todo lo que hagas porque nunca te ganarás el perdón o el respeto de esa gente. Esa historia era la mar de interesante, otra de tantas con un porrón de potencial, pero de repente llega Roger Stern y su amigo John Byrne, luego Harras y finalmente Jim Lee y a la mierda la historia, Claremont se tiene que largar firmando tres cómics que echan definitivamente por tierra todo su trabajo con el personaje.
Aunque igual lo de que Magneto no fuera un villano igual funcionó mejor de lo que alguno habría querido, porque por muchas atracciones letales, Josephs y Xornetos que se le echaron encima al personaje, la memoria que ha quedado de él no es la del «fuhrer mutante», si no la de la victima de la xenofobia que lucha a brazo partido para que a nadie le vuelva a pasar lo que le pasó a él. Es un villano, es un héroe, es un antihéroe… Es un personaje cojonudo y por mucho que tanto retentivo anal haya querido devolverlo a ser una caricatura, pues oye, permanece.
Y lo dice alguien que nunca estuvo contento del todo con la trayectoria de Magneto hasta el 150 de Uncanny, que conste.
Sería un retconeo como una casa, pero el relato corto dedicado a Magneto que publicaron en uno de los «Classic X-Men» hacía mucho por reconciliar su nueva faceta de villano buscando redimirse (o al menos dejar se comportarse como un villano), no tanto por lo de que en su etapa de villano estaba medio enajenado por problemas con la bioquímica de su cuerpo. sino por lo ver que el hombre se había dedicado a perseguir nazis de forma más o menos «legal» y acababa traicionado de mala manera. Daba mucha penita ver la viñeta final con ese «Y así muere el sueño… y empieza la pesadilla». Y sí, lo de la bioquímica alterada era una forma muy burda de acogerse a la carta de «nunca fue realmente malo, es que estaba perturbado», pero bien que John Byrne jugó esa misma carta en su «Namor», que cuando lo juzgaron acabaron sentenciándolo «culpable pero demente» porque en la superficie se emborrachaba con la atmósfera de oxígeno.
La verdad es que si te lees todo Uncanny y pasas de las historias cortas de Classic X-Men te estás perdiendo muchísimo. Puede que algunas sean parches y remates a posteriori, pero joder, todas esas historias de los miembros novatos del grupo empezando a conocerse, a encajar, a hacerse amigos… Éso es de lo mejorcito de Claremont y lo que más se echa de menos de los mutantes de los últimos treinta años. Que sí, que Claremont asomó por aquí y por allá, pero luego todos nos quieren vender que si Morrison que si tal que si cual y ninguno llegaron a ese grado de «intimidad» con los personajes, a pesar de que algunos habían leído e intentaron imitar a Claremont lo más grande.
El relato dedicado al funeral de Ave de Trueno le daba al personaje más caracterización de la que han tenido otros superhéroes en toda su vida, y el de Jean Grey esperando a que Scott pasara por su piso a recogerla se anticipó quince años a esa cosa rara del «número silencioso» que hicieron en el 2002.
Curiosamente yo siempre ví en ese relato la justificación de que Jean se hiciera llamar Fénix después del accidente, venía de ver esa obra de teatro y se había quedado con el nombrecito. Luego claro, te das cuenta de que ése cómic se hizo después de Factor X y para entonces «Fénix» ya era una fuerza cósmica y blablabla.
Si hay un retconeo que realmente hace falta es el de que Fénix sea una fuerza cósmica y toda esa mierda, ACABEMOS CON ELLA DE UNA VEZ! SIEMPRE FUE JEAN!
Hace un par de meses me puse a ver la serie de animación de la Patrulla-X porque la tienen en el catálogo de Disney+, y me llamó la atención cómo hacen encaje de bolillos para presentar una trama de Fénix Oscura que se entienda y no haya suicidios ni esparraguicídios que suban la calificación por edades, y hacen una mezcla muy curiosa que permite que puedas «have your cake and eat it too», porque presentan a la Fuerza Fénix como una entidad guardiana del cristal M’kraan que es independiente de Jean, pero Jean sigue siendo quien se corrompe por una combinación de poderes potenciados y lavado de cerebro de Mente Maestra, tienen el detalle de aprovechar una historia de esa época en la que salía el lado oscuro proto-Onslaught del profesor Xavier para explicar que es muy mala cosa que a un telépata se le disparen los poderes, y al final hasta logran mantener el sacrificio de Jean Grey sin que en realidad llegue a morir nadie. ¡La verdad es que les quedó una versión sorprendentemente resultona y que en algunos aspectos hasta prefiero a la original (y ya no digamos a la posterior a 1985)!
Lo que me llama la atención de esas historias es que las primeras víctimas de Magneto son inocentes, según como se mire. Hay un incendio casual y la hija mayor queda atrapada. Magneto se lanza a salvarla y asume que los malditos humanos se lanzan a por él por antimutantes. Cuando en realidad dudo que nadie le viera usar sus poderes. Más bien creo que los «malditos humanos» querían impedir que ese pobre padre desesperado se asara vivo entrando en un incendio para salvar a su hija.
Me temo que no. He repasado la historia, y cuando Magnus se dispone a rescatar a su hija, lo pillan dos policías que le dicen que «Está arrestado por asalto y extorsión», y con ese asalto y extorsión se refieren a cuando Magnus amenaza sin proponérselo a su jefe (utiliza sus poderes subconscientemente para arrojarle una palanca) porque se está quedando con parte de su salario como «comisión». Y Magnus se pone a suplicar que con él hagan lo que quieran, pero que alguien salve a su hija, pero el jefe le contesta que «nadie estará dispuesto a arriesgar su vida o libertad por la hija de un enemigo del estado». Así que esas «víctimas inocentes» de inocentes no tenían nada, y de inhumanos (pero no los de Attilan) sí que tenían mucho. Y sí, Magnus debería haber matado únicamente a los policías y a su jefe, en vez de llevarse por delante a toda la muchedumbre, pero el uso de sus poderes en ese momento fue un estallido de rabia y desesperación y no un acto deliberado de asesinato.
Te falta la parte en la que le pegan una paliza mientras ve a su hija morir entre las llamas y la de su mujer huyendo de él espantada cuando se da cuenta de que tiene poderes. Y el cabrón que le quiso estafar descojonandose en su cara para rematar la faena, si es que esa historia te hace perder la fe en la humanidad!
«Claremont se tiene que largar firmando tres cómics que echan definitivamente por tierra todo su trabajo con el personaje.»
ni tanto, porque en esa historia Magneto nunca se vuelve villano tal cual, él no ataca genosha, fue Cortéz, nunca busca la confrontación, incluso por eso Claremont escribe su posible muerte, incluso escribe algo así como que no pudo seguir el sueño de Xavier porque era demasiado el rencor que este tenía para mantener la Fe completamente en el sueño, pero tampoco por eso regresa a la villanía, en lo personal no creo que tire a la borda todo lo hecho con él.
Si da igual lo que escriba Claremont en esos cómics, Jim Lee lo dibuja como el villano y el mensaje final con el que se quedó el personal era que Magneto era el malo. Villano trágico o lo que quieras, pero villano al fin y al cabo. La única satisfacción que le dejaron a Claremont -aparte de la economica- fue que se cargó a Magneto; la gente podía haberlo respetado pero no, en cosa de año y pico ya lo trajeron de vuelta full villano psicópata y Xavier lo lobotomizó «porque se había pasado y no había otra solución».
Vamos, que no creo que Claremont escribiera esos cómics de buen grado, porque eran una imposición de Lee y Harras y desde luego eran un paso atrás para el desarrollo del personaje.
La forma de que «a nadie le pase lo que le pasó a él» pasa por «esclavizar a toda la humanidad». Así que no trago.
Magneto a veces parece una metáfora del estado de Israel y sus excusas para maltratar palestinos.
Claro, por eso era el villano y estaba equivocado. Que ojo, lo de esclavizar a la humanidad es más cosa de Apocalipsis y gente así, que Magneto cuando se plantaba to loco en la ONU solía decir cosas como DADME UN PAIS PARA MI SOLO Y MIS MUTANTES!! CABRONES!! y cosas así que bueno, Krakoa.
Bueno, en «Yo, Magneto», su forma de «esclavizar a la humanidad» es algo parecido a lo que hacen en «The Authority», ejercer de autoridad suprema que impone normas al mundo entero; sus exigencias en «Yo, Magneto» consisten en pedir a todas las naciones del mundo que desmantelen sus arsenales nucleares, no para impedir que pueden usarlos contra él, sino para impedir que pueda producirse una guerra nuclear, y en «Dios Ama, El Hombre Mata» (y me parece que hasta en «Secret Wars») Magneto dice que su intención es crear una utopía para todo el mundo en la que las libertades que haya que sacrificar no se echarán en falta. Y aún así, Cíclope le lleva la contraria (cuando el Profesor Xavier ya está a punto de darse por vencido) y le dice que no, que la utopía no justifica los medios.
Quizás esto daría para una serie de artículos que se llamen «Juicio a Magneto». Total, si Roger Stern decidió juzgarlo por segunda vez, aquí bien se puede juzgar por tercera. ¡Al fin y al cabo, parece que es lo que quiere hacer Marvel!
https://www.marvel.com/articles/comics/x-men-trial-of-magneto-august-2021
Exactamente, aquí el Magneto más requeteloco y villanesco en un número de los Vengadores de Thomas y Buscema:
SI ES QUE ESTABA PIDIENDO SU KRAKOA!
¡Ojo, que en los bocadillos de pensamiento pone que toda esta actitud villanesca es una pantomima para que no tengan ninguna otra opción que rechazar su propuesta!
Y aún así no deja de ser unas demandas tan salidas de madre que era impensable que la ONU se las diera… ¡Y ahora es lo que tienen con Krakoa!
Bueno, lo del veto en la ONU no sé, igual sí y todo, porque las relaciones diplomáticas que se han montado con los demás países del mundo han sido de un abusón que asusta.
Magneto donde descarrila es cuando se empieza a autodenominar Homo Superior, pero tristemente ahora lo hace hasta Xavier…
cuando Magneto tuvo su propio país (conquistando San Marco) lo que hizo fue esclavizar a los humanos, fusilar opositores y gobernar dictatorialmente. Incluso sus sicarios llevaban uniforme nazi.
No esclavizó a nadie, no fusiló a nadie y sí, goberno dictatorialmente y encarceló a la oposición; De hecho conquistó el país entero sin pegar un solo tiro gracias al ejército imaginario de Mente Maestra. Y ya que estamos, no es muy normal que una víctima del holocausto decida que su ejército imaginario o no (porque luego viste con esa pinta a la chavalería de Santo Marco) tenga uniformes clavaditos a los de la wehrmacht. Que sabemos que lo del holocausto se contó veinte años después, pero a dia de hoy cualquier cómic que revisite esa historia no debería usar esos uniformes, porque quieras que no Kirby dibujó los uniformes «de los malos» que él conocía y en paz.
Cuando los X-Men lo echaron, dejó una bomba atómica programada para explotar y exterminar a los humanos.
Torturó al Angel durante horas en una ocasión.
Lanzó misiles para matar a sus hijos para cubrir su retirada (luego Wanda y Pietro pasaron a los Vengadores).
Teniendo hipnotizada a Wanda, la hizo bailar sicalípticamente para él.
Con que era un nazi y un cerdo.
Podría entrar otra vez al baile de decirte que esto era esto y lo otro por lo otro, pero…
Era un puto loco y un personaje lamentable creado por Stan Lee y Jack Kirby? Sí.
X-Men era el peor grupo de Stan Lee y Jack Kirby? También.
Es estúpido juzgar X-Men y a Magneto en base a sus peores cómics? Por supuesto.
Recordemos, en base a esos cómics todo el grupo quería zumbarse a Jean, Xavier incluído. Y Jean era una pavisosa de encefalograma plano a la que solo le interesaban los trapitos, por no hablar de que el pobre Charlie era un canalla que fingió su propia muerte porque patatas. Era la peor serie de Marvel con diferencia, un absoluto desastre, y en el trabajo de chapa y pintura que necesitaba Magneto exigía una limpieza de arriba a abajo. Y eso a pesar de que el personaje ni siquiera era el jodido Adolf Hitler, pero estamos hablando de un Magneto que no quería la libertad para los mutantes -¡creaba mutantes en laboratorio!- lo que quería era conquistar el mundo y ya.
¿Quieres quedarte con ese personaje? Yo desde luego no, de esos sobran.
No digo que el Magneto Silver Age fuera mejor. Solo que lo que hizo no puede barrerse bajo la alfombra tan fácilmente. Ni minimizarse.
Me fastidia mucho que se reescriba todo para que todo lo que hiciera Magneto en el pasado fuera de «antihéroe». Es una retrocontinuidad maligna que parece entender que sólo importa lo que dijera Claremont. Y que el trabajo de Kirby y Thomas no importa nada.
Pues opino que no señor. El pasado está ahí aunque no nos guste.
Evidentemente Claremont hizo una serie GENIAL Y PUNTERA. Que me encanta. Pero no por ello carece de defectos.
Si quieres a Magneto «bueno», ponle reconstruyendo lo que ha destruido, no ligándose a una rubia. Que vaya a San Marcos a pedir perdón.
Lo que comentas del uso que posteriores guionistas le dieron a Magneto (el de villano) tras la marcha de Claremont, yo creo que tú mismo das la respuesta correcta: «es más fácil que simplemente los nuevos guionistas sean nostálgicos de lo que leyeron de jóvenes y quieran recuperar ese status quo…». De hecho, si se mira la portada del nº 1 de Factor-X, encima del título pone «Porque vosotros lo habíais pedido – el dramático retorno de la Patrulla-X original». Eso es la claudicación definitiva a los fans que a finales de los setenta escribían cartas indignadas porque «esta no es mi Patrulla-X».
««Para que un villano deje de ser un villano no tiene que recibir la absolución de nadie, tiene que empezar a comportarse bien». Ya, si sería lo ideal. Pero difícilmente puede seguir comportándose bien alguien si el mundo le sigue viendo como un villano porque la herida es demasiado profunda…».
Precisamente en esto que comentas veo yo la penitencia que entrañaría la redención. El personaje a partir de ahora va a comportarse como un héroe, sabiendo que el mundo va a seguir viéndolo como un villano, pero es que el propio personaje sabe que no puede pedir que le perdonen sus crímenes anteriores. Y si ahora es realmente un héroe, una vez alcanzada una hipotética situación en la que no sea necesario que siga defendiendo el mundo, debería entregarse a las autoridades.
De hecho, supongo que esa es la justificación que Claremont le da al final del juicio en París; se lía pardísima, el profesor Xavier se marcha a la galaxia shi’ar, y con no solo las relaciones entre humanos y mutantes de mal en peor, sino los propios mutantes empezando a matarse entre sí (la Masacre Mutante está al caer), Magneto no puede permitirse el lujo de cumplir condena cuando se le necesita como superhéroe. Otra cosa es que con este razonamiento de que «el mundo me necesita», en el Universo Marvel siempre habrá algún peligro o crisis mundial en el que iría bien que Magneto venga a echar una mano, por lo que Magnus siempre podrá autojustificarse con que «esta semana no me va bien entregarme, mejor la siguiente». Pero ese es un tema que podría haberse tratado perfectamente tras las «Guerras Mutantes» que Claremont quería hacer, y en caso de que Mangus hubiera acabado siendo juzgado y sentenciado, la condena bien podría haber sido: «Vas a servir en los Vengadores (o en los Thunderbolts, o en la Fuerza de la Libertad) de por vida».
Pues el arrepentimiento y la (presunta) empatía, sino van acompañados de un acto de contricción, solo son una forma de absolverse a uno mismo.
Si la historia de la redención es buena, lo triste es que Claremont parece decir que Magneto ya queda disculpado si lo ayuda a Xavier y a su causa mutante. Es como decir que Von Braun queda disculpado de ser un esclavista porque ahora fabrica cohetes para los yanquis.
¿No te parece suficiente acto de contrición reconocerle a su enemigo el que está equivocado, enamorarse de una simple humana y someterse al juicio en París? Magneto estaba arrepentido hasta el punto en que reconoció la autoridad de un tribunal humano, que más quieres que haga?
Que los gestos son muy bonitos, pero el que alguien demuestre su arrepentimiento es algo que tiene que hacer día a día durante el resto de su vida, sin volver a sus andadas.
Se puede criticar que Claremont no se atrevió a llevar hasta las últimas consecuencias del juicio en París, porque queda truncado por el ataque de la parejita Fenris y no llega a haber una sentencia (y la del juicio en «The X-Men vs The Avengers» mejor dejémosla estar).