Este fin de semana el mundo del cómic se ha puesto de luto una vez mas con el triste fallecimiento de Russ Heath a los 91 años de edad. Con el no solo se nos ha ido unos de los pocos autores que habían estado ahí desde la Edad Dorada del cómic Estadounidense, sino un grandísimo artista de esos que crean escuela y que fue uno de los pilares fundamentales sobre los que se construyó la que probablemente fue la mejor linea editorial de cómic bélico de la que hemos podido disfrutar los lectores. Así que una vez mas, con una mezcla de tristeza por haberle perdido y con alegría por esos sesenta y pico años de carrera en los que tan buenos ratos nos hizo pasar, queremos rendirle desde aquí nuestro pequeño homenaje.
Como muchos otros en su campo, Russ Heath siempre quiso dibujar y se paso su infancia imitando a artistas especializados en el salvaje oeste ya que su propio padre había sido vaquero. Una pasión por dibujar que le llevo a que durante su adolescencia en los años cuarenta Heath compaginase sus vacaciones de verano del instituto con trabajos de freelance en “Captain Aero Comics”, dibujando la serie bélica «Hammerhead Hawley», entrando ya desde el comienzo en un genero en el que con los años se convertiría en uno de sus maximos exponentes. Unos tempranos comienzos que se vieron interrumpidos cuando se alisto en la Fuerza Aérea para luchar contra el Eje, aunque en realidad su etapa militar la dedico principalmente de nuevo a dibujar para el periódico de la base.
Tras aquella época, y mientras se ganaba la vida como chico de los recados en una agencia de publicidad, Heath no cejo en su empeño en ser dibujante de cómics, y para finales de los cuarenta consiguió de nuevo entrar en ese mundo de la mano de Timely Comics (que no hará falta que diga que es lo que hoy conocemos como Marvel) . El propio Heath no estaba completamente seguro de cual había sido ese primer trabajo, aunque estaba seguro de que había sido una historia de Dos Pistolas Kid. Y aunque en aquellos años no siempre se acreditaba a los autores y ni siquiera los historiadores se ponen de acuerdo en cual fue su primer trabajo, lo que si sabemos con certeza es que en aquellos años en Timely Heath volvió a su pasión infantil y se especializo en dibujar westerns.
Pero los años pasaron y Timely (que por aquel entonces se había convertido en Atlas) fue diversificando su oferta, y como todos sus colegas de la época Heath hizo un poco de todo. Western, humor, horror, drama, cómic bélico y ciencia ficción, un genero este ultimo en que que habría que destacar su co-creación, junto con Stan Lee, de Robert Grayson, el Marvel Boy original (al que muchos conocerán por ser el predecesor de Quasar). Un trabajo que alternaba con colaboraciones en EC Comics saltando de nuevo al genero bélico y en MAD con el humor, una época en la que se dieron también sus primeras colaboraciones con una editorial que fue la que le lanzó definitivamente a la fama, DC Comics.
De aquella etapa sin duda lo mas recordado sea su creación, junto a Robert Kanigher, del Tanque Embrujado, una serie bastante popular en su día y que sin embargo el propio Heath no entendía como podía gustarle a alguien por lo repetitiva que era. Pero lo que no era difícil de entender era que su trabajo se encontrase en prácticamente todos los titulos bélicos de DC de la época dada la autenticidad que le imprimía a los mismos. Y eso era algo que conseguía gracias a una pasión por su trabajo que le llevo a comprar uniformes y equipo militar para fotografiarse con ellos y a construir maquetas para utilizar todo eso como modelos para su trabajo, lo que como el propio Joe Kubert dijo una vez de el, hizo que Heath fuese el dibujante que todos los demás utilizaban como referencia.
Una atención al detalle que se puede apreciar en la precisión con la que dibujaba cada vehículo, cada uniforme, cada elemento de la composición que junto con su gran habilidad a la hora de manejar las texturas y la iluminación, y su habilidad para narrar, le convirtió en una de las grandes estrellas de la casa. Y todo eso combinado con ese no querer dormirse en los laureles le llevo a experimentar con diversas técnicas como cuando para las portadas de sus Sea Devils, comenzó a utilizar una técnica que había inventado Jack Adler, y que otros muchos dibujantes de la casa como Joe Kubert también adoptaron, a base de aplicar sombras y texturas con tinta china aguada, dando un resultado espectacular.
Pero de entre toda la dilatada carrera de Russ Heath, probablemente uno de los trabajos mas recordados de la misma fuese su colaboración con Harvey Kurtzman y Will Elder en la tira «Little Annie Fanny» para la revista Playboy, por la anécdota que la acompaña. Y es que una de esas colaboraciones no acreditadas provocó que Heath tuviese que trasladarse a trabajar en la mismísima mansión Playboy con Kurtzman y Elder ya que estaban agobiadisimos con las fechas de entrega. Pero cuando el trabajo terminó y ambos autores regresaron a sus hogares… Heath se quedó. Allí tenia una habitación gratis, una cocina que funcionaba las veinticuatro horas del día preparándole todo lo que desease y estaba rodeado de las modelos de la revista, era difícil culparle. Y esa situación se prolongó durante meses ya que todo el mundo por allí asumía que ese era su lugar hasta que le pillaron y le echaron, pero dudo que se arrepintiese de nada.
Y no podemos terminar este repaso a la vida y obra de Russ Heath sin mencionar como el y otros compañeros de profesión se volvieron tristemente famosos fuera de las fronteras del cómic cuando Roy Lichtenstein les robo a el y a otros dibujantes de cómics (una larga lista en la que encontramos a grandes artistas como John Romita, Milton Caniff o los mismísimo Jack Kirby y Joe Kubert entre muchos otros) numerosas viñetas de sus cómics que copió y combinó como le vino en gana para elaborar algunos de sus cuadros mas famosos sin molestarse en acreditarles en ningún momento porque a saber que opinión tendría de esa gente que hacia cómics para niños…sigh. Una situación que el propio Heath retrató en una tira (con color y rotulación de Darwyn Cooke) en 2014.
Pero con lo que debemos quedarnos es con celebrar que Russ Heath tuvo una larga vida (aunque en sus ultimos años tuviese que contar con la ayuda de organizaciones como The Hero Initiative para sobrevivir) y con el inmenso legado que nos ha dejado detrás. Porque como siempre digo en estos casos, lo mejor que podemos hacer por el, lo único, es mantener viva su memoria y recordar ese trabajo que tanto le apasionaba. Aunque en este caso no vendría mal que editoriales como DC colaborasen un poco y ya que en los últimos años se han volcado tanto en recuperar su material clásico en formatos asequibles diesen el paso de hacer lo mismo con sus cómics bélicos, que hay tienen autenticas joyas de las que es difícil disfrutar por medios legales.
No hay quien entienda a Hugh Hefner, si tienes a Russ Heath de okupa no lo echas a patadas, LE DAS TRABAJO EN LA REVISTA HASTA EL FIN DE LOS TIEMPOS!
Vaya equipazo que se montó Kurtzman, eh.
Suele pasar cuando a la gente le pagas y le tratas bien. Cuántos deberían tomar nota!
Aquí el único que tomó nota fue James Warren.
Un dia hay que hacer una lista de editores buenos y editores espabilados.
Y luego ya la de los editores buenos y espabilados, que ahi ya lo flipas.
Otro de los grandes que se va.
Encima, yo daba por sentado que el viviría con comodidad, pero no; aunque si supo vivir con dignidad
Roy Lichtenstein y Warhol eran los reyes del caradurismo en el mundo del arte. Que haya cuadros calcando viñetas vendiendose por millones de euros, mientras los autores originales pasan hambre es demencial.
La diferencia es que Warhol nunca oculto el origen de sus obras, tu ves cualquiera de sus obras que reproducia algun producto conocido, ya fuesen las famnosas latas de sopa o la botella de coca cola y el origen esta claro, en cambio ves los cuadros de Lichtenstein y si no te dicen de donde ha copiado cada cosa… https://www.flickr.com/photos/deconstructing-roy-lichtenstein/
Curiosamente hoy en dia la propia Roy Lichtenstein Foundation mantiene una web en la que se puede ver las referencias que utilizo para sus obras https://www.imageduplicator.com/main.php?decade=60&year=66&work_id=3843
Si el problema no está en la apropiación, el problema está en despreciar tanto el material y al creador de lo que te apropias como para negarte a acreditarlo.
A ver, que es como si el fabricante del orinal demandase a Duchamp. Lichtenstein ganó millones porque hacía cuadros, es decir, obras únicas, Heath no porque producía originales para su difusión industrial y popular a un público que no considera arte lo que hacía él. Lichtenstein es quien es no por copiar sino por descontextualizar y convertir un proceso industrial (darle el color de puntitos y tal) en un proceso artesanal/artístico. Heath no tiene nada que ver con eso, pero desde luego se merece una acreditación. Lo que tenía que haber hecho él, y los demás, es luchar para que su profesión esté mejor considera tanto por el pueblo como por la élite cultural. Es eso lo que le condenó a la pobreza, EE.UU. es verdaderamente chungo 🙁 Menuda vejez!
Diogenes y yo hemos tenido muchas discusiones sobre este tema (el obviamente defiende a aquellos que le ayudan a blanquear su fortuna), y mi conclusión siempre es la misma, me dan igual las excusas que desde ciertos sectores se inventen para justificar determinadas actitudes, si buena parte de tu obra consiste en redibujar cosas que otros han hecho y no te molestas en acreditarles, no solo eres un caradura que no respeta el trabajo de los demás, eres un greg land del arte.
Y un cuerno defiendo esto:
http://brainstomping.com/2018/08/29/adios-a-russ-heath-1926-2018/#comment-32224
La discusión que tuvimos fue sobre el derecho de Liechtenstein a copiar viñetas, no sobre si debería haber acreditado o no. Desde el minuto uno estaba claro que tenía que acreditarlas, porque una de las bases del pop art está precisamente en la apropiación de objetos de la cultura popular y trasladarlos al espacio artístico. Liechtenstein al negarse a acreditar a los autores era como los gañanes que ven una ilustración hecha por ordenador y se creen que eso «lo hace la máquina», ¡su puta madre!
Tu defiendes lo que yo digo que defiendes! Y calla que estamos en guerra con Eurasia!
Si en eso estamos dacuerdo. Yo lo decía por lo que da entender el pobre Heath. Lichtenstein sólo le debe el crédito. Y también porque no estoy de acuerdo contigo en que el artista robó (con acento en la o:) al pobre Heath. Heath no son Siegel y Shuster ni Kirby en este caso.
Si Roy «Greg Land» Lichtenstein utilizó, y se enriqueció, con el trabajo de los demás sin acreditarles les robó, al menos en el sentido moral del termino.
http://dle.rae.es/?id=WXknmzC
De ninguna de las maneras. Lichtenstein se inspiró en el trabajo dotros para crear otra cosa. Lo que uno ve en una viñeta no lo ve en un cuadro del artista y viceversa.
Acreditarles no hubiera hecho que Lichtenstein ganase menos y que Heath más. Además el artista está copiando el resultado final, la impresión, no el original de un dibujante. Lichtenstein se inspiró en un material publicado industrialmente, o sea, masivamente, barato y en la mentalidad daquella época de usar y tirar. Un ejemplo diferente: Picasso no robó a Velazquez.
Pues esa segunda definicion de la RAE «2. tr. Tomar para sí lo ajeno, o hurtar de cualquier modo que sea.» ya describe bastante bien el método de trabajo de Lichtenstein.
Ademas aqui no se trata de si Heath hubiese ganado mas o menos de haber estado acreditado, solo digo que el ladrón de Lichtenstein no se molestó en acreditar a ninguno de los autores de cómic a quienes robó parte de su trabajo para crear el suyo.
Y sobre la comparación con Picaso y Velazques, de entrada las Meninas es un cuadro tan inmensamente famoso que no hacia ni falta acreditarlo, salvando las distancias como cuando Warhol usaba las latas de sopa o el logo de General Electric. Y segundo, su versión si que es una autentica reinterpretación en su estilo cubista del cuadro de Velazquez, mientras que Greg Land Lichtenstein hacia poco mas que calcar y saturar los colores del material que robaba.
Y por cierto, lo que hace Greg Land es perfectamente legitimo, tomar referencias y copiarlas como un descosido no tiene por qué ser algo malo así se pasó Jackson Guice buena parte de los 80 y 90. Lo malo es tomarlas todas de revistas porno y modelitos posando, sin querer acordarte en ningún momento de que se supone que estás contando una historia.
Muy bien dicho lo que atañe a Greg Land. Lo suscribo totalmente.
M´R, me refiero a que no existe el robó moral. En cuanto a lo de Velazquez iba no por la acreditación, evidente, sino porque lo que hace Picasso es lo mismo que hace Lichtenstein, reinterpretar algo existente. Se te olvida en todo esto que lo que hacía Heath eran viñetas y lo que hacía Lichstenstein cuadros. Quiero decir que lo de Heath es una parte de una cosa mayor, la página, que es parte de otra aún mayor, la histori(et)a, mientras que Lichstenstein aisla y descontextualiza. Revaloriza algo que sólo tenía valor funcional y sentido como parte de un todo. Vamos que Picasso y Lich hacen otra cosa a lo que hacían sus inspiradores. Este último sólo robaría a Heath si publicase un cómic de Heath diciendo que lo ha hecho él.
En todo caso que no se nos olvide que en lo fundamental estamos de acuerdo. Lich tendría que haber mencionado sus fuentes.
Hombre, si te refieres a códigos penales y similares no, no existe el robo moral, pero es lo que practicaba Greg land Lichtenstein cada vez que robaba el trabajo de otros para «crear» el suyo. Porque el que Heath y Lichtenstein se dedicasen a medios diferentes no niega que el trabajo de este ultimo, tal y como ha pasado a la historia no hubiera existido sin el trabajo que le robo a Heath, porque el podría haber echo exactamente el mismo tipo de cuadros que hacia sin necesidad de robarle a nadie, nada le impedía crear sus propias composiciones ya fuese de su propia imaginación o como hacia Heath, usando sus propias fotos y maquetas, pero no lo hacia, se limitaba a aislar y descontextualizar después de robar. Porque vamos, nunca publico un cómic de Heath diciendo que lo había hecho el, solo dibujos sueltos de Heath, Kubert, Kirby y tantos otros diciendo (o callando y dando a entender) que los había hecho el, y yo no veo ninguna diferencia entre una cosa y otra.
Y fundamentalmente, como no citaba sus fuentes era mas chorizo que «artista».
No estamos de acuerdo 😀 Seguro que te has dado cuenta. Lich cogía viñetas reales por la misma razón que Duchamp cogía un orinal que no había hecho o Warhol cogía objetos pop. No creo que nadie en su momento pensase que Lich se inventaba las viñetas porque entonces no haría Pop Art. Y Lich no es sólo cuadros de viñetas igual que Warhol no es solo latas y Marilyns. En fin, yo ya he dicho todo lo que se me ocurre sobre este tema. Y sigo sin ver que una viñeta que ha sido reproducida cientos de miles de veces, distribuida por doquier en EE.UU. por lo menos, vendida por calderilla y luego tirada a la basura se pueda robar. Por no pararse a pensar que lo que hacía Heath y otros «homenajeados» por Lich no es el producto final que el artista tomaba como modelo.
Al final sera mejor dejarlo en que no podremos ponernos de acuerdo nunca, yo seguiré pensando en que Greg Land Lichtenstein era un chorizo merecedor de ningun respeto, tu que era un artista y ahí siempre estará la figura de un artista de verdad como Russ Heath al que muchos no le llegaban ni a la suela de los zapatos en cuanto a talento.
:D!
Lo peor de todo es que en realidad estabais de acuerdo, pero por un quítame esas pajas menuda chapa habéis metido!
Igual que aquellos que venían a defender a jimm lee y tu estabais de acuerdo…