Estos pasados días hemos repasado el tremendo impacto que supuso para la industria del cómic de superhéroes la llegada de Neal Adams, quien revolucionó la forma en la que se hacían los cómics y puso todo su empeño en mejorar las condiciones de trabajo de quienes los hacían. Pero este gigante del cómic además de ser un genio dibujando y un activista dispuesto a casi todo por ayudar a sus compañeros de profesión, también quiso cambiar cambiar lo que se contaba en ellos, que los cómics reflejasen de una forma mas fidedigna el mundo real en el que vivían sus lectores. Y de esa faceta suya probablemente no hay mejor ejemplo que todo lo que rodeó a la creación del Green Lantern John Stewart.
A estas alturas hablar del Green Lantern/Green Arrow de Denny O’Neill y Neal Adams es hablar de un cómic legendario, uno que medio siglo después de su publicación sigue siendo de lo mas actual por como se atrevieron a romper los esquemas de todo lo que se había publicado antes, tratando temas que en aquellos años era inconcebible que se tratasen en un cómic de superhéroes. Y aunque de esa etapa mítica lo que mas suele recordar el publico es como se trató el tema de la drogadicción a través del personaje de Speedy, hay otro momento determinante en esa etapa que no conviene olvidar, especialmente por como se llego a el, la creación de uno de los primeros superhéroes negros de la historia (y el primero de DC Comics)
Es cierto que en los comienzos de la década de los setenta en Marvel ya existían algunos superhéroes negros como Pantera Negra, creado en 1966, el Halcón en 1969 y Luke Cage en 1972, pero en DC Comics por su parte no había absolutamente ninguno y Neal Adams se propuso corregir eso. Según contaba el propio Neal Adams, durante su etapa en Green Lantern/Green Arrow junto a Denny O’Neill, Adams le propuso a Julius Schwartz, el editor de la serie, crear un ayudante para Hal Jordan en caso de que a este le sucediese algo, a lo que Schwartz le respondió que eso ya existía y que se llamaba Guy Gardner. Y claro, Adams cuando vió que se trataba de otro tipo blanco anglosajón no le hizo mucha gracia y propuso atropellarlo con un autobús.
Su propuesta era quitarle de en medio durante una larga temporada para poder introducir un nuevo reemplazo para Hal Jordan, uno que no se pareciese a el pero con un pelo diferente. Y es que a Adams le parecía curioso (por no decir otra palabra) que el anillo de poder buscase en toda la tierra a gente digna de utilizarlo y siempre acabase en las manos de tipos blancos, por lo que sugirió hacer algo que para la DC de la época era completamente radical, darle el anillo a alguien que no fuese blanco. Y es que como Adams le argumentaba a un Schwartz que no debía saber donde meterse, no había mas que ver eventos como las Olimpiadas para ver como allí había una mezcla de gente de todos los colores.
La conversación fue derivando hacia terrenos en los que no me cabe duda que Neal Adams se lo pasó bien pinchando amistosamente a su jefe mientras le soltaba verdades como puños. Y es que cuando Schwartz propuso que el nuevo Green Lantern fuese asiático, Adams le recordó que los antecedentes de la editorial con los personajes asiáticos no eran precisamente bueno, haciéndole ver que aquello de llamar “Pieface” a Tom Kalmaku, el amigo y confidente de Hal Jordan, era algo bastante racista, pese a que Schwartz no lo veía así. Pero este tenia claro que el plan de Adams era tener un Green Lantern negro, algo que este no negó en absoluto.
Una tarea de la que este se encontraba encantado ya que se consideraba uno de los pocos dibujantes de la editorial capaz de dibujar personas negras de forma realista (Adams no era nada modesto pero tenia motivos de sobra para no serlo) ya que el resto de dibujantes lo que solían hacer era dibujar a personajes con rasgos de gente blanca y oscurecerles la piel, incluidos los dibujantes negros ya que en la editorial o no les dejaban hacerlo de otra forma o simplemente nadie les había enseñado a hacerlo de una forma realista. Y es que Adams, se había criado teniendo amigos negros que no solo no se parecían a los personajes que salían escasamente en los cómics, sino que se quejaban de como esos cómics estaban hechos para un publico blanco.
Pero Adams no había terminado aun con sus instrucciones de como debía ser ese nuevo personaje, ya que no solo quería que físicamente pareciese una persona negra de verdad, sino que no fuese un estereotipo sino alguien que se sintiese autentico. Y es que por aquellos años, como ya mencionaba antes, los únicos superhéroes negros (los de Marvel) eran reyes de naciones secretas africanas súper poderosas (T’Challa), ex convictos reconvertidos en superhéroes tras obtener poderes (Cage) o tipos de Harlem sin profesión definida (hasta que le retconearon horriblemente seis años después de su creación para convertirlo en un ex proxeneta) que se habían convertido en superhéroes por azar (Halcón). El quería un personaje con el que cualquier lector negro se pudiese identificar, un tipo decente, aunque duro, con estudios y una profesión.
Todo parecía ir bien encauzado, la tarea de escribir a ese nuevo personaje recayó obviamente en Denny O’Neill quien ya estaba realizando la serie de Green Lantern junto con Adams, y este nuevo personaje era un arquitecto criado en un barrio humilde y con la actitud que Adams buscaba… pero que se llamaba Lincoln Washington. Adams cuenta que miro con estupefacción a O’Neill, quien le dijo que el nombre no había sido idea suya, que era cosa de Schwartz. Así que Adams una vez mas se dirigió al despacho de su editor (ya debían temer sus visitas) indignado de que ese nuevo personaje, que debía evitar ser un estereotipo, tuviese un nombre de esclavo. Algo que como en el caso de “Pieface” Schwartz no veía así, ya que según el muchas personas negras tenían nombres similares, a lo que Adams le respondió que claro que era así, pero que por eso se los cambiaban. Y seguramente buscando librarse de una vez de Adams, Schwartz le dijo que escogiese el un nombre que le gustase y así es como finalmente nació John Stewart.
Pero pese a todo este ir y venir, aun quedaba un pequeño escollo en el camino. Neal Adams no solo dibujaba como le daba la gana, en muchas ocasiones como en este caso, también se coloreaba a si mismo, y a la hora de realizar las indicaciones sobre como colorear a John Stewart se aseguro de que este tuviese una piel oscura, no ese tono marrón claro que se solía utilizar para colorear a los personajes negros en aquellos años (había casos en los que los personajes casi parecían grises). Algo que provocó que Julius Schwartz y Sol Harrison fuesen a hablar con el para preguntarle que por que había coloreado a Stewart con la piel tan oscura y que si estaba seguro de querer hacerlo así, llegando a preguntarle que si los lectores negros no se sentirían ofendidos (realmente Schwartz a veces parecía vivir en otro mundo).
Yo personalmente pagaría por haber podido ver la cara de Neal Adams en ese momento, justo antes de responderle a sus jefes que los lectores negros por lo que se debían sentir ofendidos es por los pasados cincuenta años de cómics, esos en los que o no existían personajes negros, o cuando estos aparecían eran como caricaturas racistas, estereotipos o secundarios con poca o nula relevancia. Y como queda claro observando las viñetas de ese cómic, Neal Adams se salió de nuevo con la suya y ayudo a crear a uno de los primeros superhéroes negros del genero y uno de los mas populares. Uno que como el mismo contaba, muchos lectores negros le agradecieron su papel en su creación décadas después de la publicación de este cómic.
Un personaje que en aquella primera aparición ya quedaba claro que no se parecía en nada a Hal Jordan. Donde este tenia un gran respeto hacia la autoridad John tenia una actitud radicalmente opuesta fruto de la experiencia de ser un hombre negro en la América de los setenta. Alguien que como señalaba el mismo, pese a ser arquitecto no encontraba mucho trabajo debido al color de su piel, y que se negaba a llevar el antifaz que muchos de los miembros de los Corps utilizaban porque el no quería esconderse ante nadie. Con pequeños momentos y diálogos aparentemente casuales, O’Neill y Adams ya nos caracterizaban a John a la perfección en un par de paginas y recordaban al lector de forma poco sutil el racismo al que la gente como el tenian que enfrentarse a diario en el mundo real.
Menos sutil aun fue ese momento en el que en su primera misión de practicas Hal y John rescataron a un grupo de políticos a punto de morir en un accidente en el aeropuerto. Rescate durante el cual John no pudo evitar humillar un poco a esos políticos ya que entre ellos se encontraba un senador abiertamente racista que quería llegar a ser presidente del país.
Y aunque al principio Hal no estaba convencido de que el criterio de los Guardianes fuese acertado con respecto a John, este probó mas allá de toda duda de que tenia todo lo que hacia falta para ser un Green Lantern tan digno como el que mas, siendo mas perspicaz que su instructor y destapando una conspiración organizada por ese mismo senador para auparse al poder a lomos de una campaña racista. Pero pese a tratarse de un personaje con un potencial tremendo, su papel de reemplazo del protagonista (en unos años que no era habitual tener múltiples Green Lanterns compartiendo protagonismo) provocó que John se pasase muchos años desaparecido.
Esto fue algo que tristemente se mantuvo hasta que Len Wein y Dave Gibbons le recuperaron en 1984 para convertirle en el protagonista de la serie, momento a partir del cual fue una presencia bastante habitual en el titulo y llegando a ser el GL titular de la serie animada de la Liga de la Justicia, convirtiéndose para toda una generación en el autentico Green Lantern. (y pese a que soy fan a muerte de Hal Jordan, jamás diré una mala palabra de quienes prefieren a John Stewart ya que es un personaje increíble)
Momentos como este son los que hacían de Neal Adams alguien tan grande, por negarse a conformarse con lo que estaba establecido y buscando siempre romper esas normas no escritas para hacer cómics mejores y mas interesantes que reflejasen mejor el mundo real. Comics que como señalaba al comienzo siguen siendo tan vigentes hoy como lo fueron en su momento y uno de esos que cualquier aficionado al genero superheroico debería leer sin falta.
De momento tendremos que conformarnos con la pelicula animada. Supongo que ya vieron el trailer.
( Y mas les vale que este dedicada a Neal Adams).
https://www.youtube.com/watch?v=YQcQ-s1i9IQ
La única pega que le veo es eso de «soldier» en vez de arquitecto… Pero bueno, ya se verá.
Desde que en la serie animada les dio por convertirlo en soldado ya jodieron al personaje un poco. Desde entonces demasiados guionistas le han convertido en el superfrancotirador dispuesto a hacer lo necesario que nadie mas quiere hacer, como si fuese lobezno.
Bueno, esa actitud un poco habrá venido por lo de Cosmic Odyssey, no?
Pero lo de Cosmic Odyssey era simplemente un accidente, lo de después fue convertirlo casi en otro personaje. Pero se ve que mas de un escritor se quedo simplemente con lo de que John había matado.
Sabía de esta película desde hace tiempo, pero hasta ahora no había podido ver el tráiler, y me ha encantado que continúe en el mismo nuevo universo de película animadas que se han marcado con ‘Superman: el hombre del mañana’, ‘Justice Society: World War II’ y ‘Batman: el largo Halloween’.
No he comentado esta tanda de artículos sobre Neal Adams porque no tengo mucho que añadir, pero me están encantando, y ojalá hubiéramos tenido y tuviéramos más con sus valores y con las mismas narices.
La etapa Green Lantern/Green Arrow es algo que, cuando lo leí originalmente, me pareció muy interesante, entendí su importancia en el mundo del cómic, pero no me terminó de gustar demasiado como lector. Pasado el tiempo, cuanto más la releo, más parece que mejora
Sí, en la serie animada lo convirtieron en un duro marine. Johns, en su relanzamiento de Green Lantern decidió mantener ambas cosas: la profesión de arquitecto y el pasado como marine.
Such stupidity is the price we pay for free speech…¿M’Rabo está lanzando una indirecta?
Respecto al tema Adams, en un prólogo creo recordar que habla de uno de sus maestros de dibujo más buenos y más duros que le obligaba a dar lo mejor…y que era negro.
Lo dicho: un gigante, y no sólo como narrador gráfico.
Hombre, es que en este caso no es «libertad de expresión», es directamente un discurso de odio basado en mentiras, con lo que deberían empapelarlo en cero coma, aunque tristemente la realidad… Pues bueno, es lo que tiene.
La verdad es que Adams no lo tenia complicado para hacerlo mejor
Bueno, la verdad es que usar ejemplos de los años 40 es forzar un poco, salvo error por mi parte ya no hacían esas barrabasadas a finales de los 60.
Principalmente porque justo abajo hay un ejemplo de dibujo en que lo único que han hecho para dibujar negros fue dibujar a blancos, cambiarles el pelo y poner la piel oscura. Sé que es un dibujo de Kirby, y está feo hablar mal de Kirby, pero…
No es forzar mucho porque el propio Adams en su conversacion con Schwartz le decia que los lectores negros por lo que estaban ofendidos era por los 50 años anteriores de comics, por eso son ejemplos antiguos.
Y aun así personajes como Pieface, los secundarios de Luke Cage o Snap Wilson eran perfectamente contemporáneos.
Esa Black Mariah del comic…
El primer superhéroe negro viene ya de 1947: Lion Man (un científico de la ONU que protege una montaña en la Costa Dorada africana que es una enorme fuente de uranio), publicado en All-Negro Comics (colección y editorial de negros y para negros de Philadelphia). Fue un fracaso, claro.
En los cincuenta hubo varios intentos de héroes negros en los comic-books (casi siempre con escasa vida), la mayoría tarzánidos (sí, varios tarzanes negros, ja). Incluido uno de Atlas que era también miembro de la realeza africana (un precedente de Pantera Negra, vamos). Un poco mejor les iba a los algo más realistas (periodistas y así) héroes afroamericanos de las comic-strips (por supuesto en prensa «racializada», que en la prensa «blanca» los de color solo podían ser comparsas cómicos como el caricaturesco Ebony White del The Spirit del por lo demás genial Will Eisner …vale sí, teníamos al Lothar de Mandrake, pero su imagen inicial no iba sobrada de dignidad …y no destaca tampoco mucho en las tramas hasta los sesenta), con autores como la afroamericana Jackie Ormes (Torchy Brown) …para que un protagonista de tez oscura protagonizase una comic-strip en la prensa convencional hubo que esperarse a los setenta (Friday Foster, la bella fotógrafa de Jim Lawrence y Jordi Longarón, ambos muy blancos). En los sesenta, aparte de Pantera Negra en Marvel, uno de los casos más destacados fue el de Lobo (western de la Dell con prota afroamericano, creo recordar que dibujaba Tony Tallarico, fallecido a comienzos de este año), que podría haber protagonizado Jim Brown en la gran pantalla, ja.
Lo que siempre me ha gustado de John Stewart es que consigue ser normal y creíble sin ser un estereotipo. Ni es un macarra chungo rollo Luke Cage, ni tiene antecedentes en plan Sam Wilson (menuda cagada con lo de Snap), ni va de gracioso por la vida. Por eso me molestó mucho que lo hicieran luego exmilitar (y encima francotirador, de lo peor que hay). Es como decir que los negros solo son respetables si han sido militares. Es que ser arquitecto no cuenta?
Ya se que nadie conocerá un comic catalán llamado La casa bajo la sorra (la casa bajo la arena), que es de los años 70-80. Fue el primero de una serie en la que el protagonista era un catalán que va a Africa en los 70 (Pere Vidal/Peter White), lo interesante es que el secundario/coprotagonista es un sudanés, Henry Balua, que demuestra ser más capaz, más valiente y más integro que el protagonista (sin ser don perfecto). Henry Balua siempre me ha recordado a John Stewart.
Curiosamente, ese cómic (y los que le siguen de la serie de «Las Aventuras de Pere Vidal») son una adaptación de una serie de novelas juveniles de los años sesenta, y el mes pasado me encontré precisamente la novela de «La casa bajo la sorra» en una tienda de libros de segunda mano y la compré. Y es lo que dices, el personaje de Henry Balua es tan valiente como el presunto protagonista, mucho más íntegro, y también acaba demostrando ser mucho más capaz por el sencillo detalle de que la aventura transcurre en un entorno (su país natal) con el que él está familiarizado y el protagonista, que es un señor de Barcelona, no. Y eso no evita que ambos personajes se salven la vida mutuamente varias veces a lo largo de la historia. Teniendo en cuenta que la novela es de 1966, me pareció bastante meritorio percibir en ella un espíritu anticolonialista nada disimulado.
Pues sí, es una obra adelantada a su tiempo y a su gracia, sobre todo en una época en que muchos españoles asumían que en Africa había solo caníbales con falda de hojas (en el cómic bromean sobre eso).
A mí cuando lo leí me gustó que son los propios sudaneses quien acaban con la banda internacional de nazis, sin necesidad de americanos ni ingleses ni zarandajas.
En las siguientes novelas se mantiene un tono muy progresista, y los protas ayudan un país africano con sus problemas (inestabilidad, desertización, etc.) pero sin querer europeizarlos ni ir de salvadores. De hecho los villanos son luego una multinacional americana y un rey que quiere vivir con su gente (no en un palacio dorado) y gastar su petróleo en cosas útiles.
De lo que comentas de los protas ayudando un país africano ficticio, leí uno de los tomos («El País d’en Fullaraca») donde deben desmontar una conspiración para derrocar al rey, que quiere modernizar el país, y me gustó mucho el discurso que da el monarca cuando los protas le devuelven su corona (la conspiración iba en torno a sustraérsela para deslegitimar el monarca en una ceremonia) en pleno discurso televisado, éste la deja en el suelo diciendo «Sí, es mi corona, pero no me la pondré nunca más» y suelta un discurso explicando la necesidad de modernizar el país y abandonar tradiciones rancias como la de dichosa corona («Si estos amigos míos no hubieran logrado devolvérmela [la corona], yo habría seguido siendo la misma persona que tenéis ante vosotros, pero no me estaríais escuchando»). Y esto me hace pensar en la película de «Black Panther» del MCU, donde Wakanda será todo lo moderna que quieras, pero siguen teniendo curiosas tradiciones como duelos rituales para decidir debates sucesorios que son dignas del África de caníbales con falda de hojas.
Desde luego Fullaraca le da sopas con honda a T’Challa en cuanto a madurez emocional. Y eso que él también comete errores (la primera vez que lo vemos vive en un palacio estilo Versalles con un ridículo uniforme lleno de medallas).
Este comic es muy grande y siempre me ha dado lástima que no lo hayan reeditado.
Yo soy de esos que crecieron con John Stewart como Linterna Verde (como molaban las series animadas de Dini y Timm), para mí es y será el Linterna Verde titular por delante de Hal Jordan.
Sobre la historia de su creación, no tenía ni idea y bueno, creo que sobra decir que Neal Adams era un crack. Buena excusa para revisitar el GL/G que además ya ni me acordaba de este número.
Hay cosas que sabía y muchas que no, pero vaya, gente así hace falta siempre. Muy chulos estos artículos y gracias por la parte que me toca por darme a conocer aspectos de Adams que desconocía.
Si algo hubiera lamentado de Brainstomping es que alguien se hubiera leído solo las reseñas de Batman Odyssey y se hubiera quedado con esa imagen de Neal Adams. Así que no veas lo que me alegro de que estos artículos estén consiguiendo su objetivo!
Eh, yo descubrí este blog precisamente con esos artículos. Otra cosa buena que le debemos a Neal Adams. Pero, sin ser fan de su obra, siempre tuve claro que aquello no dejaba de ser un tebeo hecho por un autor en la etapa final de su carrera y que podía permitirse esas cosas.
Que, en cualquier caso, se agradece mucho esta serie de artículos.
Uy, y Adams estaba orgullosísimo de esos cómics, para él eran su obra más redonda!
Y para que negarlo, para entonces ya le permitíamos cualquier cosa que nos presentara, disfrutábamos igualmente.
Mira que me gusta la serie animada de la JL pero opino que con Green Lantern la cagaron. Es básicamente Luke Cage con anillo de Green Lantern. Lo pusieron en la serie para hacer la alineación «más diversa» (Lo mismo hicieron con Hawkgirl) y acabaron por caer en todos los estereotipos de negro duro de barrio chungo.
Era bastante estereotipo la verdad.preferia a Vixen
¿Quien diseño el traje de Stewart de la serie animada? Porque me parece mil veces más cool que el de Jordan.
Imagino que Timm, pero tampoco podría asegurarlo; de entrada todas las «model sheets» que circulan por ahí son de Timm y él figura como director artístico, así que será suyo.
No pensé que ese traje se hubiera originado en la serie animada, por eso de que también lo usa en los cómics