Hace no mucho Liam Sharp, un tipo con más de veinte años de carrera profesional en la que ha realizado genialidades como su Man Thing con JM DeMatteis y que recientemente explotó en popularidad gracias a su Wonder Woman con Greg Rucka, se preguntaba por qué su miniserie de Black Label de Batman -Batman: Reptilian- junto a Garth Ennis no había tenido ni la mitad de repercusión que cualquiera de sus otros trabajos recientes, incluido un proyecto personal sobre los mitos artúricos que no contaba con la maquinaria publicitaria de DC. No se lo explicaba, era Batman, era Ennis, era él… Y na de ná.
Algunos intentaron darle una explicación basada en los contenidos del cómic, que muestran un Batman algo pasada de vueltas y hasta algo prepotente, pero lo cierto es que esa «indiferencia» no se da entre los que han leído el cómic, por lo que esa explicación no tiene sentido. Lo que sí que está pasando es que en el mes en el que salió Batman Reptilian DC sacó la friolera de 24 cómics de Batman o relacionados con él como Nightwing, Harley Quinn, Joker, Urban Legends y demás, lo cual constituye más de una tercera parte de los cómics que sacó DC al mercado aquel mes. Por supuesto, muchos de estos cómics pasaron más desapercibidos que el propio Reptilian, pero uno de ellos es la continuación «apócrifa» del Batman de Tom King y el otro que llama la atención, el que arrasó verdaderamente en ventas, es Batman Fornite, que es un crossover del murciélago con el videojuego multijugador de Epic Games que tan loca esta volviendo a la chavelería y que en en las páginas del cómic incluía un código promocional para el videojuego de marras, con lo que el cómic salió turbodopadísimo y en cero coma llenó las «bargain bins» porque ya sabes, una vez usas el código el tebeo ya no vale de nada.
Pero claro, lo de Fornite o lo de King puede que le hayan robado «popularidad», pero no debería haberlo hecho entre los lectores habituales más que el Batman de Tynion, por un poner. Así que sí, lo que debe de haber pasado es que tal vez a DC se le fue la mano haciendo que casi una cuarta parte de los cómics que saca al mercado sean o estén relacionados con Batman, con lo que hacer un proyecto de Batman tengas el nombre que tengas es algo que ya nos tiene saturados. Eso o que hay proyectos que directamente ya no nos llaman para seguirlos mes a mes, que preferimos esperar al tomo recopilatorio, y hay que reconocer que Reptilian -y la mayor parte de los cómics de Black Label, para que negarlo- invitan mucho a eso, porque al estar fuera de continuidad no tienes ese impulso de querer «estar al día». Aun así también hay que tener en cuenta que Garth Ennis es un gran guionista, uno de nuestros favoritos y leeremos todo lo que escribe, pero también hay que reconocer que su historial con los superhéroes, Demon y Hitman aparte, nunca ha sido precisamente un superventas, y hasta hay un sector del fandom que lo detesta porque suele hacerle cosas malas a sus personajes favoritos (y si no mirad su trabajo con Steve Dillon en las desventuras de Frank Castle o la miniserie Vikings que hizo sobre Thor, menuda mala leche que gasta el tío).
Pero dejando de lado los desajustes batmanianos de DC, es triste que Reptilian no haya tenido más repercusión, vaya que sí. Porque es un tebeo que merece mucho la pena, porque es un guión que Ennis escribió pensando en su amigo Steve Dillon y porque la dedicatoria de Sharp en el primer número es precisamente a él, que no pudo dibujarlo porque nos dejó demasiado pronto. Y es que Reptilian es un tebeo intenso en diálogos, algo que el londinense dibujaba como nadie y de los que siempre sacaba petróleo allí donde otros tenían que inventarse complicadísimas distribuciones de página para no aburrir al lector. Para Dillon y Ennis hacer un cómic entero con una conversación en la barra de un bar era su zona de confort, y así es como consiguieron hacer un cómic entero en la cabina de un camión sin que absolutamente nadie notara algo raro. Y mucho de eso se ve a ratos en Reptilian, en un guión que se ve adaptado a Sharp y que el dibujante consigue solventar marcando su estilo, demostrando su personalidad y llevándolo a su terreno, ni mejor ni peor, simplemente distinto.
Así, Sharp busca un estilo más caricaturesco, más expresivo del que usó en sus trabajos más comerciales como Wonder Woman o Green Lantern y vuelve a un estilo más «británico», con personajes más deformados y exagerados que sirven mucho mejor a la historia que se está contando y hasta más auténticos con el estilo de Sharp, tan influenciado por sus raíces de 2000AD y Simon Bisley. Y es que al final este cómic nos muestra un Batman excesivo, con un sentido del humor bastante cafre y que a cada rato parece estar harto de su trabajo, que necesita unas vacaciones, moviéndose por Gotham haciendo exclusivamente trabajo de detective -que buena falta nos hacen historias de Batman siendo un detective, manda narices- mientras un monstruo va destrozando a dentelladas y zarpazos a toda la galería de villanos de Gotham.
Así, veremos la hermosa relación entre Batman y un Alfred que no se corta un pelo en decir lo que piensa -como debe ser-, confidentes aterrorizados por Batman mediante deliciosas torturas psicológicas basadas en el concepto de que Batman «no mata», chistes de rico sobre los pobres, chistes de pobres sobre los ricos y, en general, ese sentido del humor cafre de Garth Ennis aplicado a Gotham en una historia que, si bien entiendo que no entre en continuidad, es más auténtica al personaje que el millón de cómics con el que nos han bombardeado durante los últimos años con Gotham siendo destruida y Batman corriendo de un lado a otro como pollo sin cabeza y destrozándose los nudillos contra absolutamente todo; en los cuatro números (de seis) publicados hasta ahora, no haber visto a Batman pegar un solo puñetazo, solo hablar, interrogar y conducir. Y sentarse, aunque a algunos eso les parezca terrible.
En definitiva, Batman Reptilian es un tebeo de Batman que bajo un envoltorio británico y con muy mala leche, encierra el tebeo de Batman más auténtico que uno se pueda echar a la cara ahora mismo, con lo que si los lectores se vuelven locos entre tanto título de Batman para elegir «el bueno», lo mejor que pueden hacer es optar por Reptilian, porque ése si que es el bueno.
«Genialidades como el Man-Thing junto a J.M. De Matteis»….lo mismo pensaba yo , así lo recordaba, hasta que hace muy poco decidí releerlo y me pareció un tostón insufrible ?
En lo demás del articulo estoy totalmente de acuerdo
No me des esos sustos que todavía es lunes!
por desgracia la forma britanica esta muy sobre exploytada en este lado del charco y es muy cansado si contamos que nos resetaron desde hace cinco años hasta la fecha todo lo britanico incluido un mamotreto de las guerras mystech de marvel UK y por desgracia lei el Man-Thing y es bueno tirandole a regular a leer solo en caso de visita de la tía….
Pues sí.
Es que la explotacion de Batman es una exageración. Y tambien un problema a largo plazo, porque al final no tienes un Batman en continuidad, si no tres o cuatro simultaneamente dependiendo del autor y la serie. Ya no hablo de elseworlds. Es lo que me ha alejado progresivamente del personaje.
Y sí. El Joker es tan cansino para Batman que esa debería ser su actitud hacia él. El Joker solo busca atraer la atención. Pasar de él sería la verdadera solución al problema.
Y luego Batman como Detective. Que haya gente que no entienda que esa es la verdadera caracteristica fundamental del personaje. Que escuchen a Ra’s al ghul dirigiendose a Batman.
Sobre Ennis yo me sorprendo de que alguien así pueda estar medio enterrado. En el sentido de que un comic suyo debería ser el aliciente principal para comprar un cómic y parece que no.
De Ennis tenemos que hablar un día de su Marjorie Finnegan, que es un tebeo la mar de cachondo que todavía me extraña que M’Rabo no haya hecho un post sobre él. En fin, supongo que está demasiado ocupado con otras cosas…
Batman detective…¿alguna vez veremos reeditado el Batman de los 70/principios de los 80? Yo todavía conservo mis tebeos de Novaro y de Bruguera…
Yo lo que no entiendo es como estando el de Grant y el de Moench se empeñen en reeditar el de Starlin, que es pura morralla. Morralla efectista, pero morralla.
Bueno, creo que Starlin era el guionista y dibujante de historias como la del gorila blanco ladrón de cuerpos (hablo de memoria, a lo mejor meto la gamba). No tengo mal recuerdo, aunque tal vez me puede la nostalgia.
La mayor parte de la etapa de Starlin ha envejecido muy mal, y teniendo en cuenta que ya en su día era un pelín peculiar, no te digo ya.
Es que el monocultivo de murciélago por parte de DC es agotador, y tiene como resultado que obras válidas queden ocultas en medio de una oferta tan desmesurada.
Siempre me ha hecho gracia que la justificación para la superior popularidad de Batman sea su carácter supuestamente realista en relación con los demás superhéroes: efectivamente, pocas cosas habrá más realistas que un multimillonario que sale por las noches disfrazado de murciélago acompañado por un adolescente en mallas a pelearse por los tejados con payasos y mujeres-gato.
Y otra derivada es que incluso en productos audiovisuales teóricamente ajenos al Cruzado de la Capa terminan adaptando sus cómics en lugar de los que tocarían. Ya lo vimos hace años con Ra’s al Ghul convertido en villano de Arrow, y recientemente la última temporada de Titans se ha dedicado a adaptar la Muerte en la Familia y Capucha Roja, y al Espantapájaros como gran villano, porque para qué recurrir a las historias que convirtieron a los Titanes en un cómic de referencia, si puedes contar otra historia de Batman.
Y a la vez te das cuenta de que si puedes sustituir a Batman por otros personajes y la historia te queda igual, lo mismo Batman no es un personaje tan único y genial… Que ojo, a mí me gusta Batman, pero me gusta el Batman que piensa, ése que no se puede sustituir por copias suyas como Green Arrow.
Por eso me parece tan interesante Reptilian, porque es el Batman que investiga, que interroga aterrorizando al personal y demás, tirando del carácter único del personaje y no cayendo exclusivamente en los puñetazos de siempre.
es un poco triste que, quizá por culpa de la cultura de tomos «grandes obras» la gente sólo recuerda cuatro historias (memorables, eso sí) y sólo saben hablar de Batman Año Uno, Broma Asesina y demás. Es como si dijeran un poco que lo demás es morralla… Como si Englehart, O’Neil, Grant, Rucka y otros no hubieran dejado obras excelentes a su paso. Ese tanto leerse tomos en lugar de colecciones hace ese daño, a mi entender.
También hay que decir que como la gente que ve las series de TV no suele conocer las historias originales, los guionistas pueden tirar de grandes sagas sin que se note tanto.
Lo peor de todo es que Año Uno eran números de la serie regular, pero a estas alturas casi todos lo han conocido como un tomo independiente…
no es una novela grafica???
Novela ilustrada, que decía algún tarao de From Hell…
Tan realista es un hombre sin amor propio, que sólo vive de impartir justicia, hazme el favor. Por creencias erróneas como ésta, es que el cine le ha hecho muchísimo daño a Batman. De seguro va a ser más de lo mismo cuando sea 4 de Marzo: otra tergiversación del personaje.
Bueno, no creo llegar a leer Reptilian, dado que no tengo demasiado estómago para leer algo de Garth Ennis. Sin embargo, quisiera recalcar algo con respecto a la sobreexplotación de Batman.
Yo siento, considero, que si estamos expuestos a tanto tebeo de Batman, más que años atrás, desde el año pasado, es porque DC no está teniendo buena racha comercial y creativamente hablando. De ventitantos cómics, casi ninguno es recomendable porque no saben más qué hacer con el personaje hoy en día, excepto usarlo como su puta para sacar dinero a sus más ingenuos clientes. Eso, y el hecho de que Batman está absolutamente irreconocible, siendo más un bully con problemas mentales que el detective calmado y estoico de antaño.
Esto lo escribo como fan de Batman desde la serie animada, que ha seguido sus proezas lo mejor que ha podido. Pero ahora esos tiempos han quedado muy atrás, y no tengo de otra que aceptarlo.
Yo quiero disfrutar del personaje, pero gracias a guionistas como Scott Snyder o Tom King, esto no es posible, por lo que seguiré enfocándome en conprar cómics antes de New 52.
A mí Ennis me gusta, pero entiendo que para ciertas sensibilidades cosillas como las partes escabrosas de Predicador les eche para atrás. No digo ya si has leído Crossed, que eso ya es gore y casquería sin ningún control que la verdad, no está al nivel de Ennis como guionista. Pero si puedes leer sus War Stories échales un vistazo, son de los mejores cómics de guerra que te puedas echar a la cara, a veces da la sensación de que si fuera por Ennis se pasaría el día escribiendo cómics de guerra y de gente hablando en un bar.
Y de Batman ahora mismo, aparte de Reptilian, está el Adventures Continue de Dini y Burnett, que es lo más parecido a una temporada nueva de la serie animada que te puedas echar a la cara. Que, ya que estamos, puestos a hacer un revival noventero habría sido mejor eso que ciertos mutantes…
Quizás habría que añadir aquí «Furia, mi guerra privada», una serie que pasó muy desapercibida en su momento (posiblemente por ser publicada en los estertores del Nick Fury blanco)
Pues a mi me tiene saturado hace rato de Batman y si apenas me llama la a tencion algo con el de protagonista o relacionado al universo gothamita. No se como estaran los otros lectores porque siempre hay un sector que se queja de este exceso, pero al final siempre vende, asi qeu, beu, razones habra, se explica uno.
En cuanto a lo de Reptilian, supongo que es extraño que un producto asi pase deapercibido o quizas en el formato tomo recupere. Quien sabe. Pero si es cierto que Ennis demuestra constantemente un desden por todos los superheroes y por el genero en general, excepto, paradojicamente, contra Superman.
Es que Ennis no odia a los superhéroes, detesta ciertas cosas en concreto; como lo de poner a superhéroes combatiendo en la Segunda Guerra Mundial, porque eso lo ve como una falta de respeto a la gente que sí que luchó esa guerra. O los superhéroes «del establishment», esos que dicen que el orden establecido es el correcto y todo debe de seguir como está aunque haya gente muy perjudicada por ello. Pero el Superman de Ennis es un buen tipo que hace lo que puede, no es el Weisingeriano, con lo que a Ennis le parece más interesante que el superhéroe medio que lo único que hace es cazar cacos y lamentarse por su vida personal.