Para terminar la semana voy a hacer doblete y a hablar de otro libro de ciencia-ficción algo atípico y que me he leído en un suspiro sin parar de reír. Un libro que me resistía un poco a calificar como de ciencia-ficción ya que el uso que hace del genero su autor es poco mas que una excusa para mostrarnos la realidad descarnada de su Barcelona natal a través de los ojos de un peculiar visitante. Pero al final esto de las etiquetas no deja de ser una tontería y lo realmente importante es que el Sin Noticias de Gurb de Eduardo Mendoza es un libro divertidisimo y con mucha mala leche que todo el mundo debería leer.
Barcelona, comienzos de la década de los noventa. La ciudad se esta preparando de forma intensiva para la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992 aunque ello suponga ponerla patas arriba. Y es justo en ese preciso instante cuando dos visitantes de las estrellas deciden aterrizar allí para investigar los usos y costumbres de la raza humana. ¿Pero que sucede cuando el explorador, tras adoptar la forma de Marta Sánchez, desaparece sin dejar ni rastro? ¿Como se las arreglara su Comandante para localizarle en una ciudad poblada por miles de habitantes estrafalarios y que actúan sin sentido alguno?
De este libro recuerdo vagamente que Diógenes me lo había recomendado hace muchísimo tiempo pero era otra de esas cosas que por distintas razones había ido posponiendo su lectura (hay tantas cosas que hacer, ver y leer…) Un retraso al que puse fin esta semana tras leérmelo prácticamente de un tirón y soltando mas de una carcajada durante su lectura (que no se diga que Diógenes a veces sirve para algo). Y es que con su narración a modo de diario y utilizando el socorrido recurso en la ficción de mostrarnos una realidad cotidiana a través de los ojos de un extraño, Eduardo Mendoza pone en primer plano a un “turista” mas extraño y ajeno de lo habitual para realizar una disección sin piedad y con mucho humor de la sociedad Barcelonesa de la época.
A través de los ojos (o lo que sea que utilice en ese momento para ver) de este peculiar alienigena sin nombre dotado de habilidades tan extraordinarias como absurdas, Mendoza va dando un repaso con bastante mala leche a la situación de la ciudad en aquellos años salpicada de obras y zanjas por todas partes y habitada por una peculiar fauna de costumbres tan extrañas como las de empeñarse en ser pobres pudiendo ser ricos. Una ciudad y habitantes que a nuestro protagonista le parecen de lo mas estrafalarios, pero que sin embargo, y sin pretenderlo, se va asimilando cada vez mas a esa humanidad a la que tan poco entiende pero que tanto le fascina.
Tengo que reconocer que pocas veces me he reído tanto con un libro como me ha sucedido con Sin Noticias de Gurb, un libro que se hace terriblemente corto (dos días me ha durado) pero cuya lectura vale muchísimo la pena. Ahora por mi parte lo que me va a tocar es echarle un ojo al resto de la bibliografía de Eduardo Mendoza, que este libro me ha dejado con ganas de mas.
Me lo leí hace muchisimos años.
Está emparentado con Makinavaja en el sentido de que son las preolimpiadas, la transformación de los barrios de mala muerte en una ciudad «europea» y los avisos de la lluvia de corrupción que venía.
Ojito, que se entiende en buena medida todo lo que pasa en Cataluña hoy en día leyendo ambos.
El advenimiento al poder de toda una generación de trepas, que presumían de modernos mientras hacían lo más conservador de la Historia: medrar a costa de otros.
Zattanasay , totalmente de acuerdo con tu visión de las historias del Maki. Yo me acuerdo de esa de «abuelo ¡¡ no se siente usted en esa estatua!!!, – que no es una estatua , es un banco nuevo de diseño que ha puesto el alcalde» Yo visité por primera vez Barcelona en fechas post-olímpicas, 1995, y siempre me quedó pena de no haber conocido la Barcelona pre-olímpica que mostraba Ivá en sus historietas, mas canalla , pero ni peor ni mejor que la posterior, solo distinta.
Sobre Ivá ,todo un personaje, también circulan grandes historias, como la de que para adelgazar se pateaba con el perro las Ramblas parriba y pabajo, autoboicoteándose al entrar en todos los bares de tapas. ¿ Que opinaría él de la Barcelona actual invadida de guiris , gentryficada , cada vez mas llena de viviendas de alquiler vacacional, etc… ? ¿ y del ascenso del independentismo , o la emergencia de nuevos partidos de todo signo como Podemos, Vox, etc…? Su forma de mostrarnos esto seguro que no tenía desperdicio , aunque dudo que los estúpidos ofendiditos de piel fina actuales pudieran asimilar su humor. Le saldrían denuncias por todos lados , contatación de lo inmenso que era.
Sobre Eduardo Mendoza, te recomendaría también El Misterio de la Cripta Embrujada ( que título mas EC Comics) o El Laberinto de las Aceitunas. Con ambos reiras a mandibula batiente.
Que Ivá muriese tan joven fue una tragedia.
Lo que podía dar de si hoy en día, con este reinado de la mediocridad y del egoismo. Estamos viviendo en lo que hace unos años era una parodia del futuro.
Los humoristas no parodiaban el futuro. ¡¡¡Lo pronosticaban!!!
que razón tienes, madre mía
Otro que se lo leyó hace la tira, tanto que quizá me valdría la pena volverlo a leer porque no recuerdo a penas nada del libro, sólo su estilo y que me reí con él. Igual le doy una oportunidad por lo rápido que se leía.
Yo cuando estoy tristón me leo o el de las aceitunas, el de la cripta embrujada, o el lazarillo. Según el tiempo que tenga, elijo no de los tres. Me suena que del «heroe» de la cripta embrujada hace poco sacó otro libro, pero no recuerdo el título. ¿el tocador de señoras? ¿ponponio flato? Pero no sé por qué, los dos primeros son los que mas me gustan.
Pomponio Flato no, porque transcurre en la antigüedad, pero es muy legible también.
Otro libro que me hace reir siempre , lo abra por la página que sea, es «La Conjura de Los Necios» . La parte en la que Ignatius Reilly imagina como sería su propio entierro es desternillante.
Creo que Mendoza es el único escritor cuyos libros no puedo leer en lugares públicos, porque consigue que me parta de risa incontrolablemente. En el caso de Gurb muchos años después todavía recuerdo el descacharrante análisis que el protagonista hace de una novela de Agatha Christie.
También es muy divertido La Aventura del Tocador de Señoras, donde el protagonista se alegra de que en su caso no fuera cierto eso de que al estar a punto de morir pase tu vida delante de tus ojos, «porque bastante malo es morirse, para encima tener que morirse viendo cine español.»
Me encanto este libro , el libro tiene algunas frases geniales (como casi todos los de Mendoza )