Pues con el nuevo año volvemos a tener parejas las dos series «de Star Trek» que combatieron por nuestro corazoncito el año pasado, por un lado The Orville y por el otro la auténtica, Star Trek Discovery. Ya sé que sólo al leer eso último más de uno está echando espumarajos por la boca, pero vistas las reacciones al estreno de la segunda temporada de esta última serie parece que los ánimos se están calmando. Pero seguro que hay excepciones, así que vamos a repasar un poco a santo de qué viene esta guerra y de paso los indecisos podéis haceros una idea de que coincide más con vuestros gustos.
Star Trek como tal es una serie de televisión de los años 60 y cuyo periodo de mayor efervescencia probablemente entre los 80 y 90, cuando la franquicia tenía presencia tanto en los cines como en televisión con dos series de televisión simultáneas. Su última aparición por la pequeña pantalla sería en 2005 con la última temporada de Star Trek Enterprise. Así, la evolución desde la serie original de Star Trek hasta Enterprise nos sirve para ver como se ha desarrollado la ficción serializada durante los últimos cincuenta años, partiendo de series basadas en episodios autoconclusivos a lo que ya teníamos en Enterprise, con conflictos concretos en cada episodio pero manteniendo una trama a largo plazo que se desarrollaba a lo largo de la temporada. Y es precisamente este modelo el que adopta Discovery, con una continuidad incluso más fuerte que la de Enterprise que no acababa de convencer en ninguno de los dos casos a los fans más ortodoxos de la serie, que parecían considerar que el modelo de episodios autoconclusivos de la serie original o, si acaso, el de La Nueva Generación con una continuidad y evolución constante pero con tramas principales que nunca superaban los tres o cuatro capítulos era el correcto. Y en estas tenemos a The Orville.
The Orville es una serie de Seth McFarlane que empezó a dar forma cuando intentaba conseguir que le dejaran crear una nueva serie de Star Trek. The Orville es muy muy parecida a lo que ofertaban series como Voyager o Next Generation, con una temática basada en explorar las peculiaridades de cada uno de los miembros de la tripulación de la nave, las relaciones entre distintas razas alienígenas y su evolución personal, todo ello mediante episodios autoconclusivos con conflictos que en apariencia se resuelven en el episodio en el que se plantean pero que en muchas ocasiones siguen en los siguientes, aunque no siempre en primer plano. Además, en The Orville se trabaja mucho más en plató y los efectos digitales son menos intensivos, con lo que, dejando de lado que sus efectos especiales se benefician de los avances de los últimos veinte años, no se puede negar que visualmente recuerda mucho a las ya mencionadas series de Star Trek. Eso sí, tened claro que no se parece mucho a Deep Space 9 o Enterprise, porque en ellas la iluminación trabajaba más el claroscuro y se trataba de buscar una textura distinta a la habitual en la serie.
Y así es como tenemos que si Enterprise intentaba evolucionar a algo nuevo buscando una iluminación más dramática y menos uniforme, es lógico que Star Trek Discovery siguiera buscando esa evolución y tratara de alejarse del remake peliculero de JJ Abrams, basado en lucecitas por todos lados que habían horrorizado al fandom. Discovery usa y abusa de los efectos digitales, de la corrección de color, de las pantallas azules, en definitiva, Discovery es una serie de alto presupuesto tratando de aportarle a Star Trek los avances de los últimos quince años, con lo que probablemente en su estética haya espantado a la ortodoxia trekkie más de lo debido, que ha preferido volcarse en aquella supuesta comedia espacial que gritaba desesperadamente que quería ser Star Trek a pesar de no tener la licencia. Si sumamos a todo esto que en Discovery el protagonismo lo tiene un personaje que no es el capitán de la nave y para colmo en su primera temporada se sitúa en mitad de un conflicto bélico de primera maginitud, pues normal que los fans más intransigentes se rebotaran, porque a fin de cuentas estamos hablando de que la idea fundamental del creador de Star Trek era la de mostrar en televisión las bondades de una utopía espacial. Pero vamos a dejar a los trekkies en paz que se peleen y vamos con lo nuestro, ¿cuál de las dos series merece más la pena?
Pues Discovery, de eso no tengo ninguna duda. Puede que rompa algunos dogmas de Star Trek, pero no deja de ser una serie más madura y con una idea más clara de a dónde quiere ir a parar que The Orville. Cierto es que al contar con una continuidad más fuerte, Discovery puede hacer que las relaciones entre los personajes sean más dramáticas y el cargárselos nos llegue más a la patata, mientras que el formato de The Orville, que a ratos no sabe si quiere ser Galaxy Quest o la serie original de Star Trek, hace que la despedida de un personaje de la serie se nos antoje algo raro o hasta irrelevante, a pesar de que la serie intente por todos los medios hacérnoslo sentir; con una hora de película puedes contarme quién es Spock, que siente hacia sus amigos y hacernos sentir la muerte al final de la misma, pero si durante quince episodios de una serie te limitas a contar que es un tipo con orejas peculiares y poco más, su despedida no será ni la mitad de dramática de lo que debiera.
Asi que sí, a The Orville le falta un hervor, y aunque de vez en cuando te regale alguna escena entretenida o tiene algún giro interesante -esa novia del capitán- le falta todavía mucho que demostrar, mientras que Discovery arranca ya su segunda temporada con la ventaja de tener los deberes hechos y de que ahora si que puede tirar de fan service de la franquicia y hacer referencias directas a personajes como Spock o la propia Enterprise, con lo que pueden hacer que poco a poco muchos vuelvan al redil. Sin embargo -y esto es lo preocupante- no parece que las tenga todas consigo, porque como toda franquicia excesivamente mimada está sometida en el plano artístico a los tiras y aflojas entre ejecutivos y productora, llevando ya dos cambios de showrunner entre las dos temporadas, con lo que uno nunca sabe que se va a encontrar para la temporada siguiente. De momento las sensaciones son buenas, así que por mi parte seguiré viendo las dos y ya nos veremos a final de temporada para un repaso con más detalle.
Orville a lo mejor tiene buenas cosas, pero es que los trekkies profundos… buf. Se han puesto tan plasta que he acabado cogiendola manía.
Ah, y que Jason Isaacs no ganase ningún Emmy el año pasado es una vergüenza para el sindicato
A mi con los fandoms perturbados me pasaba algo parecido con el Undertale, con la diferencia de que el juego en sí tampoco era gran cosa.
gran artículo! un placer leer sobre mi pasión st (y boca jrs). pero antes de dar mi opinión dire: el enterprise-e no aparece en generaciones una muy buena decisión para darle un digno funeral al viejo y querido d y además es el escenario principal de una de las mejores pelis trek first contact (y no pienso que sea horrible sino que se parece muy mucho al voyager preguntándome si no han reutilizado una maqueta). como fan total y viejo de la saga creo que discovery es un cascarón vacío con buenas y malas ideas por igual. el gran error de la serie es haberse metido en un momento de la cronología bastante picante (unos 10 años antes de tos tal vez ahora de memoria no lo tengo claro) si la hubieran colocado 10 años dp de nemsis en 60 por ciento de las criticas no hubiera sido tales. lo de la hna de Spock es urticante pero recomiendo ver «torre de babel» donde kirk y Maccoy se enteran in situ y en el momento del parentesco de Spock y de la dudosamente canónica st 5 donde ocurre lo mismo con un hermanastro. o sea para mí hay explicación para cosas fuera de continuidad yo soy un lector de pijameros de toda la vida entrenado para rellenar huecos (creci con saldos de otro país que no eran fáciles de conseguir en una época pre internet) no nos olvidemos de la guerra fría temporal o los viajes en el tiempo de las numerosas series trek, enterprise es fruto de la contaminación temporal de first contact. lo único que no puedo tolerar es el horripilante maquillaje de los klingon pero parece que está temporada lo van a arreglar (mochila que tuvieron que soportar los productores pero fue consecuencia de los problemas legales de la separación entre la paramount y la CBS que ya se destrabo) saludos!!!
Yo es que detesto la E porque me encanta la peculiaridad del diseño de la original, y esa tendencia de «aplanar» tanto la sección de propulsión me saca mucho de quicio. Creo que son naves que tienen su propia identidad y una silueta muy particular, y para mí una nave que se llame enterprise tiene que tener algo más que un platillo muy grande. Y eso por no hablar de lo muchísimo que recargaron el platillo, madre mía!
Sobre Discovery… Yo es que he visto a la gente cabreadísima con ella, y lo puedo entender cuando me hablan de Michael como un pegote, pero a la vez tenemos que ser conscientes de lo que tu mismo dices, en Star Trek V le endosaron un hermano iluminado a Spock sin venir a cuento y perpetraron una de las peores películas de la serie. Michael es hermana adoptiva, puede morir perfectamente antes de TOS y realmente se las han ido apañando para justificar su existencia. No sé, es que estoy de acuerdo contigo, cualquier lector de superhéroes ha tenido que hacer esfuerzos bastante mayores de suspensión de la incredulidad.
Pero vamos, que ahora vamos a tener klingons peludos, uniformes de la federación con colorines y naves «limpias», así que poco a poco parece que Discovery se va a ir transformando en TOS.
Y nosotros que lo vamos a disfrutar.
Yo me lo paso genial con las dos, pero estoy muy hartito de los haters de Discovery y que endiosan Orville como auténtica heredera. Porque tengo clarísimo que si Orville llevara el nombre de Star Trek delante se estarían cagando en ella quejándose del humor, a lo UCM.
O los que se cagan en todo lo que está haciendo Disney con Star Wars y ni siquiera se han molestado en ver Rebels.
Un día de estos tengo que hacer un post sobre como es esto de amargarse leyendo tebeos, viendo películas y demás, porque da para un doctorado.
pero es que en el episodio de TOS «torre de babel» de dorothy fontana junto con rodenberry y gene l coon los tres mejores escritores de TOS kirk y maccoy por lejos las personas más cercanas a el se enteran en el momento de recibir a sarek que es el padre de Spock con lo que tranquilamente podría no hablar de la hermanastra humana que no soportaba de niño (ahora si son ciertos los rumores de algún romance juvenil seria una aberracion de otro color) no encajaría con ‘yesterdar’ de la serie animada (de la propia fontana) pero tranquilamente los topetazos por los sucesivos viajes temporales le dieron una hermana adoptiva a Spock (ahi les regaló un buen argumento para la serie) al estilo de lo que hicieron con el sexo del hijo de díggle en arrow y el flashpoint. lo de la tecnología creo que la explicación es que discovery usa tecnología altamente peligrosa y experimental algo que se deja entrever en la primer temporada y ahora parece que lo van a dejar claro como esos comentarios de pike y su gente asombrados del discovery. cuando empecé a reever enterprise gracias a Netflix (en Argentina la pasaron muy mal en cable en su momento) me paso lo mismo que con disco, que más tecnologia que con kirk etc pero la serie se encarriló. al final la tan criticada guerra fría temporal de Brannon braga les va servir a akiva goldman tb
Lo de la explicación de la «involución» tecnológica es maravilloso, de hecho mucha de la gracia del género de la ciencia ficción viene de inventarse tecnología pasada de vueltas y ver como reacciona el ser humano ante ello, una de las mejores partes de Discovery fue precisamente toda la subtrama de los tardígrados y como llegan a la conclusión de que seguir explotando esa tecnología es un puto peligro ya no solo para la galaxia, si no tal vez para el universo entero.