Llegados al número 5 del volumen 2 de Fantastic Four, me toca hablaros de John Byrne. Porque podría hacer lo de siempre y dar por supuesto que todos habéis leído su etapa, pero cuando estamos hablando de un cómic como el que nos traemos entre manos en el que tiene más influencia Byrne que Kirby, pues como que nos toca echar la vista atrás y releer el número 258 de Fantastic Four «Interlude», el que sería mi número favorito de la serie si no fuera por Walter Simonson, ¡y mira que me he puesto veces pesado con Kirby, oiga!
«Interludio» es uno de los perros verdes de la serie original, porque está protagonizado por completo por el Doctor Muerte. No hay Reed Richards, no hay pelea contra nadie, nada de nada. Es Victor Von Doom en su rutina diaria, dándose una ducha, desayunando, gobernando y planeando como vengarse del maldito Reed Richards. La aparente sencillez de un guión casi costumbrista -o sin casi- supone un retrato psicológico del personaje, de su famosa «honorabilidad», de su crueldad y de toda la genialidad que encerraba el villano más importante del Universo Marvel. Hay en este cómic varias viñetas que se convierten en referencias a la hora de retratar al personaje, dejando claro que cualquier autor a posteriori tendría que contar con la visión de Byrne y no solo con la de Stan Lee y Jack Kirby. Pero volvamos a Jim Lee…
Imagino que éste es el cómic al que le tenía más ganas de dibujar; no en vano todas las tramas de la serie hasta ese momento confluyen y es la presentación final de su Doctor Muerte, que hasta entonces sólo ha sido dibujado «en sombras» y que hasta ese momento ha tenido un diseño bastante basado en el original de Kirby con las «ventanas» de los ojos rectas. Lee toma como referencia el diseño de Byrne y le añade «ventanas redondeadas», exagerando el diseño de «cejas rotas» del canadiense sin ser consciente de que eso le quita bastante más expresividad y agresividad a su mirada; la mezcla de curvas y rectas es mucho más violenta que una basada en sólo curvas, por mucho que hagas más hincapié en lo desfiguradísimo del rostro de Victor al añadirle tiras de piel tapándole los ojos. Puaj. Pero vayamos al cómic en sí…
Lo habíamos dejado en que Ben y Johnny cazaban a un intruso en el Baxter que resultaba ser nada más y nada menos que Wyatt Wingfoot con barba, el cual tras una escena de barbería muy FF#4 revela que el Wyatt que trabaja para Muerte es un impostor, un doppelganger, un falso traicionero que ha tomado su lugar. Cualquiera que haya leído los 4F originales y sepa que omitieron para el número 2 ya sabe que es lo que está pasando, pero por si hay despistados que no han leído el cómic voy a callarme de momento. La cuestión es que mientras tanto Reed, Sue y T’Challa -ése que lo ha petado con su peli más que el resto de personajes de la serie juntos, sigh- se encuentran de morros con el Doctor Muerte, que empieza a vacilar de lo listo que es y esas cosas. Así que para no aburrirse demasiado y aburrirnos a nosotros, Reed Richards decide que es buen momento para darnos una dosis de exposición y contarnos que relación tiene con ese tal Victor Von Doom.
Aqui Lee nos vuelve a contar el origen de Lee y Kirby pero aprovecha para colarnos algo de su invención, los «Caballeros Atómicos de la Tabla Redonda», un club universitario formado por Tony Stark, Hank Pym, Bruce Banner, un fulano que se inventó para su Iron Man, Reed Richards y Victor Von Muerte. Todos ellos eran amigos y compartían un proyecto científico de exotraje, una armadura de combate a lo Iron Man/Doctor Muerte que Jim Lee aprovecha para colarnos y hacer el universo Marvel mucho más pequeño. Muerte sigue siendo el tonto arrogante del original y, desoyendo las advertencias de Reed, vuelve a estallarle un experimento en la cara y exiliarse por el Tibet, pero en esta ocasión el origen pierde algo de la tragedia inventada a posteriori porque se quita por completo la parte de que el hombre estaba intentando liberar a su madre del infierno, y en este caso sólo es un flipao que se pone cabezón por probar un traje que todo el mundo dice que le va a explotar en la cara.
Después de la exposición, Muerte decide enseñarles el pollo que tiene montado y se remonta directamente a una historia del número sesenta y algo de la serie original, porque tiene atado como un salchichón al pobre Estela Plateada y le está sacando todo su poder cósmico con sus trastos tecnológicos. Reed le afea lo que le ha hecho al pobre señor alienígena pero a Victor le trae sin cuidado, y le exige que le revele todo lo que sabe sobre rayos cósmicos y conseguir poderes con ellos y esas cosas porque claro, tiene pensado doparse con ellos y por muy feo que sea no es cuestión convertirse en un saco de rocas naranja. Y entonces empiezan las tortas y T’Challa aprovecha para escaparse y jugar a John McClane mientras Muerte y el falso Wyatt reducen a Reed y Sue, obligando al primero a trabajar para ellos porque si no matan a la chica rehén. Y no lo manda al pasado a buscarle el tesoro de Barbanegra porque no le apetece.
Mientras tanto Ben, Johnny y el «auténtico» Wyatt -que el auténtico estaba en el 616 y este solo es la copia de Heroes Reborn, pero ya me entendéis- se ponen a invadir Latveria e invadir muertebots hasta que consiguen cruzarse con Pantera Negra, que los dirige hasta el laboratorio de Muerte para que volvamos a tener tortas. Y aunque Reed ya tenía lista la máquina de dopajes cósmicos, Muerte prefiere pegarse con ellos mientras el señor fantástico libera a la futura señora fantástica, momento que el falso-falso Wyatt Wingfoot aprovecha para meterse en la máquina y meterse un chute cósmico que hace que pase de ser un simple agente skrull -¡si no lo veías venir es que debes de ser fan de DeFalco!- a convertirse en un Super Skrull. Y fin.
Ya habéis visto como en los pies de foto he aprovechado para mostraros todos los homenajes de Lee a Byrne,pero me gustaría decir que aunque en muchas ocasiones la caga en estas copias y devalúa el original, repito lo que he dicho hasta ahora con todos los homenajes a Kirby, el conjunto mejora su trabajo. Probablemente este sea el mejor cómic que ha hecho Jim Lee en su vida, y todo a pesar de que se le ve más apresurado en el dibujo. Hay muy pocos momentos en los que se le vaya la olla y pierda el tiempo con tonterías y, aunque seguimos viendo diálogos completamente vacíos, la verdad es que se podría decir que es un cómic divertido para todo el que no haya leído el original de Byrne. Para los que si lo han hecho, sólo decir que el cómic no ha envejedico nada en treinta y cinco años, y que es más que recomendable. Para los demás, sólo deciros que la semana que viene hablaremos del último número dibujado por Jim Lee en Heroes Reborn y el último número de esta serie de artículos, que su sustituto será Brett Booth y no tengo yo el cuerpo para tantos disgustos.
Hay que decirlo una y mil veces: los 4F de Byrne son una puñetera OBRA MAESTRA. Al menos hasta el juicio de Reed Richards. El señor John Byrne estaba en su cenit creativo, tanto en dibujo como en guión, regalándonos historias y números WTF así de pronto y sin avisar como éste, el de la llegada de Ego, el de Secret Wars II… Hay que ser niño/adolescente (o volver a serlo) para que te caiga en las manos mes a mes un nuevo número de estos 4F y flipes… Este señor hizo historia haciendo el auténtico manual del Back to the Basics perfecto.
Si es que es recordar el momento en que Annihilus llega al Edificio Baxter y hace lo que hace y… quizá nunca en mi vida un cómic me ha provocado tantas emociones… es sentir un shock y un odio por el villano como nunca se pueda llegar a experimentar…
Lo que me extraña es que me pidan tanta reseña de los 4F de DeFalco y no de los de Byrne…
Claro que la gente aquí va a lo que va, A HACER DAÑO!
Hombree, no es hacer daño, ¡es ponerte un reto! Que hablar de Byrne, Simonson o incluso Englehart es fácil… pero a ver quién le echa cataplines a «analizar» al Defalco!
Ya que estamos, aunque ha llovido desde entonces, ya por pediros a mí me encantaría que continuárais la serie de Shooter…
En realidad es más fácil hablar de una mala obra que de una buena, porque te limitas a decir lo que está mal y en paz. Por eso me aburre hablar de gente que hace las cosas mal, es mucho más interesante contar como se las arregla un tipo para contarte un millón de cosas con cuatro monigotes.
Y sí, lo de Shooter es mi verdadera cuenta pendiente.
En realidad lo más difícil es hablar de algo que te gusta, porque al final te quedas con la sensación de decir lo mismo una y otra vez. Poner a parir algo es lo más fácil del mundo
Shooter, pleaseeee. Que me enganché del todo a brainstomping con s serie de artículos y es criminal que no acaben. Aunque hace tiempo que estoy mas bien lurker por aquí…
LURKER!!!
(Ya, ya lo sé…)
Mi Victor favorito siempre será el de Triunfo y Tormento.
Que pena que Stern hiciera tan poco con los 4F, aunque yo sigo quedándome con Byrne.
Ya, yo no. Es un racista antiskrull.
Morrison lo es más y luego es Byrne el que se lleva la fama!
Bien tirada, pero sabes perfectamente que del calvo escocés solo me gusta la Doom Patrol.
Por cierto, ¿soy el único que echa de menos los recuadros de las portadas donde aparecían los personajes? A mí esa de los 4F de Byrne me parece mítica… pero puede que sea la fuerza de la nostalgia la que me domina.
Fue un invento de Ditko y como tal deben ser respetados! Como el traje de Spiderman o el de Doctor Extraño!
Los de Uncanny X-Men y Avengers además te permitían seguir los cambios en la alineación.
Byrne tiene muchísimo talento y muy poca cabeza. Y se le dan mejor las series con mucho recorrido previo, donde puede tomar un punto de partida y mejorarlo, que ser original.
Y la vejez le ha sentado mucho peor que a Simonson ( Orion, Judas’ Coin o Ragnarok son mucho mejores que todo lo hecho por Byrne en la misma época) Para mi, lo último bueno de Byrne fue OMAC
No sé que decirte, recuerdo que el declive de Byrne fue con Wonder Woman. Cuando estaba en Namor la gente todavía lo «respetaba», pero una vez se puso con Next Men parece como si el personal pasara del tema, y luego ya en Wonder Woman se dieron cuenta así de sopetón que el hombre se ahorraba los fondos cada dos por tres… ¡Cuando llevaba años haciéndolo!
Lo peor es que tu analizas como dibuja Byrne ahora mismo y lo comparas a lo que hacía en los 80, y el cabrón ha mejorado en muchas cosas mientras ha empeorado en otras fundamentalmente por haber tratado de «ahorrar tiempo». Es todo un caso de estudio, vaya.
Se dice «oficialmente» que la decadencia de Byrne llega más o menos cuando está en Namor, pero yo leí su Hulka y ví que el tipo aún se lo curraba.
¿Simonson envejecer? What?
Hay cómics más que potables de Byrne en su época final en Marvel y DC; Marvel: The Lost Generation es un favorito personal. Incluso el último trabajo que hizo para DC, un arco de JL Classified, entintado por Farmer, lucía fenomenal.
Por desgracia en su última etapa en IDW se ha empeñado en entintarse siempre a sí mismo, y no se hace ningún favor. Sin embargo hizo un especial de Angel donde se reproducían directamente sus lápices, sin tinta ni color, donde se demostraba que el que tuvo, retuvo.
Yo creo que a Byrne le pones un editor capaz y el tipo puede rendir lo más grande, pero como «ya no está de moda» y en Image lo tienen como persona non grata, pues como que ahora tiene que ir arrastrándose por las independientes y así nos va.
Anda que no me jodió que el muy idiota no le cogiera el teléfono a DC para hacer una portada del Action Comics 1000…
¿Hay alguien en el mundo capaz de atar en corto a Byrne? Acabaría liandola fijo.
Siento ser poco original, pero… Shooter lo hizo durante bastantes años y consiguió sacarle lo mejor de si. Luego ya se endiosó y no hubo manera, pero me pregunto que habría pasado con Byrne si le hubieran dado una serie en Vertigo. Que no es que Berger sea muy cañera, pero siempre conseguía lo mejor de sus autores.
Nada bueno. Sin 200 números previos, se ahoga. Le pasó en Alpha Flight y por eso echa pestes de ella, a pesar de ser uno de sus trabajos más frescos
Hrmmm… ¿Me estás diciendo que Byrne necesita de una continuidad fuerte para poder hacer su trabajo? Eso explicaría por qué ya no está de moda hoy en día!!
Su truco del «Regreso a los orígenes» necesita de una continuidad fuerte previa. Es el reverso de Kirby, que odiaba trabajar con personajes ajenos y cuando lo tenía que hacer, llenaba la serie con personajes suyos «chupando cámara». En el fondo, lo de Byrne es un truco de guionista bisoño que se defiende con un argumento de autoridad =yo solo desarrollo cosas que ya estaban al principio
Creo que estáis siendo malos con Byrne, Nextmen y Alpha Flight estaban bastante bien por mucho que los dejara colgados.
Byrne es el equivalente a la estrella deportiva que quiere que el equipo gire entorno a el.
Si pido un ejemplo empezaría a denunciar de que pie deportivo cojea cada uno, no?
En Image y en Marvel. Con DC la relación era fría pero existente, al menos. En las otras esta proscrito. Y es una ausencia en el Action 1000 como un pozo de Apokolips de grande
En Marvel no tienen problema con el, el problema lo tiene él con Marvel por haberle cancelado Hidden Years. Pero vamos, que si se le pasara el berrinche tampoco creo que a estas alturas le llamaran, porque «está viejo».
Sigh.
Se podría decir que Byrne y Jim Lee son muy fans de los… githanos:large