Las mejores series de televisión de 2015. Y alguna de las peores, también. 1º Parte

Se termina un año más (¡¿pero a donde se va el tiempo?!) y toca repasar todo lo que nos ha gustado, lo que nos ha molestado y lo que nos ha dado asco, vamos que no es exactamente un “lo mejor/peor del año” sino más bien un “lo que más me ha gustado y disgustado a mí de lo que me ha apetecido ver” que en Brainstomping nos da mucha pereza hacer tops. Y como Diógenes se ha pedido hacer el de videojuegos me ha tocado a mí una vez más hablar de lo que me ha parecido la oferta televisiva y comiquera del año, centrándonos hoy, sin ningún orden en concreto, en lo que he visto en la “tele” (cof, cof) Han sido muchos los estrenos, cancelaciones y decepciones, pero en general no se puede decir que el 2015 haya sido un mal año televisivamente hablando.

Repitamos el chiste del año pasado… No recuerdo ver las series en eso…

En el lado negativo del año se encuentra algo que no por esperado fue menos doloroso, el final de algunas series de las que había disfrutado mucho. Don Draper y todo el glamour y la sordidez de los Estados Unidos de los años 60 y 70 en Mad Men nos dijeron adiós  tras siete temporadas de lo mejor que ha dado la televisión en las últimas décadas. También fue triste el tener que despedirse de los empleados públicos de Pawnee en Parks and Recreations y de los estudiantes y profesores de Greendale en Community (¡que aun nos deben una película!) Menos dolorosa fue la despedida del Mentalista, serie que igual duro un poco más de lo que tendría que haber durado pero que gracias al carisma de su protagonista consiguió sobrevivir un poco a la resolución definitiva de su trama principal.

La televisión no sera lo mismo sin ellos

Aunque no todas las despedidas son programadas, ya que como cada año son muchas las series que sufren el hachazo de las bajas audiencias y su consiguiente cancelación forzosa que siempre nos deja con el mal sabor de boca de que las historias de esos personajes tendrían que haber continuado. Y pocos géneros (de entre lo que yo veo) sufren tan a menudo este fatal destino como el de la ciencia-ficción. Las aventuras temporales de la oficial Kiera Cameron en Continuum sufrieron un final algo precipitado en el que sus creadores fueron capaces al menos de cerrar de forma bastante satisfactoria todas sus tramas.

Les costo un poco pero la acabaron relativamente bien 

Algo parecido a lo que sucedió con Joshua Nolan, Irisa ¡Datak Tarr! Y el resto de habitantes de la ciudad de Defiance. Extant fue otra que, gracias a la previsión de sus responsables, consiguió cerrar muchas de sus tramas antes de sufrir una cancelación cuyo bajón de audiencia hacia inevitable. Una suerte que no corrieron los protagonistas de Hélix, que tras una algo irregular segunda temporada en la que quizás un optimismo mal entendido les hizo dejar un montón de tramas abiertas, también fue cancelada sin piedad dejándonos con más preguntas que respuestas (algo que era casi marca de la casa). De quien también tuvimos que despedirnos fue de los habitantes de Chester’s Mills que vivían atrapados “Under The Dome”, una despedida que casi se agradeció ya que la serie se había convertido en desastre sin frenos que seguía viendo como el que ve un accidente de tráfico, por esa incapacidad de apartar la vista.

Admitamoslo, la serie se fue cuesta abajo cuando se la cargaron a ella

Pero aparte de las cancelaciones, lo otro que duele mucho en el panorama televisivo son las decepciones, incluso las que son más que previsibles. Heroes Reborn trajo de vuelta a algunos de los viejos personajes (los que no tenían otra cosa mejor que hacer) y a una nueva generación de héroes y villanos en una serie sosa y predecible cuyos responsables parecen creer que aun vivimos en 2006 y no se han estrenado las películas de Marvel. Una sensación parecida a la que me ha transmitido el Powers de Playstation (consolas de videojuegos emitiendo series, esto es el futuro) serie que partiendo de la base del gran comic de Brian Bendis y Michael Oeming, pero que ha contado con un casting muy mal escogido y un presupuesto de pena que no solo no hacen justicia al material de origen, sino que me hacen sentir como si estuviese viendo una reposición de Mutante-X.

Que pinta de «fan-serie» ha tenido este Powers…

Mas decepciones fueron las que sufrí con 12 Monos, una serie de ciencia-ficción sobre viajes temporales (basada en esa película que sé que tengo que ver ya) y que tras unos pocos episodios consiguió que los 40 minutos que duraba cada uno se me hiciesen eternos, algo que no creo que se le pueda achacar a los viajes temporales. También dentro del terreno de la fantasía/ciencia-ficción se encontraba «You, me and the Apocalypse», una comedia negra que prometía mucho y que contaba con algunos actores de The Office y Parks and Recreations, pero que no tardo en dejar claro que poco o nada tenía que ver con aquellas. Y aunque me resistía a incluir en este apartado a Killjoys, ya que pese a sus numerosos defectos he disfrutado de ella, las comparaciones con el resto de estrenos de ciencia-ficción de este año hacen que quede en muy mal lugar, por lo que ha terminado un poco en el limbo entre lo bueno y lo malo. (aunque Diogenes la odia porque es un amargado)

No es para tirar cohetes pero podría mejorar…

Por suerte 2015 ha tenido mucho de bueno en el terreno televisivo, y para alguien con mis gustos ha sido el año del comic y la ciencia-ficción. A comienzos de año nos llegó Agent Carter, el salto a la televisión de Peggy Carter, un personaje que en los comics fue siempre bastante secundario pero que gracias a su aparición en la primera película del Capitán América y sobre todo gracias a Hayley Atwell, se ha convertido en un personaje fundamental dentro del Universo Marvel televisivo/cinematográfico. De Marvel también nos llegaron las dos primeras series surgidas de la colaboración entre Marvel y Netflix, Daredevil y Jessica Jones, dos grandes adaptaciones de los personajes (sobre todo la primera) que pese a tener algún defectillo siguen recordándonos que Marvel está en una racha imparable con sus adaptaciones, algo que no hace más que aumentar las ganas que ya eran enormes de ver el resto de las series.

La racha de éxitos de Marvel parece imparable

Pero no solo Marvel ha tenido adaptaciones televisivas. Del sello Vertigo de DC nos llego Izombie, serie basada ligeramente en el comic del mismo nombre escrito y dibujado respectivamente por Chris Roberson y Mike Allred. Pese a que el parecido entre el comic (que aun no he leído) y la serie es algo tenue, el resultado final ha sido una serie muy divertida en la que sus creadores han sabido sacarle nueva vida a esa gastadísima formula del “procedimental”, haciendo de Izombie una serie muy recomendable.

Una de las pocas cosas decentes que se han hecho con los zombis en televisión

Algo más fiel al original, aunque también con numerosos cambios, ha sido la serie de Supergirl, serie creada por Greg Berlanti, uno de los principales responsables   de las series de tv de Arrow, Flash y Legends of Tomorrow. Y aunque es una pena que al emitirse Supergirl en otra cadena de momento la idea de un crossover no esté en el aire, es algo que se compensa por tener a una protagonista que disfruta de su trabajo y sonríe haciéndolo, dejando claro que Berlanti entiende mejor a los superhéroes de DC que la gente que hace las películas. Y tampoco perjudica que en los últimos episodios hayan introducido por sorpresa a cierto icónico superhéroe amante de las galletas de chocolate.

¡Los Kryptonianos son capaces de sonreír!

Y como la cantidad de series que he visto en este 2015 son muchísimas más de las que creía cuando comencé a escribir esto, vamos a dejarlo por hoy aquí y continuar mañana con el resto de producciones que nos ha ofrecido la televisión este año, o al menos con las que he tenido tiempo y ganas de ver, que de haber podido esta lista sería muchísimo más larga…