Reseñas televisivas tardías 2º parte: Last Resort

Terminamos hoy con estas pequeñas y tardías reseñas de un par de estrenos televisivos de esta temporada que no tuvieron la suerte de cuajar en la audiencia. Tenían en contra el alejarse un tanto de lo convencional y el no tener detrás el equipazo que suelen tener las superproducciones de cadenas como la HBO o la AMC. Pero eran buenas series y se hubieran merecido tener algo más de suerte, pero habrá que conformarse con los episodios rodados y cruzar los dedos para que sea verdad que han podido rodar finales decentes. Así que tras ver ayer que nos ofrecía 666 Park Avenue veamos hoy que podíamos encontrarnos en Last Resort.

Una serie sobre militares que no parecía propaganda para alistarse, no podía durar

En Last Resort lo que nos encontrábamos era algo de un género muy diferente. La serie nos cuenta como un día, durante unas prácticas rutinarias cerca de la costa de Pakistán, donde deben recoger a unos Navy Seals, el submarino nuclear de la marina de los estados Unidos USS Colorado recibe por un canal de emergencias secundario, vestigio de la guerra fría, la orden de lanzar sus misiles nucleares sobre Pakistán. El Capitán del submarino se niega, las ordenes le llegan por un canal que solo debería utilizarse en caso de que Washington (La casa Blanca, el Pentágono, etc.) quedase destruido, pero como pueden comprobar no es así y la capital sigue intacta. Por lo que desconfiando de quien se identifica por ese canal  como Secretario de defensa, y tras negarse a cumplir las órdenes, otras embarcaciones de la marina realizan el ataque nuclear y a continuación tratan de destruir al submarino rebelde.

No mola tanto como el Seaquest pero tiene su encanto…

El USS Colorado consigue escapar gracias a un prototipo de un dispositivo de camuflaje que estaban probando y se encuentran con que se les ha culpado del ataque sobre Pakistán, se les considera criminales y se les busca por todo el planeta con la misión de capturarles vivos o muertos. Encontrándose con que no tienen a donde escapar y que no pueden volver a su país sin arriesgarse a que les destruyan antes de poder demostrar su inocencia buscan refugio en la isla de Sainte Marina, donde se encuentra una base de la Otan de alerta antimisiles que convertirán en su refugio. Y para proteger su nueva posición harán lo que sea necesario, incluyendo el amenazar con bombardear su propio país con los misiles nucleares con los que está armado el USS Colorado.

Los pobres no tenían ni presupuesto para hacer que las fotos promocionales no cantasen a montaje a kilómetros de distancia

A partir de ese momento su único objetivo será averiguar que paso realmente el día del ataque contra Pakistán y encontrar una forma de volver a su país sanos y salvos, pero no lo tendrán fácil. Los auténticos culpables del ataque contra Pakistán no dejaran de intentar acabar con ellos para impedir que la verdad salga a la luz, además tendrán que lidiar con los ataques de otros países que buscan conseguir el prototipo instalado en el submarino y con la mafia local de la isla, quien no verá con buenos ojos el haber perdido el poder casi absoluto del que hasta entonces disfrutaban.

¡Y encima tienen un Terminator infiltrado a bordo!

Fue una pena que ni esta serie ni 666 Park Avenue hayan sobrevivido a su primera temporada, las dos eran lo bastante entretenidas y prometedoras como para haber sido buenas series. No es que ninguna de las dos fuese una obra maestra ni nada por el estilo, no se podían comparar a pesos pesados de la tv como Boardwalk Empire o Breaking Bad. Pero se alejaban bastante de la tónica habitual en cuanto a series de tv y era algo agradable. Pero se ve que a día de hoy aun sigue la tendencia de que si no haces una comedia intrascendente o una de estas series “procedimentales” no vas a ninguna parte, a no ser que tengas la suerte de hacerla para algún canal de pago. Habrá que esperar a la temporada que viene a ver si hay algo más de suerte y los estrenos que se salgan un poco de lo corriente aguantan un poco más.