Estrenado por sorpresa sin que surgiese siquiera el rumor (probablemente para que no se hablase tanto de lo de Kimmel), Disney nos ha dado el primer tráiler oficial de la película de El Mandaloriano y Grogu (a quien me temo que ya tocara dejar de llamar Bebe Yoda), que continúa las aventuras de esta peculiar familia donde se quedaron en su serie de televisión. Un origen televisivo que ha despertado ciertas críticas en algunos sectores, acusando a esta película (que no se ha estrenado aún) de no ser más que un par de episodios pegados de la serie y que no se ve mejor que esta, como si la serie no hubiese contado con un nivel técnico casi de película desde su comienzo. Y aunque el tráiler en sí no nos cuenta demasiado, yo estoy encantado con reencontrarme con esta pareja y por ello no me he resistido a analizar su tráiler.
THIS IS THE WAY!
El tráiler comienza con un regreso que ya se había filtrado con anterioridad, más o menos. Y es que, como podemos apreciar en la escena introductoria, casi parece que el Razor Crest ha renacido de sus cenizas, pero teniendo en cuenta el estado en el que acabó la nave de Mando y lo reluciente que es esta nave, podemos asumir que se trata simplemente de otra nave de asalto ST-70 y que probablemente sea el incentivo que la Nueva República le ha dado a Mando para que trabaje con ellos. Porque si nos fijamos en ese pequeño acantilado sobre la playa podemos ver lo que parece ser la Base Adelphi de la Nueva República, donde estaba estacionado el escuadrón del Capitán Carson Teva, un viejo conocido de Mando.

Y ese trabajo, como sabemos por la sinopsis oficial de la película, va a consistir en cazar a los restos imperiales que siguen dispersos por ahí (y que son bastantes más y más organizados de lo que la Nueva República quiere creer). Trabajo que ha debido aceptar ya que, a continuación, le vemos junto con Grogu espiando en la distancia una base repleta de tropas de asalto imperiales.

Un trabajo que sin duda le será encargado por esta vieja conocida a la que encontramos a continuación, la enorme Sigourney Weaver, quien se estrena en Star Wars como la coronel Ward de la Nueva República, a quien encontramos en lo que parece ser la cafetería de la Base Adelphi invitando a Mando y Grogu a sentarse con ella. Y justo allí Grogu hace lo de siempre, tratar de robar la comida de los demás utilizando la Fuerza para atraer hacia él el plato con aperitivos de Ward, pero esta lo agarra con rapidez dejándole decepcionado. Que no en vano estamos ante alguien que ha sobrevivido varias veces a los xenomorfos, un pequeño glotón de un palmo de altura no puede con ella.

Tras esto nos encontramos uno de esos batiburrillos de escenas rápidas que tanto abundan en estos tráilers, en los que podemos ver a Mando y Grogu en un bar muy retro que parece de los tiempos de las precuelas, una criatura reptiliana que algunos en internet han identificado como un Amani (unos aliens que salían de fondo en el palacio de Jabba durante El Retorno del Jedi) y a Mando y Grogu de nuevo, esta vez en la muy familiar cabina de este nuevo Razor Crest II (a falta de nombre oficial). Una nave a la que vemos zambullirse entre las nubes seguida de cerca por otras dos naves que se mueven demasiado deprisa como para poder identificarlas. Pero aunque su perfil recuerda algo a los TIE Fighters del Imperio, una escena que veremos más adelante y que apunta a que no son enemigos persiguiéndole precisamente.

Volviendo a los interiores, nos encontramos con una pelea pasillera, como si esto fuese la serie de Daredevil, en la que un soldado de asalto está siendo apalizado por alguien muy ágil y tremendamente familiar. Y tengo que reconocer que esto ha sido mi momento favorito del tráiler, porque estamos ante Garazeb “Zeb” Orrelios, ex miembro del Escuadrón Fénix de la Rebelión y uno de los protagonistas de la serie animada Star Wars: Rebels. Un personaje al que ya habíamos visto tener un pequeño cameo en la última temporada de El Mandaloriano, precisamente en la misma Base Adelphi que vimos al comienzo, y que aquí está en su salsa, apalizando imperiales con su Bo-Rifle. Algo que espero que sea una señal de que más tarde o más temprano Filoni nos dará la secuela en imagen real de Rebels que nos merecemos.

Y tras un pequeño plano en el que vemos a Grogu a bordo de un speeder en miniatura junto a varios Anzellanos, a los que espero que trate mejor que como los trataba cuando los conoció en Nevarro, vemos a Mando volando hacia una nave que abre su compuerta para recibirle. Una nave que, aunque no es de las más populares de la saga, resultará familiar para quienes hayan visto Rogue One, ya que se trata de un U-Wing de la Alianza Rebelde, y observando el perfil de la misma yo diría que este es el tipo de naves que seguían al Razor Crest II y que probablemente le acompañaban como apoyo en alguna misión para la Nueva República.

Pero toca a lo que deben ser los bajos fondos, donde nos encontramos una especie de arena de gladiadores en la que un público enfervorecido vitorea a un Hutt victorioso que a Mando le parece impresionante y que a Grogu parece darle un poco igual porque está comiendo de nuevo (menudo dineral se debe gastar Mando en alimentarle). Un Hutt que también es otro viejo conocido y por partida doble, ya que por lo visto se trata de Rotta el Hutt, hijo de Jabba y quien debutó en la serie animada Clone Wars, donde fue rescatado de las garras del Conde Dooku por Ahsoka Tano, quien le apodó Apestoso. Pero ahora ha crecido bastante y va a prestarle su voz Jeremy Allen White.

Y a juzgar por lo que vemos a continuación en ese lugar deben celebrarse combates entre seres gigantescos, ya que nos encontramos a Mando en una especie de mazmorra tratando de sobrevivir a dos droides enormes que parecen escapados de los A.B.C. Warriors de 2000 A.D., y en el centro de la propia arena colgado de la espalda de un alien igualmente descomunal. Está claro que va a necesitar cargar con armas más grandes.

Tras esto vemos a Mando y Grogu escapar volando (¿Para subir a bordo del U-Wing que vimos antes?) de una cabina que no tardamos en comprobar que es la de un AT-AT que está explotando y que acaba cayendo por el acantilado en el que avanzaba en la retaguardia de otros dos vehículos de la misma clase, lo que debe ser otra de sus misiones de acabar con imperiales.

Y para terminar, tras desvelar ese logo de la película que difícilmente podría ser más retro, y que no desentonaría en absoluto en la portada de algún pulp clásico, nos encontramos a Grogu y a un Anzellano en lo que parecen ser unas alcantarillas, donde son sorprendidos por una especie de rata gigante a la que Grogu dispara en su único ojo con lo que parece ser el disparador de muñeca que le dieron los mandalorianos para entrenar, y que debe estar cargado con el mismo tipo de munición que un arma de paintball.

Ahora nos toca esperar hasta el 22 de mayo del año que viene para poder disfrutar (espero) de la película, una espera que como siempre estará “amenizada” por multitud de teasers y tráilers que nos destriparán el argumento de la misma con más detalle. Y aunque sé que este tráiler ha dejado fría a mucha gente, especialmente a quienes andan quemados con Star Wars, yo espero la película con algo de ilusión, y confío en que aquí hayan sabido recuperar la magia de la primera temporada de la serie y que esto no sea más que un capítulo más de la historia de estos dos personajes.

Después de Andor, ésto se me hace raro. Y el logo es muy extraño!
Es retro! lo retro es bonito!
Teniendo en cuenta que esto era Star wars 100% (el del bueno, de todala vida) y que devolvió el listón a la franquicia, pues yo encantada de verla y más si es en el cine, que voy poco, solo para cosas muy puntuales y frikosas.
Pero sí, tras Andor, todo star wars se queda pequeño, porque esos si han puesto e listón muy alto y creando un star wars adulto afín a quienes crecimos con la saga.
Yo también tengo muchísimas ganas de ver esta película en el cine, que aunque el nivel de la serie bajase un poco con el tiempo siguen siendo unos personajes muy disfrutables. Lo que me temo es que las posibilidades de ver algo mas al nivel/estilo de Andor va a estar complicado.
Aunque hayamos tenido que descubrir que la mitad de los que crecieron con la saga son una panda de «nazis» (y con algunos hasta las comillas sobrarían).😈
Eso es cuestión de estadística, coge 10 personas al azar por la calle, cuantos de ellos serán idiotas perdidos? 7 de 10, 8 de 10… pues eso 😛
Yo aun no me he recuperado del susto de encontrarme a gente en internet quejándose de que los Imperiales de Andor salían retratados como fascistas. ¿Qué creían que era exactamente el Imperio? Aunque supongo que solo veían al Emperador, Vader y compañía como malos genéricos y al ver los entresijos del Imperio se han visto retratados y no les ha gustado.