Si hiciéramos una encuesta al personal sobre quién os cae peor, si Superman o Batman, seguramente ganaría Superman por goleada. Y me resulta irónico teniendo en cuenta que la imagen imperante de Batman no deja de ser un millonario traumado y torturado que se pasa el día enviando niños a morir a manos del Joker (no hablo de la realidad, hablo del inconsciente colectivo). Ese Batman es completamente odioso y a ratos hasta un personaje plano, pero a la gente le gusta, mientras que la imagen de Superman, dejando de lado a los acólitos de Zack Snyder (perdónalos señor que no saben lo que hacen) es la de un personaje aburrido porque es exageradamente poderoso. Y de un tiempo a esta parte la cosa es peor todavía, porque lo consideran un tirano fascista.
Que ojo, la cosa ya viene de lejos, porque no me cansaré de recordar que el Superman de la era Weisinger pasó de ser el Defensor de los Oprimidos al Defensor del Orden Establecido Oprimiera a Quien Oprimiera. Y éso estuvo muy feo, el público se dio cuenta y Superman empezó a caer muy mal. Si lo trasladamos ya a su aparición en el Dark Knight Returns de Frank Miller con su mal entendido servicio descerebrado al presidente Reagan, pues como que Superman ya se había convertido en un icono del establishment mientras que el personaje que había nacido para ello, Batman, se había convertido en yo que sé, en un anarquista peligroso. Se había dado la vuelta a la tortilla por completo y los críos y no tan críos que pasaron a detestar a Superman fueron legión; cuando no se hablaba de ese elemento político y se racionalizaba ese odio por otro camino, se solía decir que Superman era Don Perfecto, que no tenía fallos por ningún lado y éso lo hacía aburrido. Los más atrevidos pasaban a decir que Superman era un mal personaje porque estaba mal hecho, porque era demasiado poderoso y no se le podía enfrentar a nadie; y es que otro de los inmensos males Weisingerianos es cierto que radica en que el personaje era invulnerable a todo menos la magia y la kriptonita, con lo que de repente cualquier villano que se pegara con él pasaba a usar kriptonita -un mineral supuestamente escaso- constantemente y de distintos colores.
Durante los 80 -y los 70, que no nos olvidemos que tuvo un relanzamiento suave- Superman cambió completamente de tercio y pasó a ser más vulnerable, pero por supuesto para la gente que no leía sus cómics la vida seguía igual, y la cosa no mejoró precisamente cuando Superman murió. El anuncio en los periódicos sobre su muerte no dio una imagen del personaje como uno con fallos o vulnerable, porque su muerte fue a torta limpia contra un bicharraco que, simplemente, «era más fuerte». Absolutamente nadie entendió que la gracia de Superman estaba en sus decisiones morales, en reprimir la fuerza de sus golpes para no hacer demasiado daño. El personaje se reivindicaría a posteriori demostrando que era el más fuerte -tú arréglalo Jurgens- pero desde luego en todo ese desaguisado no se vio al Superman que sabe que el poder en bruto no es la solución para todos los problemas y que siempre encuentra una vía alternativa para solucionarlo todo. Escribir -bien- a Superman es difícil, sí, pero no porque sea demasiado poderoso, si no por la misma razón que escribir a un personaje más ingenioso que uno mismo es complicado, porque tienes que ir dos pasos más allá y encontrar una solución óptima. El optimismo y la esperanza como superpoder y no solo como un eslogan vacío, vaya.
Pero la finalización de los 90 y el nuevo siglo nos trajo todo lo contrario; si las visiones «malvadas» de Superman se habían sucedido anteriormente con personajes como el General Zod, el Superman Ciborg o con el mismo Ultraman del Sindicato del Crimen de América volviendo tras su desaparición -heroica- en Crisis en Tierras Infinitas (cómo echo de menos los tiempos en los que decías Crisis a secas y no tenías que especificar qué crisis) no sé qué es lo que hizo exactamente que en ese justo momento llegara una fascinación por el Superman «malvado». Supongo que el Superman Red Son tuvo algo que ver, con un Superman manipulado por Stalin que acaba tomando el control de la URSS y del planeta entero pero que acaba viendo el buen camino -después de todo es Superman, ¿no?- mientras otras novelas gráficas de la época (hablo de formato, porque ésto si que no se veía en el comic book) como el Luthor de Azarello nos mostraban en portada a un Superman de ojos rojos que daba auténtico miedo. Ya no hablamos de un Superman abusón haciéndole perrerías a Lois Lane y Jimmy Olsen, hablamos de un sádico inmisericorde que es un matón y un auténtico monstruo, una amenaza para el bienestar de todos los individuos de este planeta. La cosa fue creciendo y fue creciendo hasta que alguien en DC/Warner decidió que el Mayor Héroe de la Historia se podía convertir en el Mayor Tirano de la Historia y así nació Injustice.
Sé que a mucha gente le gusta Injustice, pero lo cierto es que rompió un tabú; el germen original de todo esto reside en un videojuego, Mortal Kombat VS DC Universe, en el que la desarrolladora, Midway, se encontró con que no podía hacer fatalities con los personajes de DC porque esta última no permitía que sus personajes fueran descuartizando o fueran descuartizados. Frustrados por la situación que les había llevado a hacer aquel juego, los desarrolladores capitaneados por Ed Boon decidieron crear un juego sobre los personajes de DC en el que algo salía mal y Superman se convertía en un tirano al que solo se oponía un pequeño grupo de héroes y villanos liderados por… Batman. Otra vez Batman. Lejos ya de decir que este juego es tan popular que es referenciado por todos lados, en lo que nos atañe lo importante es el cómic basado en el juego que escribió Tom Taylor desde principios de la década pasada, y que lo consagró como uno de los guionistas más importantes de la actualidad. Taylor supo ver que lo que podía hacer funcionar realmente bien el cómic era el contraste entre el pasado luminoso de los personajes y su actualidad oscura, por lo que durante meses pudimos ver como, mientras los nubarrones de New52 lo llenaban todo, Taylor nos daba un refugio de un universo alternativo. Porque, por supuesto, Injustice es una tierra paralela de tantas… Pero el daño estaba hecho.
Para muchos chavales, Superman es el de Injustice, el de Cavill. Y cuando digo chavales hablo de gente de 30 y pocos años, hablo de gente que ya lleva años en esto, y que en muchos casos considera que los personajes de Marvel molan más y son más luminosos. Que Thanos es mejor y más original que Darkseid -como no- y que Superman es un sieso, un mamarracho insoportable. La cosa es peor todavía cuando veo que una de las tramas principales de la última serie de animación de Superman, My Adventures with Superman, una de las versiones más luminosas que se han dado del personaje en los últimos años, consiste en que el futuro más probable de Superman sea el de convertirse en un tirano; es cierto que dentro del ADN del personaje está el enfrentarse a una oposición invencible y aun así triunfar, pero creo que ya es hora de dejar de villanizar a los personajes, de dejar que sean ellos mismos. Si vamos a mantener la ilusión de cambio contra viento y marea negándonos a que los personajes envejezcan, lo que desde luego no tiene sentido es embarrarlos hasta convertir la percepción de los mismos en villanos. Digo yo.
Creo que en gran medida el problema nace en el agotamiento de los guionistas, que no de los personajes. Dark Knight fue una historia excepcional, posiblemente el primer acercamiento serio al clásico enfrentamiento soñado entre Batman y Superman. Lo grande es que Miller no convirtió a Superman en un villano, lo convirtió en un oponente por motivos ideológicos, pero no perdió de vista su ética y sus valores, ni tampoco su amistad con Bruce, de quien siempre ha sido difícil ser amigo.
La villanización de los personajes es la alternativa elegida a dejarlos crecer y envejecer, cosa que no parece que las editoriales estén dispuestas a hacer, creo que por pura incapacidad de generar personajes alternativos realmente interesantes. Ni envejecen, ni mueren ni se retiran para siempre, por lo que la alternativa a hacer siempre lo mismo se reduce al cambio de acera, de héroe a villano.
Ojo, que olvidado el despropósito con que arranca Injustice, Tom Taylor se porta y retrata con acierto a muchos personajes en una historia límite, donde parece tener libertad para hacer lo que quiera con ellos, eso sí, y se nota.
Hay que ser muy buen guionista para escribir bien a Superman, llevarlo al límite y encontrar soluciones que no traicionen al personaje. En malas manos el bueno de Clark rompe cuellos «porque no le queda otra opción». Este razonamiento me confirma que ese guionista no es el indicado para escribir a Superman, le falta la misma grandeza que caracteriza al personaje. En pocas palabras, no es digno.
Es que no hay personaje malo (ni agotado), solo escribas sin imaginación. Al respecto siempre sacó a colación el Animal Man de Morrison, con un prota que fuera de su breve intervención en las Crisis y en los efímeros Héroes Olvidados (nombre muy descriptivo) no había dado para mucho (ni nada daba pistas de que fuera a hacerlo) …por no decir el uso shockeante en la del todavía más oscuro Bwana Beast (aunque podríamos acusar ahí a Morrison de caer en la moda del momento de putear a los personajes siguiendo la estela oscura de Moore y Miller)
Todavía recuerdo al Superman de Byrne ejecutando a sus enemigos kryptonianos…
Tuvimos suerte que detras de byrne habia un grupo de buenos o inclusongrandes escritores de spiderman y algun dibujantes fan del personaje.
Una pena que con Man of Steel no hubiera eso.
La excepción que confirma la regla y la última tocada de huevos de Byrne a DC antes de largarse por la puerta de atras en otra de sus habituales espantadas. Aún hoy no se sabe cómo se llegó a publicar ese número sin la aprobación del editor. Seguramente por las prisas de cumplir con las fechas comprometidas
Espera, el editor no aprobó la muerte de los kryptonianos??? Como puede ser eso?
Qué decir. El verdadero poder de Superman es su bondad. Hay personajes más poderosos, pero pocos con sus valores. Estoy hasta las narices de que sólo sepan hacerlo malo o un tanque indestructible. El verdadero Superman debería usar el ingenio más que la visión calorífica.
Recuerdo cuando Ed Boon (co-creador de MK y actual cabeza al mando) decía que fue complicado hacer un juego de lucha (MKvsDC) con Superman, porque «no se le podía vencer», y tuvo que «inventarse algo» para que los demás personajes «tuvieran alguna oportunidad». En ese mismo juego metió a Capitán Marvel (Shazam), Wonder Woman, Darkseid…. etc… y no pasaba nada.
Lo mismo con Injustice, que se inventó la «pastilla kryptoniana» para que pudiesen estar igualados con el «invencible» Superman. Eso sí, para Shazam, Detective Marciano, Dr. Fate, Lobo, Wonder Woman, Flash, Ares, Zod, Doomsday, Supergirl y demás no había problema…
Gente como Snyder tiene la manía de olvidar que lo que caracteriza al kryptoniano es que es más humano (o más bien humanista) que los propios humanos (representa mejor que ningún otro súperhéroe los rasgos positivos de la humanidad …y el ideal heroico). De la misma forma que el Peter Parker de antaño (no nos engañemos, ya se ha perdido esto, aunque alguno quede que todavía sepa escribirlo cuando le dejan) representaba al humano de a pie bienintencionado entre los superhéroes (entre iconos era más creíble como un joven que se convierte en superhumano sin perder su condición de chaval de barrio)
Considero que el superman de los oprimidos desaparecio cuando desaparecio Ultrahumanite, luego de esto cuando se habla de «el superman de los oprimidos pre-Weisinger» solo veo un americanista del copon (con americanista me refiero a americanism, ideologia de la epoca sobre que america era un pais multietnico y multireligioso supongo que para combatir el sovietismo y arianismo).
Lo que digo es que el personaje que luchaba por el obrero y bebia de mitologias e historias populares habia mutado a lo conocido en los 40s y 50s, que fue una epoca muy heterogenea y portadas mas patrioticas de Fred Ray(veias el estilo mas cartoon de Ira, algunos capitulos mas artisticos como el que Superman lucha por sobrevivir en un remolino, los numeros del prankster,…) y esa epoca al final se estabilizo para lo que es Weisinger.
Al final del dia lo dificil de Superman es que cada momento del personaje esta ligado a la ideologia y cultura de la epoca y aun asi todos tienen una sensaciones en comun que pocos ven. Por eso es dificil de escribir.
Por que no es lo mismo un numero de superman contra nazis que uno de americomando. O un superman de Weisinger que algun comic de la silver age de tercer o incluso segundo plano.
Despues de este tochaco, muy buen articulo.
PD: Y ya que hablo de action comics de principio de siglo 20 , siempre me ha gustado Zatara , se habla mucho del «feminismo» de WW pero el numero donde porque si empareja a 2 reinas alienigenas es mas divertido y reinvicativo que WW gritando los fetiches del autor.
Hombre, ni punto de comparación entre el Superman de Siegel & Shuster (en los comic-books y prensa) y el ya controlado con mano de hierro por Weisinger (por mucho que tenga sus momentos imaginativos …o incluso putodelirantes). Yo, tras la marcha de sus creadores (e incluso de ellos me gusta más lo del principio) ya me tengo que saltar casi (fuera de algunos números sueltos como los del Capitán/Coronel Futuro o algunos World’s Finest, como uno humorístico dibujado por Alex Toth, o lo del relato ilustrado de Steranko en el Superman #400) a lo de Wolfman & Gil Kane …y de ahí casi a lo de Byrne para releer algo a gusto.
Yo es que me da a elegir los numeros de Burnley , el estilo mas cartoon de Ira o los numeros de Siegel y Schuster despues de Ultrahumanidad… Pues no hay color, se nota que a partir de la primera gran historia los creadores delegan muchisimo y cuando les tocan ponerse delante es demasiado descafeinado y ya no entienden el personaje
Y ya de la era Weisinger, me quedo con las historias de Finger(como cuando pierde la parte de arriba del uniforme) y algun numero de Otto
Hombre, como que tras los primeros números para asumir la producción tuvieron que montarse (como casi todos: Eisner, Bob Kane, C.C. Beck, Simon & Kirby, Bob Powell,…incluso Jack Cole, que odiaba ese sistema de trabajo pese a la pasta que le permitía ganar) el sistema de estudio (con unos cuantos «ayudantes» (de esos que nunca se acreditan, «negritos» los llamaba Ibáñez). Pero con eso y todo los primeros años (al menos hasta el ’41) molan (y luego todavía se deja leer, con sus momentillos). En prensa me gusta casi todo lo de Siegel & Shuster y lo primero de Boring (en cambio en los comic-books nunca me hizo mucha gracia Boring). De Bonder me quedo con su Capitán Marvel (que vendía incluso más que Superman, de ahí el mosqueo de la National).
También siempre vuelve a Booster Gold (Jurgens).
Por cierto, a alguien más le parece Doomsday un personaje plano y totalmente desprovisto de interés? (Ni en Smallville ni tan siquiera en el Timmverso lograron darle algo de cuerpo …y mira que en el Timmverso lograban revitalizar a personajes olvidados e infravalorados, incluso a alguno que nunca había tenido demasiado interés o que era casi un chiste)
En un episodio de la serie Futurama, Fry decía a sus amigos que para ser feliz necesitaba cosas y no personas. Bender le respondia “yo soy cosa”.
Pues Doomsday podía contestar como Bender.
Es que Doomsday hay que tomárselo mas como un arma que como un personaje, es tan plano como pueda serlo los muertebots, los centinelas y similares, es algo contra lo que pegarse pero que necesita a alguien detrás.
Creo que los Muertebots tenían más personalidad.?
Pero solo cuando copiaban a Muerte, por lo que es su personalidad,. Cuando salen en bulto como si fuesen misiles, entonces si que son como doomsday xd
Con Doomsday ya te han contestado.
No es un personaje. Es un accesorio.
Es un mamporrero (?y no solo porque solo sirve para dar mamporros).
Ah, el Jimmy Olsen de Kirby!
El Superman animado de los Fleischer (que visto ahora parece fácil, pero nanay). O el estupendo del Timmverso (en su serie y en la de la Justice League).
Aleluya
Para mí no hay problema ninguno en contar una historia que sea la caída en el lado oscuro de un héroe, y su conversión a villano. El problema es que todos sabemos que si es un personaje principal de la empresa, el cambio va a ser algo temporal y hace que leas la historia sin interés. Se habla mucho de la fatiga superheroica y personalmente creo que la principal razón de esa fatiga es la sensación de que nada tiene consecuencias. (Eso ya está pasando incluso en el cine, donde un Celestial surge del centro de la Tierra y a nadie le importa, por poner un ejemplo.)
Para ese uso de la historia con consecuencias sin manchar al original aparte de los elseworlds están toda esa legión de trasuntos… Plutonian (del Irredeemable de Mark Waid), Apollo de la Wildstorm, Superior (de Millar) el Vigia e Hiperion de Marvel. etc
La pena es cuando ese trasunto o versión alternativa cala al personaje original desdibujándolo (personalmente me apena mucho en este caso el Capitán América de los setenta y ochenta con una personalidad muy firme a la vez que amigable y dialogante (y de tendencia al discurso) con lo que veo hoy tan pegado a su versión Ultimate).
Acerca de la fatiga superheroica es algo que a mi me afecta en el cine y series y con los trabajos de comic actuales donde percibo que la continuidad y universo compartidos ya no valen apenas nada. Pero no sufro esa fatiga como lector ya que lo compenso con la lectura (y relecturas) de antiguallas (de los ochenta hacia atrás basicamente) de todo lo que quise leer y aún me falta. Es decir, la falta de novedades mayormente no me afecta ya que además mi gusto lector es mas cercano a esas obras y formas de antes.
Eso sí, algo off topic, pero me ha encantado la nueva portada de ese «experimento» (¿esperpento?) que parece ser JLA vs Godzilla VS Kong con su Superman en plan «¿Pero por qué demonios me pasan estas cosas? ¿No me habéis metido en bastantes mierdas ya?»
Que baje Weisinger y lo borre todo el próximo mes.????
Gojira le hecha el aliento (radioactivo) a Kara??
Voy a decir una cosa que me resistía a poner porque es terrible decirlo.
Pasa, que hay muchas personas que son Craneo Rojo. En el sentido de que no soportan ver a una persona buena como es el Capitán América. Les entra una ansiedad horrible.
Les joroba ver, como hay alguien bueno, porque pone de relieve su propio mal interior.
Se sienten perdedores en la comparación y sienten la -para ellos- terrible presión de la responsabilidad de tener que comportarse bien.
Ver el descredito del heroe les alivia de todo ese dolor. Es un peso menos en su alma.
En cierto sentido, el heroe bueno es como el vaso medio lleno/medio vacio; se ve el caracter de la persona dependiendo de su reacción al verlo.
Lamentablemente creo que tienes más razón que un santo, porque me he encontrado más de uno, dos, tres y diez elementos así. Lo mejor es apartarse de ellos muy discretamente…
Yo lo vi en un caso muy exagerado.
Fui al cine, a ver la del Capitán América, con un grupo de amigos.
Al lado tenía a una persona que hizo aspavientos, con la escena de Steve Rogers tirandose encima de la granada.
Sufrió toda la película, con las escenas de demostración de la bondad humana de Steve. Refunfuñaba y se retorcía en el asiento.
Literalmente lo pasó mal durante la película; y al salir solo decía del Capitán que es un heroe de mierda, que solo es un heroe por meterse en una máquina y cosas similares.
Yo me reía por dentro en mi ingenuidad.
Pero a lo largo del par de años siguientes descubrí lo malísima persona que era ese sujeto. De lo peor con lo que me cruce en mi vida. Y hay competencia muy dura.
De ahí empecé a sacar esta teoría mía.
Con un pequeño interrogatorio que parece inocente, sobre que personaje te gusta más y por que; ya ves por donde va el sujeto.
Y he visto refrendado los resultados después.
Una gran reflexión la verdad.
El tipo del cine, ¿podria ser Ojo de Halcón?, porque despues de craneo debe ser el siguiente que más le toco los cataplines al bueno del Capitán.
Va a ser que no.
Era una tipa de hecho.
Manipuladora, retorcida y le da absolutamente igual el daño que hace. Y ha hecho muchísimo daño a mucha gente.
Creo que inadvertidamente has tocado en porque no me gusta Howard Chaykin de alguna forma. Para alguien cuyos años formativos tuvieron mucho de leer Hellblazer y Vertigo (casi lado a lado con Spiderman), muchos aspectos del trabajo de Chaykin no tienen la importancia que podrían y lo que queda es algo demasiado similar al rechazo de la bondad humana en forma de decisiones creativas en vez de a una expresión transgresora visionaria e inquebrantable. En especial para mi que descubrir que me gustaba Garth Ennis de hecho fue una de las cosas que me hizo querer conocer todo el resto de Marvel que había ignorado al leer Spiderman; porque adoro esa invencible humanidad propias de Stan Lee y Marvel tanto o más de lo que me encantaron las cosas propias de los cómics de Ennis y Vertigo.
Y por otra parte; la trilogía de películas del Capitán América del MCU me encantan (así como me encanta el cómic Huck de Millar y Albuquerque) justamente por todos esos detalles ahí para remarcar una absoluta bondad que solo le hace más y más grande como personaje. Es lo mejor de la primera película sin lugar a dudas y es absolutamente fundamental a la construcción de todo el resto del MCU y por lo tanto de su avasallador éxito.
Viendo como son los fans del Superman de Injustice, de Homelander y similares, me temo que has dado en el blanco, hay un sector del publico mas grande de lo que me gustaria que es tal cual eso.
Es que sí.
El superheroe que les gusta es un reflejo de como son ellos.
Es una validación de su fuero interno, de sus deseos íntimos.
Esta idea deberias deberias profesionalizarla y hacer un test homologado.
Ganas no me faltan. Tendría que meditar mucho las preguntas para atinar.
No puedo preguntar «¿Starshiptroopers le parece que propone una deseable opción política para el futuro próximo?» «Conteste sí/no»
O «¿American History X es una condena o una apología del fascismo?» «Marque condena/apología»
O «¿Superman es un Dios superior o el más humano de los humanos?» «Marque Dios inhumano/ humano más bueno que el pan»
¿O sí puedo?
¿Habeis visto Escipión el africano?
https://www.filmaffinity.com/es/film645238.html
Es la película en la que mejor he visto este fenomeno.
Escipión es totalmente inocente; pero todo el senado quiere ensuciarlo, porque no soportan contemplar tanta honestidad.
«Nadie puede ser honesto, no es creíble.»
Miraos la película. En serio.
Es una maravilla.
Tragicómica. Crepuscular. De dialogos brillantes y punzantes.
Y con lecciones eternas sobre la vida.
Me gustaría poder hablar sobre ella con alguien. Porque es de esas películas que nadie a visto.
Ya la buscaré por ahí.
Ojo que hay mucha tendencia a endiosar a los grandes generales romanos rollo Escipión y César. Y eran unos pájaros de cuidado.
Sí, pero la película tiene el punto autoparódico suficiente para dejar bien claro que no pretende ser histórica de ninguna manera. Es una fabula.
Muchos de los mejores momentos están, cuando Escipión se pierde en sus meditaciones, y entonces aparece Zeus para hablar con él; y Zeus suelta unas puntualizaciones sobre el ser humano y la Historia de Roma muy causticas.
O el hermano; Escipion el asiático, que es el payaso oficial de la película. E impide totalmente que te la puedas tomar en serio. Muy grande el asiático.
Byrne, que también tuvo sus momentos, escribió un número en el que Luthor creaba una supercomputadora para averiguar la identidad secreta de Superman. La computadora le decía que era Clark Kent (perdón por los spoilers) y Luthor consideraba que la compu estaba mal programada porque no era posible que alguien con los poderes de Superman se rebajara a hacerse pasar por un simple y banal humano. Claro, a él no le podía entrar esto en la cabeza porque él no se rebajaría si tuviera esos poderes… El mundo está lleno de Luthors desgraciadamente.
Ese es el otro gran ejemplo de como proyectamos en el heroe nuestros propios deseos.
Un ejemplo que tendemos a olvidar es J.J.Jameson; que fue muchos años el gran villano de Spiderman.
Y su motivación para atacar la honorabilidad del heroe era; que no podía soportar que Spiderman sea altruista y desinteresado, por que le hacía sentirse miserable y mezquino en la comparativa.
Y sobre el tema de los muchos que se hacen pajas con los ojos rojos de Superman.
Yo me pregunto. ¿Cuantos de ellos serán, los que de niños cuando iban al campo; iban con una lupa buscando insectos que asar con la luz del sol; y cuantos eran los que iban a deleitarse viendo a las mariposas y pajaros volar?
Solo por la curiosidad.
Buena pregunta. Garth Ennis en Predicador le explicaba al joven Jesse Custer a través de su padre por qué tenía que ser bueno: «Porque ya hay demasiados malos»… Sin duda, demasiados.
El problema de Superman escque es un personaje concevido para jn publico infantil. Los niños pequeños se identifican con él porque vuela, por hace superproezas y no recibe daño. Pero cuando hay que subir el liston puess se encuentran con el problema de que es el personaje iconico de DC y que no se puede tocar demasiado la esencia del personaje (recordemos la que se monto con el superman de rayitos azules de los noventa) por lo que siempre vuelve a su origen.
Personalmente recuerdo la etapa de los 90 con el retorno de Superman con el reinado de los superhombres (muy epico todo aunque con un desarrollo loco). Superman puede ser epico contra grandes monstruos o puede ser cotidiano a la vez que alienigena pero como siempre es segun el amor que le ponga el autor.