Éste post tenía que haberse publicado el lunes. Mira que ando yo liado estos días que se me ha pasado el veinticinco aniversario de Starship Troopers, una película de la que llevo pensando hacer un post la friolera de doce años, desde que empezó la cosa esta de Brainstomping. Y así se me ha ido pasando el tiempo, dejando y dejándolo para más tarde, con lo que supongo que ya toca, aunque sea por vergüenza torera. Ésto es una cuestión de fuerza mayor, ¡así que vale ya de charla, que hay bichos que matar!
Si alguien cuenta un chiste y casi nadie lo pilla, pero los que lo entienden se descojonan vivos como nunca se habían descojonado en su vida, ¿el chiste es malo? ¿Debería hacerse un chiste menos gracioso pero que lo entienda más gente? Si algo hizo Starship Troopers cuando se estrenó en 1997, es demostrar que la gente no era tan espabilada como pensaba. Era una película de ciencia ficción que destacaba por sus bichos generados por ordenador, pero la ironía que desprendía por los cuatro costados pareció escapar de muchos de los sesudísimos críticos de la época que en su día tampoco habían captado Robocop o (je) Showgirls. Todo el mundo tenía claro que la película buena de Verhoeven era Instinto Básico, que en realidad era la más tontorrona de todas pero como era un thriller que ni arañaba la ciencia ficción pues oye, era la mejor y Sharon Stone no llevaba bragas. Como diría Homer «ganas de matar aumentando…»
Uno de los grandes hallazgos de la película -y de los más imitados- en realidad era una repetición de una idea de Robocop, el introducir a lo largo de la película segmentos de la televisión del universo en el que se mueven los protagonistas.
Pero el caso es que Verhoeven era un director que en realidad no debería haber encajado en Hollywood, y su llegada allí con Robocop (otra película de la que ya es hora de la que hablemos largo y tendido) fue una absoluta carambola. Verhoeven no dejaba de ser un director holandés con una carrera de más de veinte años que no entendía como era posible que su primera película en habla inglesa, Los Señores del Acero una película de aventuras medievales coproducida entre Países Bajos, España y EEUU que había tenido bastante éxito en Europa, aun así no había conseguido encajar en el mercado americano, por lo que Verhoeven decidió emigrar allí para tratar de entender ese mercado y así es como acabó con el guión de Robocop entre las manos… Y lo rechazó. El guión venía firmado por un ejecutivo de Universal, Edward Neumeier y un tal Michael Miner, y la única razón por la que en Orion debían de estar insistiéndole a Verhoeven para firmarlo debía de ser porque tenían amigos o algo parecido, porque aquello al director holandés le pareció una absoluta mierda. Sin embargo y gracias a que su esposa le echó un vistazo también al guión, pronto descubrió que, entre otras cosas, la película contenía un subtexto de crítica social del capitalismo exaltado de los tiempos de Ronald Reagan que acabó haciendo la historia la mar de interesante.
Por supuesto, Robocop fue un éxito y el estudio se quiso poner a trabajar en la secuela cuanto antes, pero Verhoeven no tenía el menor interés y su carrera fue por otros derroteros mientras el equipo de producción liderado por Jon Davison buscaba otra forma de reunir a toda la banda. Robocop había sido una película muy especial, la típica producción por la que nadie apostaría pero que sin embargo triunfa y es todo un éxito, juntando a un equipo técnico espectacular y blablabla, por lo que cuando siete años después y durante la producción de Showgirls le ponen a Verhoeven el proyecto de Tropas del Espacio encima de la mesa, pues como que se lo tiene que pensar. Por supuesto que consideró que el guión era otra mierda y que la novela original era otra, pero de nuevo el subtexto le empezó a parecer más y más atractivo; Verhoeven había crecido durante la ocupación nazi de Holanda, sabía lo que era vivir en un estado fascista en el que oficialmente todo va bien pero en realidad es una completa pesadilla, y Starship Troopers le hablaba de exactamente eso. Y claro, volvió a picar.
Porque Starship Troopers es una película tremendamente nazi, sí. Dicho literalmente por Verhoeven, el plan era crear una utopia fascista, ese mundo perfecto de jovenes y bellos, de perfección absoluta, en el que todo va bien. Que sí, que hay que ir a la guerra, pero porque la guerra nos da carácter y la violencia es la única autoridad real en este mundo, cojones ya. Por eso el reparto está compuesto en su mayoría por veteranos de películas de acción como Clancy Brown o Michael Ironside que actúan como instructores de una pandilla de actores postadolescentes que tienen más pinta de estar anunciando dentrífico que estar en una guerra. Son veteranos de series como Sensación de Vivir (sí, así tradujo en españa Beverly Hills 90210) o Melrose Place, los culebrones para chavalería de la época en los que todos eran guapísimos según los cánones de belleza de la época, pero de actuar sabían poco. Y, aunque a posteriori Verhoeven reconocería que a la película tal vez le habrían venido mejor actores un pelín mejores (seguramente el mejor actor que hay en ella es Neil Patrick Harris, que borda su transición de empollón de instituto a científico nazi y que por la época solo era conocido por haber protagonizado la serie Doogie Howser, M.D., Un Médico Precoz) lo cierto es que funcionan. Y funcionan porque no empatizas con ellos, son carne para la picadora, auténticos niñatos que no deberían caerte bien, porque ni siquiera son buenas personas.
El protagonista, Johnny Rico (Casper van Dien), no deja de ser un niño pijo borrego que se alista en el ejército simplemente porque no sabe que hacer con su vida y cree que es la forma de mantener a su novia del instituto, Carmen Ibáñez (Denise Richards), pero ante la imposibilidad de sacar nota suficiente para entrar en la flota espacial, se alista en la infantería movil, el ejército de tierra; uno se pregunta en todo momento como es posible que Rico, aun cuando Carmen le repite constantemente que lo más probable es que no vuelvan a verse, decide alistarse en el ejército solo para impresionarla, porque más allá de eso no tiene ningún plan y ojo, que Carmen va a su bola y en cuanto puede corta con él. Por el otro lado tenemos a Dizzy Flores (Dina Meyer), una compañera del equipo de futbol americano del instituto de Rico que hace todo tipo de maniobras para quitárselo a Carmen, pero él pasa de ella porque, como ya he dicho, es idiota. Y finalmente tenemos a Carl Jenkins (Neil Patrick Harris), supuestamente amigo de Rico pero que aun así no pierde la oportunidad de humillarlo públicamente cuando saca una nota horrenda en su test de aptitud. Es gente hipercompetitiva, muy poco empática y lo peor, Carl es telépata y aun así es un sádico redomado.
Y éso es lo tremendo del primer acto de la película, que en realidad es una comedia juvenil de sábado por la mañana en el contexto de una civilización fascista que reconoce que un día fue democrática, pero que los «veteranos tomaron el control y nos dieron décadas de paz». Un golpe de estado en toda regla para crear una sociedad en la que los militares tienen el poder porque son los únicos con derecho a voto. Con élites adineradas que pueden evadir el servicio militar porque puede permitirse estudios superiores que las clases bajas no pueden lograr. Y éso está en la película, mientras todos sonríen y son felices, y también está cuando la chica negra que se ha alistado para hacer carrera política mata por error a uno de sus compañeros por un error de un superior y es ella la que es expulsada del ejército, mientras que su superior blanco de sonrisa perfecta solo recibe un correctivo público (diez latigazos) y hala a seguir mandando. Starship Troopers es cruel, es despiadada y si parpadeas te lo pierdes, y por eso muchos de los críticos de la época no entendieron absolutamente nada, llegando a acusar a Verhoeven de ser un neonazi porque no veían la ironía por ningún lado. Y esos no eran los peores, porque en este auténtico test de rorschach democrático que supuso esta película en su día, muchos ni siquiera vieron algo «político» en ella porque en realidad veían el fascismo como algo normal o atractivo, que recuerdo que por la época más de uno consideraba con toda su jeta que el sufragio universal no debería existir y que debería existir una prueba de ciudadanía, yo que sé, un examen o un cursillo o algo…
#StarshipTroopers turns 25 in 2022!
Here’s the bug test that got the greenlight to move ahead.
Did you watch with us at @BeyondFest? #TippettStudio pic.twitter.com/IQHbSc6bMM
— Tippett Studio (@Tippett_Studio) January 22, 2022
Mención especial al gran Phil Tippet, responsable también del stop motion de Robocop y el mago que consiguió sacar adelante esta pequeña escena que consiguió que la película fuera aprobada por el estudio.
Veinticinco años después nadie niega la ironía de Starship Troopers, y la equiparan a la de la propia Robocop. Hasta Showgirls ha sido reivindicada, y probablemente la propia Instinto Básico ha sido valorada en su justa medida (ciertas partes han envejecido bastante mal) pero Starship Troopers fue más querida por las generaciones que crecieron con ella, aunque de niños pensaran que era una película de aventuras y quisieran alistarse en la marina para matar bichos (bichos a los que la humanidad había invadido y colonizado, que los humanos estamos empeñados en hacer esas cosas) y de mayores… Pues de mayores espero que hayan pillado el chiste, que la cosa me acojona. Porque igual la solución no va tanto por hacer un chiste peor pero que entiendan todos como educar a todo el mundo para entender el chiste.
Por la cuenta que nos trae.
Tal vez la escena más irónica es el veterano sin piernas y con un solo brazo que felicita a Rico cuando se alista en infantería: «el ejército ha hecho de mí el hombre que soy».
Es la única escena que recuerdo, de cuando vi la peli hace la tira de años (bueno, sí, cierto, también recuerdo las duchas…).
Ya tocaría revisitar la peli y de leerme al lado la novela, a ver qué tal.
Si te decides a leer la novela, piensa que 1) no es de las mejoras novelas de Heinlein, 2) está escrita en 1959, 3) salvo en algunas cosas superficiales, no tiene nada que ver con la película de Verhoeven; de hecho, en algunas cosas la película es la completa antítesis de la novela, empezando por el tratamiento de los soldados (que en la película son carne de cañón y en la novela son tropas de élite comparables a tanques andantes; poniendo como ejemplo «Warhammer 40.000», en la película los soldados son Guardias Imperiales, y en la novela son Marines Exterminadores).
De hecho, una de las pocas cosas malas que se le puede achacar a la película de Verhoeven es que para las reediciones de la novela se adoptó la nefasta costumbre de poner como portada alguna imagen de la película, que no representa EN ABSOLUTO lo que te va a contar la novela. Aunque de esto en realidad la película no tiene la culpa, sino la ignorancia o la sinvergonzonería de los departamentos de marketing de las editoriales.
Pues pinta que va a ser curiosa la comparación con la novela XD
Sinvergonzonería, que saben que la única forma de vender una novela de hace 50 años que se saldaba de segunda mano en la colección de ciencia ficción de Orbis -así la conocí yo- es con Casper Van Dien y Denise Richards en la portada.
Todo parecido con la peli es anecdótico. Los marines de Heinlein son armas de destrucción masiva (con poder nuclear), el sueño húmedo de un republicano (USA).
¡Y bombas psicológicas! «¡Soy una bomba de treinta segundos! ¡Soy una bomba de treinta segundos! ¡Veintinueve! ¡Veintiocho! ¡Veintisiete!…».
Eran jodidos mechas, de hecho en la peli no los sacaron por una cuestión de presupuesto, porque a Verhoeven le gustaba la idea de que se tiraran desde la estratosfera y se estrellaran contra el suelo, pero eso aumentaba el presupuesto y la idea de verlos confrontados «cuerpo a cuerpo» con los bichos le venía mejor a la película porque la idea era que fueran destripados constantemente.
Pero se exploró la posibilidad de que los marines cayeran a tierra en una cápsula en plan meteorito de la que salían en tropel al estrellarse, cosa que habría sido un paralelismo curioso con los «ataques meteorito» de los bichos.
Sí, dejaban en cutre el mecha de Avatar.
Yo recuerdo leer la novela y pensar que era tan jodidamente exagerada que también tenía que ser una puta broma. Y me explico; así como Amos de Títeres es un libro de su época más escorada, Tropas del Espacio está escrita casi en los años 60 y esa es la época en la que se vuelve jipi y escribe Forastero en Tierra Extraña y todas estas; Heinlein tiene una evolución personal muy radical, y Tropas del Espacio está escrita ahí, en tierra de nadie. Que no me extrañaría que alguien escribiera su libro más radicalizado en su momento de mayor duda, para reafirmarse, pero también tengo la sensación de que se está burlando de si mismo.
Pero vete a saber, habría que haber estado en la cabeza de Heinlein para enterarnos.
Tendríamos que meternos en la cabeza de Heinlein y en la del ciudadano medio de esa época, porque hay críticas del momento en las que dicen que lo menos realista de la novela es «que las fuerzas militares estén compuestas por un 100% de voluntarios». Y entonces piensas que no es solo eso, sino que Heinlein te está describiendo unas fuerzas armadas en las que las mujeres están perfectamente integradas; o que en la última página de la novela Heinlein básicamente le dice al lector «Te pensabas que [X] era un tipo rubio y de ojos azules, ¿verdad?». Pero, por otra parte, te presenta unas fuerzas armadas tan tremendamente idealizadas que no sabes si han de darte repelús o risa, y en todas las clases de «filosofía moral» del profesor Dubois se monta unos hombres de paja de escándalo.
Es que hay muchas pistas de ese palo, pero lamentablemente hace mucho que la leí y apenas me acuerdo. Yo creo que Heinlein la escribió sin querer pillarse los dedos sabiendo que si se pasaba igual le caía encima el FBI de Hoover, porque en aquel momento la caza de brujas no estaba tan lejana.
No lo sé, pero los ejemplos que das, sobre todo el de la raza en una época en la que todavía estaban con Jim Crow y Rosa Parks seguía en la cárcel, como que nos dan pistas suficientes como para confirmar que la novela no es tan idiota como parece.
El tema de los duchas es otra muestra de lo fino que hilaba este hombre con la ironía
Ése es un contraste muy fino de la peli, el hecho de que eran una banda de fachas trasnochados pero lo suficientemente avanzados en otros aspectos como para que pudieran compartir duchas sin que pasara nada, algo que en la época era más vanguardista todavía porque la integración de la mujer en el ejército casi ni se vislumbraba, que estábamos en la época de la Sargento O’Neil.
Cabe decir que lo de la integración de la mujer en el ejército es algo que ya existe en la novela original (acabo de mencionarlo en otro comentario, pero lo repito aquí porque me parece un «vanguardismo» que no es cosecha de Verhoeven, sino de Heinlein). Pongo también como detalle reseñable que el capitán de la Rodger Young es (en la película y en la novela) una mujer (la capitana Deladier); me parece reseñable porque dos años antes del estreno de «Starship Troopers» (en 1997) las oficinas de la Paramount estaban recibiendo amenazas de muerte y de bomba por haber osado poner a una mujer al mando de una nave de la Flota Estelar en «Star Trek Voyager».
Queda claro que fachas también había unos cuantos hace 20 años, solo que no tenían un altavoz tan gordo.
Y con una sonrisa de oreja a oreja mientras le entrega los papeles de reclutamiento, nada menos!
No sé si alistarme a la marina para matar bichos porque la verdad se notaba muy raro todo lo que salía en la película; había algo en como actuaban esos «jóvenes felices» que hacía a todo parecer descolocado cuando era niño. A eso se le sumaba una cierta desconexión entre diálogo e imagen que usualmente se veía cuando una comedia hacía un chiste intraducible y el doblaje no podía hacer nada para explicártelo (pasaba mucho con Leslie Nielsen y los Zucker y en Austin Powers también; casi una marca de los spoof films esencialmente).
Así que era casi como si pudiera saber que había un chiste que no estaba entendiendo. Lo que no me pasaba con Robocop; y creo que tiene mucho que ver con la iluminación también que hace todo tan malditamente luminoso y claro. Para cuando podía ver películas como Starship Troopers me hacían ver cosas como Abierto hasta el Amanecer, Kill Bill, las pelis de Blade, y otras R-rated entre las películas de Pixar y Dreamworks; sin quererlo aprendés inconscientemente a saber que hay una forma de iluminar acción y drama que simplemente Verhoeven no está llevando a cabo en Starship Troopers; porque está haciendo justamente iluminación de comedia juvenil de sábado por la mañana o de TV (es una diferencia que también se ve entre un episodio de Star Trek y una película de Star Trek; no solo es una diferencia en iluminación sino que del valor de producción asociado a esa iluminación).
Mi yo niño pensaba que era una película hecha mal y no tanto una película de aventuras (esas eran Volver al Futuro y las de Indiana Jones y la Momia de Brendan Fraser). Ahora sé que es una de esas genialidades tremendamente adelantadas a su tiempo, repleta de detalles y con una sátira tan excelentemente dirigida que acaba teniendo el problema del Colbert Report; en delatar al fascismo como ridículo pareciese que ha conseguido que sus seguidores se hayan vuelto más descarados y más avergonzantes, marcando la línea no entre los que entienden el chiste y los que no, sino entre los que se ríen con el chiste y los que les parece un insulto que se rían de ellos y su «ideología/religión».
Había algo de antinatural en ese «mundo feliz» filofascista de bellos jóvenes nazis «concienciados» (daba la misma sensación de irrealidad que un musical).
Es una comedia excelente pero su forma de contar los chistes necesita que uno entienda que para reírte con la película tienes que reírte de la película; su historia, personajes, dirección. Porque su forma de atacar a la gente que propagaría su mensaje es sabotear su propagación a través de cada decisión creativa. En mantener el mensaje (llevandolo a sus últimas consecuencias en muchos casos) está criticando el universo de ficción en el que existe mientras se burla de los fascistas que querrían un mundo así a través de como dirige ese mensaje.
Verhoeven busca conseguir con Starship Troopers lo que 300 acabo siendo sin querer; una parodia del fascismo a través de tomárselo lo suficientemente en serio como para mostrar lo ridículo que es el ideal fascista.
300 no lo acabó siendo sin querer. Snyder sí es ese tipo de persona.?
Me refería a que 300 con toda la sinceridad del Snyder despierta tanta o más risa y es tan o más ridícula que Starship Troopers. Le salió una parodia pero sin querer.
La ironía y la sátira sí le salieron involuntarias a Snyder en 300. Y en Watchmen (que no entendió realmente de lo que iba y se tomó 100% en serio al Comediante y especialmente a Rorschach … bueno, Moore jamás se habría entendido con Snyder).
…Vale que nuestro chamán de Northampton favorito cada vez se entiende con menos gente.? …Pero para él (como para don Diógenes) Snyder sería directamente gentuza.
…A esto y todo, nuestro querido M’RABO …»ande estará»? (Camino de ver Wakanda Forever?)
Hombre, Snyder extiende ideas reaccionarias anarcocapitalistas y convierte a Superman en un marciano muy poco empático al que parece que hay que rezarle para que te salve, ¿cómo no va a ser GENTUZA?
Y no preguntéis tanto por M’Rabo como dad gracias de que yo haya hecho los posts de toda la semana, ¡mirad lo que ha mejorado Brainstomping gracias a ello!
Su Superman es un tipo solitario y atormentado al que le cuesta entender a la humanidad y que no ha superado la perdida de su ancla moral y emocional (sigue arrastrando la muerte de su padre). Superman oscuro? Eso es no entender al personaje. Puede gustarte más o menos (incluso muy poco, como a mí, que me mola el de Siegel & Shuster, el de Donner, el de Byrne y muy poco más), pero Superman es un personaje brillante y humanista, no oscuro y atormentado. Para mí es junto con el Capitán Marvel original (en su concepción original de Binder & Beck) el más positivo e incluso humano de los superhéroes (mucho más aún que otros sin superpoder alguno …tipo Vigilante, The Question …o Batman, que me gusta en cambio mucho más), sigue al fin y al cabo siendo ese chaval de pueblo del cinturón de grano americano.
Hay gente que defiende Man of Steel diciendo que es un Elseworld.
Un Elseworld. Te pasas años sin ver una película de Superman, con un relanzamiento fallido que trataba de continuar directamente la de Donner, con Iron Man, Capitán América y Thor petándolo en cines y se te ocurre sacar un Elseworld.
No señores, lo que pedía todo el mundo es una película de Superman, no una de Hiperión.
Incluso el Superman de «El Regreso del Caballero Oscuro» tiene algunos momentos «brillantes y humanistas» (cuando le da las gracias al planeta por el sacrificio del campo de girasoles, cuando se preocupa por la salud de Bruce en medio de su enfrentamiento, el guiño final a Carrie…).
La semana que viene tendría que ser todo memes memos para compensar!
Lo curioso es que el propio Miller creo que todavía estaba lo suficientemente cuerdo como para que en el cómic griegos y persas fueran de piel oscura, mientras que en la peli de Snyder era una pesadilla aria que remarcaba aún más el tono paródico con esos músculos maquillados.
Lo de Snyder es la fantasía de un «guionista» de Vox: la amenaza «morena» extranjera que viene a robarnos no nuestro a los europeos caucásicos (los de «verdad»).?
Creo que hace poco en esta página (no recuerdo en qué artículo) se mencionó lo fallida que es «300» como adaptación poniendo como ejemplo la escena de «¡Espartanos! ¿Cuál es vuestro oficio?». que en el cómic se limitan a alzar todos la lanza, mientras que en la película alguien creyó necesario hacerles gritar un «¡Auu, auu, auu!» que a mí me pareció tremendamente ridículo cuando la vi en el cine.
Es decir, que dejando aparte todo el tema ideológico, a mí es que ni tan siquiera me parece buena como película de acción. Las escenas de lucha alternando entre cámara lenta y cámara rápida me parecen peleas de videojuego, y momentos presuntamente dramáticos como la muerte del hijo del capitán dan risa.
Lo hemos dicho bastante sí, de hecho a veces hemos sido magnánimos y hemos dicho que 300 era la menos mala… Pero no por mucho.
O a lo mejor era solo cosa de la colorista, su ex-mujer Lynn Varley, xD.
Y la verdad la capacidad de pasarse varios pueblos de Snyder es muy difícil de imitar. Que sea completamente sincero es aterrador e hilarante a la vez.
Su obra es realmente la mejor parodia de su ideología y de si mismo que puede existir.
Nono, que tenían rasgos no caucasicos. Y pelo rizado, mechones en plan rasta y todo, algo que me chocó un poco en su momento porque estaba acostumbrado a ver a los griegos completamente arios y ya ves, eran un pueblo del mediterraneo con negocios constantes con fenicios y egipcios, no era normal que fueran blancos y puros como la nieve.
300 me parece mas bien criptofascismo.
Lo tremendo es que no se sentían insultados por la burla, ¡es que ni siquiera la veían! ¡Creían que era una película perfectamente normal que extendía valores muy necesarios entre nuestra sociedad!
Y ahora están peor todavía…
Uff, es que para mí sin el aspecto de la burla la película se desmorona y no es buena. Si no es porque justamente ahora por fin la gente que la entiende habla de ella no estoy seguro de si se recordaría para nada.
¿Has visto la entrevista, que un youtuber le hizo a un nazi arrepentido que sacó un libro sobre su periplo vital? El que tiene todo el cuerpo tatuado con simbología Nazi. Hablan de cine entre otras cosas.
Desopilante, porque el tío tiene la capacidad de relatar su autoadoctrinamiento con cabeza.
Añado que la banda sonora de Basil Poledouris es una gozada (ese temazo de «Klendathu Drop»), y que todas las escenas con naves espaciales son, como los dinosaurios de «Jurassic Park» una clase magistral de cómo combinar efectos prácticos con efectos generados por ordenador.
La única excusa para los que no pillaron el chiste es que como película de acción es una virguería y eso les distrajo.
Nah, eran fachas y en paz. XDD
Y ahora Paul Verhoeven, esta semana te estás ganando un huequito en mi corasón latino. No me canso de defenderla.
No sé si has visto Black Book pero va precisamente de la ocupación de Holanda, preciosa película en otro registro. Me llamó la atención en el artículo porque no había caído en la cuenta de que se pudo basar en su propia experiencia
Felicidades de nuevo por el post
Y habría merecido también más atención El libro negro y sus miserias (incluso entre la resistencia), como es de esperar en una guerra de ocupación (no digamos ya con supremacistas de por medio).
Peliculaza, un día de estos también tenemos que hablar sobre ella.
Poco hablo de cine, pero claro, M’Rabo me obliga mucho a hablar de cómic de supers porque como a él le ha dado por las «cosas raras»…
Gran reseña aunque todavía no he visto la película.
Un tema completamente off topic pero igual acorde con Brainstomping: hoy,como motivo del Dia de las Librerías, ire a comprarme el Capitán Britania de Chris Claremont.
No es muy allá en guiones y tarda en arrancar y coger unos mínimos de nivel (lo mejor las páginas de John Buscema, pero como me gusta también Trimpe como narrador, pues tampoco estoy demasiado descontento). Eso sí, cometí el error de adelantarme (que hoy me hubiese ahorrado unos eurillos). Hoy sí me pillaré el último Límited que salió de La Espada y un par de Límited más atrasados que todavía están en la librería en mi caja de reservados.
Te agradezco profundamente que en uno de los pocos posts en los que no he hecho la Obligatoria Mención a Don Chris Claremont la hayas hecho tú.
Y el capi britania no es una maravilla y quedó completamente eclipsado por el de Moore, pero Moore también jugaba con ventaja porque tenía a Alan Davis y no a Don Perlin!
De nada jaja
Hare una reseña mas profunda cuando lo lea por completo, pero de momento me gusta lo que he visto.
Y la semana que viene publican el primer tomo de Excalibur….esta Navidad me voy a quedar sin ahorros.
Es un papá o mamá, pero en la duda entre Claremont/Byrne y Claremont/Davis, creo que me quedo con Excalibur.
Aunque me cuesta mucho decirlo con rotundidad y por eso me costaría escribir un artículo argumentándolo sin contradecirme constantemente.
Excalibur molaba con Claremont/Davis (y ese prólogo Claremont/Arte Adams, claro, coño/, pero casi que me gusta más lo de Alan Davis en solitario …al menos es desde luego infinitamente superior a lo de Claremont con otros dibujantes (eso era mero relleno).
Te aviso de que ese primer tomo de «Excalibur» incluye solamente los primeros once números de la colección, y el resto son historias del «Marvel Comics Present» (igual ya lo sabías, pero te lo comento por si acaso, para que no esperes encontrarte unos 18-20 números de la colección principal).
Si,ya lo sabia, siempre consulto la página de Panini para ver cuantos números son. Igual gracias por el aviso
Herb Trimpe (que al menos era un narrador dinámico). Con entintado principalmente del muy veterano ya Fred Kida (el de Airboy, pero mucho más recordado por su labor de asistente de Dan Barry en Flash Gordon …o no, que no lo acreditaban).
Sí, por desgracia la mayoría ni pillaron que lo de esta peli era una sátira.
La secuelas de Starship Troopers (telefilmes y serie animada) mejor ignorarlas.
Ni las he visto, y eso que uno de los guionistas de la original -y de Robocop- andaba de por medio. Pero vamos, que a mi lo que me interesaba era Verhoeven.
¡Yo cometí el error de ver la primera secuela porque me fijé en que estaba Edward Neumeier de guionista! ¡Pero fue como si no hubiera estado, o igual era otra persona que se llama igual!
No te pierdes nada
A mi pareciendome una gamberrada muy divertida y con algo de carga crítica que siempre se agradece, lo que más he visto en cuanto a su recepción no es gente que la malinterpretase, sino que gente que sí pillaba el chiste y ya parece que somos Noam Chomsky. Coñe, que vale que en este mundo hay de todo pero las perlas que deja el director están bien subrayaditas.
No me parece una obra maestra de la ciencia ficción, que tambien es una opinión extendida (sino leer críticas en cualquier página de cine).
Yo es que creo que el gran logro de esta película es haber conseguido realizar la sátira que intentó Tim Burton con Mars Attacks! con bastante más cabeza y mucho mejor dirigida. Porque en el contexto de la época, con Independence Day de por medio, Burton se limitó a burlarse y ridiculizar todos los tópicos de ese tipo de historias mientras que Verhoeven nos soltó algo bastante más político y hasta pedagógico. Que no salimos hechos unos expertos en politología, pero si ayudó a que la gente aprendiera a detectar algunas líneas rojas, ni tan mal.
Porque falta nos habría hecho más cine así para no haber llegado a donde hemos llegado, vaya.
Mars Attack me aburrió soberanamente.
Yo me reí mucho en su día, pero vamos, que todo Burton en general ha «envejecido» un pelín mal. No es que fuera un fraude o un mal director, simplemente no era para tanto. Eso sí, Ed Wood sigue siendo estupenda, aunque es sutil como un calcetín lleno de clavos.
Y parte del gran público le recuerda solo como el director de Pesadilla antes de Navidad …que NO dirigió!?????…Lo que jode mucho al director, claro. Ed Wood me encanta incluso a un señoro como Garci también, ja). Eduardo Manostijeras me gustó mucho en su día, pero casi me da miedo revisitarla.
En el momento te introducía en una estética rollo realismo mágico que sonaba muy novedosa en aquel momento, pero llegado cierto punto te dabas cuenta de que no había mucho más allá y se te iba cayendo. Vamos, yo para el cambio de siglo ya estaba hartándome de Tim Burton, no te digo ya cuando hizo películas como Big Eyes o la de Alicia. Dumbo ni la he visto, vaya.
Tampoco tan novedosa si habías leído a Beto Hernández y otros por el estilo.
O a Gabriel García Márquez.
Bueno, arriba habeis hablado ya de 300, que es como estas tropas del espacio tomandose en serio a si misma y da penica.
En Mars Attacks poca chicha política habia o recuerdo, más alla de un general de sofá cuya solución a todo era «bombardear antes que ellos».
Yo siempre la vi como una crítica a la primera guerra del Golfo, con esos políticos reaccionando siempre como si fueran intocables y esa patada en la boca a los que hablaban del «fin de la historia».
Esta pelicula me repele. La he visto a trozos porque no soporto verla de seguido. No es su culpa.
Pero ese futuro me parece tan rechazable, y todos los personajes tan hostiables, y ese tono de telefilm amoroso de relleno. Es que me encorajina.
Un compañero de la Universidad era uno de esos, que no entienden el concepto de la película. Quedó entusiasmado de ese futuro, en donde para tener derecho de voto hacía falta hacer el servicio militar y estuvo tiempo dando la chapa con eso.
Me quedé acojonado. Eso, y una experiencia de esa época que me dejó con la boca abierta y muy asustado.
En la sala de la televisión al salir la noticia de que Leandro de Borbón había visto reconocidos sus derechos dinásticos por sentencia judicial se quedaron todos estupefactos. Yo les pregunto que les pasa.
Pues estaban confusos, porque no entendían que un juez pudiese dictar sentencias contrarias a los intereses del rey.
Y de repente, me encuentro de profesor de Derecho Político explicandoles la separación de poderes.
No entendían el concepto ni los mecanismos básicos de una democracia.
No percibían que viven en una democracia. Y yo les pregunté en que clase de país creen que vivían.
Ahora, que veo el auge de la ultraderecha, percibo que ese era uno de sus caldos de cultivo. Toda esa gente, que ni sabe lo que es la democracia; y por lo tanto no la valoran ni ven el apremio en defenderla.
Es una cuestión educativa.
Y Starship Troopers es una de las bisagras cinematográficas con las que descubres hacia que vertiente se inclina la persona que está a tu lado.
Igual, que cuando descubres viendo American History X que tu pareja se entusiasma con el nazismo.
O igual que Robocop, entusiastas de la violencia, que no perciben la carga de crítica social que tiene. Y luego afirman, que habría que privatizar los cuerpos policiales, que serían más eficientes.
O… en fin. Que el ser humano es la hostia. Y el como proyectan su propia personalidad a cualquier mensaje es la repera.
El mensaje hoy, tiene que ser terriblemente expositivo para que alguno lo entienda. Y si meten un mensaje, para que hasta el más cazurro lo entienda, se ponen todo locos diciendo, que meten política en el entretenimiento y que es una conspiración.
Lo triste es que hay semanas que parece que esa sátira de futuro (o el Dredd, otra sátira distópica cabrona que muchos se toman en serio …y admiran a sus «héroes», que poco tienen de ello, salvo quizás sí la empática juez psíquica, que sí muestra humanidad pese a pertenecer también al spareto represor de un estado fascista que a veces ni aplica la lógica al aplicar sus leyes represoras, solo la costumbre) está cada vez más cerca (y si fuese por los Elon Musk del mundo ya estaría aquí …siempre que las nuevas normas se aplicasen a la plebe pero no a ellos, claro).
Lo curioso de la gente que alienta los totalitarismos es que nunca se les pasa por la cabeza la posibilidad de que el «nuevo régimen» se les vaya a volver en contra. Que siempre lo hace, hasta plutocracias como la de Putin se han ido cepillando oligarcas a manos llenas.
Especialmente en el último año, cuando empezaron a decir públicamente (o incluso solo en privado) que sus planes expansionistas eran malos para el negocio.?
Es que una de las trampas del fascismo es el mito de la «élite» ya sea clase superior, como raza aria, como lo que sea.
La gente que sigue esos programas se cree superior.
¿Cómo se me va a decir a mí, que no formo parte de la raza superior? Las leyes no se hicieron para mi.
Musk se merece una torta descomunal por su ansia de declararse salvador de la humanidad.
De hecho, hay la teoria de que el rollo de Musk proviene del ámbito afrikaner y de la necesidad de demostrar la masculinidad de continuo.
En resumen, que es un tonto tóxico con demasiado dinero!
Elon Musk es un personaje que me da la sensación que se cree «el Tony Stark del mundo real» (o quiere venderse como tal), y en realidad a quien más se parece es al Victor von Muerte interpretado por Julian McMahon en la película de Tim Story de «Los Cuatro Fantásticos» (y sus presuntos planes para colonizar Marte serían para crearse su Latveria particular).
«política en el entretenimiento»
No es casual que la semana en la que se estrena Wakanda Forever haya hablado de estas dos películas. Vale que Starship Troopers me coincidía con el aniversario, pero es que dos películas que son tan «formativas» para mi como estas muestren unos valores tan marcados y que los reaccionarios de hoy en día no se quejen de que son «políticas», y las pongan como ejemplo del gran cine de entretenimiento «no político» o digan que «si ya estaba Sarah Connor no hacen falta más protagonistas mujeres» y demás lindezas… En fin, que sin ver la de Wakanda me huelo la de mierda que van a volcar otra vez!
Lo llamativo, es que su denuncia de la intromisión de la política en el entretenimiento es de un punto a ahora.
Como que «antes no se hacia» (el mito del pasado ideal al que hay que volver), luego empiezas a tirarles de la lengua y les dices que Matrix es lo mas «woke» del mundo y les explota la cabeza; porque adoran Matrix (de hecho, es la referencia en el submundo de los «incel»).
Tienen el Señor de los Anillos como un ejemplo de obra apolítica, cuando es una fabula ecológica, antindustrial, defensora de la autoridad del estado (la tercera novela se llama el Retorno del Rey por algo). Se lo dices y ya no saben que contestar.
Que se pongan a leer Tintin, a ver que les parece. El Principe Valiente, que es lo mas integrador y superador de odios del mundo.
Clint Eastwood mete política en sus peliculas (Invictus, Ejecución inminente, Banderas de nuestros padres, Gran Torino y todas.) pero no lo incluyen por ser un icono de la masculinidad.
¿Algún día verán las peliculas de Silvester Stallone con un poco de perspectiva? El final de Rocky IV con su llamamiento a la buena fe, la concordia y a la paz; o la critica a la guerra de Rambo. La muerte cerebral seria inevitable entonces.
Es pura ignorancia y mala fe.
Podríamos añadir «Un Día de Furia» a la lista de películas que a veces te espeluzna la reacción de quienes las han visto (porque parece que la escena final de «Entonces, ¿yo soy el malo?» no es lo suficientemente explícita).
En su día había gente que lo admiraba y decía que todos queríamos hacer eso, pero que en el fondo nos faltaba valor.
Recuerdo ver esa película siendo bien crío y pensar «¿CUÁNDO VAN A MATAR A ESTE DESGRACIADO? ¿DÓNDE ESTÁ JOHN MCCLANE?» Al dia siguiente en clase algunos chavales estaban diciendo «55 sentivos» y se descojonaban, porque creían que aquella escena era graciosa cuando en realidad era una denuncia del más puro racismo, el catetismo del que se ríe del acento de otro porque «habla mal». Aprende tú primero a ser persona, desgraciado!
Éramos tres en el cine, a los otros dos les encantó (y por supuesto uno de ellos no la entendió realmente?).
Bueno, yo eso en eso de «quiero una hamburguesa como la de la foto» sí empatizaba con el prota.
Yo no porque las hamburguesas siempre me han dado puto asco, así que cuando él se quejaba tanto pensaba «y qué cojones te esperabas, pedazo de subnormal? Pides mierda y te dan mierda, haber pedido un bocata de chorizo!»
Ya digo que el prota se me atravesó desde el minuto uno, debía de ser el corte de pelo…
Ya, pero si le ponen un bocata de chistorra frita con una caña bien tirada por un afable camarero sesenton igual el sonado se reconcilia con la existencia y se acaba la pelicula sin que pase nada.
Pues sí. Esa es otra.
Habría que hacer una lista, de películas que sirven de prueba de personalidad, un test de Rorschach cinematográfico.
Más que nada para ver en que coinciden todas. Sería curioso.
Hay días, Zatannasay (el corrector, que debe estar acostumbrado ya a que con mi friquismo escriba cosas peores intentaba ya cambiarmelo por Satán nazi???), que uno se queda a cuadros cuando como al preso político de Él beso de la mujer araña le intentan contar como si de un cuento de hadas romántico se tratase una «aleccionadora» película de propaganda nazi (no lo digo por Starship Troopers, sino por realidades cotidianas mucho más recientes …que empiezan a llegar a lo desvergonzado).
A mi, el corrector una vez me cambió un mensaje de whatsapp de «Hola, ¿cómo estás» a «Polla, coño, tetas»; menos mal, que no le di al botón de enviar por una décima de segundo.
Ese corrector, usaba de referencia las palabras más usadas en la aplicación. O asi me lo explicaron al menos. Tremendo.
Por lo demás, es que es alucinante como han estado escondidos esperando un momento de retorno.
Que se lo han dado la crisis económica y la pandemia; además de el rencor hacía el reconocimiento de la diversidad sexual, o a las políticas a favor del medio ambiente, que tanto les joroba.
Es que son…
Elio suele hacerme los cambios teniendo en cuenta vocabulario que uso con frecuencia …y pasó por lo de los nazis (que como los odio con ganas los mencionó a menudo) …pero juraría que no mento con tanta frecuencia a Satán!??
Y sí, últimamente no hay proyecto artístico (no solo películas) liderado por una mujer o una persona de sexualidad no «heteronormativa» (y da lo mismo que no sea activista) que no tenga ya por ello una campaña en contra (con comentarios destructivos o puntuaciones negativas ya incluso antes del estreno) …ya si hay activismo de por medio la campaña que recibe es ya directamente de odio. Joder, que dejen vivir a la gente como prefiera (y pueda) hacerlo. Soy hetero, caso cincuentón y tirando a conservador …y de campo (lo que suele traducirse en doblemente conservador y apegado a las costumbres) pero de verdad que no puedo entender a esta gente que les molesta todo (la etnia, la tez de piel, el idioma, la cultura, a quien votan o con quien follan o les gustaría follar) en los demás…un poco de empatía y un mínimo de educación y respeto por los demás, coño (no le hagas a nadie lo que no quisieras que te hiciesen a ti).
EL MÍO, NO Elio.
Y no es que no entiendan lo que es la democracia (a lo mejor sí que no entienden como funciona nuestra democracia …por ahora y cuando todavía funciona), es que a la mayoría de ellos no les interesa. Y a unos pocos (ahora ya no tan pocos, y bastantes más de los que nos creíamos) NO les gusta.
Yo recuerdo, cuando se estrenó la peli, que los espacios de TVE del sábado (por la mañana en la 1 y por la tarde en la 2 con Gasset) precisamente presentaban y analizaban la película como lo que es: una genial sátira mordaz del fascismo a lo American Way. Vamos, hay que ser bastante cegato para no ver el exceso y la mala baba típica de Verhoeven aquí.
A mí siempre me dio la impresión de que fueron los propios usamericanos los que no se enteraron del cotarro con eso de ser una sociedad superombliguista pero, a su vez, incapaz de verse a sí misma sus miserias.
Una puñetera obra maestra que me alegra que la hayas homenajeado.
Menudo equipazo que tenían en Días de Cine en los 90, lo que pude aprender yo con aquel programa y no con los relamidos del programa de Garci!
Y mira, hasta me daba vergüenza no haber hablado de Starship Troopers (y Terminator) pero ya iremos saldando cuentas poco a poco.
Gasset era enorme. Como le hecho de menos.
Yo sí creo que debe haber una prueba de ciudadanía. Para votar hoy hay que demostrar saber e interés. Si no, hay populismo. A las pruebas me remito.
Me parece bastante grueso hablar de que esta novela es nazi, fascista o facha. Por ahí se ha dicho filofascista y eso me parece aceptable aunque tampoco. Lo que tenía en mente Heinlein cuando escribió es a la polis griega. Allí, para ser ciudadano tenías que ser miliciano. Lo 2º te permitía ser lo 1º. Así, para los antiguos griegos hoplita y ciudadano eran sinónimos pese a que también había caballeros, infantería ligera, tiradores y, en las polis costeras, remeros. Lo cual quería decir que si eras de una polis importante te tocaba ir a la guerra 5 o 6 años mínimo de los 25 en que eras enrolable. Lo que hicieron Heinlein y Verhoeven fue una seudoEsparta. La sociedad de ST es delirante pero es que su autor era anticomunista y filomilitar, escribió en plena GUERRA Fría y en 1958, cuando EEUU se acojonó por el Sputnik y muchos se lanzaron a pedir una paz. Esto último escandalizó tanto a Heinlein que escribió su novela para endurecer a sus paisanos. En ST no hay fascismo, hay militarismo y belicismo, que por supuesto no son los mejores caminos hacia la paz. Debido a su pensamiento Heinlein no se dio cuenta de ese gran fallo que invalida todo.
Finalmente, si lo que ves no te parece cuestionable pues evidentemente no pillas la ironía. Ese es el problema. La peli es transparente desde el momento en que te presenta al tullido. Ahí ya puedes unir todos los puntos. Es como 300. Precisamente todos los que por motivos políticos protestan por cambios de raza, de sexo o de gusto sexual en personajes de ficción con décadas a sus espaldas no se lanzaron a protestar por cómo se representó a Jerjes y al ejército persa. Para mi lo más asqueroso de 300 es la fascista visión de los persas. Es decir, ahí estos son la personificación de la pesadilla de un nazi. Es deleznable la patada en los huevos a la Historia y el nulo respeto por otras culturas y pueblos. A la altura de pintarse la cara o achinarse los ojos.
Me parece que has mezclado comentarios, porque lo que se ha tildado de «nazi, fascista o facha» es la sociedad que se refleja en la película de Verhoeven, no en la novela, sobre la que hemos dicho que la película no la representa salvo en cosas anecdóticas, y yo mismo he dicho que para juzgar la sociedad de la novela hay que meterse no sólo en la cabeza de Heinlein, sino en la sociedad de la época en que se escribió. De la novela lo que más se ha criticado es el su repudia al sufragio universal, y, de nuevo, es un tema que da para debate (al fin y al cabo, ¿no limitamos el voto a los mayores de edad?).
Comparto absolutamente lo de que lo más asqueroso de «300» es su representación de los persas. Sólo hay que comparar cómo aparecen los inmortales en el cómic, donde son inquietantes, y cómo aparecen en la película, donde son orcos. O la escena del lanzazo a Jerjes, quien en la novela se queda plantado desafiante ante la lanza que se le viene encima y encaja la herida estoicamente, mientras que en la película lo pilla por sorpresa y se pone histérico al ser herido.
No he mezclado comentarios, es que la sociedad de la peli, que la he visto 2 o 3 veces, ni nazi ni fascista ni facha es. Es como la del libro, que he leído 2 veces, filoespartana.No tengo reciente ni una relectura ni un revideado pero jamás he visto nazis ni en la peli ni en el libro y sé perfectamente identificar el fascismo. A la sociedad de ST (ya peli ya novela) le faltan bastantes puntos para ser fascista. Sería un gran avance si dejásemos de hablar tan coloquialmente de nazismo, fascismo y fachismo. Llevar un uniforme seudonazi no hace a ninguna sociedad nazi.
Pues en esto no estoy de acuerdo. Por mucho que repitan algunos diálogos de la novela, la sociedad de la película tiene unas actitudes que no veo en ningún lado en la de la novela. Pongo como ejemplo la actitud del reclutador, que en la película dice la frase de «El ejército ha hecho de mi lo que soy» sin darse cuenta de la ironía, mientras que en la novela ese reclutador dispone de unas prótesis estupendas que se quita deliberadamente para asustar a los reclutas y que sólo se alisten si están completamente decididos (el reclutador de la película, en cambio, está encantadísimo con que se aliste cuanta más carne de cañón mejor).
Las sociedades de la peli y la novela tienen sus diferencias pero ninguna es más nazi que la otra.
Siempre me ha sorprendido que nadie se queje de que en 300 todos los malos son negros y con piercings… Es una tropa de blancos peleando contra una invasión de pandilleros. Más racista ya… Que además es una chorrada, porque los persas venían de Iran (que significa «patria de los arios») y son cualquier cosa menos africanos.
«y por eso muchos de los críticos de la época no entendieron absolutamente nada, llegando a acusar a Verhoeven de ser un neonazi porque no veían la ironía por ningún lado»
y sí si lo ven pero lo esconden para no dejarle abrir los ojos a la gente?
lo anterior lo digo porque muchas películas que traen una carga anti o ideologica, no nos las venden como tal, sobre todo como estas que parece que es una más de acción, pues cuando la vi en el videoclub por eso no la rentamos, no porque yo no la quisiera ver si no los adultos de mi casa creyendo que solo era acción a lo bobo. y si se vió robocop fue porque era una película de acción, no porque se supiera algo del director
y de ahí me salgo bastante del tema, pues a veces solo leyendo bastante del tema es como lo conoces, pero no puedes entender el facismo o el totalitarismo si no lo viviste o por lo menos tu país no lo vivió, cosa que sucedió en EU, (es una creencia mía) es decir no sabes que tan profundo es el rio hasta que te metes, por muchos cálculos que hagas.
deberían hacer un brainstomping hablando de cosas político sociales, porque me gustaria saber su opinion de todo lo que llaman progre y antiprogre pues los segundos parecen ser más eruditos que los primeros y logran convences a los demás mientras que los segundos quedan en plan de ignorantes, y saber que opinan de un tal agustin laje, que si lo resumimos es alguien de derecha y yo lo resumo todo a que cuando ví el hombre bicentenario dije pues que más da dejenle ser hombre ¿porque negarle algo que el siente?, pero como no soy muy sociable y antes no existian esto de las redes sociales, no se si exista gente que dijera al diablo el robot ese, que no tiene derechos ni pensemos en darselos
saludos,
Me atrevo, con algo de verguenza, a ser yo quien te comente; pues los demás no lo han hecho y no es cosa que tu comentario quede en el aire.
A ver.
Depende también de que medios ves. En el Pais (periódico más importante de España y progresista) sí comentan el mensaje que acompaña a las obras (cinematográficas, literarias, teatrales, etc) es un tema que tratan y valoran.
Pero eso es algo que no suele anunciarse o priorizarse al hablar de una película.
Y en parte es, digo yo, por precisamente esa inquina; que ahora vemos muy desarrollada, con que las peliculas y series tengan «política»
¿Puede ser que ese «guardarse de hablar del mensaje» del pasado; fuese un precedente del actual «meten politica en el entretenimiento, ¡Arrrghhhh!»?
Pues no sé. Pero igual era una manera de no perder posible público.
Entre las muchas cosas que hacen rabiar a la derecha es el cuasimonopolio que el pensamiento progresista tiene de la producción artística.
Para la derecha el arte es un subterraneo de depravados y liberales. (Exageración, pero hay muuuchos que ahora ya expresan eso abiertamente)
La izquierda tiene conciencia social, es decir, percibe las injusticias de la sociedad y se expresa contra ellas. (Muy a la ligera he dicho esto, lo sé). Y por lo tanto siente la necesidad de denunciarlo y censurarlo para cambiar la realidad o al menos exponerla. De ahí viene el «mensaje».
A la derecha (o al menos a sectores muy grandes de ella) le carcome eso, y se han tenido que inventar conspiraciones para justificar esa realidad, la más conocida: la del «Marxismo cultural»
Mucho les gustaría despojar al arte de «mensaje», no porque esten en contra de que tenga mensaje, si no porque el mensaje casi siempre es progresista.
Particularmente me encanta John Ford. Fue tildado en su época de derechista y conservador. ¿Qué dirían los «antiwoke» actuales, si se viesen: El Sargento Negro, Tres Padrinos, El Delator, ¡Qué Verde Era Mi Valle!, Centauros Del Desierto, todas ellas? Les explota la cabeza. Pero no tienen ni idea.
Sobre ese tal Agustin Laje. He tenido que mirar quien es, y solo con lo de la wikipedia ya me he asustado.
Si solo la mitad de lo que cuentan es cierto, es un pedazo de elemento.
Ese curriculum que tiene es el A, B y C de todos estos pensadores ultrareaccionarios. Que anda que no ha habido en Sudamérica ejemplos.
Es el típico ejemplo de pseudointelectual a los que la ultraderecha abraza intentando tener algun tipo de soporte ideologico para sostener sus posturas.
En España tenemos a Miguel Angel Quintana Paz. Es tremendo como un profesor de filosofia suelta tantas falacias por minuto. Sus videos son para caerse de culo.
muchas gracias por tu respuesta, es que bien dicen que entre amigos y familia no es bueno hablar de política ni religión, a lo mejor por eso prefieren omitir un comentario porque acabaríamos con la paz y armonía que tenemos aquí,
es que por lo menos aquí en México que vivimos muy alejados de Europa y de América del sur, esto de ser de derecha o izquierda es nuevo, después de una revolución armada allá ´por 1910, se creo un gobierno de centro izquierda/derecha, ya que si bien se trabajó mucho cosas socialistas; (seguridad social, empresas paraestatales etc) el lado conservador; religión buenas costumbres no se dejó a un lado; así que había cosas que también se censuraban, por lo que gran parte del siglo 20 creo yo convivimos sin gran problema como una sociedad mixta
ya el problema vino a finales de los noventas que con las políticas neoliberales, se empezó a desbaratar el aparato del estado a favor de la oligarquía, dándole beneficios, y después de 18 años de neoliberalismo se empezó un movimiento ya denominado de izquierda al cual se le suman (aunque realmente son cosas aparte) las nuevas ideas progresistas creando ahora sí una idea de: a eso que atenta contra nuestras buenas costumbres son cosas de izquierdistas, entonces si somos izquierdistas ustedes son de derecha, con decirles que en su momento se le acogió en México a Fidel Castro líder de a revolución cubana y a León Trosky y si bien me imagino que hubo alguna queja de ciertos sectores, al gobierno como a la sociedad en general le dio igual.
saludos
A ver, estos días he andado algo liadillo (¡y encima he hecho todos los post de esta semana!) y por eso ando callado, pero nunca os corteis de hablar de lo que os venga en gana. Aquí no nos escondemos, creemos a pies juntillas en lo mejor para todos y en que cada uno sea y viva como le de la gana sin joder a los demás, nos parece obscena la acumulación de riquezas en manos de unos pocos y todo eso. Hemos tenido a auténticos mamarrachos defendiendo ideas filonazis por aquí y así han acabado (aquí solo hay gente de bien) pero vamos, que no tengas ningún complejo.
Sobre lo otro, pues oye, soy de la opinión de que hasta un cómic de Superman atrapando ladrones de bancos tiene un mensaje político, solo que como para la mayor parte de la gente éso es lo correcto, no lo ven.
Para la mayor parte de la gente no hay mensaje político cuando están de acuerdo con el, pero cuando están en desacuerdo… ¡Ahí les duele!
Es que lo que estás contando es un ejemplo de polarización de la sociedad.
Hablando desde la ignorancia en muchas cosas. Yo vislumbro que en Sudamerica en General se ha polarizado muchisimo las tendencias.
Uno de ellos es el tema del Socialismo como una palabra insultante (no digamos ya comunismo) los años de batalla entre U.R.R.S y U.S.A. tomando Sudamerica como su patio de juegos, han hecho que cualquier propuesta que
suponga: redistribución de la riqueza, protección de minorias, respeto a la diversidad sexual, igualdad de sexos real, protección de medioambiente o cualquier tema similar, sea contestada con un «¡¡¡comunista!!!»
Es decir algo en contra del candidato conservador y te saltan: «Cuba, Venezuela, socialismo=pobreza»
Oiga, no. No tiene nada que ver. No pretendo construir un imperio totalitario anulador de la voluntad individual o… Y por otra parte, el comunismo original era lo contrario de eso. Luego vinieron generaciones de dictadores que usurparon el concepto del comunismo para hacer con él lo que les dió la gana.
El Nick Furia de Ennis, con ese general ruso montandose una isla/estado, y poniendole un nombre que «suena a comunismo» para buscar la sobrereacción de E.E.U.U. o la película de «El buen Pastor» ;deben ser buenos referentes de ese lodazal.
Que llamen «Comunista» a Lula, y haya quien pida un golpe de Estado militar porque ha ganado las elecciones. Pero, sí ya estuvo en el poder. Y se considera que fue la época de esplendor de Brasil. ¿Que hubo mucha corrupción y no se cumplieron todas las expectativas? Ya. Pero no hay que tener miedo a un gobierno «socialista que cumple las reglas de la democracia»
A eso se le llama «Socialdemocracia» y lleva decadas al mando de paises como Finlandia, Dinamarca, Alemania o Suecia. España es un «Estado democrático y social de Derecho» ¿Paises como Canada, Australia o Nueva Zelanda no lo serían también, con su propia nomenclatura?
Y los partidos de derechas europeos, por mucho que se les note el ansia liberalizadora y restrictora de la función social del Estado. Saben que no pueden eliminarla, con lo que han aceptado en buena medida postulados del socialismo.
En muchos sitios de Sudamerica, se ha desatado la batalla de deshumanizar al rival político. El punto intermedio se ha perdido. Ahora las seis potencias económicas de Sudamerica son de «Izquierdas» y es bueno en el sentido de que permiten la alternancia en el poder (Colombia jamás había tenido un presidente de «izquierdas») y por otro lado puede permitir mostrar que no tienen cuernos y rabo. A ver que pasa. Pero con este ambiente.
Mexico está al borde de convertirse en un narcoestado. Ya lo es en muchos sitios. No sé como se puede revertir eso. Y he visto en foros, mexicanos (supuestamente) que pedían a Trump que interviniese en Mexico para llevar preso a Obrador. ¿? De locos.
Por contra Costa Rica es un éxito, llevando políticas progresistas. Cuidando del medio ambiente y mejorando en general la situación económica de la población. Con una alternancia política más o menos sana. Ojalá sea un ejemplo exportable.
Y el auge de la ultraderecha en Europa es palpable y temible. Tenemos a nuestro favor la Unión Europea que es lo mejor que ha pasado al continente en su Historia. Pero como a la democracia, hay que protegerla.
«México está al borde de convertirse en un narcoestado. »
es que ya lo era, solo que estaba todo bien regulado, pero hace 16 años aprox. el presidente de ese momento (de derecha) inició una guerra contra el narcotráfico, pero en realidad todo fue para darle el beneficio a un solo cartel, por eso se inicio una guerra entre carteles, solo que hasta ahorita se hace oficial esa información, en aquellos tiempos había voces que lo delataban solo que se les ignoraba,
tan es así que el secretario de seguridad pública de aquellos tiempos ahora está detenido en EU por narcotrafico, pero la caja de pandora ya fue abierta y es muy complicado cerrarla, sobre todo que la misma sociedad que se espanta de la violencia es la que consume el producto,
y en Sudamérica puede que sea más polarizado porque por lo menos en dos países más importantes hubo dictaduras militares, las cuales se hicieron promovidas por EU para «detener el avance del comunismo» por eso allá esa idea de derecha contra izquierda puede que esté más arraigada en la sociedad.
A los diez segundos de mandar el comentario ya empecé a arrepentirme de poner esa frase.
Pensé: ¿En serio le estoy diciendo a un mexicano eso de su propio país? No tengo autoridad para eso, por mucho que quiera creerme bien informado.»
Así que me alivias mucho con esta respuesta. Te lo agradezco infinito.
Sabía, lo de la falsa guerra contra el narcotráfico. He leido sobre ello, pero se me quedó un poco atras en el recuerdo.
Dos días antes del mensaje, había leido en El País un artículo.
Que venía a denunciar; que para explicar el reguero de periodistas asesinados en Mexico, se usa al culpable propiciatorio del cartel. Cuando en realidad, la inmensa mayoría son víctimas de las fuerzas del orden en represalia por denunciar la corrupción policial.
Mexico tiene difícil salida. Pero Colombia parece («parece») que está saliendo después de como 60 años de guerra.
Yo, por hablar de cómics, me acuerdo del retrato que los hermanos Hernández hacen de los escuadrones de la muerte; y de como las mafias se ensalzaban a si mismas como un baluarte contra el comunismo y el progresismo. Y del apoyo que recibían de los «americanos».
Igual que en «El padrino» ya puestos.
«Pero Colombia parece (“parece”) que está saliendo después de como 60 años de guerra.»
Confirmo. Justamente gracias a la desmovilización de las FARC (la guerrilla más grande y vieja del país) y su integración a la sociedad – para que a sus integrantes los terminaran matando a tiros en las regiones apartadas, pero eso es otra historia – es que se desactivó el miedo que había sembrado la oligarquía desde la guerra fría sobre una victoria de la izquierda en la presidencia. Y se está buscando negociar con los grupos residuales de las guerrillas de izquierdas y los ejércitos paramilitares, desmilitar a la policía, etc. Parece que al fin vemos la luz al final del túnel
Por lo que la polarización no es nueva para nosotros tampoco, solo que hace 20 años a cualquiera de izquierdas se le consideraba «aliado de las guerrillas», lo que lo convertía, automáticamente, en un blanco de los militares y paramilitares. Y así fue que asesinaron a los integrantes de todo un partido político.
Tengo que discrepar con eso de que la pelicula es racista. Si mal no recuerdo, la chica negra deja el ejercito no por una amonestacion, sino porque se siente mal por haber matado a su amigo.
Y si os fijais, al principio la guerra la lidera un mariscal blanco y es un desastre. Cuando este renuncia, su cargo (que parece la maxima figura de autoridad) es ocupada por una mujer negra claramente africana, y es cuando empiezan a ganar la guerra.
La sensacion que siempre he tenido es que las cuestiones de genero y raciales han sido superadas y dejadas atras…
Sí y no, ya te digo que el blanco está por ser blanco y la negra está por ser competente. Hacen una mezcla muy curiosa sobre atrasos y adelantos respecto a la sociedad de los 90, pero no se corta en dejar claro que hay avances que son solo cosméticos porque en la realidad sigue habiendo discriminación aunque seas «ciudadano». Eso sí, que una mujer negra fuera la comandante suprema de los ejércitos de la Tierra en 1996 era algo impensable, porque lo de la incorporación de la mujer al ejército todavía era una polémica tremenda (y en el fondo sigue siendo, porque anda que no reciben palos las pobres).