Aventuras espaciales, héroes nobles y valerosos, malos malísimos y ese encanto ingenuo de los viejos pulps de principios del siglo pasado. Si, hoy toca un poco de historia y remontarnos casi un siglo para redescubrir un clásico de la ciencia ficción que pese a que no ha envejecido del todo bien en algunos aspectos sigue siendo una lectura de lo mas divertida, y contiene todos los ingredientes para ser el punto de entrada perfecto para aquellos que quieran conocer un poco los antepasados de este genero, La Legión del Espacio de Jack Williamson.
La Legión del Espacio lleva siglos manteniendo la paz en el Sistema Solar y su mas reciente miembro, John Ulnar, aun no se cree el honor que acaba de recaer sobre el en su primera misión como Legionario, proteger el secreto mas preciado de su gobierno del que depende esa paz que se ha mantenido durante generaciones. Pero un misterioso enemigo ha conseguido apoderarse de ese secreto y ahora el destino de toda la humanidad reside en un joven novato y sus nuevos camaradas, quienes tendrán que enfrentarse en solitario a un adversario inconcebible para evitar la aniquilación total.
Jack Williamson fue otro de aquellos jóvenes a quien la Amazing Stories de Hugo Gernsback entusiasmo de tal manera que quiso convertirse en uno de esos escritores que creaban aquellas historias apasionantes, un sueño que cumplió a los veinte años publicando su primera historia “The Metal Man” precisamente en Amazing Stories. Poco a poco su fama fue creciendo, inspiro a otros futuros escritores, como a cierto joven llamado Isaac Asimov, a seguir sus pasos y nunca dejo de escribir, publicando su ultima novela The Stonehenge Gate cuando contaba con noventa y siete años de edad.
Aunque lo que toca ahora es viajar hasta 1934, cuando Williamson era un joven escritor de veintiséis años y comenzó a serializar en las paginas de Astounding Stories La Legión del Espacio (y que fue recopilado por primera vez en forma de libro con algunas modificaciones en 1947). Esta historia era una directa heredera de los pulps de aventuras y de la que se podría decir que encontrábamos mas ficción que ciencia, una de aquellas historias en las que a los escenarios y arquetipos del genero de aventuras se le daba un barniz extra de fantasía, cambiando las junglas en África por junglas en Marte o Venus, los barcos por naves espaciales, los revólveres por pistolas de rayos y los nativos salvajes por alienígenas.
Pero curiosamente los precedentes de Williamson en el genero de aventuras parecen remontarse un poco mas atrás que muchos de sus contemporáneos y a otro continente. Tenemos a este joven soldado cuyo sueño había sido siempre unirse a la Legión, que conoce a tres veteranos de la misma con los que acaba formando equipo, que son acusados de traición y que tienen que enfrentarse ellos solos al autentico traidor y sus aliados para salvar su hogar y limpiar sus nombres. Si es que solo les faltaba gritar en algún momento un sonoro “Uno para todos y todos para uno” para que resultase aun mas obvio en quienes se había inspirado Jack Williamson para su reparto de personajes. Una idea que copio literalmente de Henryk Sienkiewicz, quien ya había tomado prestados a los personajes de Dumas y que los había combinado con el Falstaff de Shakespeare y que otros autores han copiado a su vez.
Sobre estos cimientos Williamson construyó una de las primeras Space Operas del genero y que carga con muchos pecadillos de aquella época lejana. Leída con la perspectiva de hoy en día la historia puede resultar muy simple, casi simplona, todos los mundos del sistema solar parecen habitables y cuentan con atmósfera respirable para los humanos, en varios de ellos hay poblaciones a las que hay que “civilizar” por la fuerza, los héroes son muy nobles y heroicos, la caracterización de los camaradas de John Ulnar se limita a que Giles Habibula adora comer y beber y no se calla nunca, que Jay Kalam es un tipo serio con una mente muy analítica y Hal Samdu (Un anagrama de Dumas, porque para que disimular) es muy fuerte, y estos se enfrentan a uno villanos que son criaturas repulsivas y casi lovecraftianas que no tienen voz en la historia y que son pura maldad.
Aunque el mayor problema del libro sin duda reside en el peculiar trato que recibe Aladoree, el único personaje femenino del libro y que es al mismo tiempo una damisela en apuros y un Macguffin de manual. Tras su introducción en la que se la caracteriza superficialmente como una joven valiente que no teme decir lo que piensa, esta pasa a convertirse en un personaje sin agencia que existe solo para ser secuestrada por los villanos, rescatada por el héroe y enamorarse de este. Pero pese a eso el destino de la historia depende exclusivamente de ella, Aladoree es la única que conoce el secreto que salvara a la humanidad y como utilizarlo, es sobre ella donde reside la esperanza de obtener la victoria definitiva, y leyendo esta curiosa evolución a lo largo del libro casi da la sensación de que Williamson quería hacer algo mas con ella, pero que no sabia como o no se atrevió darle a un personaje femenino tanta relevancia como merecía.
Pero a pesar de esa simplicidad ingenuidad y los problemas obvios que nos vamos a encontrar casi siempre con los personajes femeninos en este tipo de literatura (aunque sin superar el susto que me lleve en ese sentido cuando me leí el Lensman de E. E. Smith) la historia es divertida y apasionante, Williamson nos lleva de un escenario dramático a otro sin casi un momento de descanso, siempre hay una nueva amenaza a la vuelta de la esquina o algún contratiempo inesperado que parece que será insalvable, y los héroes saltan de cliffhanger en cliffhanger (no olvidemos que esto se publicó originalmente por entregas en una revista) hasta llegar por los pelos a la victoria final.
La Legión del Espacio es un libro que a estas alturas no va a romper los esquemas de nadie, pero es una lectura perfecta tanto para pasar un buen rato como para comenzar a descubrir los orígenes del genero de la ciencia ficción y en el que podemos encontrar muchos elementos que inspiraron a incontables creadores de generaciones posteriores (que tengamos en cuenta que esta Legión protege un Sistema Solar cuyo nombre oficial es los Planetas Unidos, solo les faltaba llevar anillos de vuelo).
Ah, la Legión del Espacio, que tiempos! Y los Lensmen (los Hombres de la Lente fueron los precedentes de los Green Lantern Corps) de E. E. «Doc» Smith (el mismo de la Alondra del Espacio)! Y el Northwest Smith (pistolero espacial precedente del contrabandista bribonzuelo Han Solo) de C. L. Moore. Y el Eric John Stark de su gran amiga Leigh Brackett. Y, claro, el John Carter de Marte de Edgar Rice Burroughs (autor también del Carson Napier de Venus).
Eres seguidor de Barsoom (revista y/o libros)?
Sí, pero ya me viene el vicio pulp de la infancia. Y ya seguía estos años las ediciones de Valdemar y otros sellos, antes de La Biblioteca del Laberinto, Libros de Barsoom, Costas de Carcasa y el actual renacer de la literatura pulp en lengua castellana (gracias principalmente a que todo está libre de derechos y fácil de encontrar en inglés o francés).
Aquí otro seguidor, yo no pillé las novelas, y relatos pulp publicados por Martínez Roca (y algún otro en los 80 y 90) más que en tiendas de segunda mano y este renacer con Barsoom, Ulthar,… me está encantando.
?✌️
Y el alférez Flandry (una especie de Bond futurista) del imperio terrano.
Ed Hamilton y su Capitán Futuro, precedente de tantas y tantas cosas.
Por cierto, Ed Hamilton era muy amigo de Hank Kuttner. Edmond era pareja de la Brackett y Kuttner lo era de la Moore. Y ambas eran miembros activas del Círculo Lovecraft…y admiradoras de las espadachinas de Bob Howard (ay, esa Dark Agnes!). La Moore también escribió su propia guerrera pelirroja, por cierto (una temible castellana).
El Star Wars de Lucas era muy deudor de la obra de Hamilton y Brackett (y de Flash Gordon, claro…tanto del cómic como de los tres seriales de cine por capítulos con Buster Crabbe de prota …que también fue Buck Rogers …y Tarzan)…y contrataría a la Brackett (ya mayorcita) para novelar el guión de Star Wars. La Brackett , siendo mucho más joven pero ya una veterana escritora había sido llamada a Hollywood gracias a ser también escritora de novelitas de gangsters y del Oeste (John Ford dijo de ella: «Este tío sí sabe escribir novelas del Oeste»).
Lucas llamó a la Brackett para escribir el primer guion de El Imperio Contraataca cuando ni se llamaba todavía así (la pobre señora ya tenía el cáncer avanzado). El resultado no le gustó nada y lo reescribiría Kasdan.
Y Ed Hamilton fue uno de los guionistas de la familia Superman (no olvidemos que unos jovencitos Mort Weisinger y Julius Schwartz empezaron en fanzines de SciFi para pasar a ser agentes de escritores pulps …y de ahí a editores de DC, a donde se llevaron a algunos de sus representados, como Hamilton o el gran Otto Binder…y que por DC ya andaba Gardner Fox, que aparte de prolífico guionista y editor de la compañía era también escritor pulp). No serían los únicos escritores pulp relacionados con los cómics (hubo bastantes que escribieron para comic-strips …aunque algunos solo prestaban su nombre, caso de Zane Grey, pues hoy se sabe que era su hijo quien escribía las historias de King de la Policía Montada … también se pone en duda ya que Dashiell Hammett escribiese realmente a X-9, no tanto que lo hiciese Charteris) …incluso en Timely curraron algunos que empezaban (como una jovencita Patricia Highsmith o un jovenzuelo Mickey Spillane, que alternaba esas primeras letras con la venta a domicilio) para el agarrado de Martin Goodman.
¿ De verdad soy el único al que le asombra la erudición de Jesús Manuel Martinez Otero ?
Tio , ¿ hay algo que no hayas leido-visionado , o algun rumor – leyenda urbana- cotilleo del » mundillo» del comic-cine-televisión- literatura , de la cultura popular en definitiva. …que no conozcas ???
Dicho sea desde el respeto y la admiración.
Brainstomping…¡¡¡ fichen a este hombre !!!
Muchas cosas. Demasiadas. (También me arrepiento de haber leído y visto unas cuantas, ja) Con el pulp me acostumbré de crío, como con las comic-strips (supongo que ya entonces tenía gustos de viejo, porque ya me pirraban también las pelis de los cuarenta y cincuenta que emitían los sábados y domingos por la tarde), con cinco y seis años me leía las novelitas de Tarzan y Conan, a Poe y Lovecraft, Verne, Salgari,…
No eres el único, no XD.
«los personajes femeninos en este tipo de literatura (aunque sin superar el susto que me lleve en ese sentido cuando me leí el Lensman de E. E. Smith»
¿Cual era el susto? (no he leido las series de Lensman)
Básicamente había un arma extraordinaria que unos seres alienígenas le daban a los humanos (las lentes del titulo), un poco como los anillos de poder de los Green Lanterns, y al menos en el primer libro en el que aparecieron (First Lensman, el segundo de la saga) las mujeres no tenían la capacidad psíquica necesaria para utilizarlas o algo así. Por lo que tengo entendido en los siguientes libros eso se parcheo, y ya en el primero salían mujeres aguerridas que no tenían problema en agarrar un arma y atacar a sus enemigos, pero lo de las lentes sexistas esas fue algo que me pillo por sorpresa al leerlo por primera vez hace cuatro o cinco años.
Yo pensaba que lo del Matriarcado Lyraniano (las mentalistas de Lyrane odian todo lo masculino …de hecho a Kimball lo reciben intentado cepillarselo …y no en el buen sentido?). Bueno, gracias a ello Clarissa asciende de enfermera a heroína, pues dado que allí odian a los hombres, Kimball la recomienda para la misión y así es destina allí como la primera mujer Lensmen (sí, en eso futuros del pasado no iban tan avanzados …pero pese a todo, comparado con la competencia, Smith fue un adelantado también en eso).
Sí, un reptiliano con un buen rabo podía ser Lensmen con cierta facilidad, pero una mujer lo tenía mucho más complicado, al menos al principio.?…Algunos ven a Clarissa como un precedente de Leia (no sé yo si tanto … sí son más claras las influencias de Captain Future en Star Wars …Y es cosa sabida que lo del relanzamiento de Green Lantern en la Silver Age como miembro de un cuerpo policial espacial viene claramente por los Lensmen)
Stan Lee fusilaba mucho a los escritores pulp, pero también a los guionistas de comic-strips (el Mandrake y The Phantom de Lee Falk y el Flash Gordon de Dan Barry y compañía fueron una fuente nada disimulada de inspiración …y a veces de algo más, que llegó a copiar con descaro)
Joder, le falto decir que no podian arbitrar partidos de futbol masculino.
Como se suele decir en estos casos: eran otros tiempos.
El personaje de Clarissa MacDougall se llama así por Clarissa MacDougall, la hermana de la mujer de Smith (Jeanne), ambas muy guapas (Jeanne era una pelirroja altiva). Una de las hijas de Smith también recibiría el nombre de Clarissa.
Hubo anime tanto de Lensman como de Captain Future.
El anime de Capitán Futuro, de hecho, tuvo, por lo que sé, mucho éxito en Alemania (donde llegó a tener su adaptación al cómic).
La peli de anime de Lensman la llegamos a ver en España en los 90 (no recuerdo si editada por Manga Video tal cual o a través de su sello Anime Video).
En Alemania también hicieron cómics locales de He-Man (Masters del Universo) y otros héroes animados (entre los autores de este He&Man teutón había dibujantes españoles de la escuela Bruguera, como alguno de los colaboradores de Darnis en El Jabato). También nuestro Rafael López Espí (más recordado por sus portadas Vértice) hizo portadas de The Phantom para la germana Bastei (antes, aquí, ya había hecho las portadas de Flash Gordon y The Phantom de Vértice), para la que también hizo portadas de bolsilibros de terror, como otros ilustradores españoles (como el gran Prieto Muriana … bueno, Mandred Sommer incluso hizo portadas de novelitas románticas para Alemania)
Manfred Sommer
Huy, pero es que si nos ponemos a hablar de autores españoles que dibujaron regularmente para el extranjero para ganarse las habichuelas, da para varios artículos… Hasta la revista infantil por excelencia de Alemania, «Fix und Foxi», tuvo dibujantes españoles (como Tran, al que conocimos por su «Plurilópez» para Bruguera). Si hasta Raf dibujó para Inglaterra… Jesús Redondo dibujó para Holanda, etc. (y eso sin entrar en cómics Disney producidos para Escandinavia).
Para Alemania un montonazo (Bruguera ya les mandaba tempranamente mucho material expresamente realizado para ese mercado a través de su propia agencia «for export» y durante algunos años algunos dibujantes hicieron más cómics para Alemania que para el mercado nacional), tanto en cómic como ilustración (ya solo para Bastei…). Para Suecia también unos cuantos (ya varios para el Fantomen). Y en Holanda hubo también mucho español en cómics Disney y en revistas femeninas. En Italia en westerns y fumetti eróticos. Y en el mercado francobelga siguen todavía hoy nuestros autores (veteranos y jóvenes).
Lo del mercado británico fue casi inabarcable en los setenta y ochenta, pero venía ya de antes (humor, western, bélico, ilustración, terror, romántico,…)
Sí, Manga Films sacó el VHS.
Heinlein (el de Tropas del Espacio) también estaba fascinado con la belleza de las hermanas MacDougall.
Muchos vemos en el Matriarcado de Lyrane y sus supermujeres con poderes mentales el claro precedente de las Zamaron de DC (y en la rebelde enfermera pelirroja Clarissa MacDougall el de la morena Zafiro Estelar).
¿Para cuándo un artículo sobre La Saga de los Aznar?
A menos que ya se haya hecho aquí, claro.
George H. White (Pascual Enguidanos), …que horneaba novelitas como panes! Hubo cómics también de la Saga de los Aznar. Un par de etapas. La dibujada por Matías Alonso (el de La Capitana) me gustó bastante.
Yo cogí un día por curiosidad la primera novela de la Saga del Orden Estelar (escrita por Ángel Torres Quesada bajo el seudónimo de A. Thorkent) y se me hizo intragable, pero tal vez algún día debería darles otra oportunidad.
Ni te molestes! HUYE!
¡Veo que mi primera impresión fue acertada!
Yo no sé como tienen tanta repercusión, supongo que algo tendrá que ver el hambre de ese tipo de historias y el desconocimiento de algo mejor.
Y yo que tengo las cuatro primeras novelas de esa saga (no se si hay mas) que pille a un euro cada una en un mercadillo…
Te estafaron, te tenían que haber pagado cuarenta pavos por quedartelas.
También compre de segunda mano la primera trilogía de Dragonlance…
Para eso ponte a ver critical role!
La Capitana, por cierto, era una secuela de El Charro Temerario, pero eso ya es friquismo avanzado (y vetusto), por así decirlo (todavía hubo una tercera serie de ese subuniverso de cuadernillos) .?