Podríamos decir sin mucha discusión que los años 60 los marcó Jack Kirby y que los 70 ya fueron de John Buscema. Sin embargo, con los 80 ya habría más debate, porque el género se diversifica y la invasión inglesa hace que la cosa se difumine un poco, por no hablar de que Frank Miller pegó muy fuerte. Sin embargo, creo que si a un lector de cómics de los 80 le preguntaras cuál es el autor de la década, probablemente te daría el nombre de John Byrne.
Y eso que ya por aquel entonces estaba asociado a la polémica, tanto en lo personal como en lo artístico; y es que si hoy en día tiene esa imagen de ermitaño encerrado en su cuevaforo y vive enfadado por todo, en tiempos John Byrne era la temperamental superestrella que pasaba por cada serie como un vendaval y ponía todo patas arriba, provocando que ningún lector quedara indiferente. En una época en la que todavía había lugar al debate sobre si lo importante era el personaje o el autor, Byrne era un valor seguro para las editoriales, porque fuera a donde fuera arrastraba a multitud de lectores que lo seguían a cualquier serie que hiciera. Y es que la crítica de la época podía estar más a favor de Alan Moore, Claremont o Frank Miller, pero la superestrella era John Byrne.
John Lindley Byrne nació un seis de enero de 1950 en West Bromwich, Inglaterra, y su familia emigró a Canadá ocho años más tarde. Para entonces John ya había conocido a Superman mediante la serie de televisión, con lo que para él el nuevo continente vino a traducirse en cómics, montones de cómics. El Superman de Curt Swan, el Batman de Dick Sprang -aunque él pensaba que era de Bob Kane, ya sabemos por qué- el Tarzán de Joe Kubert… Byrne llegaba también justo a tiempo para presenciar el inicio de la edad de plata, con las primeras apariciones de Barry Allen, Hal Jordan y lo que vendría a ser la Liga de la Justicia, pero lo que realmente le volaría la cabeza llegaría unos años más tarde cuando cayó en sus manos el número cinco de The Fantastic Four, la primera aparición del Doctor Muerte y el primer cómic de la serie firmado por el tandem de Stan Lee, Jack Kirby y Joe Sinott.
Sin embargo, y a pesar de que Byrne se volvió loco por aquel cómic -para él era inconcebible que Superman y Batman se pelearan tal y como lo hacían la Antorcha Humana y la Cosa- pero para los 15 acabó cansándose de ellos cuando la portada del número 32 de la serie le prometió que jamás adivinaría la identidad del villano de la historia y él la descubrió en la cuarta página. Ya fuera por esto o por las presiones de unos padres que se creían las mamarrachadas de Wertham, Byrne decidió que ya estaba mayor para los cómics y se pasó a El Señor de los Anillos, Star Trek y a leer ciencia ficción en general. Afortunadamente la tontería no le duró más de cinco años y gracias a un golpe de suerte en una tienda de segunda mano, John pudo ponerse al día con los 4 Fantásticos, el Spiderman de Ditko o los Vengadores; en aquel momento ya no había vuelta atrás, la idea de hacer cómics se le empezó a meter en la cabeza y, dejando de lado alguna incursión desafortunada, podría decirse que realizó su primer cómic antes de terminar sus estudios de arte: The Death’s Head Knight, un cómic de veinte páginas hecho a golpe de viñetas de doble página en el que, según el propio Byrne, se ve su versión «más pura, una anterior a la influencia de Jack Kirby, John Buscema o Neal Adams».
Tras terminar sus estudios empezó a trabajar en publicidad mientras trataba de meterse en los cómics mediante fanzines, etapa durante la que conocería a Roger Stern o Bob Layton, creando al personaje de Rog 2000 que acabaría haciendo que se fijara en él el editor Nick Cuti de la Charlton y le propusiera publicarlo como complemento de E-Man, logrando así su primera serie regular, tras la que vinieron otras series de la editorial como Doomsday +1 o Space: 1999. Y así es como se acabó fijando en el un tal Chris Claremont, que por aquel entonces guionizaba Iron Fist y andaba necesitado de dibujantes después de que «el gato de Pat Broderick vomitara sobre el número anterior o algo» -palabras literales de Byrne, yo me lavo las manos-. Para entonces Byrne solo había tenido una colaboración puntual con Marvel en una historia de El Hombre Cosa que hizo para Tony Isabella, pero fue con Iron Fist con lo que llegó a Marvel y comenzó la progresión que lo llevaría a convertirse en la estrella de la editorial.
La historia de Puño de Hierro hasta ese momento había sido una de dolor y sufrimiento, con el pobre Daniel Rand siendo creado por Roy Thomas y Gil Kane en el número 15 de Marvel Premiere para pronto acabar en manos de Tony Isabella, que arrastró al personaje a lo largo de siete números infumables hasta que Claremont se hace con la serie -uno de sus primeros trabajos como guionista, ya que hasta entonces solo había desempeñado labores editoriales- junto al ya mencionado Pat Broderick hasta el número 25 con la llegada de Byrne. Estamos ante un John Byrne primerizo que se centra en los planos cortos, que parece apresurado a pesar de que por entonces ya era un dibujante capaz de dibujar tres series al mes.
John Byrne suele describir su experiencia junto a Chris Claremont como un matrimonio de cinco años que terminó con un divorcio en el que Claremont se quedó con los niños y Byrne con la casa. Pero mientras duró el matrimonio… ¡Que pedazo de matrimonio! Los dos autores se consagraron juntos profesionalmente, y es en Iron Fist como se les ve pasar de un estilo más «amateur» a consolidarse como los autores que conoceríamos posteriormente. Claremont en aquel momento está explotando en X-Men junto a Dave Cockrum y Byrne empieza a mirar la serie cual Gollum a su tesoro, diciéndole a Claremont que si Cockrum deja la serie y no lo llaman a él «habrá sangre», con lo que para cuando Dave Cockrum demuestra una vez más su mayor punto débil -sus problemas con las fechas de entrega- ahí está Byrne para demostrar una vez más que es uno de los dibujantes más rápidos del negocio.
Para entonces Claremont y Byrne ya se conocen de sobra y están en mitad de su luna de miel, compartiendo la nueva cabecera de Iron Fist en solitario, Marvel Team-Up y ahora X-Men. Sin embargo, y a pesar de que el trabajo de ambos en Iron Fist ha ido mejorando, el cómic es cancelado en el número 15 y obliga a Claremont y Byrne a cerrar tramas en dos números de Marvel Team-Up, dejando los dos autores al personaje definitivamente con tres números de Powerman en los que Luke Cage e Iron Fist se conocen y acaban compartiendo cabecera. Todo es felicidad, Claremont y Byrne están juntos en X-Men y su nuevo editor es un viejo amigo de Byrne, Roger Stern; X-Men despegará en ventas de forma estratosférica y el dúo va a recibir todo el reconocimiento que merecen… Y justo con ese éxito se romperá el feliz matrimonio.
Sea o no el rey de los ochenta, ahora mismo esa frente tan despejada está pidiendo a gritos una buena cresta ósea estilo klingon.
Con lo fan que es de Star Trek, te digo yo que hasta te la agradecía!
Coñe, aunque sabía de su trabajo en la Charlton antes de Marvel y ya imaginaba lo de su fogueo en fanzines, desconocía su «Rog 2000». La portada mola XD. ¿Guiño al Robotman de los años 70 (que en su retorno tenía un diseño parecido)? Sabiendo que Byrne conocía bien a la Doom Patrol…
Byrne dibujó un número de Doom Patrol en los 80.
Lo sé, lo sé, por no hablar de su propia etapa como autor completo en la serie, el vol.4 entre lo de John Arcudi y el relanzamiento de Keith Giffen.
Por eso mismo lo decía XD, porque en su etapa del vol.4 hacía lo típico en él de pasar de los anteriores autores y volver a los orígenes porque estos le molan, así que parecía que lo hacía por ser fan de la etapa original de los 60.
También hizo una etapa en dos mil y pico, lo dificil con Byrne es encontrar una serie que él no hiciera!
¡Existe libro español dedicado específicamente a este asunto! (No lo tengo, lo desconozco todo el superhombre byrnoniano, pero el libro parece estar bien documentado sobre la base de los propios cuadernos originales; que creo están vendiendo a través de Chollocolección.)
Me suena tener una historieta completa de Rog 2000 en español perdida por algún fanzine teórico.
Que nadie se vuelva loco buscando Rog que aviso que Byrne era bastante novato en aquellos tiempos, esa portada la hizo en los 80 para una reedición, así que no es precisamente una muestra de lo que nos encontraríamos dentro.
https://www.tebeosfera.com/numeros/john_byrne_2019_heras_-la_era_charlton_1975-1976-.html
La de Kupperberg es posterior a Rog, así que en todo caso sería guiño a Rog. Y la verdad, no me extrañaría nada.
Si sirve mi testimonio, yo me animé a leer DC -Zinco porque Byrne se fue allí. Reconocí su arte en la portada y compré el num. 2 de «Legends»
A partir de ahí, me animé a probar más series y me quedé hasta que Zinco cerró
Creo que Byrne y Crisis son las principales razones de que DC empezara a vender por aquí, porque antes de todo aquello Zinco no levantaba cabeza y andaba cancelando serie tras serie. Y creo que en EEUU pasó también algo parecido, porque aunque los cómics se leyeran más DC llevaba mucho tiempo de capa caida.
Perdón por el ‘off-topic’, pero hablando de Byrne y demás me he acordado… La viñeta del Doctor Muerte sentenciando «My greatest flaw. I sorround myself with idiots», ¿de dónde procede? No he identificado ningún origen claro, y he llegado a pensar que es algo de internet, más que proceder realmente de algún cómic.
Pues sí procede de un cómic, de la novela gráfica «Emperador Muerte» 😉
NEFASTA NOVELA GRÁFICA, LO QUE DECIA YO!
Muchísimas gracias a ambos! Manda narices por mi parte, porque me lo prestaron hace años y me gustó bastante (tendría que releerlo para ver si mantengo la opinión o cambio de idea).
Muerte no tiene (esto es, no reconocería jamás) fallos, luego tiene que ser un invento o directamente un mal guionista. La única viñeta que no parece un montaje es esta, y parece que la ha hecho Tom Morgan:
He pensado que igual era del Actos de Venganza del Castigador, pero le he echado un vistazo y no lo veo por ningún lado.
En fin, seguro que es un muertebot!
Asi como tras décadas de idolizar a Stan Lee se reivindicó a Jack Kirby, a veces deseo que se reivindique a Byrne y no se de todo el mérito a Claremont en los X-Men.
Aunque tiene grandes virtudes, Byrne no ha sido nunca muy alabado, me parece. QUizá se debe a que ha sido siempre un hombre de la compañía y un gran artesano, pero no un artista de vanguardia. Es injusto que a veces se valore más una «flor de un día» que a un hombre que con su trabajo continuo hizo las bases de muchas colecciones Marvel y DC.
Debo decir que para mí un número dibujado por Byrne siempre fue un gran aliciente para comprar un comic.
Aparte de X-Men y Superman, creo que de lo más importante que ha hecho ha sido crear la versión moderna del Doctor Muerte (mejorando y ampliando la de Lee/Kirby).
No sé si Byrne necesita reivindicación. La gente suele olvidar a Claremont si no se trata de sus colaboraciones con Byrne, Davis y Jim Lee como si sus etapas con Cockrum, Smith y Romita Jr. no tuvieran nada destacable. Mientras que nadie olvida lo hecho por Byrne (o Miller), solo que se les hace notar lo mucho que se han arruinado solos y no porque Shooter te reviva a Jean Grey o Harras te eche de tu casa y se quede con tus hijos.
Y a fines de los ’70 comienzos de los ’80 Byrne definitivamente era de vanguardia, no se volvió gran artesano hasta los ’90 con su Namor. Durante los ’80 Byrne disfruto riéndose de los lectores en su Alpha Flight, jodiendo a Claremont con DoomBots y reviviendo a Jean Grey con Busiek, re-lanzando Superman como le dio la gana en DC (aunque aquí si que lo borda como nadie), destruyendo el Nuevo Universo de Shooter, destruyendo a Vision y la Bruja Escarlata (posiblemente la obra magna de Thomas y Englehart), rompiendo la cuarta pared con She-Hulk y cuando vio que lo estaban re-escribiendo todo en los ’90 intentó re-escribir a Lee-Ditko y Claremont. ¿Que hay para reivindicar ahí?
Ese rencor por lo de Jean es lo que te pierde!!
Esa es una opinión muy negativa del asunto…
Pues yo opino que en Avengers West Coast Byrne estaba en su mejor momento como dibujante, que ALpha Flight supuso un antes y un después, y que después hizo el crossover Capitán América/Batman, que me encanta, y Batman/Superman generations, que es muy buena (por lo menos las dos primeras miniseries).
La única opinión en mi comentario es «aquí si que lo borda como nadie» con respecto a su Man of Steel. El resto son cosas que hizo, no mi opinión sobre su obra. Para reivindicar se necesita re-visitar esa misma obra y ver todas sus partes. Especialmente si es para reivinidicar a Byrne sobre Claremont, cuya obra tras Días del Futuro Pasado es de las cosas menos reivindicadas del cómic estadounidense prefiriéndose muchas veces incluso las etapas de Silvestri y Jim Lee sobre Paul Smith y Romita Jr. (algo que no entiendo en lo más mínimo). Por cierto, más abajo está mi comentario admirando a Byrne, que tampoco creo que no se merezca el cariño que le tengo a pesar de todo.
TREINTA AÑOS DESPUÉS Y SIGUE SIENDO POLÉMICO!! BYRNE, QUE GRANDE ERES!
Euh… ¿Sus «Next men» para Dark Horse?
¿Sovereign Seven? xD. Está en lista de espera. Es de la época de su Namor. Cuando esencialmente renegó de colaborar con otra gente (Claremont también se dedico a novelas, que eran los ’90 y estaba lleno de malos editores y peores dibujantes). Hasta donde sé acabó de forma poco ceremoniosa cuando simplemente dejó de dar ganancia.
Algo que le pasa a Byrne por hacer tanto en los ’80; para los ’90 ya estaba más que visto y el no estirar el musculo justamente colaborando con alguien como Claremont en vez de Mackie le atrapó aún más en un rincón del mercado que se reducía cada vez más en una industria que, tras recuperar a la gente que espantó con los ’90 y Wizard, se pasó una década intentando deshacerse del pasado con luminarias como Dan Didio, Jim Lee, Harras y Tom Brevoort en puestos editoriales. Y ahora está como está.
Una cosa si te digo, no hay color entre Next Men y Sovereign Seven, entre otras cosas porque Next Men tuvo a un buen autor tanto en guión como dibujo y S7 tuvo a dos manazas en el dibujo que deberían ser juzgados en el tribunal de Ginebra por crímenes contra el cómic.
Oh, por supuesto. Por eso mencioné que se fue a hacer novelas. En realidad iba por el poco impacto que las dos obras, hechas por dos personas que supieron ser los juggernauts de la industria, tuvieron en su época y hoy en día. A lo mejor S7 se recuerda más por salir en DC, no sé. Y tampoco digo que Byrne fuera malo en los ’90, que a eso iba mencionando su Namor que sí conozco y que está muy bien para haber salido de una idea de Tom DeFalco.
Claremont tiene Deuda de Honor de Star Trek con Adam Hughes -muy buena- y Alien VS Predator: The Deadliest of the Species, que lamentablemente no tuvo ninguna continuidad y planteaba ideas bastante interesantes. Pero claro, por aquellos tiempos a Claremont lo estaban cortejando los niños de Image, una cosa llevo a la otra…
Bueno, es que Claremont con Cockrum demuestra sobradamente que los X-Men son suyos, Byrne aporta muchísimo, pero cuando vuelve Cockrum y entra Paul Smith la cosa no se resiente ni la mitad de lo que dice Byrne.
Y honestamente, Byrne era dios en los 80, eso te lo aseguro, de hecho cuando se puso a hacer Chapter One y todo aquello la gente se sorprendía de «lo malo» que era Byrne. Eso sí, en los 80 también había desnortados que creen que BWS es mejor que Byrne, igual que los hay que creen que su Conan es mejor que el de John Buscema. ¿Que quieres que te diga, si Jim Lee sigue teniendo fans que presumen de ello por la calle?
Me gusto mas en superman
Yo lo ví más disperso que, por ejemplo, en los 4F.
Byrne es, de las estrellas de los ’80, el del estilo más accesible; moderniza a Kirby y comparte con él algo muy importante para ser una estrella del cómic: la velocidad. Estaba en tres series a la vez mientras Cockrum tenía problemas con X-Men, Miller tenía que dejar que Klaus Janson hiciera cada vez más en DD y Simonson se volvía más angular y sketchy (con resultados impresionantes) en Thor hasta dejar a Sal Buscema al dibujo. Alan Davis hace una entrada tardía con Excalibur. Marshall Rogers regresa también tarde y solo con Englehart en Estela Plateada (¿qué le pasó entre estas dos colaboraciones con Steve?). Paul Smith es uno de mis artistas favoritos pero especialmente su etapa en Dr. Extraño está muy cortada y el espectáculo y la ciencia ficción a lo bestia como Byrne no le salía. Romita Jr. no iba a explotar hasta los ’90 cuando empezaría a dibujar LEGOs, George Perez era demasiado detallista y sus layouts solían destacar ese aspecto lo que al público general hace a sus cómics parecer una galería de arte (se necesita a Wolfman y Wein en su mejor forma y destruyendo el multiverso de DC para que George Perez pueda ser parte de la historia que cuenta y no estar por encima de esta como le paso en Vengadores). La invasión inglesa también es algo tardía; Bolland era más un portadista y Gibbons lo borda pero de forma limitada en GL y Watchmen (no con longevas etapas en X-Men y los 4F + Man of Steel, sus Alpha Flight y sus pasos por Los Vengadores y Marvel Team-Up y hasta Capitán América). Michael Golden no colabora lo suficiente con Stern y Claremont y acaba con Micronautas y The ‘Nam en vez de convertir al Dr. Extraño en superventas (algo de lo que probablemente deba culpar a Shooter). Art Adams es otra entrada tardía. Mazzucheli como anotaste en Superman Year One no se prodiga demasiado tampoco. Bill Sienkewicz pasa de clon de Neal Adams a algo que definitivamente, casi que desafiantemente, no es la norma. Ron Frenz era el colaborador favorito de Tom DeFalco y eso es un detrimento (tanto como su estilo extra-clásico). Si hay más, todos pierden ante Byrne en una cosa u otra (no hicieron tanto, no les sale algún aspecto ya sea drama, acción, ciencia ficción, aventuras, etc., nunca escribieron, nunca colaboraron con la gente correcta, etc.).
Byrne es la super-estrella de los ’80 por más que solo meter lío. Si puedes hacer X-Men, los 4F y Superman al nivel que este hombre los hizo en los ’80 y poder sacarte un Alpha Flight de la manga mientras la gente recuerda como molabas en Iron Fist y Vengadores (cosa de volver con los de la Costa Oeste y dejar las semillas de House of M), eres una super-estrella porque nadie más de tu quinta se te compara (ahora, si empezamos a contar a los Buscema y Neal Adams, la cosa se pone más difícil). Eso si, es una verdadera lástima que jamás dejo de ser ese chico de 15 años que paso de leer los 4F porque se dio cuenta quien era el villano antes de terminar la historia.
Que conste que leí lo que hizo en los NUevos Vengadores en los 80-90 y no me gustó que «matara» a la Visión, y lo de la Bruja Escarlata fue muy cruel… Pero creo que no se le puede dar la culpa de las paridas de Bendis.
Byrne para mi es un gran fan que consigue su objetivo de seguir el camino de Kirby.
Estoy de acuerdo contigo en general, aunque no se bastante de historia de los cómics como para opinar sobre todos esos artistas…
Nah, yo no lo culpo de eso. Sería terriblemente injusto (y culpo más a Brevoort incluso que a Bendis).
Pero si voy a mencionar voy a mencionar todo cuanto pueda y no quedarme con lo bonito. Más con una figura repleta de luces y sombras como Byrne (que yo le defiendo y le critico por igual).
Yo prefiero a BWS!!
Byrne tuvo la mala suerte de compartir década con Miller y Moore. Es peor que ellos pero a la vez mejor porque es un autor completo notable en todos los aspectos mientras que Miller en el dibujo es solo apañado y Moore directamente no dibuja. O sea, que sí, Byrne es el dibujante de los 80, pero al final ninguna de sus obras está entre las mejores de los 80. Es que el tipo también tuvo que competir con Eclipse y con First que tienen cosas muy majas como American Flagg.
Y Byrne fue tan vanguardista como el que más sólo que a nivel más gamberrete. Jugaba con la ausencia de fondos como nadie en una época en que a nadie se le ocurría pasar dellos. Y luego junto a Giffen y DeMatteis metió la sitcom en los Superhéroes cuando nadie había hecho algo así, y cuando lo que estaba triunfando es el grim&gritty ese de infausto recuerdo. El problema de Byrne es que no le han seguido salvo en lo de los fondos pero nadie lo hace con la sorna con que lo hacía él (ni siquiera él mismo) u oponiendo al vacío figuras minimalistas y hermosas.
Creo que si Byrne hubiera sido la estrella indiscutible de los 80 hoy tendríamos un mainstream más clásico que el actual. Pero al final fueron los ingleses los que triunfaron,
Me he cuidado mucho de decir que es la estrella indiscutible y decir que lo era para los lectores de la época, porque es que era así. A Byrne lo ficha DC por una morterada de dinero, se hace de oro en una época en la que Miller o Moore harán maravillas, pero a la hora de la verdad el que levanta series solo con su presencia es Byrne y son los lectores los que corren a por sus tebeos; no podemos olvidarnos de que en España se malpublicó el Daredevil de Miller como complemento de Spiderman y las ventas de La Cosa del Pantano de Moore no fueron precisamente las del Superman de Byrne. Y es eso lo que quería reflejar, el hecho de que en aquel momento era el más importante y -mal que le pese- una de las influencias principales de los nenes de Image que arrasaron con todo en los 90.
Pero bueno, con eso me estoy adelantando y tengo que dejar algo para los siguientes posts, que narices.
Sí, sin la perspectiva es así. Como dices. Byrne ya había triunfado antes de que Miller y Moore lo petasen de verdad en los 80. En el momento parecía que era él pero eso se fue disolviendo y yo creo que es una de las razones de su cabreo con el mundo.
Es triste pensar que él vio como los lectores se reían de Kirby en los 70 y luego los lectores de los 90 se reían de él. Catetos todos, vaya.
Moore y Miller también (y Moore lo reconoce) rechazaban al lector más juvenil de buenas a primeras en sus historias. Mientras que Byrne era más Pixar, dejando cosillas para los más grandes mientras los niños disfrutan del espectáculo. Llegarle a más audiencia es parte de ser una estrella.
Y Miller no es apañado, sino que es, junto con Chaykin, el precursor de «feistas» como Gaydos o Latour. O por lo menos a mi me lo parece, que cosas como Ronin, The Dark Knight Returns y 300 están impecables en lo gráfico (que también le podemos echar la culpa a Lynn Varley) y Sin City es una enorme obra noir.
A pesar de lo difícil que es porque los ’80 rebosan de calidad, yo creo que tanto Man of Steel como su colaboración con Claremont en X-Men si que están entre lo mejor de la década.
Y, por pura maldad, el sitcom de superhéroes es invento de Gerber (tanto Byrne como DeMatteis son fans de Gerber).
Miller es apañado porque es un mal dibujante así que tiene que apostar por todo lo demás. Un dibujante mainstream tiene que dominar la anatomía porque vive de dibujar gente desnuda en acción y eso Miller no puede. Por tanto no es feísta sino que hace lo que puede. Feísmo es una opción. El talento dibujístico de Miller es cortito y para él no hay opción.
Gerber más que sitcom creo que hizo sátira. Pero me vale. El asunto es que hasta él con Hulka o hasta la JLI eso no se vuelve popular de verdad.
Bueno, también hay que decir que Miller es bueno en todo en lo que BWS es malo, así que yo no diría que Miller es un mal dibujante ni que BWS sea malo tampoco, los dos son buenos solo que uno es más académico que el otro.
Claro que BWS es peor que Miller, simplemente porque se supone que los dos hacen cómics.
Cuando hablo de dibujo me refiero a lo que podemos llamar académico o realista que es el estilo típico del mainstream, dejo aparte la narración y demás cosas. Dibujar bien no es dibujar realísticamente bien, PERO el aficionado medio al mainstream de siempre ha demandado eso y no gente que es un grandísimo dibujante académico pero le gusta ser expresionista como Sienkewicz. Como artista de cómics sí, el mejor Miller es mejor que BWS.
«Claro que BWS es peor que Miller, simplemente porque se supone que los dos hacen cómics.»
Enviaría a mis monos voladores si no estuvieran sindicados los muy…
Ni en su época de mayor esplendor como autor completo Frank Miller habría sido capaz de emular los picados y contrapicados que hacen de cualquier escena de acción dibujada por Barry Windsor-Smith algo superior a la secuenciación vista como simple composición de página. De haber sido dibujada Ruleta por BWS esta historia sería mucho más emocionante y nos habríamos librado de esas horrendas viñetas horizontales del final, ya de paso, de bastantes cartelas de texto, gracias a su capacidad para apretar encuadres como solía hacer con la Patrulla-X y personajes como Lobezno o Tormenta. Que solo por el modo en que componía sus figuras no necesitaban expresar ningún pensamiento en forma de bocadillos o de textos. Al contrario que cualquier figura dibujada por Miller no dejará de mostrarse como las convencionales posturas de un superhéroe. Así que niego la superioridad como historietista de Miller sobre BWS, aun cuando resulte evidente que se situó como autor por encima del dibujante británico. Pero nunca porque se tratase de un narrador mejor, sino debido a la afortunada e inteligente focalización que Miller imprimió a sus relatos y argumentos. Tan fácilmente asimilables a la figura del vengador que acabó por reinar en el subgénero superheroico; y de la que nunca ha sido capaz de desprenderse el FM, por cierto.
Y ya sabemos que el Conan de Barry Windsor-Smith nunca será el más elogiado. Que jamás va a escupir tan lejos como el de Buscema. Ni será tan alto como el Neal Adams. O tendrá un semblante tan terrible como el que le imprimieron los filipinos Pero todo esto no es más que la demostración de la ejemplaridad como modelo heroico del Conan de BWS, porque es el más cercano a la dimensión desesperada del personaje literario. Y no ese encarroñado vikingo de las pelis y la mayoría de los tebeos.
Pues… No, no estoy de acuerdo. Y soy consciente de que para hablar de esto necesitaríamos meter ejemplos, imágenes y demás, pero es que yo veo Sin City y lo comparo con Adastra y me parece que no hay color (heh). BWS es mucho más estático, y probablemente eso venga de que Miller sí es guionista y sí es autor completo, siendo mucho más consciente del ritmo y la armonía que hay entre una viñeta y otra de lo que es BWS, que en multitud de ocasiones se pierde entre tanto ruido.
Que no es que quiera convertir esto en un debate sobre la línea clara, ni tampoco decir que Miller es el mejor dibujante de la historia que por algo Miller tiró de Mazzucchelli en cuanto tuvo ocasión, pero a la hora de la verdad Miller tiene el don de elegir el encuadre exacto para la viñeta determinada, sabe colocarte la cámara en el punto exacto, mientras que BWS es un dibujante cuyo gusto por el naturalismo hace que en ocasiones sus figuras se vean forzadas; esto, por ejemplo, no me pasa tanto con Manara y otros dibujantes de esa cuerda, y es algo que siempre me ha reventado de BWS. No sé, siempre lo he visto encorsetado por su propio estilo, aun cuando soy consciente de que todo esto es la mar de discutible y puede dar un debate estupendo.
Eso sí, con Mazzu no hay debate, Mazzu barre el piso con los dos!
No sé… diría que en «Archer y Armstrong» BWS sí demostró fluidez narrativa y menor estatismo que en obras posteriores. Y que podía ser autor completo sin problemas… aunque no puede durar mucho en una serie mensual. Como Kevin Maguire, más o menos.
Tampoco estamos hablando de que BWS sea Ron Lim, simplemente estamos discutiendo cuales son los puntos flojos de BWS comparado con Miller. Vamos, que cuando digo que BWS es más estático que Miller no estoy diciendo ni mucho menos que BWS sea un tronco. Y sí, en su día Miller demostró que podía llevar una serie como autor completo sin mayores problemas.
No sé, yo siempre he visto al Miller dibujante más experimental, más juguetón con el fondo y la forma, mientras que aunque BWS tiene composiciones interesantes e investiga recursos, pero siempre ha sido más John Buscema que Will Eisner.
Y por favor, que nadie piense que estoy poniendo a Buscema por encima de Eisner o viceversa, que entonces ya el debate ya se nos sale de madre!
Desde ahí pues si, que tampoco es ni Sienkiewicz ni Romita Jr. que les sobra pruebas de que pueden dibujar tan parecido a Neal Adams como quieran.
Yo me refería más a sus Defensores, que a Howard el Pato y el Hombre Cosa. Aunque también se les puede considerar sátira (como sus Guardianes de la Galaxia).
Lo de la sitcom es discutible, ¿eh? Humor con superhéroes se había hecho antes, que eso a Stan Lee le encantaba!
Humor habido siempre pero que cada grapa equivaliese a un episodio de una sitcom no es hasta Hulka y JLI. Podemos poner al Pato, yo he leído poco porque a mi Gerber no me parece gracioso, pero en verdad eso es más parodia o sátira y no una comedia de enredo.
Frank Miller no es buen dibujante en general, pero creo que lo que quiere narrar lo narra muy bien.
Definitivamente lo es. Pero como definición de una etapa como Lord_Pengallan lo presentaba en su comentario creo que se ve por primera vez en el mainstream en Los Defensores de Gerber. Que también, sitcom y humor no son lo mismo. Stan Lee puede escribir un gag de La Cosa y la Antorcha Humana y escribir tongue-in-cheek pero que el motor de tu historia sea en parte Hulk adoptando un cervatillo poseído por un villano entre los que tenemos los HeadMen (y Ruby) mientras un duende asesino liquida gente porque si, pues, es más sitcom-y.
Es tremendo como reivindicas los Defensores de Gerber, me olía que irías por allí y no me has defraudado!
Más que reivindicarlos solo los recuerdo. Si los reivindicara hablaría de cuantas similaridades tiene Gerber con autores de la invasión inglesa… xD
Y al final, no se supo quien era el duende pistolero…
DeMatteis creo que intentó explicarlo. Gerber no tenía intención de hacerlo.
Vale, yo ejque no he leído los Defensores de Gerber…
Es uno de esos cómics de los ’70 que vale más por lo que hizo en esa Marvel que empezaba a estancarse que por dejar una huella indeleble en el UM como si lograron Englehart y Starlin. Igualmente, a mi me encanta el Gerber de esas épocas y realmente creo que lo de cómics como sitcom viene de sus Defensores.
¿Quien creo a la pandilla de la Calle Yancy? ¿Lee o Kirby?
Lee, porque surgieron primero como unos lectores que trolleaban el correo de los 4F.
Claro que si no eran cartas inventadas por Lee, está claro que no son una invención ni de Lee ni de Kirby…
Lee, QEPD, era muy capaz de ello, supongo… Pero se puede detectar fácilmente que una carta es falsa porque en los 60 él no tenía ni pajolera idea de como hablaban los jóvenes, solohay que ver como escribe los diálogos de Spiderman.
Así que si nadie detectó que la pandilla era un timo, asumo que eran auténticos. mejor que mejor. Make mine Marvel!
Si eran fans y Lee aprovechó para meterlos en el cómic, como que eso hace que Stan Lee sea mucho más grande!
diría «que lastima que byrne y claremont se separaron» pero la verdad que xmen siguió en excelente nivel y cae recién en la etapa australiana (cuanto seria cinco años?? uds me dirán) y byrne tuvo etapas geniales en los ff y cuanta coleccion pasó en Marvel y dc hasta que de a poco empezó a tropezarse con su propia leyenda para mi en su segunda etapa en dc ww los New gods etc. aún así el tipo tiene obras muy reseñables en los últimos 15/20 años: las tres miniseries de generaciones (la tercera está muy vilipendiada pero sirve de muy buena presentación al futuro de dc muere de envidia bendis y tu millemiun) y la minis3rie del Dr maccoy (ok soy muy muy trekker) saludos! es bueno leer de byrne claremont etc y poder discutir de ello y no tanto mcu, arrow y la mar en coche
Personalmente, me revienta que por una u otra razón tengamos a Claremont y Byrne sin hacer cómics. Hay un porrón de autores en esa situación, pero con lo que han sido esos dos…
el comic (y el coleccionista) yanki es muy peculiar porque siguen las colecciones y no tanto a los autores con casos muy particulares como morrison ahora mismo que atraen lectores de un lado a otro. lo que me extraña es que no exista ninguna antología por decir al estilo 2000ad o skorpio que reúna a lectores veteranos como el propio byrne o simonson que td están en condiciones de trabajar. pensar que cuando salía la mejor coleccion de supers del mercado era astro city hecha por dos veteranos de mil batallas lastima que el pobre Anderson tenga problemas de salud
Como Byrne haga el Juez Dredd no bajamos a M’Rabo del techo ni para el 2030!
Byrne ya dibujó a Dredd en el 2000 A.D. Sci-Fi Special de 1983 con guion de John Wagner y Alan Grant!! (que debería reseñarlo ya que estamos)
Yo y mi bocaza…
Admite que echabas de menos mis artículos sobre comics del Juez Dredd!
Ah, pero… SE HABÍAN IDO????
ahora a esperar esa nota!!
Y Ostrander, Mesner-Loebs, Ordway, Maguire…
Que se vayan a Image con Jim Shooter! xD
Jo, se me hace más raro eso de que Jim Shooter va a salir acreditado en un cómic de Image…
A mi se me hizo rarísimo escribir esa frase. Yo no puedo evitar tenerle cariño a Shooter, toda su carrera en cómics es fascinante y lo que creó en la Marvel de los ’80 es de las cosas más increíbles que he visto desde lo organizacional a lo creativo. Espero que haya aprendido y no vuelva como el tirano de sus últimos años sino como el afable gigante que supo ser.
Realmente volver lo que es volver no vuelve, ha puesto su nombre y ha dado un par de consejos y poco más a un chaval que le cayó bien y que estaba haciendo su primer cómic.
Vete a saber, si consigues su correo y le haces un poco la pelota igual puedes hacer despegar tu carrera de colorista…
Es que eso es lo que sería volver; que aconseje a los nuevos porque sabe de cómics o no sería quien es. No deja de ser el hombre que estuvo a cargo de Dennis O’Neil, Roger Stern, Louise Simonson, Christopher Priest, Ann Nocenti, y muchos otros autores/editores que valen su peso en oro. Y como todos ellos se pasaron a escribir e igual nadie escucha a Claremont en Marvel, un editor que sepa editar en el mercado nunca viene mal (en otras palabras, se necesitan desesperadamente).
Y necesitaría hacer mucho la pelota para cubrir por mi falta de habilidad y mucho más para despegar mi carrera de colorista (que ya no son los ’90 cuando Liefeld abrió las puertas a todos los mancos del mundo).
No se por qué extraña asociación mental, me he acordado de John Ostrander : ahora demasiado pero nunca leí nada suyo que no fuera entretenido
Abandona ese cuerpo M’Rabo!!!