Pues que… Hickman vuelve a Marvel. Y vuelve después de varios años en los que supuestamente iba a volver a sus propias series de Image, esas que tenía tan dejadas porque se pasó años haciéndole más caso a los Vengadores que a Manhattan Projects y demás. Y la verdad, no les ha hecho mucho caso, porque la que no ha dejado colgada la terminado un tanto atropelladamente, así que ha vuelto a Marvel. Le llamó Dan Buckley y le preguntó que quería hacer, y Jonathan le dijo que X-Men. Y así ha vuelto a Marvel.
Vosotros ya sabéis que a mi Hickman se me ha acabado haciendo bola. Que me gustaban unas cuantas cosas que hacía hará unos años, pero fue coger Vengadores y volverse insoportable. Y claro, va el hombre a los mutantes después de que los pobres hayan tenido ya siete renumeraciones y cambios creativos gordos en los siete últimos años -Gillen/Aaron, Bendis, Lemire/Bunn/Hopeless, Guggenheim/Bunn, Taylor, Rosenberg/Thompson/Brisson para finalmente llegar a Hickman, y me dejo unos cuantos nombres por el camino- con lo que, si hace nada esperaba y rezaba para que Marvel dejara tranquila Uncanny X-Men y le diera tiempo a Rosenberg para dar rodaje al nuevo status quo, de repente me encuentro que la semana pasada que todo esto era una pantomima, un engaño, y que desde el principio el año pasado cancelaron Red, Blue y Gold sabiendo que iba a venir Hickman este verano, y que todo lo que han hecho desde entonces era «hacer tiempo». Pues vale.
Y como decía antes, la cosa no empezó con el editor de X-Men, Jordan White, si no que salió del Presidente y antiguo Publisher de Marvel, Dan Buckley, que señaló con su dedazo a Hickman y le ofreció las llaves del reino al poco de despedir a Axel Alonso, el antiguo editor jefe de la editorial. Por el camino y con la renovación que traía el nuevo EiC, Cebulski, se decidió cancelar Red/Gold/Blue, con lo que autores perfectamente válidos como Tom Taylor no debieron salir nada contentos y el trabajo del editor Jordan White fue el de buscar guionistas a los que no les importara hacer un añito de la serie en un «falso relanzamiento» que al final parece haber tenido la misma función que tuvo el volver a contratar a Scott Lobdell para que hiciera tres meses de X-Men justo antes de que llegara Morrison y su New X-Men, de hecho lo que se busca es un efecto parecido al que tuvo el calvo hará unos veinte años. Claro que la situación, ahora mismo, es muy distinta.
Porque durante todos los 90 X-Men había sido la franquicia más vendida y más famosa del cómic estadounidense, pero su nivel de calidad era un tanto lamentable. Una nefasta gestión editorial obsesionada en mantener estancada en el tiempo una serie que debía su éxito a estar basada en la evolución y el cambio había terminado por hacerla vulgar y un ejemplo claro de los males que aquejaban al medio por la época, convertido así en paradigma de la superficialidad noventera. Los editores, sin la cabeza suficiente como para darse cuenta de que su propia política era parte del problema, buscó recambios a los Lobdell y Nicieza -Waid, Seagle, Kelly, Davis y hasta el propio creador del éxito original, Chris Claremont- pero mantuvo la serie congelada hasta que los propios editores fueron despedidos y la nueva era Joe Quesada nos colocó a Grant Morrison, que bajo la bandera del cambio puso la serie patas arriba y definió sus años posteriores. Y sin embargo, y pese a que el éxito de Morrison fue notable, la decadencia de la serie era algo ya asentado y nunca volvió a recuperarse aquel éxito de los 90; Hickman llega precisamente tras una travesía en el desierto en la que los mutantes se han hundido en la más miserable de las irrelevancias, con lo que llega así con un handicap añadido.
Que no nos engañemos, hasta la purria más insoportable de Lobdell había coronado los puestos primero y segundo del top 100 de ventas de Diamond, y aunque hoy en día tenemos a Rosenberg diciendo que su Uncanny X-Men está como el segundo cómic más vendido en digital, lo cierto es que en Diamond a Uncanny tenemos que buscarla en el puesto 24 y 25 del pasado abril, por debajo de War of Realms, Symbiote Spider-Man, Batman who Laughs, Immortal Hulk, el Batman de Tom King, Thanos, Heroes in Crisis, Web of Venom – Cult of Carnage, los Amazing Spider-Man, Detective Comics, Justice League, Avengers, Venom, Fantastic Four, Green Lantern y Superman. El Major X de Rob Liefeld aparece dos puestos por debajo, vendiendo 45000 ejemplares respecto a los 48000 de Uncanny, unas cifras que no son en absoluto aceptables. Eso sí, hay que repetirlo, puede que el trade paperback de X-Men venda más y que la mayor parte de las ventas provengan del digital porque los tiempos han cambiado mucho, pero está muy claro que Marvel -y Disney- no pueden permitirse el lujo de que tanto Spiderman como Hulk sean los protagonistas del top 10, dos personajes de los que no tiene los derechos cinematográficos al 100%. Han sido años de marginar a los mutantes y hasta de intentar suplantarlos con los Inhumanos, con lo que ha llegado la hora de arreglarlos y para eso han fichado a Hickman. El problema viene cuando después de tanto cambio y vaivén creativo puede que ya estén llegando demasiado tarde…
Mañana veremos que intenciones tiene Hickman para con los mutantes y si realmente es necesario cambiar tanto las cosas para acabar dejándolas como estaban.
A lo mejor debo esperar para mañana para hablar, cuando hayas dado tu opinión completa, pero honestamente tengo mucha fe en lo que suceda con Hickman. Creo que toda esta idea de «sacar series para matar el tiempo» es un espanto, pero me parece que se debe a una posición estratégica de marketing más que otra cosa, que creo que lo de Age of X-Man (la cual no estoy leyendo) y lo que sucede en Uncanny sí es importante y «va a contar», pero que ni de cerca eran necesarios tantos meses para preparar el terreno. Un par de numeros y la cosa hubiera bastado. Y es una lástima porque cómics como X-Men Red parecían ir a largo plazo y, aunque bonitas, tuvieron un cierre temprano innecesario.
Así las cosas, espero mucho la llegada de Hickman a X-Men. Que sí, no me gustaron tanto sus Avengers, pero su trabajo en general me parece bastante bueno y creo que es el tipo de guionista que hoy necesitan los títulos mutante. Y qué más da, el nivel gráfico que parece va a tener (Larraz y el clon de Immonen, R.B Silva) ya hace que sea cuanto mínimo interesante de leer. Porque al fin y al cabo ese es el problema de los cómics mutantes; desde hace rato se han cerrado en ellos mismos y las historias se basan (no todos) en contar u homenajear cosas que ya pasaron antes. Hay etapas dignas y más que simplemente dignas dentro de estos años, pero la franquicia en general lleva una mochila demasiado pesada y los elementos, a día de hoy, ya nos suenan conocidos, cuando es una de las pocas series, en mi opinión, que tiene la capacidad de adaptarse (¿o mutar? Pun intended) y no depender de un personaje en particular. Entiendo desde el punto de vista comercial, pero casi me molesta cómo los guionistas tiran de los mismos personajes sin, justamente, contar diferentes situaciones o crear otros nuevos.
Pienso que la promoción de la llegada de Hickman está tirando un poco por demás, con esta idea de la «nueva era»y «nada será lo mismo», pero no deja de ser marketing y por el momento trato de no confiarme demasiado ni dejarme llevar. Se nota que tiene planes y tengo muchas ganas de leerlo.
Tengo depositada mi fe en ti, Hickman! No nos salgas con personajes que se llamen Proxima Midnight, Corvus Glaive, Supergiant o Ebony Maw!
Te adelanto que el post de mañana va a hablar sobre lo triste que es que traigan a Hickman para hacer algo nuevo y diferente y en realidad estén repitiendo al dedillo la misma maniobra que hizo Quesada al contratar a Morrison con New X-Men y en definitiva, que sea otro reboot, otro relanzamiento y más de lo mismo en una serie que pide a gritos evolucionar de forma «natural» y no a golpe de borrón y cuenta nueva.
Y concuerdo, pero a decir verdad, no es una movida inesperada. Ya sabemos que la llegada de un nuevo guionista y/o el cambio de dirección de una serie supone ya el relanzamiento, visto las cosas. Teniendo en cuenta la magnitud del cambio de dirección o status quo, a sus ojos amerita un relanzamiento, y creo que además busca emular aquello que sucedió con Morrison. Veremos si semejante reboot vale la pena.
Lo peor que pudo pasarle a los mutantes es que el relanzamiento de Morrison funcionara, porque provocó que los ejecutivos de Marvel creyeran que podían arreglarse problemas creativos con dedazos desde arriba, y poco a poco así nos hemos visto enterrados en números uno y en cambios bruscos de dirección que las series no pedían. Pero claro, si unimos a esto que Marvel ahora mismo está teniendo una fuga de talento tremenda que -oh sorpresa- se está largando a Image y a DC -porque en DC ahora mismo te tratan bastante mejor- pues como que compadezco a unos editores que no solo en muchos casos han llegado al puesto sin la preparación suficiente, si no que son puenteados constantemente por unos jefazos más volátiles que el precio de la gasolina.
No había pensado lo de la fuga de talentos. Si es con dibujantes eso es cierto, pero muchos de ellos estaban vinculados a Bendis, asique no me llamó demasiado la atención. Con los guionistas no lo había notado.
Y concordamos en que hay editores que o no están a la altura o fallan en su tarea, pero eso diría es un problema que se reparte entre las dos grandes.
Con los guionistas tenemos que acabaron en DC G Willow Wilson, DeConnick/Fraction, Tom King y luego casos de maltrato tremendos como el de Jeff Lemire, que le pusieron a hacer Extraordinary X-Men y lo trataron como si fuera un Lobdell de la vida cuando el condenado es el que está sacando lo de Black Hammer. Y muchos de estos guionistas cuando se han ido se han llevado dibujantes, con lo que ahora mismo la media de calidad de las series de Image y Dark Horse ha subido tanto que Marvel es la que empieza a parecer la indie que apoya a los nuevos talentos.
Y ojo, que lo de los problemas editoriales en DC lo están apañando tanto y tan bien que la que está quedando en evidencia es Marvel a pesar de no tener ni a Jim Lee ni a Dan DiDio. Vamos, que el mamón de Bob Harras está consiguiendo su venganza!
Puesto así entiendo, pero eso en los ultimos años y algunos de ellos no dejaron Marvel y se fueron inmediatamente a DC, sino que estuvieron un tiempo en sus proyectos y luego se pasaron a DC, aunque es lo que sucedió con Wilson y Bendis. Sigue siendo una lástima, honestamente, y concuerdo que los han tratado mal, principalmente a Fraction y a Lemire, quien incluso llegó a hablar de que lo que realmente siente que hizo bien fue Moon Knight precisamente porque no tuvo restricciones (y eso que Extraordinary me pareció buena dentro del status quo horrendo en el que se encontraban).
Lo curioso es que volvió para hace Sentry pero terminó intempestivamente en el número cinco sin hacer mucho alboroto y la editorial diciendo que terminaba por razones argumentales, entiendo que yo que lo usarían para otra cosa o algo así pero quedó en nada. Lo que pudo ser el regreso de Lemire terminó quedando en nada.
Ahora que no está M’Rabo por aquí, sumo a todos estos nombres los de Brian Wood y Rick Remender, que este último fue al que por mandato editorial le cancelaron todos sus planes en Capitán América y luego tuvo que decir por ahi que siempre estuvieron en guerra con eurasia.
Lamentable.
NUNCA LES VOY A PERDONAR ESO!!! IAN ROGERS MERECÍA EL ESCUDO!
COMOOOOOO? QUE EL CAPITÁN AMÉRICA TIENE UN HIJOOOO?
Pues aparentemente ni el tiene un hijo ni el Doctor Extraño se habia enfrentado nunca antes a Galactus…sigh
Bueno Hickman le dejaron hacer cosas impensables con los 4 fantásticos y los vengadores, así que sea lo que sea lo que vaya a hacer con los X-Men será muy impactante. Yo sólo digo que X-men en la portada están llegando a un jardín con el cielo rojo que recuerda mucho al creado por Ex-Nihilo en Marte durante su etapa de los Avengers y con un saber que tiene una estética sospechosamente parecida al Maker. A Hickman le encanta autorefrenciarse y tiene un plan de dos años por lo menos para la franquicia.
Me parece lógico que se autorreferencie, pero corre el riesgo de que al lector de mutantes le produzca rechazo y al que se quiera meter a leer mutantes por primera vez sin conocer a Hickman no entienda absolutamente nada.
Y lo de que tenga un plan de dos años me parece bien, pero Claremont & Cockrum tardaron más en hacer despegar la serie en los 70 y creo que si tuviera un plan de cinco años a la serie le vendría hasta mejor.
Pero bueno, que conociendo a los ejecutivos de Marvel lo mismo le largan después del primer año y todo el trabajo al cuerno, así que no le culpo si no quiere tener un plan a larguísimo plazo.
Lo de dos lo he dicho por decir, dijo que tenia planes a largo plazo pero sinceramente no me acuerdo de la cifra exacta. Se que cuando terminara las dos miniseries en 6 meses quiere relanzar toda la franquicia con él al mando y que ningún libro se va a salvar de su huella.
Solo ha dado una entrevista al respecto y supongo que los dos la hemos leído, así que a priori solo ha hablado de un lanzamiento después del verano y otro ya para 2020, así que doy por hecho de que lo que dijiste de un par de años no anda muy desencaminado. Más o menos también fueron dos años los que tenía pensados cuando cogió Vengadores, solo espero que si su etapa es buena tenga más planes a largo plazo porque lo que necesita la serie es estabilidad.