Lo primero es lo primero: Sí, esta historia es un perverso reflejo de una de las primeras historias de la «nueva» Patrulla X, ésa en la que Ave de Trueno muere al final del enfrentamiento con el Conde Nefaria. Como recordaréis (o no, porque es una historia mediocre y muy olvidable) la trama de aquellos cómics giraba sobre el ataque de Nefaria y unos «ani-hombres» a la instalación militar del NORAD. En el caso de Los Nuevos Mutantes ya no hay una instalación militar, pero sí una especie de Isla del Doctor Mureau en la que uno de sus miembros encontrará la muerte. Pero antes hagamos un poco de historia…
Spoiler: sí, yo también creo que la portada parece un mitin de Vox.
Louise Simonson recogió el testigo de Chris Claremont al frente de The New Mutants después de que el creador del grupo tuviera sobrecarga de trabajo con Uncanny X-Men, Excalibur y otra nueva serie, Wolverine. El objetivo de Simonson y Claremont era el de «mantener el control» sobre las series de mutantes, y por eso la propia Louise había tomado el control de X-Factor tras la espantada de Layton al ver despedido de la editorial a su protector y amigo Jim Shooter. El cómic que aquí se llamaría Factor X nacía de una gran canallada, porque si hasta entonces Shooter había discutido con Claremont cualquier posible spin-off de X-men, todo X-Factor se había desarrollado a espaldas de suyas junto a su archienemigo John Byrne (y no olvidemos al infame Kurt Busiek, que era uno de esos fans que pedía el despido de Claremont cuando vió a la nueva Patrulla X sustituyendo a la original) que participó en el complot con toda la mala saña del mundo. Su mala leche fue tal que para llevar a cabo la fechoría llegó a resucitar a Jean Grey -¡la primera vez que la resucitaban, hasta entonces la muerte había significado algo en Marvel!-, cosa que a Claremont no le hizo ninguna gracia y lo había colocado a la defensiva y en el bando anti-Shooter, con lo que no es de extrañar que canturreara «ding-dong the witch is down!» el día en que Jim Shooter fue despedido de Marvel.
Por lo menos Byrne podía haber tenido el detalle de hacer los primeros números de Factor X y disimular un poco…
La nueva era DeFalco parecía darle cierta tranquilidad, pero para entonces el guionista británico se había puesto a la defensiva, tomando medidas drásticas al respecto al colocar a la Patrulla X en Australia -evitando en lo posible los crossovers con otras series de la editorial-, sacar una serie en la filial británica de Marvel para mantener «ocupados» a Kitty Pryde y Rondador Nocturno, personajes que no pegaban para la etapa australiana del grupo y colocar las aventuras de Lobezno en solitario en la isla ficticia de Madripoor, un sitio por el que tampoco habría posibilidad de sufrir más interferencias de otras series al estar también situada a medio mundo de distancia de Nueva York.
Que sí, que mató a la Patrulla X entera y la resucitó al final del cómic.
Todo este plan se ejecutaría durante La Caída de los Mutantes, el evento que ocupa la historia que estamos repasando y que, como decía, en realidad de crossover tiene poco, porque la única relación entre todos los títulos participantes está en que en ellos ocurre algo traumático (aunque en el caso de Factor X el trauma vino antes del crossover, pero bueno). La semana pasada lo habíamos dejado en que Los Nuevos Mutantes llegaban a una extraña isla del Atlántico para conocer los orígenes de Cabeza de Chorlito, el Chico Pájaro que tanto parece detestar Rob Liefeld. Nada más llegar a la isla son recibidos por varios «ani-hombres», y muy acertadamente Sam -el fan de la ciencia ficción, como no- se pregunta si no habrán sido hechos evolucionar artificialmente como «en aquella película que vi una vez…»; sí, Sam, sabemos de sobra que estamos haciendo La Isla del Doctor Moreau.
Me pregunto que otro dibujante podría haber hecho funcionar esta historia mejor que Bret Blevins.
Y sí, pronto conocemos al Moreau de esta isla, que no es otro que el Doctor Animus, un tipo de aspecto cochambroso que descubre rápidamente la identidad de los invasores gracias a la base de datos de «The Right», un grupo antimutante que solía aparecer por aquella época en Factor X (de ahí el crossover minimalista de esta historia). El Doctor ordena la muerte de Los Nuevos Mutantes, pero la presencia de Cabeza de Chorlito y el hecho de que Rahne Sinclair sea una mujer lobo «como ellos» hace que el grupo se gane la confianza de los anihombres. Mientras tanto tenemos un interludio en el que vemos como los otros dos miembros de los Nuevos Mutantes, Warlock y Mancha Solar, vuelven de la serie limitada de los Ángeles Caidos -demasiado largo de contar, otro día hablamos de ello- y se encuentran con el pobre Magneto, que como decía la semana pasada, no gana para disgustos.
Para disgusto el traje con la M horrorosa que le diseñó Romita Jr, menos mal que en este cómic lleva un traje más «normal».
La verdad es que esta escena es una de esas que dejan claro lo mucho que había cambiado el personaje desde sus tiempos en la Hermandad de Mutantes Diabólicos, y que además de ser el encargado del marrón de soportar a estos críos, el tipo les tenía cariño. Lamentablemente -y no me cansaré de repetirlo- nadie en Marvel se acordó de esto años después cuando Magneto se fue a vivir a Utopia y nunca se reencontró con el grupo, pero supongo que algunos van muy de fans de los Nuevos Mutantes pero luego sufren extrañas amnesias… Pero mejor no digo nada y sigo, que a mí estas cosas me ponen demasiado malo y al final no es nada a lo que no nos tenga acostumbrados la Marvel actual. Lo importante es que en estas páginas se ve a personajes que, como diría Mariano, «son sentimientos y tienen seres humanos». Cosa que luego no se vería en X-Force…
El Doctor Animus, clavadito al tertuliano medio de Intereconomía (o de Fox News, vaya).
Bobby, Warlock y Magneto no tardan en descubrir que sus amigos estan ausentes, con lo que lo lógico habría sido que Magneto saliera corriendo a buscarlos, pero eso vamos a dejarlo para la semana que viene que bastante tenemos ya con el grupo descubriendo que todos los anihombres tienen un entrenamiento pauloviano que les obliga a ir a un punto determinado en cuanto oyen un silbato. El grupo decide ir hasta ese punto para investigar, y muy acertadamente se cuestionan lo cabal de esa decisión, para descartar inmediatamente esos temores al ser conscientes de que «tienen poderes y pueden manejar cualquier situación». Ya. Poco después descubren que se han metido en un laberinto lleno de trampas y el grupo es derrotado y capturado por el Doctor Animus, que por fín da la cara y declara su intención de hacer de ellos un ejemplo de lo que les pasa a aquellos que intentan rebelarse.
Hay que reconocer que con lo mucho que sufrían los X-Men, los bebés-x hasta entonces poco habían padecido…
El cómic acaba con el grupo dándose cuenta de su error, ya que su intervención ha provocado que el Doctor Animus decida cortar por lo sano y matar a casi todos los anihombres, a Los Nuevos Mutantes y todo lo que se meta por en medio. Lo cierto es que esta historia es un pelín chocante, porque no olvidemos que durante 59 números el grupo había escapado de sus tutores a la mínima oportunidad y nunca había tenido que pagar un precio muy alto (tuvieron un miembro muerto en los inicios, pero reapareció viva meses después y aquí paz y después gloria), con lo que es lógico que los chavales pensaran que podían llevar a cabo esta aventura sin muchos problemas; al fín y al cabo peor se las vieron en Krakoa y la Patrulla X salió con el doble de miembros, ¿no? Para los Nuevos Mutantes no habría tanta suerte…
Bueno, no sé todos los detalles del culebrón Byrne-Claremont, pero por lo que sé Claremont también hizo alguna que otra cosa para cabrear a Byrne, como lo del juicio de Reed Richards, o …¡Usar al Doctor Muerte como encendedor de cerillas! Yo ahí también lo habría sustituido por un robot.
«Por lo menos Byrne podía haber tenido el detalle de hacer los primeros números de Factor X y disimular un poco…»
Seguramente lo hubiese pensado, pero, si no me equivoco, Byrne estaba a punto de pirarse a DC para ocuparse de Superman. Creo.
Y aunque lo de Fenix fue una puñalada trapera al menos dejaron a Claremont cambiar algunas páginas… cosa que cabreó más a Byrne XD
«Seguramente lo hubiese pensado, pero, si no me equivoco, Byrne estaba a punto de pirarse a DC para ocuparse de Superman. Creo.»
Yo también pienso que el hombre estaba ya en Krypton y que se la sudaba Marvel ya, aparte que sin Shooter para atarlo en corto ya iba en plan modo «yo soy el puto amo y aquí se hace lo que yo digo».
Quien le iba a decir que la burbuja de ROB!, Mcfarlan y Lee estaba a punto de sepultarlo para muchos fans.
Sic transit gloria mundi…
Yo no voy a disculpar a Claremont en nada (aunque lo de la cerilla lo compensó con Fantastic For VS X-Men) pero al final el más coñón siempre fue Byrne, que no dejaba de ser el que echaba mierda en público mientras el otro las mataba callando. Y sí, Byrne estaba a punto de hacer la espantada a DC, lo cual hace más vergonzoso el que pusiera en marcha el zurullo de Factor X y se largara por patas.
«Spoiler: sí, yo también creo que la portada parece un mitin de Vox.»
Ni de coña, la de la peil de leopardo de los chinos es la Betty Gimeno y el de los cuernos es Garzón aka «la culpa es del heteropatriarcado que nos viste de manginas».
«con lo que no es de extrañar que canturreara “ding-dong the witch is down!” el día en que Jim Shooter fue despedido de Marvel.»
Lo que no sabía es que los que llegaban iban a hacer bueno a Shooter (y sí, era un tirano, pero al lado de la patulea que le sucedio el tío era la hostia en verso).
De hecho lo de Magneto y su fracaso con los nuevos mutantes es una bella metafora de lo que pasa cuando no los pones firmes a los esbirros y a los alumnos. 😉
«El cómic acaba con el grupo dándose cuenta de su error, ya que su intervención ha provocado que el Doctor Animus decida cortar por lo sano y matar a casi todos los anihombres, a Los Nuevos Mutantes y todo lo que se meta por en medio.» Ese es el espiritu pedagogico que necesitaban esos niñatos, y Xavier seguro que los controlaba solapadamente con sus poderes, fijo.
«El Doctor Animus, clavadito al tertuliano medio de Intereconomía (o de Fox News, vaya). »
Que noooo, que es la Betty Gimeno, a ver si se pone aire acondicionado en esa armadura latveriana o se limpia los parabrisas de la mascara herr doktor Doom
Y por cierto si alguien cree que soy de Vox o del PP, voy a decitr la verdad:
Pongamos que veo a los dirigentes de los distintos partidos políticos de España y a un perro ahogandose, lo tengo claro, salvo al perro (aunque me diera tiempo a salvarlos a todos) 😉
Yo por diogenes no puedo hablar, pero imagino que sera de cualquiera que le garantice que no le quitaran todo el oro que tiene escondido en suiza..
Yo por mi parte, y pese a que los perros son mi debilidad, haria todo lo posible para dejar que que los dirigentes de tres partidos políticos concretos se ahogasen, tras golpearles repetidamente en la cabeza con el remo y ponerles pesos en las piernas y salvaria a quien de momento parece la opcion mas adecuada para ayudar a remar, que eso de dejar que todos se ahoguen al final es como estar a favor de la peor opcion o votar a Trump.
Y todo esto me recuerda que deberia sacar de la estanteria el V de Vendetta que hace años que no lo saco a que le de el aire.
Lo de Magneto no es un problema de «no haber puesto firmes» a los Nuevos Mutantes, es más un problema de comunicación; al final la culpa es de Xavier por endigarle el marrón a Magneto (un tío en cuyo historial «educativo» está putear al Sapo y poco más).
Y por cierto, «excusatio non petita» y esas cosas, puede que los políticos te importen menos que la vida de un perro, pero todo lo que me has enlazado y los comentarios que has ido haciendo tienen un sesgo político claro. Doy por hecho que ni borracho compartes el ideario de luminarias de la mamarrachada como Losantos, Dávila o historiadores ficción como César Vidal, con lo que supongo que simplemente te pasa lo que a tantos, que el politico correctismo te ha hinchado los cojones y vas con la escopeta cargada; descárgala, no merece la pena. Igual que en el mundo del cómic los Angostos y los Jemas son los más voceras y los que más burradas dicen, en el mundo de la lucha de los derechos sociales los más bocazas suelen ser los gilipollas (y los que realmente no hacen nada por la causa que apoyan mas que perjudicarla). Los gilipollas que escriben artículos buscando clickbait ya sea escandalizándose por lo machista que es uno o por lo «feminazi» que es la otra no dejan de ser son el mismo perro con distinto collar, jetas que se aprovechan de la mentalidad de rebaño del personal.
Lamentablemente en el internet de hoy en día hay demasiada gente preguntando que debe de pensar, y muy poca gente pensando. El título de Brainstomping viene precisamente de eso, del propósito de machacarnos el cerebro pensando sobre cómics, cine, videojuegos y demás, rehuyendo de pensar lo mismo que los demás, y creo que por eso hemos acabado teniendo una personalidad muy marcada… Lo cual nos pone de frente contra «trend setters» y «líderes de opinión». Esos me pueden comer todo lo gordo por debajo del culo, vaya.
Y oye, igual que Inda es cierto que se parece al primo esmirriado de Pantuflo Zapatilla, Marhuenda es el primo bien comido del Doctor Animus:
«Marhuenda es el primo bien comido del Doctor Animus»
Sí, puede que se den un aire. XD
«puede que los políticos te importen menos que la vida de un perro,»
Y que la de una pulga si me apura… XD
«pero todo lo que me has enlazado y los comentarios que has ido haciendo tienen un sesgo político claro.»
Huy, huy que me parece que vamos a acabar como en las cenas de navidad familiares con «montones de paz para los onvres de buena voluntad»
http://i.imgur.com/vSizqqB.png
Ahora en serio, bastante tengo con los anormales que salen prometiendo sandeces en la tele y llevandoselo crudo pintados de distintos colores , como para hablar de ellos aquí.Prefiero hablar de tebeos que de parasitos.
Ok, pero procura tener en cuenta lo que te dije sobre los voceras, es una buena forma de mantener la cordura en estos tiempos convulsos 😉
» El título de Brainstomping viene precisamente de eso, del propósito de machacarnos el cerebro» di la verdad! el nombre viene de los golpes que me das en la cabeza con tu mazo de cricket cuando vuelves a casa y no estan todos los articulso escritos!
¡Llámalo por su nombre! ¡PALO DE ENSEÑAR!
Louise Simonson recuperó y potenció algo muy importante en Nuevos Mutantes: una adolescencia real de los personajes. Claremont paulatinamente había caído en sus reflexiones y conflicto interior que convertía a los personajes en jóvenes adultos. Creo que Simonson hizo bien, es una de las mejores guionistas para reflejar la adolescencia y la infancia de los personajes de forma creíble y con nota de humor.
Lo que nunca podré perdonarle fue lo de Doug Ramsey. Para mí era el mejor poder mutante, saber idiomas: te sacarías títulos EOI o First cantidad, ligar con extranjeras, buenas ofertas de trabajo… Por eso cuando la ví en el documental La muerte de Superman llorando a moco partido porque Ma y Pa Kent no podían despedirse de Clark me enfadé. ¿Y que pasa con Doug que me lo has matado de forma absurda pero «heroíca»?
A Magneto le tendrían que haber hecho un monumento por la paciencia con los Nuevos Mutantes que se largaban cada dos por tres y no le hacían caso. Una duda que tengo: la vuelta al lado oscuro de Magneto en el nº75 dibujado por Byrne, ¿Era una idea de Simonson o le vino impuesta por las altas esferas.? Fue un cambio muy drástico aunque él ya estaba en el Club del Fuego Infernal. Me recordó mucho a como decidieron volver a Zemo malo en la etapa de Brubaker, cargándose todo el trabajo de Nicieza.
Por cierto, me encanta vuestro estilo y me divierte mucho. Cuando me voy a trabajar y tengo que hacer largos trayectos, es lo único que me hace sonreir.
Ante todo gracias, a mi también me gusta hacer largos trayectos a costa del trabajo de M’Rabo y su sufrimiento es lo único que me hace sonreir!
La muerte de Doug es un catalizador para el resto de los personajes de la serie, abandonando la trama inicial que inició Claremont con la idea de que se estaba infectando por el virus tecnorgánico de Warlock (aunque yo siempre pensé que era la puerta trasera de Simonson para traerlo de vuelta). Así que Doug moría para que Illyana perdiera los papeles, Rahne madurara y Magneto fracasara; no sé hasta que punto el regreso de Magneto fue algo impuesto por Harras o DeFalco, pero lo que está claro es que tanto Claremont como Simonson juegan con la idea de que vuelva al mal camino durante años y la muerte de Doug es lo que realmente abre la brecha entre alumnos y profesor… Y eso es como más de un año antes del número que mencionas, que venía a exigir que Magneto se hiciera malo porque tenía que salir en Actos de Venganza (y aún así Gruenwald salvó los trastos de maravilla con el crossover de Capitán América, explicando perfectamente la razón de que Magneto quisiera meterse en semejante follón).
Un día de estos tengo que repasar Actos de Venganza, seguro que era más divertido que hablar de los 4F de DeFalco…
«Ante todo gracias, a mi también me gusta hacer largos trayectos a costa del trabajo de M’Rabo y su sufrimiento es lo único que me hace sonreir!»
Tu de suiza tendras la cuenta bancaria y el oro robado, pero te recuerdo que yo tengo la navaja multiusos… primer aviso.
Anda ya! Tu de suiza lo único que tienes el envoltorio de 55 tabletas de chocolate! Limpia ya tu celda!!
Segundo aviso!!!
Hala, ya ha roto otro rotulador rojo para simular que se ha cortado las venas para escribir otro anonimo…
La verdad me tengo que leer esta etapa, nunca me leí New Mutants porque siempre pensé que era la «menor» en todo sentido, un esfuerzo de Marvel por explotar la franquicia y Claremont saliendo a pedir el título para que no hagan desastres en ella. Pero cada vez me dan mas ganas de leerla, precisamente en el momento que se me está reavivando las ganas de leer cosas mutantes después de Extraordinary X-Men y Old Man Logan (no estaría mal que hablen de Extraordinary, Lemire está haciendo un buen trabajo hasta ahora).
Además, cualquier cosa que haga algún Simonson me interesa, el X-Factor de Lousie Simonson me gustó mucho.
Espero ansioso los próximos posts de esto!
Totalmente de acuerdo con lo de Lemire, que tiene muchísimo mérito teniendo en cuenta que ni le tienen como guionista estrella ni la serie de por sí es «comoda» para ningún escritor -menos para Bendis, pero de eso ya hablamos otro día.
Y si lees New Mutants desde el principio, como que te recomiendo paciencia con los 15 primeros números de Claremont y McLeod, al principio los dos están un poco desorientados y no saben muy bien por donde tirar con los personajes… EPero cuando llega Sienkiewicz Claremont se pone las pilas y los dos hacen uno de los mejores trabajos de su carrera.
Es que personalmente el crédito que le doy a Lemire es doble: hacer que los mutantes sean X Men y que hsga algo bueno con la que es por lejos la peor premisa que tenía el post secret wars. Eso, y que loa Inhumanos me generan rechazo mas que curiosidad…
Prometo echarle una leída en cuanto pueda, muchísimas gracias por la recomendación.