Avengers y X-Men: Axis – Ya ni de Rick Remender me fío cuando hay un evento de por medio

Supongo que más de uno se habrá dado cuenta de que el opinar sobre el Avengers & X-Men – Axis lo hemos ido dejando un poco de lado, que la serie ya va por su tercer numero, pero la explicación es bastante simple, apatía. Todos estos megaeventos con los que nos ataca Marvel un par de veces al año y tras los cuales ya nada será lo mismo ya aburren tanto que da igual quien los escriba, que ya comprobamos con Original Sin (¿No ha pasado demasiado poco tiempo entre un evento y otro?) cómo ni alguien de la talla de Jason Aaron es capaz de hacer algo bueno. Y eso que, y no porque lo escriba Rick Remender (bueno, un poco si), pero de momento me está pareciendo uno de los mejores eventos del último par de años, pero solo porque los demás eran rematadamente malos…

Espero que la historia se la hayan currado tanto como lo de que el logo pueda leerse en cualquier dirección…

Antes de entrar en materia aprovechare una vez más, y aun a riesgo de repetirme, para quejarme de como las editoriales han convertido lo que en principio es una buena idea en algo que ya para muchos no genera más que hastío y desconfianza. El principal problema que les suelo encontrar es que los jefazos de las editoriales se han tomado estos megaeventos única y exclusivamente como un medio para llegar a un fin, lo que les importa son las consecuencias del mismo no lo que suceda en ellos. Así es como nos encontramos con que muchos de estos eventos no son más que una excusa estiradísima y aburrida (¡Te estoy mirando a ti Age of Ultron e Infinity!) en la que no sucede nada interesante porque lo importante es llegar del punto A al B. A veces dichas consecuencias son algo interesante como el Dark Reign que siguió a Civil War y Secret Invasion y otras veces dan más pena y vergüenza ajena que otra cosa, como que Original Sin solo haya servido para quitar de en medio al Nick Furia que no se parecía al de las películas. Y luego hay casos aparte algo más tristes como los de las Secret Wars originales y las que tendremos el año que viene, que se plantean para vender muñequitos… Todo esto provoca que de igual que el crossover lo escriba Brian Bendis, Jonathan Hickman, Jason Aaron, Rick Remender o perico de los palotes, parece que desde arriba les dicen lo que tiene que suceder, como y cuál debe ser el final, así que al final ni el escritor más solvente es capaz de sacarle el jugo a la historia.

Así deben ver los eventos en las editoriales, no tienen por que ser bonitos o entretenidos, solo llevarte al destino escogido

Con todo esto en mente no es de extrañar que ni tratándose de un evento escrito por Rick Remender (del que puede que haya hablado bien una o dos veces por aquí) tuviese demasiado interés en el, pero como me suele pasar al final la curiosidad ha sido más fuerte. Los orígenes de esta historia se remontan al comienzo de Uncanny Avengers, cuando Cráneo Rojo desenterró el cadáver de Charles Xavier e implanto trozos de su cerebro en el suyo ganando sus poderes telepáticos en el proceso. Tras una primera derrota a manos de los Vengadores Cráneo regresó dispuesto a apoderarse del mundo una vez mas solo para, aparentemente, morir a manos de Magneto. Pero como si de Obi-Wan Kenobi se tratase su muerte le convirtió en algo mucho más poderoso de lo que había sido jamás… Red Onslaught… En serio.

Lo de Wanda volando sera magia del caos, si, eso, magia… 

Con sus nuevos e ilimitados poderes Red Onslaught lanzo una onda telepática de odio que transformo a todo el que no estuviese protegido contra ataques psíquicos (o sea, la inmensa mayoría del planeta) en seres violentos sin control. No todos cayeron bajo su influjo, muchos era inmunes y fueron capaces de proteger a sus compañeros y se dispusieron a derrotar de nuevo a Red Onslaught, pero para lidiar con ellos tenía a su servicio unos Centinelas muy especiales fabricados por Tony Stark bajo el influjo telepático de Cráneo Rojo y que contaban con protocolos diseñados para derrotar a todos los héroes creados por el propio Stark durante Civil War (porque desde que Mark Waid escribió wl JLA: Torre de Babel hay demasiados superhéroes a quienes les ha dado por buscar formas de derrotar a sus compañeros por si acaso…)

Aunque tampoco es tan raro, yo tengo por ahí un plan secreto para librarme de Diogenes si se pone pesado…

Pero con lo que no contaba Red Onslaught es con que si bien esos Centinelas estaban diseñados para derrotar héroes, no contaban con datos para derrotar villanos (Porque Cráneo Rojo es tonto y no pensó en ordenarle a Stark que metiese un par de discos duros extra en los Centinelas con información sobre villanos…) Por ello Magneto reclutó a un pequeño ejército de villanos para enfrentarse y distraer a Red Onslaught, mientras su hija Wanda y el Doctor Extraño lanzaban un “hechizo de inversión” para poner al control de la criatura los restos de la mente de Xavier que aun se encontraba en los fragmentos de su cerebro que Cráneo robó. El hechizo se lanzó y Red Onslaugth fue derrotado, todo parecía haber salido bien, excepto por el pequeño detalle de que dicho hechizo parece haber invertido más cosas de las que debería y tanto los héroes como los villanos no son ellos mismos…

Hay que admirar la velocidad a la que Magneto ha viajado desde Genosha a Estados Unidos, Madripoor, Asgardia, Latveria, etc  y ha regresado con todos ellos…

Puede parecer que he contado demasiado del evento, ya que esto casi parece el argumento de la historia entera, pero no ha sido más que un prologo (algo largo) de lo que es la verdadera historia, los buenos son malos y los malos buenos, o por lo menos todos son bastante más ambiguos de lo que suelen ser. Sí, eso es lo que interesa realmente de Axis, patear un poco (no demasiado) el status-quo y tener a villanos haciendo de héroes y a héroes haciendo cosas no demasiado heroicas, mientras que (no es difícil de prever) Red Onslaugth recupera fuerzas y planea su ataque definitivo. Tras ello todos volverán a ser quienes eran y tendrán que lidiar con las consecuencias de sus actos (que cambiaran para siempre el Universo Marvel al menos hasta el verano que viene) mientras estuvieron bajo el influjo de los poderes del villano y de ese poco afortunado hechizo de la Bruja Escarlata y el Doctor Extraño.

¡Iron Man se va a pasar a Apple!

En cuanto al comic en sí, pues visto lo visto no sorprenderá que de momento la historia vaya algo  lenta. De los nueve números de los que consta la serie ya se han publicado tres (mas sus crossovers con otras series) para contarnos tan solo el prologo de la historia, así que parece claro que vamos a tener “decompresive storytelling” para dar y tomar. Otra cosa que no acaba de convencerme demasiado de Axis son los diálogos de la serie. Otra cosa que me saca un poco de la historia a veces en es que en ocasiones los personajes suenan algo forzados incluso cuando se supone que estos se encuentran están libres del poder de Cráneo, por lo que o la historia no es lo que parece o ahí ha metido mano el editor, porque Remender en Uncanny X-Force y Uncanny Avengers ya ha demostrado de sobras que sabe escribir a muchos de estos personajes (aunque creo que lo de escribir a Iron Man no se le da bien de ninguna de las maneras…)

Esto igual tendría gracia dicho por Robert Downey Jr, pero así escrito como que no…

En el apartado grafico tenemos a un pequeño y (muy) dispar grupo de dibujantes encabezado por un Adam Kubert que parece que hubiera necesitado algo más de tiempo para acabar mejor su trabajo. Tanto debe ser así que en el tercer numero (y en el cuarto también) ya es reemplazado por Leinil Francis Yu, a quien sustituirá a su vez Terry Dodson en el quinto y sexto, para el séptimo volverá Kubert, Yu volverá también para hacer el octavo y Jim Cheung rematara la serie en el noveno. Yo entiendo que dibujar una serie semanal, aunque sean solo nueve números, no es algo que puedan hacer muchos dibujantes hoy en día, y que a estas alturas tendría que estar más que acostumbrado, pero visualmente la serie queda algo perjudicada con tantas y tan diferentes manos dibujándola. Igual hubiera sido mejor dividir Axis en tres actos de tres números, cada uno con un dibujante diferente, o al menos de buscar dibujantes con estilos algo mas similares, pero esta extraña forma de alternarlos no parece obedecer más que a su disponibilidad y velocidad de trabajo, y eso es una pena. Aunque si al final esto es todo lo que tengo que criticar del cómic daré saltos de alegría.

Hay que admitir que Adam Kubert ha tenido trabajos mejor acabados otra veces…

Así que aquí es donde estamos con Axis de momento, casi confirmando con pena que ni aunque el megaevento de turno lo escriba uno de tus guionistas favoritos te garantiza nada. Aunque a lo mejor ahora que empieza de verdad la historia la cosa se anima y tiene interés, que de momento lo único que está consiguiendo es aburrir menso que Infinity y Age of Ultron, lo que no es decir mucho. Cuando eso suceda ya escribiré un segundo artículo de  actualización para ver si al final Axis ha remontado o si simplemente se confirma la tendencia de que los megaeventos no son más que un cementerio de escritores en donde muere su habilidad para escribir, y no se los demás, pero yo estoy convencido de que será lo segundo. Pero pese a ello de momento voy a confiar un poco más en Remender, que hasta ahora ha demostrado más de una vez que se le dan muy bien las historias a largo plazo (y esta lleva en marcha desde su primer número de Uncanny Avengers) y hacernos creer que las cosas van a ir por un camino y acabar llevándonos a otro. Aunque claro, ya he visto de qué me sirvió confiar en Jason Aaron cuando se trata de eventos…