American Hustle/La Gran Estafa Americana es una historia sobre la mentira, sobre gente que miente a los demás y se engaña a si misma. La película se basa en hechos reales, pero los deforma de tal manera que el director David O. Russell acaba contándonos lo que le da la gana. Y sí, eso es bueno…
Mapache Cohete, Lois Lane, Batman, Mística y Ojo de Halcón se encuentran en un bar de los 70 y…
Christian Bale encarna a Irving Rosenfeld, un timador que vive un infeliz matrimonio junto a Jennifer Lawrence. Esto, que a primera vista es un absurdo enorme que haría que uno tuviera ganas de salirse del cine de lo inverosimil que es, funciona gracias a que la Lawrence construye a un personaje tan maravillosamente idiota e insoportable que llega a los niveles de la Cersei Lannister de Juego de Tronos (impagable su escena del microondas y las excusas que da a lo largo de la película). La infelicidad de Irving empieza a salir por la ventana cuando conoce a Sydney Prosser (Amy Adams), de la que se enamora locamente y junto a la que consigue hacer despegar su pequeño negocio de timos a inversores en apuros. Sin embargo, Bradley Cooper aparece en escena con su placa del FBI y les obliga a trabajar para el. Y ahí es donde empieza realmente la película…
«-¿Pero tú has visto que pelos?» -dicen ellas. «-Sí, sí, estoy yo para mirar pelos» -dicen ellos.
Desde el peluquín del personaje de Bale hasta el acento inglés de Amy Adams, todos los personajes de la película tratan de aparentar ser quienes no son, personas a las que no les gusta su identidad y tratan de ocultarla, de cambiarla. Su nivel de aceptación es tan bajo que, cuando sacan a la luz rasgos de su propia identidad, lo hacen completamente aterrados y seguros de que van a ser rechazados, y lo peor es que no suelen equivocarse. Y sin embargo, y a pesar de todas sus mentiras, ningún personaje está en el lugar en el que le gustaría estar. Políticos que se preocupan por la comunidad pero que a la vez se están lucrando a costa de ella, agentes del FBI buscando la gloria y negándose a reconocer a su prometida y que siguen viviendo con su madre, jeques árabes nacidos en México… La falsedad viene por todos lados en mayor o menor grado, pero ninguno está cómodo con ella, es la mentira como modo de vida y llevando a todo el mundo a la infelicidad.
Para los fans de Boardwalk Empire, aquí tienen al bueno de Richard Harrow con su cara entera. Y por ahí también anda Eli Thompson con su propia ración de pelos raros…
Mención especial se merece el trabajo de un irreconocible Danny Elfman y del director de fotografía Linus Sandgren en su recreación de los EEUU de finales de los 70, en la era del disco y el desencanto de una sociedad que ha recibido los palos de la guerra de Vietnam, la crisis del petróleo y un tal Richard Nixon; la fotografía recuerda al trabajo de Rodrigo Prieto en Argo, y es una pena que trabajos como estos no tengan por lo menos una nominación al Oscar mientras trabajos más discretos sí que lo tengan. Pero bueno, supongo que el Oscar de este año ya está reservado para Gravity.
¡Marvel que los tienes aquí juntos! ¿A qué estás esperando a hacer una peli de los dos Ojo de Halcón?
Mi opinion sobre la peli:
ZZZZZzzzzzzzz…
¿Que te pareció Gravity?
La segunda mejor pelicula que ha hecho Alfonso Cuarón en su carrera.
Y seguramente ahora le darán el Oscar que tenían que haberle dado por Children of Men…