La película de Green Lantern podía haber funcionado como película de Green Lantern. Era fiel al cómic dentro de lo que cabe, y se permitía algunas licencias con respecto al Hal Jordan original. Tenía chistes que daban vergüenza ajena, pero también llegaba a tener alguno que merecía la pena. Lo malo es que Green Lantern era una película horrenda, nefasta, que no había por donde cogerla y su guión estaba realizado a base de interpretar las secreciones anales de un par de macacos de una isla perdida de la polinesia. En el caso de Man of Steel, el macaco estaba estreñido…
«Otros vendrán que bueno me harán» dijo Superman Returns…
Porque vamos a ver, puedo pasar por alto todo el rollo de que Superman se parezca a Superman o que Jonathan Kent sea una versión mal entendida de la de John Schneider en Smallville. Esto es una película y, al margen del material original que trate, hay que juzgarla como lo que es. Y es entonces cuando habría que hablar del exceso de lejía en la fotografía o en la obsesión de Snyder por la cámara al hombro, pero en eso voy a ser bueno y decir que es una elección estética más, algo que te puede gustar más o menos pero que hay que respetar; sobre gustos no hay nada escrito.
Y esto también le gustaba a alguna gente, otra cosa es que fuera un mojón de proporciones siderales.
Decía el slogan de la primera película de X-men algo así como «confía en algunos, teme al resto». Man of Steel nos cuenta la historia de un chico con poderes que le aterran y le maravillan a la vez. Cuenta la historia de un chaval al que su padre le dice que tiene que esconder su propia naturaleza, y que algún día tal vez pueda ser como él quiere ser. Pero que el mundo no está preparado para el, asi que debe esconderse. Y entonces un día llegan unos tipos con poderes como él y le dicen que no tiene que ayudar a la gente de la Tierra, si no que tiene que robarles su planeta. Mientras tanto, los simples y vulgares humanos se asustan al ver tanto homo superior y desconfían de la ayuda de nuestro protagonista -al que apenas le llaman Superman-, a pesar de que el pobre muchacho se parte el alma con tal de ayudar al personal a base de destrozar sus casas todo lo que pueda. Y al final mata al malo (porque supuestamente no le queda más remedio) y sufre mucho por ello y Mark Waid se cabrea a pesar de que lo que debería cabrearle más es el insulto al medio audiovisual que acaba de ver, pero eso ya es otra historia.
«-¿Que es esta cosa roja? -Oh, bueno, Goyer me dijo que DiDio le había dado el visto bueno para que Superman matara a Zod y pensé que a Dan no le importaría quedarse sin hipotálamo…»
Bien, pues con unos mimbres parecidos Bryan Singer hizo X-men allá por el año 2000 y la cosa no le salio mal. Unos seis años después hizo un remake del Superman de Donner al que maquilló un poco y llamó «Superman Returns», pero como no hizo una historia de mutantes, pues no tuvo éxito. El otro día Zack Snyder estrenó una de mutantes y no la llamó Superman, la llamo Man of Steel, que es como llamaban a Stalin y por eso le caía bien a todo el mundo a pesar de que mató a muchísima gente y al resto no la dejó vivir en paz. La cuestión es que como película esto poco tenía que ver con Superman, pero podía haber funcionado y yo no me habría quejado especialmente. Me jodería, porque no sería mi Superman y blablabla, pero me alegraría mucho de haber visto una buena película. Pero no caería esa breva…
La película empieza en un Krypton que recuerda a La Amenaza Fantasma con un Jor El que recuerda a QuiGon Jinn, más que nada porque todos los líos vienen por su culpa…
Los veinte minutos iniciales de la película son en Krypton, donde nos cuentan que allí la gente se reproduce mediante una selección genética y una excéntrica pareja formada por Jor El y Lara tienen un hijo por el método natural, que consiste en que la mujer tiene que parir y sufrir mientras su marido se limita a cogerla de la mano. Mientras tanto, como el planeta entero va a reventar por la sobreexplotación, los militares del General Zod dan un golpe de estado para tratar de salvar al planeta. Esto no le acaba de hacer mucha gracia a Jor El, que decide que ya que todos se van a hacer puñetas el va a salvar a su hijo mandándolo a otro planeta y de paso va a meterle toda la información genética de Krypton en sus venas; resulta que Jor El es un jipi y considera que toda la decadencia de su sociedad se debe a tanta selección genética y tanta puñeta.
La gracia del agente Van Alden está en que se reprime todo el rato y acojona cuando estalla. Aquí, Michael Shannon interpreta a un Zod estallando todo el rato y aburre.
Zod no llega a tiempo de evitar que el hijo de Jor El escape, asi que se desahoga matando al padre y volviéndose más loco todavía. El gobierno de Krypton se restablece y se cabrea mucho con Zod y sus militares, condenándolos a pasarse una temporada congelados en una nave que orbita el planeta. Y poco después el planeta estalla y todos se van al cuerno. Todos menos los de la nave donde estaba Zod, porque los Kryptonianos son gilipollas y no se creían que el planeta iba a estallar. Y es entonces cuando yo me pregunto que clase de madre es Lara, que sabe que su hijo Kal El se va solo para otro planeta y no coge la nave de Zod como sea para llevarse al chaval. Es más, ¿por qué no la coge Jor El desde un principio? Lo dicho, tanta selección genética debía de tenerlos la mar de atontaos…
Mira si nos ha jodido la crisis que Superman a los 33 años todavía no ha conseguido un curro decente…
Y entonces es cuando empieza realmente la historia, con un Kal El adulto paseandose en plan vagabundo por la Tierra y haciéndose llamar Clark Kent, hijo adoptivo de dos granjeros de Kansas llamados Jonathan y Martha Kent. Jonathan, interpretado un tipo llamado Kevin Costner que hace veinte años era una estrella y ahora no lo es (más de uno ahora se llama Kevin por culpa de este tipo) es una especie de granjero reprimido que sobreprotege al chaval. En vez de confortarlo y decirle que todo irá bien, Jonathan se pasó toda la infancia del chaval avisándole de lo peligrosísimo que sería para el revelarse al mundo, haciendo que el pobre crío se pase en un estado permanente de miedo a sus propios poderes y que se sienta totalmente alienado en su trato con el resto de seres humanos. La cosa llega hasta el delirio cuando, harto de que le repriman, Clark repudia a su padre adoptivo para que poco después Jonathan quede atrapado por un tornado y este le pide a su hijo que no lo salve para no revelar sus poderes al mundo porque «todavía no es el momento adecuado». Reprimido y cabezón el tío, pero lo peor de toda esta escena es darse cuenta de que Superman no salva a su propio padre no solo por no desobedecerle, si no por una mera cuestión de autopreservación. Tenía entendido que el autosacrificio iba de otra cosa…
«-Yo antes era famoso y salía en una peli con Whitney Houston. -¿Esa que murió adicta al crack? -Eeeeeh…»
Y con esta entrañable escena familiar vamos a dejarlo por hoy, que es malísimo para el karma esto de poner a parir una película durante demasiado tiempo seguido. Mañana seguiremos con el tema y trataremos de expulsarlo todo de nuestro sistema,no sea que con tanta emoción desatada nos de un infarto como al padre de Superman en Smallville y en la película de Richard Donner.
Jo, como mola el Skyrim en PC!
Tu reseña apesta
Jo macho, eres más soso que Man of Steel…
Me encanta cuando las criticas son tan razonadas y elaboradas xd
Bueno con todo respeto la película no fue excelente en el guión, pero si fue excelente los efectos especiales yo le pondría un 8 sobre 10 pero en mi humilde opinión El Jonathan Kent de MOS murió por pendejo y toda la culpa la tiene Goyer ¿o sera Didiot y sus secuaces?..bah no importa fue una buena película pero en lo visual.
Espero que en la secuela mejore la historia(si es que la hay)
Los de los efectos especiales se merecen una palmadita en la espalda porque gracias a la manía de Snyder de grabarlo todo cámara al hombro, que los pobres se han dejado las pestañas colocando tracking points para que los fondos digitales y los efectos quedaran bien en pantalla.
La verdad es que, bien mirado, el guión de esta película es un constante «pero… ¿por qué?»
Y la caverna de DC algo si ha tenido que ver, porque según Goyer consultaron muchas cosas con ellos, y hasta llegaron a ser el voto decisivo cuando a Snyder se le ocurrió que Clark matara a Zod y Nolan se negaba en redondo.