Joe Kubert, una Leyenda del Comic – [1926 – 2012]

Este domingo nos encontrábamos con la tristísima noticia del fallecimiento del gran Joe Kubert a los 85 años de edad. Con su muerte hemos perdido a un clásico entre los clásicos, a un autor que comenzó su carrera en la Golden Age y que estuvo trabajando prácticamente hasta el final de su vida en lo que más le gustaba hacer, dibujar comics. Y todo ello manteniendo hasta el final una calidad envidiable.

Adiós a una leyenda del comic

Es curioso como la desaparición de una persona a la que no has conocido más que a través de su trabajo puede afectarte tanto, pero es lo que me ha pasado con la muerte de Joe Kubert. Supongo que es debido a que daba la sensación de que siempre estaría ahí al pie del cañón. Kubert había estado metido en la industria del comic desde el comienzo de la existencia de dicha industria. Su primer trabajo, como entintador, lo había tenido a los 11/13 años y su carrera siguió adelante pasando por la Golden Age, la Silver Age, los años 70, los 80, 90… Estando prevista su publicación para dentro de un par de meses lo que ahora será su obra póstuma, Joe Kubert Presents.

Daba igual lo que dibujase, todo le quedaba bien

Varias generaciones de lectores tuvieron el placer de disfrutar de su trabajo durante los más de setenta años que Joe Kubert se dedico a lo que mejor se le daba y más le gustaba. Pero se ve que era un hombre inquieto y no se conformaba simplemente con dibujar. El era consciente de que le había costado años adquirir los conocimientos que le habían llevado a ser uno de los más grandes en la industria, por lo que decidió compartir esos conocimientos con los demás. Así fue como en 1976 Joe Kubert fundo  “The Kubert School”, su academia de comics en las que durante las últimas tres décadas se han formado miles de estudiantes y que a día de hoy sigue siendo el único centro oficial dedicado única y exclusivamente a la enseñanza de cómo hacer comics.

Muchos grandes artistas se han formado en esa escuela

Kubert era un artesano, un artista, un maestro y una leyenda. A lo largo de su carrera Kubert hizo de todo, desde comic humorístico, superhéroes clásicos, westerns, comic bélico, ciencia ficción… No dejo un género sin tocar y en todo lo que hacía dejaba muestras sobradas de que era capaz de hacer cualquier cosa que se propusiese y hacerla bien. Y aunque la mayor parte de su obra la realizo para DC Comics, también se pueden encontrar algunos trabajos suyos en Marvel y algunas editoriales independientes. A él le debemos la creación, en colaboración con su gran amigo Robert Kanigher, de grandes iconos del comic de género bélico como el Sargento Rock, el As Enemigo o el Soldado Desconocido.

El comic bélico no sería lo mismo sin ellos

Pero como ya digo no quedo ahí la cosa, Kubert era un gran admirador de Harold Foster, siendo su Tarzan el primer comic que leyó. Y décadas mas tarde Kubert tuvo la oportunidad de volver a emular a su maestro realizando el también una versión del Tarzan de Rice Burroughs que aun a día de hoy se cuenta entre las mejores adaptaciones del personaje. Pero no fue ese el único punto en común que tenían ambos autores, ya que Kubert también se dio el capricho de homenajear a través de su creación (Una vez más en colaboración con Kanigher) el Príncipe Vikingo, al Príncipe valiente de Foster. Entre sus creaciones tampoco nos podemos olvidar de Tor, el héroe prehistórico que vivía sus aventuras hace un millón de años y que trataba de sobrevivir en un mundo poblado de dinosaurios. De este personaje Kubert pudo conservar sus derechos y lo paseo por DC Comics, Eclipse, Epic… También tiene el curioso honor de ser uno de los primeros comics publicados en 3-D, técnica que el propio Kubert ayudo a desarrollar.

Ningún género le fue ajeno

Pero el género superheroico también tiene una gran deuda con él. Algunos de sus primeros trabajos fueron en las páginas de All-Star Comics dibujando a la mismísima JSA. También creo a peculiares superhéroes como Ragman, el héroe de la comunidad judía. Pero si hay algún superhéroe que tiene una gran deuda con Joe Kubert ese es Hawkman. Fue Kubert quien ayudo a revitalizar al personaje durante la Silver Age, recreando al personaje junto a Gardner Fox, bajo la identidad de Katar Hol. Debió tomarle especial cariño al personaje, porque desde entonces le dibujo cada vez que tenía una oportunidad, siendo este el protagonista de una de las historias que componían el primer número de Joe Kubert Presents. Este cariño que sentía Kubert por el personaje es el motivo por el que siempre le he tenido un gran aprecio a este autor.

La Silver Age no podía haber empezado con mejor pie

Ya ni recuerdo exactamente cuál fue el primer comic suyo que leí, pero probablemente el primer dibujo suyo que vi, al menos es lo más antiguo que puedo recordar, fue la ficha de Hawkman extraída del “Who’s Who” que Zinco publico en un numero de Superman. El comic lo dibujaba John Byrne, y me había encantado ese policía extraterrestre que se vestía como un pájaro. Pero aquella ilustración de Hawkman en la que parecía estar “nadando” en el aire, dibujada con ese trazo suelto y cuidadosamente tosco de Kubert hizo que me olvidase por completo de la versión de Byrne. Se podría decir que fue amor a primera vista tanto por el personaje como por el dibujante.

Poca gente era capaz de dibujar ese casco y que no resultase ridículo

Pero como ya he mencionado antes Kubert no se mantuvo inactivo en ningún momento. En las últimas décadas se dedico a realizar proyectos más personales como “Fax From Sarajevo”, “Yossel: April 19, 1943”, “Jew Gangster”. Retomo ocasionalmente al Sargento Rock a Tor y a Hawkman y colaboro con sus hijos Adam y Andy entintándoles cada vez que tuvo oportunidad. Incluso hizo una pequeña incursión en el fumetti Italiano ilustrando “Tex, The Lonesome Rider”.

Desde el western al drama, en cualquier campo se desenvolvía bien

Su último trabajo iba a ser una antología de relatos que según el mismo decía, era la clase de comic que le gustaría leer. Una recopilación de nuevos relatos ilustrados por él, ediciones de comics inéditos suyos y colaboraciones con artistas con los que le apetecía trabajar. Aunque con la desaparición de Kubert no está claro aun en qué punto quedara la publicación del “Joe Kubert Presents”.

Y por última vez, volvió a uno de sus personajes favoritos

Pero si bien el fallecimiento de Joe Kubert sigue siendo una noticia muy triste,  al menos nos queda el consuelo de que vivió una larga vida y que pudo dedicarse durante ella a trabajar en lo que mas le gustaba, ya fuese dibujando o dirigiendo su escuela. Y aunque ya no podamos volver a disfrutar de nuevas obras suyas, nos quedaran para siempre los miles de comics que realizo en su dilatada carrera.