Españoles… En este triste momento para todos los cristianos de bien, cuando la humanidad se ve amenazada por las hordas comunistas judeomasónicas que nos llevan al vicio, al pecado y a la sodomia, nuestra misión como hijos de la patria y defensores del nacionalcatolicismo es la de prevalecer ante la adversidad. Para ello, debemos tratar de fortalecer nuestra civilización. Las cosas no son como en el juego anterior, que en el enfrentamiento entre dos unidades o moría una o moría otra, quedandose la unidad viva en perfectas condiciones. No. Ahora las unidades tienen una barra de vida, y debemos tratar, procurar, luchar para que nuestras unidades se curen tras cada combate, o de lo contrario nos veremos abocados a perderlas contra los malvados rojos que nos amenazan.
Tenemos, por fín, la posibilidad de elegir a Felipe II o a doña Isabel la Católica, grandes reyes de España y padres del Imperio. Los mapas serán más bonitos, nuestros consejeros serán animados por las maravillas modernas del video digital e interpretados por actores reales, además de contar con melodias en el moderno estándar de vídeo digital en disco compacto. Así, en esta segunda entrega de Civilización, podemos hacer que España sea Una, Grande y Libre. Al igual que en la primera parte, los españoles agradecerán nuestra paternal vigilia con sus regalos, creándo en este caso un salón del trono digno de la tarea que acometemos.
En el canal de youtube del hombre este están todos los videos de nuestros consejeros.
Además de nuevas civilizaciones que conquistar, existen nuevas formas de gobierno. Entre ellas destaca el fundamentalismo, basado en la religión mora cercana al satanismo que crea unidades propias que, armadas con antorchas y dinamita tratan de acabar con la eterna nación cristiana. Elegir esa forma de gobierno no es del gusto de Dios, y por ello deberemos editar el gráfico de la unidad mora y sustituirla por un honrado monje o beato que transmita la palabra de dios a los masones impíos que componen la herejía extranjera, corrigiendo así el juego para que el fundamentalismo se llame «Nacional Catolicismo».
Podríamos haberla llamado Ferrol del Caudillo, o Madrid el Caudillo, pero serían nombres demasiado largos.
Porque una de las mayores virtudes de este juego de la civilización en su segunda parte es, sin duda, la capacidad de permitir al español recrear escenarios, con lo que podemos revivir la lucha contra los rojos que querían robarnos la patria, la guerra de la independencia, la reconquista o la evangelización de los indios en las américas. Que hermosas noches pasaremos reviviendo las glorias pasadas.
Todo es en esta segunda parte más grande, más bonito, más hermoso. En realidad, Civilización Dos es una revisión y mejora completa de la primera parte, plasmando de forma magistral el viaje a la consecución de llevar el catolicismo y la hispanidad a las estrellas. Que hermoso sueño, el llevar a Dios, cristo y el Cid a los marcianitos.
También podemos jugar a indios y vaqueros, pero no debemos olvidar que nuestro objetivo es acabar con los rojos, los pieles rojas son secundarios.
Tras esta segunda parte Microprose, editora del juego, desaparecerá para siempre. Durante muchos años no saldrá al mercado ningún civilización más, y la marca del producto irá cambiando de manos. Sid Meier, autor del Civilización original, creará Alpha Centauri, en el cual se cuenta que pasa después de Civilización cuando la humanidad llega a las estrellas. Lamentablemente, en el juego no hay españoles y por eso no merece la pena jugar (en realidad el juego es la rehostia y hay que jugarlo, aunque si no te va el rollo new age igual te tira un poco para atrás). Activision, que tuvo en su poder por un breve periodo de tiempo los derechos de Civilización, fabricará el llamado Civilización: Llamada al Poder Primera y Segunda parte. Los dos permitían seguir la historia de España hasta el lejano año 3000, y no caían en la vergüenza de no permitir llevar el destino de España.