Daredevil: Born Again ha regresado por la puerta grande

Pues por fin llegó el día. Ayer se estrenó Daredevil: Born Again con un doble episodio (emitiéndose el resto de forma semanal, como debe ser), así que toca hacer lo prometido y compartir las primeras impresiones sobre este esperadísimo regreso. Un regreso por todo lo alto, aunque no exento de polémica, pero que me ha dejado con muy buen sabor de boca y, sobre todo, con muchísimas ganas de ver el resto de la serie. Así que, como ya hemos esperado demasiado —siete largos años, que se dice pronto—, no voy a dar más rodeos y voy a entrar en materia. Y aunque en la medida de lo posible voy a intentar evitar los SPOILERS, es posible que algo caiga, por lo que recomiendo a todo el mundo ver estos dos episodios y volver aquí, que esta es una serie que vale la pena disfrutar llevándose las sorpresas.

Aunque igual le vendría bien un afeitado

Pese a todas las declaraciones de buenas intenciones del reparto de la serie y el resto del equipo, asegurándonos que ahora sí, esta iba en una buena dirección y que quienes habíamos disfrutado de su etapa anterior podíamos estar tranquilos, yo aún me sentía algo desconfiado. Porque sí, los diferentes tráilers tenían muy buena pinta, y la serie parecía conservar todo lo que la había hecho grande, pero como ya me he llevado demasiadas desilusiones con tráilers mucho mejor hechos que la serie o película que promocionaban, estaba algo preparado para la decepción. Por suerte, esto no ha sido así y Daredevil: Born Again ha comenzado por todo lo grande, como si no hubiésemos tenido que esperar una eternidad desde el final de su tercera temporada.

Y parece que fue ayer cuando Netflix le cancelo

Y lo del comienzo por todo lo grande es algo que digo literalmente, ya que la apertura del primer episodio es casi más propia de un final de temporada, recordándonos de paso lo violenta y brutal que podía llegar a ser esta serie. Pero es también un momento que ha causado bastante revuelo y polémica por una decisión creativa un tanto cuestionable. No voy a entrar en detalles por no reventar la sorpresa, pero, aunque puedo entender los motivos para ello —tanto los narrativos, para impulsar ciertas decisiones de los personajes, como los del mundo real, que obedecen a los cambios que sufrió la serie tras la huelga de guionistas—, es una decisión que a mí personalmente no me ha gustado y que espero que puedan rectificar más adelante, que cosas más raras hemos visto por aquí.

A ver en que queda la cosa

Aunque eso entronca con el único punto negro de la serie hasta la fecha: se nota un poco en qué partes han remendado cosas para poder aprovechar buena parte de lo que ya estaba rodado. Esto no afecta demasiado al visionado de la serie, pese a que el contraste entre el primer episodio y el segundo es bastante apreciable, siendo el primero más como fue la serie original y el segundo algo más un drama de abogados, como presuntamente era la idea original. Pero pese a ello, y a esa orientación —espero que momentánea— hacia el drama jurídico, esto sigue siendo una serie de superhéroes. Algo que se aprecia especialmente en cómo una de las tramas principales de este aspecto de la serie bebe directamente de la etapa de Brian Bendis (quien aparece acreditado como productor consultivo) en el cómic de Daredevil, en concreto el arco argumental de El Juicio del Siglo, en el que Héctor Ayala/Tigre Blanco acababa frente a un tribunal.

Aunque aquí no creo que llamen al Doctor Extraño a testificar

Pero, como ya digo, nada de eso es un impedimento (hasta la fecha, crucemos los dedos) para el disfrute de la serie, que sigue manteniendo un nivel muy alto y desarrollando unas cuantas tramas bastante interesantes. Por un lado, tenemos a ese Matt Murdock que se ha retirado como superhéroe y dedica todo su tiempo a su trabajo como abogado y a rehacer su vida. Pero eso es algo que no le resulta nada fácil, ya que su sentido de la responsabilidad le impulsa constantemente a volver a sus viejos métodos, a utilizar sus habilidades para ayudar a los demás cuando la ley no es suficiente. Una lucha interna que, por supuesto, le provoca una impotencia y un sufrimiento a los que quienes somos fans del personaje ya estamos más que habituados, porque Daredevil es un personaje al que muchísimos de sus equipos creativos adoran martirizar.

Cuando pone esa cara sabes que su contrincante esta en peligro

La otra, por supuesto, es la protagonizada por el nuevo alcalde de Nueva York, Wilson Fisk. Un aspecto en el que los responsables de la serie no se han cortado un pelo a la hora de realizar unos cuantos paralelismos con Donald Trump, mostrándonos cómo Fisk se ha ganado al electorado a base de convencerles de que hacía falta alguien de fuera de la política para arreglar las cosas, que él sí es alguien capaz de hacer lo que hace falta por su experiencia como empresario y con mucho populismo. Eso y que, por supuesto, aunque Fisk ya no sea Kingpin y se haya aislado de todos sus negocios criminales, sigue siendo ese monstruo corrupto y amoral que no duda en utilizar cualquier medio necesario para conseguir sus objetivos. Y en cada uno de esos momentos es todo un placer disfrutar del talento de Vincent D’Onofrio dando vida a ese Kingpin que trata de aparentar que ha dejado su vieja vida atrás, que constantemente se encuentra en situaciones en las que parece que va a explotar y que se contiene a duras penas. Y eso es algo que echaba muchísimo de menos.

La ficción cada día lo tiene mas difícil para superar la realidad

Por otra parte, también he podido comprobar cómo otros de mis deseos de la lista de ayer se han cumplido. Hemos podido ver a un Daredevil mucho más acrobático que en su vieja serie y que utiliza más a menudo el cable de su bastón para realizar unos desplazamientos que solo Spider-Man podría superar. Y aunque a este último no se le menciona por su nombre, sí que nos encontramos al alcalde Fisk quejándose de los justicieros de Nueva York, entre ellos uno que se viste de araña. Sabe a muy poco, pero sinceramente es más de lo que esperaba. Donde sí han sido mucho más explícitos es con el pasado reciente de Fisk, y aunque no dicen tampoco el nombre de Echo/Maya, sí que mencionan directamente lo que le hizo esta a Kingpin al final de la serie de Ojo de Halcón y su período de recuperación que vimos en la serie de esta. Así que, aunque de nuevo es conformarse con lo mínimo, al menos no han optado por hacer como si nada de lo anterior hubiese sucedido.

Aunque todavía hace un poco de parkour

Y no me puedo resistir a mencionar un pequeño spoiler, uno muy mínimo. Sin entrar en detalles, hay un momento de la serie en la que Matt, en su faceta como abogado, tiene un incómodo encuentro con un par de policías corruptos que están a punto de cometer un crimen, y podemos ver cómo uno de ellos tiene en su muñeca un tatuaje muy familiar. Sí, es un tatuaje de la calavera del Castigador, en cuya frente aparece una bandera de Estados Unidos invertida y en color negro, un símbolo que algunos movimientos de extrema derecha de allí están utilizando. Sin duda, esto es una respuesta a ese desagradable aumento de personal militar y policial en Estados Unidos que luce con orgullo ese símbolo, como si el Castigador fuese su ídolo. Y, dado la forma tan explícita en la que nos lo han mostrado, y que sabemos que Frank Castle se va a dejar caer por la serie, me muero de ganas por ver cómo va a reaccionar este ante criminales que retuercen la ley y que se han apropiado de su símbolo. Algo que definitivamente va a implicar un montón de balas…

No, a Castle no le va a hacer gracia esto

Así que, de momento, Daredevil: Born Again es una serie por la que ha valido la pena esta larga espera que hemos tenido que sufrir. Solo espero que en los episodios que quedan por emitir (siete más) no se noten más los remiendos, no más que hasta ahora al menos, que tuvieron que hacer cuando remodelaron la serie. Porque confío en que lo que hemos visto en estos dos primeros episodios no sea un espejismo, que realmente Daredevil haya vuelto con una nueva temporada a la altura de lo que se merece tanto el personaje como el público.

Invítame a un tebeo
Suscribirse
Notifícame de
guest


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

4 Comments
más antiguos
más recientes más votados
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios
Roger
Roger
1 mes han pasado desde que se escribió esto

La tercera temporada ya fue bastante «born again». Espero que aquí no signifique «más de lo mismo».
Espero que la frustración cotidiana de Daredevil no le lleve a renunciar a la abogacía. Para mí su vertiente jurídica es tan importante como la justiciera.
Alguien tendrá que contarle a Matt que hay cretinos usando la calavera, porque siendo ciego no puede verlo (vamos, ni siquiera sabe quizá que el Castigador usa ese emblema).
En algunas de sus historias Castle ha dejado claro que se considera un caso único, no un ejemplo a seguir, y ha liquidado sin piedad imitadores de vario pelaje (en otras historias, hace lo contrario. No es que los busque, pero tolera a sus «fans» e incluso les ayuda).

Roger
Roger
1 mes han pasado desde que se escribió esto

Si haver visto el episodio, me choca que saquen a Heather Glenn como terapeuta. Espero que acabe mejor que la del cómic. Heather es quizá la novia que Murdock trató peor.

Zatannasay
Zatannasay
1 mes han pasado desde que se escribió esto

Lo del tatuaje me ha matado. Que forma de invertir los símbolos. Manda cojines.

Erminzah
Erminzah
1 mes han pasado desde que se escribió esto

Buenísima la serie, que por suerte es la 4ª temporada de Daradevil y no la 1ª de Disney/Marvel, la escena del inicio es increible y te coloca rapidamente en la trama de porque hay un punto de inflexión en la vida de Matt.
Los paralelismos de Donald Trump y Wilson Fisk son tan evidentes que espero que den guantazos a algunas mentes de yanquilandia y el resto del mundo, aunque luego te saldrá algún aneuronal con «Fisk tenía razón».
Me ha gustado mucho el detalle del tatuaje y bandera invertida y que lo lleven » los malos», especialmente cuando Castle les meta una paliza.
Muy contenta con el resultado y aunque este «born again» no es el de los comics, me gusta ese planteamiento de » renacimiento» de esta trama.