Hoy toca hablar de todo un clásico con mayúsculas como Will Eisner, un autor sin quien el cómic moderno sin duda no seria el mismo y que en las ultimas décadas de su carrera se dedicó a explorar todas las posibilidades que daba el medio. Y dentro de esta experimentación podríamos englobar el cómic del que quiero hablar hoy, The Plot: The Secret Story of the Protocols of the Elders of Zion. Un cómic de larguísimo titulo en el que Eisner saco a relucir su lado mas didáctico para tratar un tema al que había estado dando vueltas durante muchísimos años, el desmontar un panfleto con mas de un siglo de historia y distintos gobiernos y organizaciones han venido utilizando para difamar a los judíos. Y aunque esta obra no acaba de ser tan satisfactoria como otras suyas, el enorme talento de Eisner y lo interesante del tema que trata, hacen de The Plot una lectura de lo mas recomendable.
Durante mas de un siglo los protocolos de los sabios de Sion han perseguido al pueblo judío a lo largo y ancho del mundo, un panfleto antisemita que desde los tiempos de los Zares de Rusia ha sido utilizado como arma propagandística con la que convertir a los judíos. en los chivos expiatorios de múltiples conflictos y revoluciones a lo largo de la historia o simplemente como excusa para poder odiar “al otro”. Un panfleto con unas raíces mucho mas antiguas y pintorescas pero que pese a las repetidas pruebas de su falsedad se resiste a desaparecer y que siempre acaba resurgiendo en alguna parte para seguir cumpliendo el objetivo con el que fue creado, extender el odio…
Will Eisner, hijo de inmigrantes judíos. europeos y nacido poco antes de la gran depresión, se encontró con el antisemitismo en muchísimas ocasiones a lo largo de su vida, por eso la existencia de un panfleto como Los Protocolos, que culpaba a los judíos. de haber organizado una conspiración a nivel mundial para controlar el mundo y que siempre se había utilizado como herramienta para criminalizar y perseguir a su pueblo, le obsesionaba. Máxime si se tiene en cuenta la absoluta falsedad del mismo, una falsedad que con el paso del tiempo se había ido volviendo cada vez mas y mas evidente y se había conseguido incluso rastrear el origen del mismo hasta un lugar y época insospechado. Por ello Eisner dedico los últimos años de su carrera y de su vida a la elaboración de la que fue su ultima novela gráfica, completada poco antes de su muerte en 2005.
Aquí Eisner dejo a un lado el costumbrismo semi biográfico que tanto caracterizo la ultima etapa de su carrera (aunque no del todo) y las adaptaciones literarias para crear en forma de cómic una herramienta didáctica que simplificase la historia detrás de este panfleto. Un cómic con el que tenia la esperanza de ayudar a enterrar para siempre este libelo que tanto daño había ayudado a provocar al pueblo judío. Aunque como el mismo dejó claro en el ultimo capitulo, insertándose a si mismo en la historia, no era del todo optimista en que esto fuese a ser así, pero al menos quería aportar su granito de arena a intentarlo.
El resultado es un cómic histórico que nos lleva desde la Francia del Siglo XIX a la Rusia de los Zares, la Alemania Nazi hasta el presente en el que un anciano autor de cómics se documenta para la elaboración de su ultima novela gráfica, siguiendo el rastro de este panfleto que nació como herramienta para desacreditar a un consejero del Zar plagiando su contenido de un libro critico con el gobierno de Napoleón III y que se extendió por el mundo como una plaga gracias a que el odio irracional siempre busca una excusa con la que justificarse. Y como relato histórico resulta apasionante seguir ese rastro y las vueltas que ha dado, tanto entre los que lo han utilizado como arma como entre quienes han tratado de desacreditarlo.
Sin embargo ese afán didáctico que guiaba a Eisner, quien estaba centrado en su objetivo de tratar de dejar claro de una vez por todas que esto no es mas que una dañina falsificación, hace que en algún capitulo que otro la lectura se vuelva un poco farragosa con el aluvión de datos que Eisner quiere proporcionar al lector para que a este no le quede ninguna duda.
Por suerte esto solo sucede de forma muy puntual y en el resto del cómic tenemos a un Eisner que a sus casi noventa años seguía siendo un grandísimo dibujante que derrochaba talento y que dominaba como quería el medio, saltándose cuando y como quería las convenciones del medio, prescindiendo de marcos de viñetas y bocadillo o consiguiendo unos efectos de profundidad e iluminación a base simplemente de tinta aguada, o la forma que tiene de representar los flasbacks, que son todo un placer para la vista y el perfecto ejemplo de que su reconocimiento como uno de los mayores genios del cómic es mas que merecido.
Y aunque es triste que ya no contemos entre nosotros con alguien de su talla, el legado de setenta años de carrera que nos ha dejado repletos de enormes obras es un autentico tesoro del que todo el mundo debería disfrutar. Por ello una vez mas recomiendo no solo darle una oportunidad a The Plot, sino zambullirse de lleno en su ingente obra en la que uno puede encontrar prácticamente de todo y en la que incluso la mas “floja” de ellas tiene unos niveles de calidad altísimos que pocos serian capaces de alcanzar.
Me lo apunto, tiene muy buena pinta, y eso de desbaratar mentiras tan anquilosadas en la sociedad me llama la atención
Tema también ( y tan bien) tratado por Umberto Eco en «El cementario de Praga» , novela que recomiendo encarecidamente
Pues ese dato lo desconocía, y me apunto leer el libro, y eso de paso explica que Eco escribiese la introducción del comic
Hacia los capitulos centrales se vuelve un poco denso y complejo, no tanto por el estilo como por tratar temas y procesos historicos con los que en España estamos pico familiarizados, como la unificación italiana ( ademas de que el siglo XIX en general es una etapa historica enrevesada como pocas) , sin embargo sus primera paginas , un largo monologo interior del protagonista , un individuo odioso: misógino, antisemita , con prejuicios hacia casi practicamente todos los pueblos europeos: italianos , franceses ( a pesar de ser el mismo medio italiano – medio franchute) los alemanes,……, , sim embargo te engancha. Me fascina de Eco esa habilidad que tiene para meterse en la mente de personas con ideologias distintas , e incluso opuestas, a la del propio autor. Me recuerda a lo que hace Alann Moore por ejemplo en Watchmen, con los monologos de Rorschach, la autobiografia de Hollis Mason, etc…
Los buenos hacen eso, meterse en una cabeza totalmente distinta a la suya y darnos variedad de personajes. Es tremendamente deprimente cuando ves como se alaba a autores que se rigen por repetir una y otra vez los mismos clichés con variaciones muy pequeñas, es como si hicieran personajes con fotocopiadora y le encargaran al dibujante disimular su chapuza.
Es la trampa psicologica del racismo, la argucia recompensadora del ego que usa: La culpa de todo lo malo (paro, plagas, guerras o perder guerras, lo que sea…) es de otros que no son como yo. Por lo tanto la culpa no es mía, es de otros.
¡Ay, que alivio! ¡Como de superior y raza especial me siento! ¡Que destino manifiesto tan maravilloso tengo!
Volviendo al cómic en sí. Eisner tiene más interés en contar la historia que en hacer un cómic. Realmente en buena parte, casi es un relato ilustrado.
Lo que llama la atención es que no lo realizase antes. ¿Porque espero tanto? A saber.
Es encomiable ese hombre que nunca perdió la capacidad de contar, el deseo de narrar. Uno de los gigantes de verdad.
A mi esas primeras paginas, que incluí en el articulo, sobre que el enemigo siempre es el otro me dejaron un poco por los suelos por lo reales que son. Y si que se nota que Eisner pretendía hacer mas un libro de texto ilustrado que un comic en si, el mismo lo reconocía, pero exceptuando ese capitulo de las comparativas entre los Protocolos con el libro francés, el resto del comic se lee que da gusto.
Y por lo que se cuenta en los apéndices Eisner se paso 20 años desarollandolo, documentándose a fondo y buscando ayuda de expertos. Supongo que se tomo su tiempo para asegurarse de que su comic fuese lo mas históricamente riguroso posible.
Eisner tanto en Fagin el judío como en esta obra intentaba concienciar y ser didáctico. Son grandes obras pero el mensaje obstaculiza la historia.
Puede parecer extraño pero creo que toda su producción mejora cuando quiere contar la historia y deja que esos elementos fluyan. Contrato con dios o Avenida Dropsie son buenos ejemplos de historias con protagonismo múltiple y reflejo de una era.
Ahora divagaré, Ann Nocenti es una gran guionista pero en muchas ocasiones sus proyectos adolecían de una primacía del mensaje sobre la historia como en Daredevil o Nuevos mutante entre otros…
Pero bueno también tenemos muchos autores que giran su producción entorno a un tema, que no mensaje, y repiten la estructura siempre. Alan Moore y la deconstrucción, Peter Milligan y la identidad, Neil Gaiman y los relatos oníricos, JIm Starlin y lo cósmico, Joe Casey y el papel del individuo frente al mundo, Hickman y las estructuras….
Para finalizar creo que es más fácil contar una historia con mensaje que viceversa. Cuando se crea el equilibrio es perfecto.
Alan Moore es tan sutil con el mensaje político de su obra como un Terminator un sábado por la noche, yo si buscara ejemplos de obras «devoradas por el mensaje» no miraría a Nocenti, a Eisner o al mismísimo Jack Kirby, miraría a Fletcher/Stewart en Batgirl, a Kelly Sue DeConnick en su primer volumen de Capitana Marvel o Michelinie/Layton en Factor X. Absolutamente todo tiene un mensaje político, otra cosa es que te sientas como si te estuvieras leyendo los consejos del final de cada episodio de Inspector Gadget; al final el tema es parte del mensaje, porque si no hubiera mensaje el tema estaría completamente vacío, y si el mensaje no tuviera un contenido político carecería de todo. En cualquier caso, hay un porrón de artistas del siglo XX que jugaron al minimalismo de crear objetos sin mensaje, y te puedo asegurar que esas obras si tienen mensaje: que no tienen un mensaje.
En eso estoy de acuerdo. Me refiero principalmente a prioritario y secundario. Hay autores que inconscientemente ponen el mensaje y secundariamente la historia.
Es muy importante dejar la historia desarrollarse y poder introducir un mensaje que vaya aparejada a la trama. Ya no hablemos solo de mensaje sinó también de las injerencias editoriales o cuando los personajes no se comportan como tal.
Todo tiene mensaje y la política también. Por eso a mí me encantan los cómics de los 80 por tener contenido político, por tratar temas sociales y buscar soluciones en ocasiones. Cuando todo se convierte en alegoria y texto sin sustancia se pierde mucho.
Y esa fue una de las lecciones que muchos autores entendieron mal de los 80.
¿Como puede el mensaje obstaculizar la historia cuando sin ese mensaje no hay historia? No se puede hablar de un tema como este y ser frio y aseptico sin posicionarse.
Toda historia tiene un mensaje, es más, las historias son mensajes en si mismas. El punto es si tu coincides con el mensaje de la obra o si discrepas de él, lo cual no necesariamente afecta la calidad de la obra en si. Hay obras que contienen un mensaje politico lo suficientemente sutil como para que la gente no se de cuenta y otras que plantean la discusión entre posturas diferentes, dejando que el lector decida por cual decantarse. En lo personal pienso que estas son las mejores.
Me producen cierto rechazo son aquellas llegan a ser descaradamente propagandisticas y/o saturadas de sermones. Incluso esas pueden tener un buen nivel artistico, pero cuando dejan de lado la historia para dar enfasis al «mensaje», pues se han olvidado que la idea es que el mensaje llegue sin que la persona se de cuenta, pues la historia tiene por objetivo dar un mensaje especifico de manera didactica.
En cuanto a esta obra, la buscare. Nunca falta el conspiranoico que cita a los sabios de Sion y su conspiración y blablabla. Y es bueno tener algun recurso para rebatir aunque ya se que es inutil rebatir con uno de esos tipos. O tipas.
De pronto me acorde de olas historias de Alan Grant y Norm Breyfogle en Batman. Esas igual tenian su carga de mensaje social. Debere releer mi vieja colección.
Me refiero al equilibrio. Si el mensaje es lo primario y la trama lo secundario, no será una lectura natural. Para enterdernos, serían bustos parlantes y párrafos llenos de mensaje. Si ese mensaje lo incluyes bien dentro de la trama y tus personajes lo cuentan de forma natural acompañado a la acción, conversación o situación, consigues un mejor resultado y se interioriza más por el/la lector/a.
¡Sabia que en Brainstomping era parte de la conspiracion socialista neoliberalista del anarkismo del KKK judeoislamista chino!! ¡Os habeis desemascarado!!
Broma. Buen articul. Me han dejado con las ganas de leerlo.
(Ya no en broma, me aterra pensar que hay alguien en este planeta que si se cree la conspiracion arriba descrita)
Bueno, la conspiración esa de Sión o como se escriba ahora ya está más pasada de moda, ahora les gusta echarle la culpa de todo al tal Soros, a los menas, a los gitanos… Bueno, lo de los gitanos tristemente nunca ha pasado de moda.
Pero Soros es judío. No se, yo diría que el antisemitismo está gozando de una segunda juventud. Pasa que ahora ya no hay immigrantes judíos y hay otros blancos más fáciles como los musulmanes o los inefables gitanos (macho, a estos nunca les dan un respiro) que se reparten el odio de la sociedad entre ellos de forma más o menos equitativa y por eso no resulta tan obvio a simple vista, pero no hay que engañarse, escarba un poco y te encuentras con lindezas bastante populares como el plan Kalergi ese o… Da miedo ver con qué precisión emulan los 10s de este siglo a los del siglo pasado, pero bueno, ya se sabe que ahora están de moda los reboots y tal.
Sí, lo de Soros es el mismo perro con distinto collar, en vez de ser una conspiración de varios es cosa de uno solo porque después de James Bond a la gente le gusta eso del supervillano en su guarida manipulando los hilos de todo lo que pasa en el mundo.
Honestamente, los conspiracionistas estos si que son los que tienen demasiado tiempo libre!
Eso digo yo. Que pareciera que se estan guardando para la tercera asi con todo. Ahora, si es que estamos en medio de una guerra comercial, que se quede en ese nivel.