Mientras esperamos que ese Superman Legacy que cada vez va tomando mas forma y su casting se va completando de formas sorprendentes, para ir abriendo boca podemos echarle un ojo a la serie de animación que se acaba de estrenar dedicada al personaje, My Adventures with Superman. Se trata de una serie de Adult Swim con un enfoque mas cómico de lo habitual y que debería pulir alguna cosilla aquí y allá, pero tras haber visto sus dos primeros episodios puedo decir que lo mas importante de un proyecto como este lo han clavado, Superman realmente parece Superman.
Clark Kent y su amigo Jimmy Olsen acaban de comenzar a trabajar como becarios en el Daily Planet, donde su jefe, Perry White, les ha emparejado con otra becaria mas veterana y muy entusiasta, Lois Lane. Arrastrados por esta dejaran de lado las labores propias de su “trabajo” (archivar papeles, servir cafés) para actuar como auténticos periodistas e investigar la que podría ser la mayor noticia de la historia, descubrir los secretos de ese misterioso héroe vestido de rojo y azul que acaba de llegar a Metrópolis y a quien Lois ha bautizado como Superman…
Quienes busquen una adaptación seria del personaje a la altura de lo que hicieron en su día Bruce Timm y Paul Dini con Superman: TAS sin duda saldrán decepcionados (es que esos dos dejaron el listón muy alto en todo). Porque My Adventures with Superman no deja de ser una serie de Adult Swim con el tono habitual de sus producciones, con un humor a menudo tontorrón y que en ocasiones roza la parodia y unos protagonistas mucho mas jóvenes de lo que estamos acostumbrados a ver (fuera de cosas como Smallville) Algo que sumado a esa estética que se inspira y mucho en el anime, puede echar para atrás a mucha gente.
Pero si uno puede dejar a un lado todo eso y acercarse a la serie con la mente abierta descubrirá que hay un elemento que hace que esta serie se sostenga, Superman ES Superman. Y es que tras años en los que hemos tenido que soportar a un sector del gran publico empeñado que Superman tenia que ser como en esos videojuegos violentos y películas mediocres, oscuro y mas agresivo, resulta refrescante encontrarnos con un Superman tan clásico (Aunque Superman & Lois se ha acercado mucho al enfoque correcto). Aquí nos encontramos con un Clark Kent (porque Clark es el real y Superman el disfraz, como debe ser), a quien presta su voz a la perfección Jack Quaid (The Boys, Star Trek: Lower Decks) recién llegado a la gran ciudad, que aun esta descubriendo quien es realmente y todo lo que puede hacer, que quiere hacer realidad su sueño de convertirse en periodista.
Un Superman/Clark que esta repleto de esperanza y optimismo y a quien su enorme corazón le impulsa una y otra vez a utilizar sus poderes para hacer lo correcto y ayudar a los demás, incluidos sus enemigos, aunque eso suponga poner en peligro su secreto, además de quedarse tras las batallas para arreglar los destrozos provocados por esta dejando muy claro lo mucho que le importan los demás, un aspecto que espero que se traslade a las próximas adaptaciones. Una caracterización del personaje que a primera vista resulta tremendamente simple (y no lo digo como algo peyorativo) pero que demasiado a menudo nos hemos encontrado con gente al cargo de diferentes proyectos que no han sabido o no han querido entender y se agradece mucho que aquí tengan claro que es lo que hace funcionar a Superman.
Algo que nace de otro de mis elementos favoritos de la serie, la influencia de unos Ma y Pa Kent que aquí siguen vivitos y coleando. Dos personajes que demasiado a menudo tanto en el cómic como en sus adaptaciones han querido quitar de en medio relegándolos a algo del pasado del personaje, como si su papel debiese limitarse a inspirar a Superman en su infancia y juventud y desaparecer. Pero como hemos podido comprobar una y otra vez (uno de los mejores aspectos del relanzamiento de John Byrne en los ochenta) son dos personajes cuya presencia en el presente es fundamental para el personaje como apoyo moral al que recurrir cuando las cosas se ponen difíciles y que en los propios cómics han tenido que acabar recuperando. Por eso me alegre muchísimo al comprobar que en esta adaptación tanto Jonathan como Martha Kent siguen formando parte de la vida de Superman no solo para servir de guía y refugio a su hijo, sino que esta ultima además ha recuperado un papel muy importante en la historia del personaje…
Y si, estoy hablando del traje de Superman. Porque aunque la serie nos da un pequeño susto haciendo que el traje sea fruto de la tecnología y el diseño de moda de Krypton, que incluso aparezca en torno a su cuerpo transformándose como si estuviésemos viendo Sailor Moon y que ese diseño kryptoniano consista en un mono azul de cuerpo entero con botas y capa rojas, ahí esta Ma Kent para hacer las cosas bien, afirmando tras ver ese uniforme que necesita un cinturón y los famosos calzoncillos, devolviéndole al personaje casi su aspecto icónico después de que durante una temporada se empeñasen en eliminarlos en el cómic, cine, televisión, animación y videojuegos, pero como se suele decir es difícil matar las buenas ideas y estos han regresado aquí de la misma forma que espero que lo hagan en el cine (no me decepciones James Gunn)
También es cierto que el traje, pese a que me encanta que en líneas generales sea el Superman de toda la vida, tiene sus problemillas. Aquí nos encontramos con el trabajo de Kris Anka, un veterano tanto del cómic como de la animación, de quien hemos visto muchos de sus diseños y rediseños para el cine en películas como Across the Spiderverse y que aquí ha tratado de “arreglar” algo que no estaba roto (quiero pensar que por injerencias de los de arriba) El resultado es un rediseño que podría haber estado mucho mejor, la simplificación del emblema del pecho le ha quedado realmente fea, y el traje esta lleno de parches en un tono de azul mas oscuro que no aportan absolutamente nada al diseño. Cambios que parecen estar ahí simplemente como respuesta a ese “horror vacui” que sigue atenazando a muchos responsables de proyectos como este y que no parecen capaces de aceptar que a veces la simplicidad de los diseños de muchos superhéroes esta ahí por algo. Pero con suerte todo eso lo pulirán para la segunda temporada de la serie cuya producción ya esta en marcha.
Así que yo animo a todo el mundo a darle una oportunidad a esta serie porque pese a que tiene aun que mejorar en algunos aspectos y el tono de la serie se que no será del gusto de todo, en lo realmente esencial lo han clavado y nos han dado un Superman que habla, actúa y se siente como Superman, y eso se agradece muchísimo.