Hace unas semanas se estrenó la serie de The Book of Boba Fett tomando el relevo de The Mandalorian, pero por unas cosas u otras hemos ido posponiendo el reseñarla tanto Diógenes como yo. Algo provocado en buena medida porque a ninguno nos ha importado nunca demasiado el personaje ni hemos entendido esas pasiones que levanta. Pero verla la hemos visto, y aunque tengo que reconocer que he encontrado la serie entretenida, han habido momentos puntuales en los que he llegado a pasármelo bien y sus protagonistas son muy buenos en lo que hacen, los responsables de la serie no han sido capaces de conseguir del todo que nos importe lo que les suceda a estos. Pero vamos a ahondar en mas detalle en los pros y los contras que de momento ha tenido esta serie.
El temido caza recompensas Boba Fett fue dado por muerto durante la fuga de Han Solo y sus aliados de las manos de Jabba el Hutt. Pero este tras recuperarse de sus heridas ha regresado con la intención de dejar atrás sus días de trabajar para otros y hacerse con el poder de quien un día fue su jefe y convertirse en el líder de los bajos fondos de Mos Eisley. Algo que resultara mas complicado de lo que este creía en un principio y que le hará enfrentarse a todos los que buscan llenar ese vacío de poder y hacerse con las riquezas que esconde ese territorio…
Lo he dicho al comienzo y lo reitero ahora, Boba Fett nunca me ha interesado, para mi siempre fue simplemente aquel secundario con diseño interesante que moría de forma ridícula y poco mas. Por eso a pesar de las novelas y cómics que se hayan podido hacer sobre este, nunca he sido capaz de comprender esa admiración que desata entre algunos, me resulta tan incomprensible como encontrarme con fans del Capitán Panaka. Pero para ser justos hay que reconocer que el Boba Fett que nos encontramos aquí es en muchos aspectos un personaje nuevo, ya que por primera vez (en imagen real) podemos conocer al hombre que se esconde bajo la armadura de beskar.
Y el Boba Fett al que le da vida Temuera Morrison tiene sus puntos de interés, ya que detrás de esa leyenda de mercenario implacable encontramos a un hombre normal y corriente cansado de estar a las ordenes de imbéciles que se creen mas listo que el y que parecía a punto de querer abandonarlo todo para vivir una vida tranquila de retiro alejado de la civilización. En ese sentido no tengo ningún problema, Morrison hace muy bien su trabajo (aunque preferiría verle hacer de Comandante Rex en la serie de Ashoka) y el personaje, tal y como nos lo presentan aquí en esta nueva versión que conocimos en el Mandaloriano, tenia mucho potencial. El problema es que parece que no han sabido muy bien que hacer con el personaje.
Hasta ahora la serie se ha dividido en dos partes, por un lado tenemos la historia en el presente con Boba Fett y Fennec Shand tratando de hacerse con el control de Mos Eisley, y por otro los flashbacks contándonos como sobrevivió Fett a ser engullido por el Sarlacc y que estuvo haciendo en Tatooine hasta que se encontró con Mando para reclamar su armadura. Dos tramas en las que el universo de Star Wars ha sido mas western que nunca, tirando descaradamente de influencias como Un Hombre llamado Caballo, Bailando con Lobos y del Spaghetti Western.
Con todo ello han construido una historia en la que se supone que nos debe importar quien lidere los bajos fondos de un agujero en el desierto y las intrigas y puñaladas traperas que se dan allí para obtener poder. Algo que da que pensar que si hubiesen copiado mas del Padrino y menos de películas de vaqueros podría haber quedado una serie mas redonda. Que yo al menos casi me lo he pasado mejor con las partes de la serie en las que Fett vivía con los Tusken que con la trama del presente.
Porque lo he dicho, la serie mala no es, es entretenida, los actores están muy bien sus papeles y ni siquiera me ha molestado esa banda de cyborgs flipados nostálgicos de la era pre-imperial como le ha pasado a muchos, pero el problema es que muy poco de lo que me han contado hasta ahora me ha importado. Quizás es que simplemente el personaje no da para mas, que puede funcionar muy bien como secundario pero le falta peso y carisma para ser un protagonista, aunque el problema principal al final es que toda la trama sobre la que gira la serie es muy insulsa.
Tras Clone Wars, Rebels, The Bad Batch y The Mandalorian yo esperaba algo que me enganchase mas, no necesariamente algo épico de lo que dependiese el destino de la galaxia, que después de todo algunos de los mejores episodios de las otras series partían de premisas tremendamente simples en las que había poco en juego. Pero a Boba Fett de momento le ha faltado ese algo mas, y quizás de haber existido esta serie antes que toda las demás su recepción, al menos por mi parte, hubiese sido diferente. Pero como se suele decir las comparaciones son odiosas, SW nos ha puesto el listón muy alto y esta serie tenia demasiadas sombras y muy alargadas de las que escapar.
Unas carencias que han sido mas palpables que nunca hacia el final del cuarto episodio de la misma, aunque para eso mejor avisar de que se avecinan SPOILERS y seguir un poco mas abajo.
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Tras cuatro episodios lidiando con los jefes criminales rivales que quieren arrebatarle el poder Boba Fett afirma que necesita ayuda, musculo, Y Fennec Shand le hace ver que con los créditos suficientes se puede comprar todo el musculo que haga falta. Una escena en la que durante unos segundos suena el comienzo de cierto tema musical muy reconocible que consiguió emocionarme mas que todos los episodios emitidos hasta la fecha juntos porque no dejaban lugar a dudas de que, o mas bien a quien, estábamos a punto de ver…
¡Aun se me ponen los pelos de punta con ese momento del final!
Y así llegamos al quinto episodio de The Book of Boba Fett, el mejor de la serie hasta ahora, un episodio en el que paradójicamente el titular de la serie no aparece por ningún lado ya que todo el protagonismo recae en… ¡EL MANDALORIANO! Solo hizo falta una silueta borrosa detrás de una cortina para que la presencia de Mando (nunca me acostumbrare a llamarle Din Djarin) me hiciera olvidar todo lo visto hasta la fecha en esta serie, me diese cuenta de lo muchísimo que echaba de menos al personaje y que este pusiese mas de manifiesto que nunca todo lo que le falta a esta serie.
En este episodio muy apropiadamente titulado Return of The Mandalorian, y dirigido por una Bryce Dallas Howard a quien deberían darle una serie entera para ella sola, nos encontramos con una continuación directa de la segunda temporada de The Mandalorian, con Mando regresando a su viejo trabajo de caza recompensas, haciendo frente a las consecuencias de sus actos en dicha temporada, buscando un reemplazo para el Razor Crest y añorando mucho a ese hijo adoptivo que nunca pensó que llegaría a querer tanto (pero como para no quererle con lo majo que es). Ni mas ni menos, una trama que parece tremendamente simple y en la que parece que no sucede nada de importancia pero que sin embargo consigue atrapar al espectador.
Flashbacks de la destrucción de Mandalore, la pesada responsabilidad de empuñar el Darksaber o simplemente encontrarnos con Mando y Peli Motto arreglando una vieja y muy familiar nave. Con todo eso, o mas bien con nada mas que eso, y un tipo al que jamás le vemos la cara, con la voz de Pedro Pascal y con mas carisma que casi todo el resto del reparto (igual una serie de Fennec Shand viajando por ahí haciendo trabajos de mercenaria hubiese sido mas interesante, que Ming-Na Wen se lo merece) con este episodio de The Book of Boba Fett Mando me lo he pasado muchísimo mejor que con el resto de la serie, y resulta muy triste que esto sea así.
Un episodio en el que por cierto (si no me quejo reviento) nos encontramos a Mando trabajando en un mundo artificial o estación espacial gigantesca con una forma tremendamente familiar. Y tengo que reconocer que me ha puesto de los nervios cada vez que me he encontrado con alguien diciendo todo emocionado que han metido Halo en Star Wars y a muy pocos, poquísimos, hablando del Mundo Anillo de Larry Niven, que poca cultura…
Y ahora, con tan solo dos episodios mas en el horizonte, y Mando formando parte del reparto de la serie, quizás The Book of Boba Fett sea lo que podría haber sido desde el principio, aunque sea a costa de contar con un co-protagonista que remolque la serie a buen puerto. Pero quizás lo mejor este por llegar, que Mando al final de este episodio ha dicho que ayudara a Boba Fett y que no le cobrara por sus servicios, pero que antes de eso tiene que hacer una parada muy especial en la que quizás nos reencontremos con cierto personaje muy querido y añorado (menos por Diógenes que no tiene alma)…
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Lo dicho, es una pena que The Book of Boba Fett no haya sido todo lo buena que podría haber sido, porque la experiencia nos dice que incluso con personajes absolutamente nuevos se pueden hacer historias cojonudas (no hay mas que ver a los otros clones de Jango Fett lo bien que les ha ido en su serie) y Boba Fett es un personaje que aunque no me haya interesado nunca, tiene multitud de novelas y cómics de los que podrían haber tomado inspiración en lugar de haberle soltado en esta trama sosa que no parece ir a ningún lado. Pero ahora que tenemos el final de la serie a la vuelta de la esquina y con el nuevo giro que ha dado la serie en este ultimo episodio, quizás esta sea capaz de redimirse y haya valido la pena este a ratos insulso viaje.