Don Chris Claremont y John Romita Jr. Ya, ya sé que no es justo, que su etapa está considerada como un clásico y que enfrentarlo a Lobdell y Bendis es algo así como pegar a Superman con Dan Hibiki (guiño, guiño) pero a la hora de poner un marco real sobre cómo se debe escribir una escena de confrontación parecida me viene como anillo al dedo. Los personajes no son los mismos pero en lo esencial y en alguna cosa más, ésta escena es muy muy parecida.
Para daros un poco de contexto, son mediados de los 80 y Tormenta, tras un viaje a Japón en el que se hace muy -pero que muy muy muy- amiga de Yukio, la amiga de Lobezno, aparece hecha una punki perdida. La buena de Ororo ya llevaba una temporada como líder del grupo y sus compañeros empezaban a expresar bastante preocupación por algunos de sus comportamientos, naderías como apuñalar gente o tomar algunas decisiones que no le pegaban a una diosa africana, así que su transformación no acabó de hacerles mucha gracia y la que lo expresó de una forma más directa fue la pobre Kitty Pryde, que no podía entender como había podido volverse tan chunga. Tras volver a EEUU, Kitty decide emprender una misión de infiltración en lo que ella piensa que son los restos del Club Fuego Infernal y Ororo aprovecha ésa última oportunidad de hablar con ella para tratar de hacer las paces con Kitty y dejar las cosas bien claras:
Como véis, no es una escena de alguien sonsacando o revelando un secreto, si no de Tormenta pidiendo que la acepten como es y no como el personal cree que debe ser. Es una escena que se da después de que la gente salga del armario, el pedir al personal que empiece a verla como lo que es y no como la idea -preconcebida o no- que tenían de ella. Vamos a ello:
CHRIS CLAREMONT, UNCANNY X-MEN #180
PAGINA 1
Viñeta 2
Kitty empujada por el viento, pensando en que está siendo empujada por el viento y que no puede a resistirse a ello. Texto totalmente redundante, a pesar de que viene a recalcar lo que vemos en las imágenes. Podría habernos valido el «hey!» que grita Kitty sin necesidad de que diga que es una ventolera o piense que no puede resistirlo, pero parte de la narración está en el hecho en que primero verbaliza lo que está pasándole y luego lo piensa. Esto lo que nos viene a decir es que Kitty puede reconocer que eso que la empuja es viento, pero le jode admitir que no puede resistirse a el.
Viñeta 3
Kitty sale volando por la ventana, exige a Ororo que pare. Tormenta le dice que ya es hora de que las dos hablen.
Viñeta 4
Kitty alcanza a Tormenta en las alturas, Tormenta le dice que prefiere hablar esto a solas. Kitty flipa por lo alto que están, pero lo único que verbaliza es que le molesta que se chulee tanto. Otra vez el hecho de que Kitty piense una cosa y diga otra está ligado a la caracterización del personaje, Kitty no quiere admitir que está flipando delante de Tormenta -por no hablar de lo mucho que la sigue admirando- e insiste en mostrar su indignación.
Viñeta 5
Kitty le admite que está asustada, pero con un cabreo de cojones. Ororo le pregunta si cree que su yo anterior no habría hecho eso, y Kitty le dice que sí.
Viñeta 6
Tormenta le pregunta si por su bienestar debería forzarse a ser algo que no es.
PAGINA 2
Viñeta 1
Kitty se muestra contrariada y le dice que eso es mucho mejor que lo que es, y le pregunta por qué ha cambiado, que no lo entiende. Tormenta responde que ella tampoco.
Viñeta 2
Tormenta le viene a explicar que esto de estar con la Patrulla X entraba mucho en conflicto con el rollo de diosa africana que se traía en su día. Lógicamente lo que está expresando en esta viñeta es que su rol como «diosa» era tan falso como su rol de «Tormenta la diosa» dentro de los X-Men, que no se sentía a gusto con ninguno de sus dos roles. Que estaba reprimiéndose.
Viñeta 3
Tormenta explica que se cuestionaba si como mujer X podía encontrar un lugar común entre la diosa y su nuevo rol, y que en principio pensaba que sí. Pero que luego se convirtió en la líder y descubrió que tenía la capacidad de tomar decisiones extremadamente difíciles.
Viñeta 4
Que de darse la necesidad, puede ser tan inmisericorde como Lobezno. Kitty le echa en cara que parece orgullosa de ello, y Ororo le responde que simplemente constata un hecho.
Viñeta 5
Ante una perpleja Kitty, Tormenta reconoce que sus dudas habían existido durante bastante tiempo, pero que no se atrevía a afrontarlas. Que necesitaba «volar», esto es, soltarse.
Viñeta 6
Hasta que se encontró a Yukio que la empujó a ello. Kitty le pregunta si le empujó a volar por el aire o al abismo, y Ororo responde que vete a saber, que la vida es constante cambio y que uno tiene que aprender a afrontarlo, cosa que no le gusta un pelo a Kitty.
PAGINA 3
Viñeta 1
Kitty le dice que las cosas no deberían cambiar, que deberían seguir igual, que bastante era que sus padres se divorciaran y que pensaba que podía contar con ella.
Esto es importante, porque ya va dejando claro que Kitty trasladó el rol de su madre a Ororo para no afrontar la realidad de la separación de sus padres.
Viñeta 2
Ororo le pregunta con que derecho le ha colocado en esa posición, que ella es su amiga, pero que no debe ser su madre. Que ella misma pensó que podía hacerlo para llenar el vacío de ambas, pero que eso era un error.
Aquí Claremont nos remarca la relación de los dos personajes (y el resto del grupo) desde los tiempos de la saga de Fénix Oscura, Kitty era su «hermanita pequeña» y esa situación va a cambiar radicalmente en breve porque ella va a madurar, va a tomar más responsabilidad y va a empezar a ser igual al resto, dejando de ser la niña que cambiaba de nombre y traje cada cinco minutos porque no encontraba su propia identidad. Pero no nos vayamos por las ramas…
Viñeta 3
Kitty le pregunta a Ororo si la quiere, y ella le responde que con todo su corazón, pero que Kitty tiene otras necesidades afectivas, que si ella se toma semejantes libertades para si misma, ¿por qué no se las deja a ella?
Vale, esto es tela. Superficialmente Tormenta le está diciendo que más allá de su necesidad de una figura maternal, tiene amigos y novios y demás, pero la forma en la que se expresa no es del todo directa. Le dice que tiene otras necesidades en su corazón, en su amor.
Viñeta 4 y 5
Ororo le dice que cada una tiene sus vidas que vivir, sus propios caminos por los que andar y sus destinos individuales. Que amigos y amantes pueden acompañarlos, pero que el viaje al final lo hace cada uno por su cuenta. Que está aprendiendo cosas sobre ella misma que no le gustan, pero intenta aprender, luchando por encontrar su verdadero yo, su lugar en el mundo. Tiene la necesidad de saber quién es y vivir su vida como ella quiere.
Sí, se ha zumbado a Yukio y ha descubierto su bisexualidad. Y Kitty va por el mismo camino.
Viñeta 6
Kitty la abraza y le confiesa que le aterra la idea de que ella cambie también, que de repente deje a de amar a la gente que ama.
PAGINA 4
Viñetas 1 y 2
Tormenta le dice que igual está loca, pero que por primera vez en su vida adulta puede reir y llorar, que puede sentir con todo su ser sin tener que negar sus emociones y desterrarlas, por lo que ella creía que era su propio bien. Que la apoye, porque necesita su fuerza para afrontar ese cambio.
Uyvá… Cuantas letras pero qué intensidad, ¿verdad? Claremont es puro nervio, es denso a matar y la caracterización de sus personajes siempre la ha basada en una mezcla de reacción al entorno y mantener el trasfondo personal de cada uno, lo que los académicos llamarían caracterización naturalista, y esto se nota de una forma tremenda durante todo este diálogo. La forma de hablar agresiva de Kitty que denota su posición a la defensiva -y que irá configurando tanto su caracter a posteriori- o la mezcolanza verbal de Ororo entre la Diosa y la «neopunk», mucho más agresiva, chocan hasta que ambas poco a poco abren su corazón a una de sus mejores amigas, dando lugar a una escena en la que ambas reconfiguran su relación. Os hago notar que este tipo de relaciones tan trabajadas no eran algo corriente en el género por aquella época, si la gente dice que los personajes de Claremont estaban «vivos» era precisamente por ese cuidado del detalle que provocaba que escenas como estas resonaran con tanta fuerza.
A partir de este momento Kitty pasará a ser más responsable y enfrentarse al cambio -lo siguiente que hace en esa misma página es irse a la Academia de Massachussets sin chistar- y Tormenta pues… No le dio tiempo a evolucionar mucho, porque lo siguiente fueron las Secret Wars y claro, pasó un año en el que cosas como lo de Peter y Zsaji pasaron a un primer plano. En realidad era un poco más del desarrollo de Kitty, porque para entonces a Claremont le sobraba la supuesta relación entre los dos.
Dicho esto, ¿hace falta decir quién es el ganador de este enfrentamiento?
En fin, que esto es lo que hay. Una vez más os pido disculpas por haber acabado metiendo a Claremont de por medio, pero siendo mutantes la escena entre Kitty y Ororo me estaba retumbando en la cabeza constantemente mientras hacia los otros dos posts, y creo que el contraste entre esos dos y Claremont era más que evidente. La intensidad de la escena de Claremont no solo destaca por las propias páginas en sí, si no por la construcción a lo largo de número tras número para llegar a ese clímax, y probablemente por eso juega con ventaja respecto a Lobdell y Bendis, que no han ido construyendo su escena con anterioridad y por eso queda tan vacía de contenido. Pero claro, tampoco estamos hablando del mejor trabajo de Bendis ni el de Lobdell, solo de escenas que eran parecidas; después de todo y sin salirse de Kitty, Claremont tiene escenas mejores…
Por lo demás, poco más que deciros. Una de las razones de este artículo era la de venir a reconducir tanto debate de «esto es bueno/esto es malo» y darle algo de fundamento, explicar un poco como valoramos un cómic, ese proceso que hacemos todos al leerlo a un nivel subconsciente o consciente en mayor o menor medida, la forma en que lo analizamos y juzgamos su calidad o, directamente, si nos gusta o no, aunque luego no lo verbalizamos a la hora de hablar sobre ello en redes sociales o weblogs. Seguramente en un futuro haga algún post más sobre como va esto de la caracterización en el cómic -tengo uno en el horno sobre, por supuestísimo, el maestro Claremont- y seguiremos hablando sobre el tema. Nos vemos en los comentarios.