Como gran admirador de los años 80, y como persona que quiere unas vacaciones, no puedo menos que sumarme a la única iniciativa decente que ha tenido Diógenes desde que se le ocurrió crear este blog y continuar con la semana (ya podría ser un mes como lo fue en Marvel) de los asistentes, a modo de homenaje de aquel mes loco de 1983 en el que en Marvel los editores se tomaron un descanso. Y para ello de nuevo contamos con la colaboración de Stravinkay Modelarus que en esta ocasión “enfrenta” diferentes métodos de narrar en el cómic de superhéroes a través de una serie de ejemplos. Así que sin mas preámbulos (que se trata de trabajar poco) veamos el contraste entre la forma de contar historias de dos autores tan populares como Roger Stern y Brian Michael Bendis.
Motivado por las declaraciones de un tal Tom Brevoort he decidido hacer un repaso de dos famosas historias de los Vengadores con el objetivo de analizar sus estructuras narrativas y ver si cumplen con una de las formulas más reconocidas a la hora de hablar de una «unidad narrativa»: la estructura dramática de tres actos (o de los cinco que son en esencia lo mismo) según se ven en Asedio (la de los ’80) y Chaos (Avengers Dissassembled). Comenzando por un resumen de las historias llanas y simples.
Por las dudas aclaro que no voy a hablar de todo el evento de Dissassembled, Asedio también tuvo historias conectadas y tampoco voy a hablar de ellas; esto sería sobre Avengers #273-#277 vs. Avengers #500-#503; Roger Stern vs. Brian Michael Bendis; Mark Gruenwald vs. Tom Brevoort; Jim Shooter vs. Joe Quesada. Aunque las historias no parecen tener mucha conexión y las intenciones al contarlas de los autores son distintas, los objetivos acaban siendo los mismos; la caída y reformación de los Vengadores con la destrucción de la mansión como muestra del equipo haciéndose pedazos y dando lugar a una nueva era. Por eso las comparo.
Asedio es una historia escrita por Roger Stern con arte del grandísimo John Buscema con tintas de Tom Palmer, editan Mark Gruenwald y Jim Shooter. Va de los Amos del Mal tomando la mansión, venciendo y atrapando uno a uno a los Vengadores. El arco comienza en el número 273 siendo la mansión tomada por los Amos del Mal en ese mismo número aunque el grupo Zemo lo venía formando desde antes. Resultado de esta batalla es la destrucción de la mansión de los Vengadores haciéndonos Stern sufrir la abyecta derrota de nuestros héroes tanto por el plan de los villanos como por errores propios hasta verlos salir vencedores pero heridos.
Mientras tanto, Avengers Dissassembled (o más concretamente Chaos) es una historia escrita por Brian Michael Bendis con arte de David Finch (y algunas páginas por Olivier Coipel, mas arte sacado de historias pasadas de la Bruja Escarlata), editan Tom Brevoort y Joe Quesada. Para la historia se retomó la numeración original empezando con el número 500 y acabando en el 503. La historia juega a desconcertarnos de buenas a primeras como a los mismos Vengadores porque su clímax es la revelación de quien está detrás de todo esto; La Bruja Escarlata, de lo cual apenas hay pistas, solo referencias a historias pasadas y Bendis con Coipel explicándonos, páginas antes de la revelación, que una borracha y desconsiderada Janet Van Dyne habló de niños una vez.
Stern por un lado nos cuenta una historia casi que completamente desde la perspectiva de los villanos y no nos devuelve a los Vengadores como fuerza activa hasta la mitad de la historia tras la brutalización de Jarvis frente a un impotente Capitán América, evento que concurre con La Avispa y Scott Lang venciendo a Creel y Titania, dándonos uno los grandes momentos de su etapa con Janet Van Dyne mirando al lector diciéndonos que ahora es el turno de los Vengadores.
Bendis nos ataca los sentidos con Finch al arte dibujando de buenas a primeras la destrucción de la Mansión más ataque tras ataque de enemigos espontáneos interpuesto con escenas en las que Bendis hace la peor parte de un escritor de renombre; llama la atención a si mismo constantemente, con diálogo haciendo a personajes no parecer ellos mismos (venir de cómics guionizados por Geoff Johns y Chuck Austen reduce el impacto de esto) que no es parte ni avanza ni empuja la historia pero genera drama manufacturado. Esencialmente, Bendis hace acción vacía durante aproximadamente 4 números y explica la razón de esta acción vacía en el último número de forma increíblemente torpe («lo hizo un mago», o en este caso «una bruja»). Nuestro momento molón lo hizo en el segundo número y se supone que un hombre azul con bigote nos tiene que parecer impactante por que el Capitán América dice «oh no» tras horas de ardua lucha contra robots asesinos y krees malvados (oh, y las muertes de Scott Lang, la Visión y Clint Barton).
La segunda parte de Asedio de Stern y Buscema se centra en Janet Van Dyne retomando la Mansión con Thor, Capitana Marvel (Monica Rambeau), Caballero Negro y Capitán América además de la inesperada ayuda de Anthony Druid, un futuro Vengador que no lo fue tanto una vez Stern se marcha de la serie. En la lucha la mansión sufre todavía más daños de los que los Amos del Mal ya habían provocado pero nuestros héroes aún superados en número consiguen vencer a todos los villanos sin volverse locos en el proceso (Moonstone se rompe el cuello huyendo de Capitana Marvel quien acude a su ayuda inmediatamente mientras que el Capitán América intenta salvar a Zemo de una caída casi fatal).
La segunda parte de Chaos de Bendis, Finch y ahora también Olivier Coipel trata de explicarnos que la Bruja Escarlata es la persona detrás de todo esto debido a que su poder mutante afecta a la magia sin ningún tipo de control o balance (a pesar del entrenamiento de Agatha Harkness, aparentemente) y nos hace una biografía que se supone nos haga pensar en ella como una persona inestable y peligrosa que necesita ayuda: es sinceramente una página que me genera muchísimo asco, especialmente al leerla por primera vez.
El concepto de que otra mujer en el Universo Marvel no puede controlar el poder que es suyo por naturaleza me revolvió el estomago. Esto es 30 años después de la Saga del Fénix pero está contado de forma tan incompetente que parece difícil creerlo. Se me hace complejo siquiera pensar en hallar una historia peor (Didioteces aparte), hay solo una página doble con viñetas de Pérez y Byrne que dejan en evidencia a Finch con Stephen Strange hablando de poder inimaginable y stress agravando una situación que en esta historia no ha sido demostrada; más exactamente la inestabilidad de Wanda Maximoff. Una inestabilidad mental que el número en cuestión nos quiere hacer ver a través de la susodicha escena de Janet Van Dyne mencionando a los hijos de Wanda y Visión (comparado con la Avispa que era líder del grupo en los ’80… que progresivo de parte de Bendis), saltando directamente a Wanda pidiendo explicaciones a Agatha Harkness y luego ya ubicándola en medio de una cena familiar imposible ya que aparentemente no solo inconscientemente creó a sus dos hijos de la nada sino que también asesinó a Agatha y a la Visión(?). Y en la poca acción que presenta esta segunda parte, el Dr. Extraño vence a Wanda y luego los Vengadores dejan que un Magneto salido de la nada se marche con ella inconsciente. Y al final se va cada uno por su lado, que más da.
En términos generales hay claramente una historia mejor que la otra. Pero como todo depende de como se cuente vamos a ir viendo uno a uno los números y personajes para ver como se nos cae a pedazos el grupo.