Ayer comenzamos a rememorar un pasado entrañable y emotivo en el que la Visión y la Bruja Escarlata aun no se atrevían del todo a mostrar abiertamente sus sentimientos mutuos, un pasado en el que el ataque de un villano provoco que Visión se atreviese a decir en voz alta lo que su corazón artificial llevaba tanto tiempo sintiendo y nos habíamos quedado con el corazón en un puño ante la duda de como reaccionaria la Bruja Escarlata ante tamaña confesión. Pero el tiempo de esperar ha terminado y solo hay que saltar de párrafo para poder leer la conclusión de esta épica historia que no fue mas que el comienzo de una de las historias de amor mas hermosas y rocambolescas del cómic de superhéroes.
El shock de la revelación de los auténticos sentimientos de la Visión es mas que suficiente para sacar a Wanda de su trance y una vez mas vuelve a ser la dueña de sus actos (hasta que alguien la vuelva a controlar para atacar a sus compañeros, desunir a los Vengadores, eliminar a los mutantes de la faz de la Tierra…) demostrando que el poder de la magia negra no puede hacer nada ante el poder del amor verdadero, snifs.
Ahora Dormammu ya no hace frente a un androide con miedo a hacer daño a la mujer que ama, delante tiene a una poderosa bruja dispuesta a todo contra el y mucho mas astuta, ya que mientras Dormammu se distraía monologando Wanda libero a Agatha Harkness (que estaba ahí prisionera también pero no me había enterado) quien tras presumir de saber mas magia incluso que Clea protege a su discípula de la magia de Dormammu el tiempo suficiente para que ella desate todo su poder contra este.
Y Dormammu desesperado pide ayuda a su hermana, quien pese a que ya pensaba traicionarle para arrebatarle su poder, parte en su ayuda pero es detenida por un recuperado Visión que no piensa consentir que nadie vuelva a atacar a Wanda y utiliza su poder de cambiar de densidad para atravesar con su mano la cabeza de Umar (eso tiene que doler) o quizás le ha dado una colleja, con el dibujo de Don Heck es difícil apreciarlo.
Viéndose perdido Dormammu trata de negociar de nuevo y esta vez lo consigue, pero no bajo sus propios términos, sino bajo los de Wanda, y así Dormammu promete devolverles sanos y salvos a su hogar y abandonar sus planes de conquistar la Tierra, mientras piensa en traicionar su palabra y recordando como ya hizo un trato similar con el Doctor Extraño pero también lo rompió (¿Spoilers de la segunda entrega de su película? ¡Sin duda!)
De nuevo en la Tierra ahora si que toca regresar a la historia de Mantis ya que esta a punto de entrelazarse con la de nuestros auténticos héroes de formas que sin duda pocos en su época se atrevieron a soñar. Y eso fue mas que nada porque dudo que nadie tuviese la suficiente imaginación como para esperar que ese ser que ha adoptado la forma del fallecido Espadachín le diría a Mantis… ¡Que tenia que casarse con un árbol! (A Englehart hay que quererlo) Algo que debió desencajar las mandíbulas de los lectores y quien sabe si inspirar de forma mística a un chavalillo de Northamptom…
Y a medio mundo de distancia, en la Mansión de los Vengadores, Visión y Wanda por fin se encuentran a solas, y tras todas las pruebas que han pasado, y tras todo lo que ha descubierto el sintozoide sobre si mismo, y tras haber revelado sus sentimientos, Visión por fin se atreve a ser mas hombre que maquina, mandar a la mierda las normas sociales y pedirle a Wanda que se case con el (Ahora que lo pienso a lo mejor tendría que haber empezado con este cómic mi serie de artículos sobre la pareja…)
¿Que responderá Wanda a esta petición? (como si no lo supiésemos ya) ¿Sera capaz de ver ante ella a alguien que es un hombre en todo menos en lo biológico? ¿A alguien que la ama por encima de todo y a superar los prejuicios del resto del mundo? La duda ofende, ya que como la propia Wanda dice, el amor es para las almas, no para los cuerpos (pero confiemos por si bien en que Phineas Horton construyese ese cuerpo con todos los accesorios) y le da a Visión la respuesta que deseaba pero que no se atrevía a esperar escuchar, un Si tan grande como la propia mansión.
Una respuesta que encuentra su eco en los jardines del templo Kree donde Mantis responde de la misma manera ante la idea de casarse con un árbol (cosas mas raras se han visto y muchas de ellas en otros cómics de Englehart) Pero esta ora historia de amor parece que no va atener un final tan feliz, ya que justo después de dar su respuesta Mantis es secuestrada por Kang el Conquistador (de mundos, que no de corazones)
Pero cuando los Vengadores se disponen a rescatar a su compañera Inmortus les pide que se detengan, que no es importante y mientras materializa en los jardines a la Visión, Wanda y Agatha, dirige a los Vengadores al interior del templo donde se encuentra una gran caja que el mismo había traído y en cuyo interior… ¡Se encuentra Mantis! ¿Pero como lo ha hecho? ¿Es David Copperfield otra de las identidades de Iron Lad/Rama-Tut/Centurión Escarlata/Kang/Inmortus?
La respuesta es mas sencilla que todo eso, y es que Inmortus ha utilizado a uno de sus mas fieles lacayos a quien los Vengadores conocen bien, el Fantasma del Espacio (sin relación con los otros Fantasmas del Espacio conocidos en ingles como los Dire Wraiths) quien suplanto a Mantis y se encuentra ahora a bordo de la nave de Kang para su desgracia al ver sus planes nuevamente frustrados.
Y así, una vez derrotados todos los villanos, el amor pudo seguir su curso y se celebró una de las bodas mas extrañas de todos los tiempos, en la que un a ratos villano y viajero en el tiempo ofició una doble ceremonia en la que dos mujeres se casaron con un sintozoide y un árbol respectivamente. Mantis y su ¿Esposo? Se convirtieron en pura energía y se lanzaron hacia las inmensidades del espacio para comenzar sus nuevas vidas mientras en un plano mas terrenal los recién casados Visión y Bruja Escarlata comenzaron los preparativos de su luna de miel ( y se pusieron a buscar Leonia en el mapa)
Esta no fue ni mucho menos la ultima historia que Steve Englehart nos contó las desventuras de estas dos parejas como los lectores de Brainstomping bien saben (pese a que no hemos tocado nunca su etapa como guionista de Silver Surfer donde retomo la historia de Mantis) Y aunque el tiempo, el destino y los caprichos editoriales no fueron amables con ninguna de las dos parejas, nadie nos quitara que un día, hace mas de cuatro décadas, un guionista fue lo bastante loco para proponer a sus editores esta historia y estos aceptaron.