Esta semana se ha estrenado la ultima entrega de la franquicia de Star Trek, Discovery. Una nueva serie de televisión que nos lleva a los años previos a los famosos viajes de la Enterprise y con la que a priori sentía algo de desconfianza por culpa del reciente “reebot” cinematográfico del que no soy un gran aficionado. Pero tras haber visto el doble episodio piloto he salido bastante satisfecho con el resultado final, ya que aunque aun hay un par de cosas que no me acaban de convencer del todo, lo que no se puede negar es que Discovery de momento es una serie de ciencia ficción bastante interesante y con muchas posibilidades. Y cuidado que aunque voy a tratar de limitar los SPOILERS al mínimo, es difícil que no se escape algo.
Y pensar que hubo una época en la que me quejaba de que apenas había oferta de ciencia ficción en televisión…
Fecha Estelar 1207.3, la nave de la Flota Estelar USS Shenzhou comandada por la Capitana Philippa Georgiou (Michelle Yeoh) es enviada a un sistema binario en los limites de la frontera del espacio de la Federación en una misión rutinaria para investigar el fallo en un satélite de comunicaciones. Un fallo que parece haber sido provocado y que la Primer Oficial Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) esta convencida que guarda relación con un misterioso objeto hallado en ese sistema. Pero lo que nadie se imagina es que están a punto de ser testigos del regreso de una antigua amenaza y que a partir de ese momento las cosas no serán lo mismo para la galaxia.
Y allí van, hacia donde nadie ha llegado jamas…
Como he dicho al principio, yo no las tenia todas conmigo con esta serie, no por Discovery en si, sino por como en tiempos recientes la franquicia se ha ido orientando mas hacia la acción y menos hacia la aventura (con todo lo arbitraria y personales que sean esas categorías) Unas diferencias que ahora que estoy en pleno proceso de ver la serie original me resultan mas abismales en algunos aspectos. Pero pese a todos esos prejuicios me propuse ver Discovery con una mente lo mas abierta posible y la verdad es que lo que me he encontrado hasta ahora, aunque no es exactamente lo que me hubiese gustado encontrar, me ha dejado bastante contento.
Si al final nada como ver algo sin expectativas para poder disfrutar
Es cierto que la serie tiene un aire demasiado “militarista” para mi gusto, con esos uniformes azules casi idénticos tan deudores de los de “ST: Enterpise” (y que según la cronología de la serie tienen los días contados para ser reemplazados por los multicolores de ST:TOS) y que se ha centrado mucho mas en la acción de lo que me hubiese gustado, algo contra lo que no tengo nada en contra, al contrario, pero que no era lo que quería encontrar en Star Trek. Pero pese a ello hay bastantes motivos para la esperanza, después de todo la serie comienza con una misión que básicamente consiste en asegurarse que una civilización alienigena obtenga agua potable para sobrevivir, y uno de los secundarios recuerda a su superior (y a los espectadores) que ellos son exploradores y no soldados. Pero mi mayor esperanza, y también mi mayor miedo, recae en la protagonista de la serie, Michael Burnham.
Aunque si me dicen que están en Tatooine buscando a Obi Wan Kenobi me lo hubiese creído
Esta se trata de un personaje bastante curioso. De entrada nos encontramos ante la primera entrega de la franquicia de Star Trek en la que el protagonismo de la misma no recae en quien capitanea la nave sino en su Primer Oficial, lo que ya nos da un punto de vista novedoso. Un personaje que ademas es una humana criada en el planeta Vulcano nada mas y nada menos que por el mismísimo embajador Sarek (Interpretado por un actor que me encanta, James Frain), el padre de Spock, lo que le añade una nueva capa de complejidad al personaje que nos recuerda a os conflictos que tenia el famoso Vulcaniano con sus emociones pero que aquí se complican un poco mas al tratarse de un conflicto entre su biología y su educación. Pero lo que ha hecho que este personaje me gane por completo no es su complejo origen o que no capitanee la nave, lo que me ha ganado es que en muchos aspectos es un personaje que representa a la perfección lo que para mi es (o deberia ser)Star Trek.
¿Esto convierte a Michael en la «hermanastra» de Spock?
Desde su primera aparición vemos a Michael mas preocupada por el bienestar de una especie alienigena primitiva que por su propia seguridad, y que afirma que de quedar atrapada en ese mundo trataría de integrarse en su cultura. Un personaje que se opone firmemente a asumir que el objeto misterioso que han encontrado durante su misión sea una amenaza solo por ser algo desconocido, que en su paseo espacial para investigar el origen del mismo, no puede evitar maravillarse ante la belleza del espacio y del propio objeto y para quien la seguridad de su tripulación es mucho mas importante que la suya o que su carrera (el bienestar de la mayoría supera al de la minoría o al de uno solo…)
Un personaje que es feliz en su trabajo y vive para descubrir las maravillas del Universo, confiemos en que esto dure
El problema es que pese a que todos estos elementos están ahí y me hacen tener esperanzas, Discovery es una serie con un episodio piloto algo tramposo, poco mas que un prologo para la serie de verdad, que puede que acabe derivando en otra cosa. Sin querer entrar demasiado en detalles solo diré que la situación de los personajes y el Universo en general cambia radicalmente tras el final del doble piloto, tanto que me hace temer que la serie acabe siendo al final algo muy diferente a lo que nos prometía buena parte de este largo prologo. Esa visión optimista y pacifista sobre el Universo corre peligro de quedar eclipsada por un fuerte giro militarista hacia una guerra espacial, y la situación en la que quedan los personajes tras este prologo, principalmente Michael, abre demasiado las puertas para que nos encontremos a un personaje diferente, con una visión mucho mas cínica y amargada y completamente alejada de lo que había sido al comienzo.
Que vale que Star Trek no ha sido nunca ajena a la acción y la violencia, pero espero que aquí este en sus dosis adecuadas
A todo esto tenemos que sumarle que al tratarse de un prologo algo tramposo aun no hemos conocido mas que a una mínima parte de los protagonistas de la serie. Aunque de entre los que ya hemos conocido hay uno que ya ha conseguido ganarme, el Oficial Científico Saru. Este personaje interpretado por Doug Jones (quien esta abonado a trabajar bajo gruesas capas de maquillaje) pertenece a una nueva raza alienigena creada para la ocasión, una que tiene fama de cobardes en la Federación y de quienes Saru es el primero en formar parte de la Flota Estelar. Un peculiar personaje de una especie que afirma tener la capacidad de sentir cuando ronda la muerte y cuya posición en la nave y su relación antagónica/amistosa con Michael nos remite inmediatamente a Spock y la relación que tenia este con el Doctor McCoy, pero con una personalidad que curiosamente parece combinar rasgos de ambos personajes de la serie clásica y que promete dar mucho juego.
No es enteramente original (¿aunque a estas alturas que lo es?) pero es un personaje bastante interesante y divertido
Y toda esta mezcla de elementos clásicos y modernos ha conseguido que este episodio piloto sea uno de los que mas he visto que divida a sus espectadores. Por un lado tenemos el habitual ruido de fondo que oscila entre el machismo y el racismo mas rampante por un lado y la fetichización mas grotesca por el otro, pero a estas alturas ya deberíamos estar curados de espantos y es fácil (o al menos necesario) ignorar. Pero quizás lo mas llamativo es el debate formado entre los fans mas ortodoxos y heterodoxos de la franquicia. Son muchos los que se han rasgado las vestiduras porque esto no parece Star Trek y no son pocos los que han llegado a afirmar que The Orville es mas Star Trek que Discovery. Y lo curioso es que en cierto modo ambos tienen algo de razón.
¡Hagan sus apuestas!
Peter David decía hace un par de días en su blog que con unos mínimos cambios The Orville podría ser Star Trek y Discovery dejar de serlo, y es difícil no darle la razón., pero solo porque The Orville se esfuerza en homenajear en todo lo posible una serie de los años sesenta y Discovery trata de modernizarla. Pero es un debate que parece quedarse en lo superficial, en lo estético. Si, The Orville tiene ese aire retro y mas simple de la serie clásica. así como su carácter mas episodico, una estética nada moderna e incluso una iluminación que parece que aun se graba todo en un estudio de televisión de hace cincuenta años. Por su lado Discovery trata de actualizar todo aquello que tenia de interesante la serie original, consiguiéndolo en algunos aspectos (y fallando en otros) siendo ahora mismo mi mayor miedo que Discovery se aleje de ese optimismo, de ese afán por buscar lo mejor en los demás y explorar lo desconocido, que era lo que realmente importaba de la serie original, para tirar por una estética “dark & gritty” y una trama mas orientada hacia lo bélico. Así que sin querer sonar demasiado neutral, y desde cierto punto de vista, se podría decir que cada una a su modo es fiel a la original.
Y siempre podemos volvernos locos y desear que las dos series mejoren para poder disfrutar de ambas
Lo que no se puede negar, dejando a un lado los debates y miedos a en lo que se puede convertir la serie, es que estamos ante un producto que se ha cuidado mucho. Visualmente la serie es espectacular, tanto a nivel de fotografía, iluminación (y cuando hay efectos de «destello de lente» estos son pocos y justificados), efectos visuales, decorados, maquillaje, etc y es difícil encontrar algo de lo que quejarse. Puestos a quejarme de algo debo decir que, sin querer sonar como uno de esos puristas de la serie clásica., que como decía mas arriba no me acaba de convencer ese aspecto tan militarista y falto de variedad de los uniformes de la Flota Estelar. Tampoco soy muy fan de estos “nuevos” Klingons calvos que se han sacado de la manga y que si me llegan a decir que se trataba de otra raza alienigena me lo hubiese creído. Y puestos a ser insoportablemente puntilloso, me sigue chocando lo poco que encajan esos comunicadores y phasers retro que parecen sacados de la serie original con la estética tan moderna que tiene el resto de elementos de la serie.
Los Klingons deben ser los aliens con el aspecto mas inconsistente de toda la franquicia
Con todo esto no se si recomendar la serie o no. Como ya he dicho esto al final no ha sido mas que un prologo para presentarnos a la protagonista de la serie y es difícil prever el rumbo que tomaran tanto ella como la serie cuando esta empiece realmente y conozcamos al resto de protagonistas. En esto quiero ser moderadamente optimista y espero que ese tono bélico que parece que va a tener Discovery no sea el elemento mas importante de la serie y que sus responsables recuerden que lo que siempre fue importante de Star Trek fue mostrarnos que el futuro podía ser algo brillante a lo que aspirar. Aunque viendo el despliegue técnico y actoral del piloto no me cabe duda de que vamos a estar ante una gran serie de ciencia ficción, que vaya a ser una gran serie de Star Trek es algo que aun esta por ver.