Icono del sitio BRAINSTOMPING

X-Men Apocalipsis: Nos han engañado, el malo de esta peli no es Apocalipsis

Pues… A mi no me pareció para tanto lo de X-Men Apocalipsis. Vamos a ver, que el villano de por sí no da para mucho más de una historia (la que contó Louise Simonson y ya) con lo que tampoco tengo idea de que es lo que se esperaban. Pero da igual, vamos a hablar de ella…

Te ponen a Xavier calvo y te pasas toda la película esperando a que lo dejen calvo. Mal, Fox, mal.

Vaya por delante que Bryan Singer abrió el camino al cine de grupos de superhéroes y puso sobre el tapete algunas de las cartas más importantes que hicieron posible que los superhéroes hayan estado presentes en los cines durante los últimos 16 años, pero hay que reconocer que lo que los consolidó de verdad fue Iron Man y el que Marvel fuera creando universo. Por lo demás, Bryan Singer siempre fue un cagao que ponía a La Patrulla X en monos de cuero y se reía de la licra amarilla. Cuando Matthew Vaughn demostró no solo que se podía hacer, si no que Magneto y familia podían salir con unas pintas idénticas al cómic en una posible secuela a X-Men First Class, Singer decidió que volver al negro y enseñarnos algunos de los centinelas más sosos de la historia. Tecnorgánicos y esas mierdas, sin sus focos gigantescos y sin decir cosas como «alto mutante». En unos tiempos en los que Optimus Prime suelta discursos mientras se pega con Gilitron, pues como que se me hizo un poco escaso… Pero se supone que estamos hablando de X-Men Apocalipsis.

«-Antes to esto era campo, pero llegó la especulación inmobiliaria y me han dejao el Cairo este hecho unos zorros»

La película abre con una escena en el antiguo Egipto en la que unos frikis con poderes están sacrificando a Poe Dameron a un señor viejo y azul (será que después de ver Agentes de SHIELD veo krees por todas partes). Por lo visto el señor viejo y azul es un tal En Sabah Nur (Apocalipsis, pero en esta película nunca le llaman Apocalipsis) que por lo visto tiene el poder de absorber el poder de otros mutantes a base de robarle su cuerpo. Y si de paso te quedas con las pintas del piloto de X-wing de moda, miel sobre hojuelas. El caso es que los egipcios no parecen estar del todo contentos con la tiranía -que más les dará un faraón que un mutante inmortal- y deciden tirarle una piramide encima para que se joda. Sin embargo, algunos de los egipcios tenían el tarro demasiado jamado por Apocalipsis y formaron un culto que durante siglos trató de buscar a su dios y liberarlo de tanto cascote…

Lo siento, pero lo de volver a repetir la escena de Mercurio no cuela. Y esta vez hasta se me hizo larga…

Llegados a este punto conviene avisar de que esta película en realidad no es sobre Apocalipsis, aunque el tipo más adelante tenga cuatro fulanos a su cargo (a los que nunca llama jinetes, por cierto) y se pase toda la película queriendo conquistar el mundo. No. Esta película no es sobre un villano darwinista que, consciente de que se acerca un peligro tremendo para el planeta, decide aniquilar a la humanidad para hacer más fuertes a los fuertes, los mutantes. Tampoco estamos hablando sobre un fulano que haya robado tecnología de los celestiales, sólo hablamos de un egipcio pirao que puede manipular energía y… Espera, esto me suena a otro villano de la Patrulla X, uno bastante más clásico y que a estas alturas creía ya casi olvidado…

Lo que pasa es que X-Men: El Monolito sonaba demasiado a 2001…

Si es que ES el Monolito Viviente. Para los que no se acuerden, el Monolito Viviente es un personaje creado por Arnold Drake y Don Heck en el número 54 de X-Men (la serie original, no el aborto de los 8 millones de Jim Lee). En aquella historia un pirado que se hacía llamar el Faraón Viviente había elaborado una absurda teoría según la cual todos los faraones eran mutantes, siendo él mismo la reencarnación de esos faraones (porque también era mutante) por lo que decide que todos los demás mutantes son competencia para su reinado y se pone a matarlos, empezando por secuestrar a Alex Summers para sacrificarlo ritualmente. La Patrulla X salta al rescate, se pegan y tras dos números jugando al ratón y el gato sin que el Faraón Viviente demuestre ser un personaje con mínimo interés, en el número 56 de la serie Roy Thomas y Neal Adams se hacen con el control y nos empiezan a contar cosas bastante más interesantes del personaje: Que el Faraón Viviente en realidad era un arqueólogo mutante que era capaz de manipular las energías cósmicas que daban sus poderes a los mutantes, y que podía absorber esas energías de Alex (que tenía tantas que no podía controlar su poder) para convertirse en el Monolito Viviente, un faraón más grande que Mazinger Z que tiene como único objetivo el dominio mundial. Igualico al Apocalipsis de la peli, vaya.

Dato chorra: Me es imposible leer «Monolito Viviente», siempre me sale primero «Manolito Viviente». Sí, soy gilipollas.

Así que sí, Bryan Singer nos ha dado gato por liebre con esta película, y la verdad es que no me voy a quejar. Que haga al final va por ahi «desbloqueando el potencial» de varios mutantes -algo parecido a lo que acaba haciendo con Alex Summers, porque al fín y al cabo en esa historia despierta sus poderes latentes- y trata de restaurar su gloria pasada a base de conquistar todo el planeta. Lo cierto es que el Monolito Viviente no da para mucho, y tras malvivir con apariciones en Marvel Team-Up dando más asco que pena, tiene su momento de gloria en una novela gráfica de David Michelinie y Marc Silvestri llamada «La Venganza del Monolito Viviente» (sí, Michelinie siempre fue un tio original) en la que el Faraón Viviente aumentaba sus poderes a la enésima potencia y acababa siendo expulsado al espacio y convirtiéndose en un planeta viviente. Luego Alan Davis lo recuperaría durante su etapa como guionista en X-Men, pero a partir de ahí pasaría a ser el peón de otros villanos como el propio Apocalipsis o la entidad mística conocida como Cyttorak cuando le dió por fusionarse con su gema y convertirse en el Juggernaut Viviente o algo así.

Olivia Munn está desaprovechadísima, pero supongo que ya saldrá en X-Force o en Deadpool 2 o algo.

Pero volvamos a la película de Singer, esa que tan poco le ha gustado a la gente a pesar de que está bien montada y bien rodada, pero con un villano sin ningún interés y con unos protagonistas de escaso carisma; al fín y al cabo aquí nos han plantado de protagonista a Mística (que ha abandonado su ambigüedad moral por completo y por la magia de Jennifer Lawrence ahora casi nunca va de azul y es prácticamente la protagonista de la película) liderando a un grupo de «nuevos mutantes» compuesto por el palizas de Scott Summers, Jean Grey interpretada por la Sansa Stark de Juego de Tronos y el Hank McCoy de las películas anteriores, además de una versión de Rondador Nocturno que conserva los tatuajes feos en la cara que tenía la versión de X-Men 2 pero que mentalmente se parece bastante más al del comic (aunque se pase media película acojonao por todo).

Hola, bienvenidos a una adaptación encubierta de X-Men Evolution. Rondador Nocturno está clavadito…

Lo cierto es que si esta película se hubiera estrenado una semana después  que Batman V Superman, seguramente habría sido acogida con la mayor de las ovaciones, pero ha tenido la desgracia de hacerlo después de Civil War y las comparaciones dan muchísimo asco. Si se hubiera trabajado un poco más el guión y hubieran tratado de hacer madurar a los personajes la cosa habría funcionado bastante mejor, pero tal y como están las cosas X-Men Apocalipsis se queda en un entretenimiento puntual que la gente olvidará dentro de unos meses. No es una mala película en absoluto, pero tampoco podemos decir que sea buena; simplemente es una demostración palpable de que un buen montaje y una dirección de actores más que competentes no son nada si la historia que se cuenta no da de sí. Eso sí, agradezco muchísimo a Bryan Singer el que haya mantenido la sobriedad suficiente como para no caer en la trampa de la cámara al hombro que parece estar tan de moda y en la que han caido tanto Batman v Superman como Civil War, que en algunas escenas la usa y las perjudica terriblemente, siendo el único punto negro de una película estupenda.

Y el único Apocalipsis que mola es el de Louise y Walt Simonson, ¡ea!

Salir de la versión móvil