El primer episodio de Game of Thrones: A Telltale Games Series tiene muchos problemas. El primer videojuego realmente basado en la serie de HBO -y no directamente en los libros, como los quiero y no puedo de Cyanide, que aunque consiguieron la licencia de TV para su segundo juego poco se notó- puede ser acusado de problemas gráficos, de control o hasta de falta de ritmo en algunos puntos, pero hay que reconocer que es el primer videojuego oficial que sabe capturar el espíritu de la serie original.
A la hora de escribir el guión del juego y siendo conscientes de que no podían cambiar la historia de la serie original -de los libros no puedo estar ya muy seguro, porque después de todo ya se sabe las libertades que se toma la gente de HBO sobre el material original- la gente de TellTale ha sido bastante hábil; la historia se centra sobre la familia Forrester, unos señores leales a la familia Stark que tras los eventos de la tercera temporada de la serie y el tercer libro se ven empujados a un conflicto del que hasta entonces no habían tenido una implicación tan directa; me vais a perdonar pero es bastante complicado explicar el argumento de este juego sin reventar los libros, asi que tendréis que conformaros con que os diga que los Forrester se parecen sospechosamente a los Stark, con personajes parecidos a los Bran, Sansa, Rickon, Robb y demás componiendo la familia.
Esto, que a primera vista uno podría esperar que fuera como contarte una versión «pirata» de la historia original, tiene como objetivo el poder colocarte un POV en cada una de las localizaciones importantes de la serie, siguiendo a cada uno de los miembros de la familia mientras tratan de sobrevivir al aluvión de puñaladas traperas tan habitual de los Siete Reinos. Así, el juego consigue llevar a cabo su principal objetivo; nos hace interactuar con los personajes de la serie -Cersei, Tyrion, Margaery Tyrell o el bastardo de Ramsay Snow, todos ellos con sus voces originales- y consiguen reproducir en el jugador la misma sensación que deben de tener los personajes de Canción del Hielo y Fuego al encontrarse con esos elementos; hablar con Cersei mientras Tyrion comenta la jugada es toda una experiencia, yo aplaudiría con las orejas si alguien sacara un juego que sólo consistiera en eso durante 4 o 5 horas.
Por lo demás… Sí, las animaciones no han quedado muy allá. Brazos caidos y sin ninguna vida, formas extrañas de subir y bajar escaleras… Se nota que no se ha usado toda la captura de movimientos que hubiera hecho falta para el juego, algo que ya habíamos notado en otros juegos de Tell Tale pero que allí se había maquillado con el cellshading y el aspecto de dibujo animado. Game of Thrones trata de imitar un estilo de pintura del XVII, con lo que los bordes de los personajes tratan de dar la impresión de estar hechos a «a brochazos» y los personajes son más naturalistas, con lo que los fallos de animación cantan bastante más.
Sin embargo y como decía antes, la experiencia está por encima de todos estos fallos, y aunque de momento sólo haya salido un episodio, el final del capítulo te deja con muchas ganas de más y deseando poder volver a hablar con los personajes más perturbados de la serie. Oh Joffrey, cuanto te he echado de menos en este juego…