Esta semana he tenido la oportunidad de visionar el episodio piloto de Elementary, esa serie que ha “creado” la CBS para aprovechar el tirón que tiene el personaje actualmente gracias a las recientes y exitosas adaptaciones al cine y la televisión. Es un poco triste tratar de ir a remolque del éxito de otros en lugar de crear algo nuevo, pero igual salía algo bueno de todo esto… pero el resultado ha terminado siendo tan triste como el intento mismo.
Siendo directos, el principal problema que tiene esta serie son las comparaciones. Tras ver el arrollador carisma de Downey Jr en el Sherlock Holmes cinematográfico y la soberbia interpretación que realiza Benedicta Cumberbatch en el Sherlock de la BBC, esta serie de la CBS queda muy, muy coja. Pero es que además de tener que cargar con ese lastre, Elementary no aporta nada realmente novedoso al personaje para que esta serie destaque.
De entrada tenemos lo de la ambientación en el presente de estos personajes, una fórmula que aunque ya se ha usado más de una vez en el pasado, ambientando las aventuras de Sherlock Holmes en diversas épocas, desde el presente en el que se creaba la serie hasta distantes futuros. Esta fórmula que puede dar mucho juego, estando tan reciente el estreno del Sherlock de la BBC, se queda algo desdibujada. El contraste de ver al detective en el presente ya no sorprende de la misma manera ¿verle utilizar teléfonos móviles o buscadores de internet? ¡Ya vimos todo eso hace dos años!
Otras de las “novedades” en esta serie es que ahora Watson es una mujer y que este Holmes es lugar de ser frio y distante con las mujeres utiliza el sexo como desahogo ¿Pero aporta eso algo a la serie? Mucho me temo que mas allá de para meter una de esas tópicas “tensiones sexuales no resueltas” entre Holmes y Watson estas nimias novedades no sirvan para nada más. Y lo de la novedad de que el detective ahora vive en Nueva York parece que no sirve más que para abaratar costes al no tener que trasladarse a rodar en Inglaterra o fabricar innumerables decorados para que así lo parezca.
Pero dejando las comparaciones a un lado, es que la serie es sosilla. La química entre Holmes y Watson es, de momento, inexistente. La interpretación de Jonny Lee Miller no pasa de correcta, aunque da la impresión de que con un mejor guion el pobre podría dar más de sí. Y de las míticas habilidades del detective mejor ni hablar… Se suele decir que un personaje de ficción es tan inteligente como el escritor que escribe sus historias, y visto lo visto me atrevería a decir que los guionistas de esta serie no son muy espabilados.
En Elementary nos muestran a un Holmes que es capaz de “deducir” que los padres de Joan Watson están vivos y gozan de buena salud al ver que la llaman por teléfono y que ella tiene fotos de los dos juntos, también “adivina” cosas sobre el pasado de su compañera… Al buscar información sobre ella en Google… ¿En serio? ¿Esto es lo mejor que pueden hacer? Estos métodos de investigación parecen más propios de Remington Steele que de Sherlock Holmes.
Pero vamos, que la serie me ha dejado a medio camino entre la indiferencia y el aburrimiento, supongo que mientras no estrenen el resto de series que suelo ver le seguiré dando una oportunidad al menos durante dos o tres episodios mas, pero si se mantiene la tónica del episodio piloto no me hace falta tener ninguna habilidad deductiva para presagiarle un corto futuro a esta serie.