Como todos los años el cómic de superhéroes nos hace sufrir una serie de periódicos eventos que no aportan gran cosa creativamente y que solo sirven para interrumpir el curso regular de varias series y quizás con algo de suerte dar un pequeño y temporal empujoncito a las ventas. De ahí surge el Knight Terrors, evento en el que una versión remasterizada de un viejo villano somete a los héroes de DC a un mundo de pesadillas mientras busca el macguffin de turno que le permitirá ser todopoderoso. Y aunque hasta ahora tristemente todo ha seguido el curso esperado, hay una serie que ha conseguido destacar sobre el resto y brillar con luz propia… ¡la luz de Green Lantern! Así que vamos a ver que ha tenido de diferente este tie-in para no ser un coñazo como el resto, una explicación que requerirá de numerosos SPOILERS.
Knight Terrors, evento creado por un Joshua Williamson que suele ser mejor que esto, nos cuenta la historia de como el villano de nuevo cuño Insomnia, sigue los pasos del Doctor Destino, aquel que utilizaba su piedra de los sueños para hacer el mal (antes de que Morfeo se la arrebatase por ser de su propiedad) y busca apoderarse de la Piedra de las Pesadillas, otra gema de origen místico que el Doctor Destino oculto porque su poder le daba demasiado miedo incluso a el, vamos, nada que no hayamos visto ya unas cuantas veces. Para ello Insomnia pone a casi todo el planeta a dormir y posee los cuerpos de unos cuantos héroes para ocuparse de aquellos que no han caído bajo su poder mientras que todos los que han caído en su influjo sufren horribles pesadillas en las que se enfrentan a sus mayores miedos, ya que se supone que esa piedra esta oculta en el reino de las pesadillas.
Esto ha provocado que buena parte de las series hayan sufrido un parón de dos meses mientras sus protagonistas están atrapados en pesadillas mas o menos aterradoras y que se le haya dado una oportunidad a personajes sin serie regular probablemente para comprobar su viabilidad encabezando su propio titulo de nuevo en el futuro. El resultado ha sido el esperable, irregular tirando a malo (hay muchas series en las que este parón no ha estado en manos del equipo creativo regular) con los héroes sufriendo mucho enfrentados a eventos traumaticos de su pasado hasta que al final se despiertan prestos a participar en la batalla final que tendrá lugar en un especial. Pero como decía al comienzo hay una serie que no ha seguido este esquema, una en la que el escritor de la misma ha seguido al frente durante este evento, integrando estos dos números de relleno lo mejor que ha podido en la trama que estaba contando y consiguiendo que una mínima parte de este evento haya sido sorprendentemente divertida, el Green Lantern de Jeremy Adams.
En mas de una ocasión he hablado aquí de lo mucho que estoy disfrutando del trabajo de Adams en DC, primero con esa gran etapa en Flash que llego a su fin hace poco y que nos recordó por que Wally West es el mejor supervelocista de DC (con permiso de Jay) y segundo con lo bien que había empezado su etapa en la nueva serie de Green Lantern, una que tras solo dos números ya ha tenido que sufrir este parón inconveniente. Pero Adams en lugar de aprovechar esto para tomarse un descanso ha intentado sacar el mejor partido posible a las circunstancias y ha llevado este evento por un desarrollo tremendamente lógico tratándose del personaje del que se trata.
A diferencia de lo sucedido con el resto de los héroes que en los dos números que ha durado esto han vivido sumidos en la misma pesadilla, la de Hal Jordan no ha dejado de cambiar, teniendo que enfrentarse la trauma de la muerte de su padre, a no ser digno de portar su anillo, de ser expulsado de los Corps o de enfrentarse de nuevo a Parallax. Algo que como se nos revela en el primer numero es fruto de la inmensa fuerza de voluntad de Hal Jordan, quien incluso a nivel inconsciente se niega a aceptar esas pesadillas como reales.
Pero Insomnia (o mas bien el avatar que ha creado para la ocasión) cree que esto da igual, que aunque Jordan haya visto a través de sus trucos y sepa que detrás de todo hay un supervillano usando sus poderes contra el este caerá presa de sus temores como han caído el resto de sus compañeros (que vale, sabemos que eventualmente todos acaban escapando de sus pesadillas al final) Pero para su sorpresa, que no la de los lectores, Insomnia se da cuenta demasiado tarde de que ha intentado su táctica con la persona equivocada, porque ¿de que sirve el utilizar los temores de una persona como arma cuando esa persona no solo pertenece a una organización en la que sus miembros son escogidos por su capacidad de superar sus miedos, sino que es el mas grande de todos ellos?
Y es que tratar de aterrorizar a alguien que antes de poseer su anillo ya se ganaba la vida jugándosela con una sonrisa en los labios y que ha tenido que enfrentarse y superar sus mayores miedos en la vida real es un ejercicio fútil. Por eso a partir del segundo numero los papeles se invierten e Insomnia pasa a ser la presa de un Hal Jordan muy cabreado que le da caza a través de ese reino de pesadilla haciendo pedazos cada ilusión que ese villano cada vez mas desesperado lanza contra el sin entender como es que su poder es inútil en esta ocasión hasta que inevitablemente cae derrotado y Hal Jordan despierta listo para participar en el Knights Terror Night’s End y regresar a su serie regular.
Estos dos números al final no han sido mas que un divertimento en el que Jeremy Adams (acompañado de demasiados dibujantes que han contribuido a que el resultado final a nivel visual sea un tanto irregular), ha aprovechado lo mejor que ha podido el tener que parar sus tramas en curso para colar este evento, convirtiéndolos básicamente en un desfile de “Como mola Hal Jordan” algo de lo que yo personalmente no me pienso quejar. Así que aunque me sigo cagando mucho en estos eventos que no aportan nada, que no tienen consecuencias y que sabemos que en muy poco tiempo nadie recordara, ha sido bonito ver como incluso de estos espantos editoriales se puede sacar algo divertido. Aunque espero que para la próxima ocasión se limiten a sacar especiales o miniseries aparte que no interrumpan las series regulares, que seria lo mas adecuado.