Como había prometido la semana pasada toca hacer reseña del One Room Angel de Harada que conseguí en la pasada TLP. Un manga de una autora que en muy poco tiempo se ha convertido en una de mis favoritas debido especialmente a su especial capacidad de sorprender al lector al utilizar temáticas y enfoques tan diferentes en sus diferentes obras y que hacen que sea difícil encasillarla. Así que sin mas rodeos vamos a ver que nos ofrece este BL diferente que tan poco o nada tiene que ver con los que hemos reseñado anteriormente.
Kôki no tiene ni amigos, ni aficiones, ni pareja y ni siquiera ganas de vivir, limitándose a llevar una existencia rutinaria y monótona en la que la inercia le mantiene en movimiento entre el trabajo y un apartamento lleno de basura. Pero un día su existencia da un giro radical cuando unos delincuentes le apuñalan en el trabajo y estando al borde de la muerte cree ver a un ángel caer del cielo a sus pies. Pero para su sorpresa esto no fue una simple visión, ya que cuando Kôki sale del hospital semanas mas tarde se encuentra con que ese ángel ha estado todo ese tiempo esperándole en su apartamento muy indignado por su tardanza y anunciándole que se quedara a vivir con el hasta que recupere su memoria, su capacidad de volar y averigüe cual era su misión en la tierra y porque siente que esta tiene que ver con el propio Kôki…
One Room Angel es técnicamente un BL por haberse publicado en las paginas de la revista especializada en BL onBLUE entre 2017 y 2018 (la misma que ha publicado entre otros Un extraño a la Orilla del Mar y un Extraño en Primavera de Kanna Kii, o El Sueño del Cuco de Tamekou) y también gano el premio al mejor manga en los BL Awards de 2020. Pero pese a esto no se parece en nada a ninguno de los BL que hemos reseñado por aquí en el pasado, algo que es debido probablemente a que la concepción que tiene el publico japonés de esa “etiqueta” de BL es mucho mas amplia de lo que nos parece visto desde fuera. Porque lo que nos encontramos en One Room Angel es un manga en el que sus protagonistas no mantienen una relación ni romántica ni sexual, y el único amor que encontramos aquí es el de la peculiar amistad que surge entre Kôki y su Ángel.
Un manga que se trata de un remake de una obra previa de la autora, un “Yomikiri” (un one-shot) titulado Tomariki que publicó en 2013 y que fue recopilado en el tomo Henai junto con otras obras cortas suyas, y que este si que es lo que mucha gente espera encontrar cuando escucha el termino BL. Pero partiendo de la idea básica de aquella historia Harada construyó una historia radicalmente diferente que es el mejor ejemplo de la enorme versatilidad que posee como mangaka, ya que como sucede con el resto de sus obras (las que he leído hasta ahora al menos) son todas extremadamente diferentes entre si. Desde el humor cafre y gamberro de Happy Kuso Life, la inquietante Color Recipe a la compleja e incomoda Niichan, pasamos ahora a una historia tremendamente tierna y optimista que nos recuerda lo complicado que es clasificar a Harada.
Lo que nos encontramos aquí es una historia acerca de dos personas (o una persona y un ángel mas bien) que por circunstancias muy diferentes se encuentran perdidas en la vida y no saben como seguir adelante. Kôki tiene un pasado trágico plagado de muy malas decisiones que le han llevado a rendirse y a arrastrarse por la vida sin rumbo alguno. El Ángel por el contrario carece por completo de pasado, o al menos de recuerdos de este, no sabe quien es, como regresar a su lugar de origen, cual es su propósito en la tierra o porque apareció ante el moribundo Kôki, pero de momento se siente satisfecho con hacerle compañía y aprender mas sobre el y el mundo que les rodea.
Y simplemente esa compañía mutua consigue que los dos vayan cambiando a mejor. El tener a alguien de quien cuidar provoca que Kôki poco a poco comience a tener una actitud diferente ante la vida, queriendo cambiar y salir de ese pozo en el que el mismo se ha hundido para ser mas digno de la responsabilidad que le ha caído encima. Mientras que el Ángel por su parte a medida que va descubriendo mas sobre si mismo comienza a entender porque sigue en la tierra, que es lo que le ha unido a Kôki y como puede seguir adelante.
Aunque muy diferente en temática y tono al resto de sus obras, lo que si tiene este titulo en común con el resto de la bibliografía de Harada es su habilidad para manejar las emociones del lector, algo que ha demostrado en cada una de sus obras que es uno de sus principales puntos fuertes. En One Room Angel a medida que se va desarrollando la amistas entre sus protagonistas, se van alternando sin fisuras momentos tremendamente tiernos o melancólicos con otros que se sienten como una patada en el estomago o que caen de lleno en el humor mas absurdo, sin que en ningún momento estos cambios tonales transmitan la sensación de ser algo brusco o forzado, sino algo tan natural como la vida misma. Y a pesar de que el manga contiene algunos momentos muy duros el tono general del mismo es sorprendentemente optimista, lo que lo convierte en una lectura de lo mas reconfortante.
One Room Angel se une así a Color Recipe, Happy Kuso Life y Niichan a la lista de obras de Harada publicadas en nuestro país hasta la fecha, demostrando que se trata de una autora que debe funcionar bastante bien en nuestras fronteras y de quien espero que siga la racha, que en su bibliografía tiene unos cuantos títulos que me encantaría ver publicados aquí como su YataMomo o Yoru to Asa no Uta. Por lo demás recomendar a nuestros lectores que le den una oportunidad a este manga ya que al tratarse de un BL tan diferente a lo que estamos acostumbrados sin duda podrá gustar a quienes no suelan tener interés en este tipo de obras, y es uno que vale mucho la pena.