Con el comienzo de la nueva temporada televisiva llegan los inevitables nuevos estrenos y se mantiene la tendencia de hacer series basadas en cómics, solo que hay que recordar que esto es algo que no incluye solo el tan de moda genero superheroico y que también podemos encontrarnos con adaptaciones de otro tipo de historias como la serie que hoy nos ocupa. Y es que, aunque yo no tenía ni la mas remota idea (y no se como se me pudo pasar eso) cuando vi el trailer en su día, esta serie de televisión se basa en un cómic escrito nada más y nada menos que por Greg Rucka (y dibujada por Matthew Southworth) pero que como todavía no lo he leído, nos ahorraremos de momento las comparaciones entre un medio y otro, centrándonos en este divertido procedimental protagonizado por Cobie Smulders del que ya llevamos disfrutando unas cuantas semanas.
Dex Parios tiene problemas para mantener una vida laboral y social minimamente estable, acosada por sus deudas de juego, lidiando con el trastorno por estrés postraumático que arrastra desde su servicio en Afganistán y desviviéndose para hacerse cargo de su hermano pequeño. Por ello, y pese a sus reticencias iniciales, acepta la oferta de trabajo de quien en otra vida podría haber sido su familia, poniendo sus habilidades como investigadora a disposición del ejercito para localizar a un ser querido, un trabajo que quizás sea lo que necesita para enderezar su vida…
Simplificándolo mucho, de Stumptown hay que decir que es básicamente un procedimental, con todo lo bueno y lo malo que ello conlleva. Es cierto que nos encontramos con la misma trama formulaica que hemos visto en incontables ocasiones donde el protagonismo de la historia recae en alguien con mucho talento para la investigación pero que no trabaja para la policía, que sus primeros encuentros con estos son bruscos, que se enfrentan al caso de la semana (mientras de fondo se desarrolla una trama a largo plazo) con algunos roces que acaban convirtiéndose en respeto por parte de la persona al cargo de la comisaria y en tensión sexual (aquí rápidamente resuelta) con su mejor detective. Esta sinopsis podría ser la de Stumptown, la de Castle, o la de tantísimas otras series cortadas por el mismo patrón, una apuesta relativamente segura para las cadenas que le ofrecen algo familiar al espectador. Y como suele suceder en estos casos, el éxito o el fracaso de este tipo de productos recae principalmente en los hombros y el carisma de su protagonista, algo en lo que de momento Cobie Smulders esta saliendo mas que airosa.
Y es que básicamente la serie de momento se sostiene solo gracias a ella, ya que no ofrece nada nuevo, ni rompedor u original, pero gracias al talento de Smulders, que gracias a su experiencia tanto en la comedia como en la acción se desenvuelve aquí bastante bien, la serie hasta el momento (me he visto ya cuatro episodios) está resultando ser de lo mas disfrutable aunque todo suene un poco a ya visto. También ha sido una agradable sorpresa el ver de nuevo a Michael Ealy como Detective Hoffman, casi compañero de Dex e interés romántico y a quien tenia algo perdido desde la injusta cancelación de Almost Human.
Pero quizás lo que mas me ha llamado la atención ya a un nivel mas, llamemosle “friki” (y tengo que leerme el cómic para ver si todo eso ya estaba ahí o si son cosas de su salto a la pequeña pantalla), es lo muchísimo que me recuerda esta Dex Parios a otra famosa detective que también nació en el cómic y dio el salto a la televisión. Porque yo es que cada vez que veo a esta Dex que bordea el alcoholismo, que parece incapaz de mantener cierta estabilidad en su vida, que arrastra consigo las secuelas de un grave trauma de su pasado, por no hablar de como suele vestir, y soy incapaz de evitar acordarme de Jessica Jones. Tanto que no puedo evitar tampoco pensar que de no ser ya Smulders Maria Hill en el MCU y que Krystten Ritter era tan buena en su papel (papel que si los rumores son ciertos repetirá en un futuro mas o menos cercano) Smulders hubiese sido una Jessica cojonuda (que casi se parece mas que Ritter a como la dibujaba Michael Gaydos en el cómic)
Así que yo no tengo ningún problema en recomendar esta serie, aunque dejando claro el tipo de serie que es, una simple historia de detectives con su caso semanal y sus tramas culebroneras, pero también una serie bastante bien hecha y divertida con la que pasarse un buen rato delante dela televisión y desconectar un rato de todo, que ese tipo de series también son necesarias.