Aunque se ha hecho mundialmente famoso gracias a su Canción de Hielo y Fuego, la carrera de George R.R Martin no comenzó con la famosa saga ni mucho menos. Una carrera que comenzó de muy joven y que a mediados de los setenta le llevo a colaborar con su amiga Lisa Tuttle en una novela corta que acabó convirtiéndose en la primera entrega de una fascinante historia sobre una sociedad lastrada por las tradiciones en la que el ansia por volar de una joven desató una lucha de clases sin precedentes que amenazó con cambiar el mundo al que llamaban hogar…
Hace siglos una nave exploradora de mas allá de las estrellas se estrello en el mundo al que los supervivientes acabaron llamando Windhaven. Un mundo hostil casi cubierto por completo por agua en las que moraban peligrosas criaturas que convertían la navegación en una tarea peligrosisima. Pero también un mundo en el que gracias a su baja gravedad, sus grandes vientos y alas fabricadas a partir del tejido que formaba la vela solar que su nave utilizaba para navegar por el espacio nacen los alados, emisarios capaces de surcar los cielos y acortar las distancias entra las escasas islas que forman esta nueva civilización. Pero con el paso del tiempo estos alados se acabaron convirtiendo en una clase social aparte, y hereditaria, que se alejaban tanto del resto de la civilización. en lo social como sus alas les alejaban en lo físico, una clase social que solo Maris, una joven con el ansia de volar se atrevió a desafiar…
No lo voy a negar, una de las cosas que mas me impulso a leer esta novela, aparte de la co-autoria de George R.R. Martin, es que su argumento casi sonaba a una especie de Thanagar Año 1, y aunque al final no he encontrado ninguna referencia clara a Hawkman, me niego a creer que ese alado gordo, con barba y tan dado a la bebida como a la carcajada no tuviese algo que ver con cierto príncipe de Sky City… Pero entrando ya en materia y dejando a un lado el terreno de los guiños voluntarios o no, tengo que reconocer que he disfrutado con este libro mucho mas de lo que me había atrevido a esperar. Partiendo de una base que recuerda mucho a estas “young adult novels” que tan de moda se han puesto en los ultimos años, con su protagonista adolescente que se rebela ante las injusticias de su sociedad, y una estructura que me ha recordado, salvando las distancias, a la saga de Terramar de Ursula K LeGuin, Martin y Tuttle construyeron una historia de lo mas atrayente gracias al contarnos que es lo que sucedió después.
Decía mas arriba que la estructura de Refugio del viento me había recordado a la saga de Terramar, y esto es debido en parte, aunque no solo por ello, a que no nos encontramos ante una novela, sino ante tres novelas cortas, las dos primeras, “The Storms of Windhaven” y “One-Wing” publicadas por entregas en la revista Analog y la tercera para ser incluida junto con un prologo y un epilogo en el recopilatorio que acabo convirtiéndose en Windhaven/Refugio del Viento. Y ademas, al igual que sucedía con Terramar, cada historia nos muestra a su protagonista, en este caso Maris, en distintos momentos de su vida, su infancia y adolescencia, su edad adulta y su vejez, lo que nos permite no solo ver la evolución del personaje sino el ver eso que no solemos ver en muchos libros, las consecuencias de los actos de su protagonista.
Y es que aunque la premisa de la historia, con su protagonista adolescente que quiere cambiar las tradiciones que “siempre” han regido su civilización. para instaurar una forma mas justa de vivir pueda recordarnos mucho, de nuevo salvando las distancias, a franquicias como los Juegos del Hambre y similares (y eso es algo que a punto estuvo de alejarme del libro) la historia va mas allá. El paso de las décadas entre capítulos de esta saga permitió a Martin y Tuttle explorar no solo al personaje de Maris y su cambio de actitud ante muchos temas a medida que se hacia mayor, sino también a como esa revolución que promete cambiarlo todo (y que tan popular se ha hecho en la ficción para adolescentes), no siempre acaba dando los resultados deseados o al meno son tan deprisa como se desearía. Eso sumado al retrato que se hace en esta obra de la lucha de clases, un tanto superficial eso si pero igualmente interesante, hacen de este libro una gran obra.
Tristemente, y pese a que hablaron mucho de seguir contando historias en este fascinante mundo que habían creado juntos, tenían planeados al menos dos libros mas, el cambio de estilo de ambos debido al paso de los años (quienes tenían estilos bastante similares cuando se conocieron) y la falta de tiempo de ambos (Y si encima Martin no tiene tiempo de acabar Canción de Hielo y Fuego como para meterse a escribir mas cosas) han dejado esta posibilidad en un simple sueño. Por suerte y pese a que existió esa idea de continuar la saga, Refugio del Viento es una historia perfectamente cerrada y redonda perfecta para estos días en que tratamos no de no morir abrasados por el calor.