Hoy en un ejercicio de hipocresía y redundancia enorme quiero quejarme de esa fauna que al menos a mi me da la impresión de que se ha multiplicado en los últimos años en Internet, los que se quejan de quienes se quejan de cosas. Es cierto que quejarse de cosas es no solo algo seguramente tan antiguo como la humanidad, sino algo perfectamente legitimo (anda que no lo hago yo a menudo por aquí). Pero en los últimos años y principalmente gracias al auge de las redes sociales, ha surgido la figura de quienes se quejan de los que se quejan,un grupo de gente que no solo no parecen tener mas opinión que “la contraria del de enfrente”, sino que en muchos casos consiguen el curioso efecto de servir de altavoz a los que se habían quejado primero…
La primera vez que fui realmente consciente de este fenómeno fue con el remake de las Cazafantasmas, una película que si bien es cierto que recibió un ataque bastante fuerte por parte de un numeroso grupo de gente, la situación llego a unos extremos tan ridículos y exagerados que en poco tiempo ya había casi mas gente quejándose de los que criticaban la película que gente criticando la película (y para otro día dejare lo absurdo de ver a tata gente atacando y defendiendo una película que aun ni se había terminado de rodar y por lo tanto no la había podido ver nadie)
Desde entonces he ido viendo cada vez mas esa actitud que de forma sistemática repite la misma formula, se anuncia el estreno de una serie o película, la publicación de un libro o de un cómic (y sucede mas a menudo cuando es el remake de algo popular), alguien se queja e inmediatamente hay detrás un grupo mayor de gente quejándose de esas personas. Pero lo de la semana asada ya fue el culmen de la estupidez en este tipo de casos, la que se ha liado con el remake de los Thundercats. Yo no tenia ni idea de que existía ese proyecto, y no me había enterado de que ya se había publicado incluso el primer trailer. Pero de pronto tanto en Twitter como en Facebook, donde aparte de un reducidisimo grupo de amigos solo sigo a gente del mundo del cómic, literatura, cine y tv, empece a encontrarme con un montón de gente (profesionales de distintos medios) indignada contra quienes se habían atrevido a criticar dicho remake de los Thundercats.
Asi que busque en YouTube, vi el trailer (me pareció una mierda pero eso no viene al caso) y si, en los comentarios del propio video había varios bastante negativos, pero nada fuera de lo habitual en YouTube, que a ver que video allí no esta repleto de comentarios negativos (y los videos que tienen los comentarios desactivados no cuentan), ya sea el trailer de una serie o un tutorial para arreglar suelas de zapatos. Pero aparte de eso no veía ninguna campaña de odio contra el remake, ninguna horda furiosa (como si había sucedido con las Cazafantasmas) solo comentarios sueltos en el propio trailer…
No debí ser el único que se sorprendió porque pronto en las mismas redes sociales empece a encontrarme con personas igual de atónitas que se preguntaban que quienes se habían quejado tanto de ese remake para provocar esas reacciones, porque viendo el panorama casi parecía que o todos estaban reaccionando ante los comentarios de YouTube o habían lanzado una especie de ataque preventivo antes de que esas criticas que esperaban que se produjesen fuesen reales. Pero claro, si uno escarba un poco en esto, y se fija en el tono de buena parte de todos estos defensores de las cosas que son criticadas, no tardamos en darnos cuenta de que aquí lo que hay es mucho postureo.
Tristemente las redes sociales se han convertido para muchos en un escenario en el que ponerse medallas, amplificando comportamientos que siempre habían existido pero que ahora tienen un publico mucho mayor. Y es que nada mas fácil para que se fijen en uno (y en ganar seguidores y retweets) que ponerse en contra de algo popular, de lo que este de moda, de lo mas nuevo, una postura que parece que ha terminado provocando una especie de efecto rebote y ahora la forma de ponerse esas medallas sea la de criticar a esos mismos o a quienes de forma legitima se quejan de algo que no les gusta. Eso es algo que es bastante fácil de apreciar en el tono de esas defensas/criticas, donde “los que se quejan de gente que se quejan de cosas” son siempre los mas abiertos de mente, los mas tolerantes, progresistas, modernos, guays… lo que sea, mientras que los otros son los frikis raros y amargados (con la habitual retahíla de tópicos asociados) y eso que les gustaba es mierda y lo que mola es la versión nueva y moderna.
Pero es que lo realmente divertido de todo este asunto, es que todos estos presuntos defensores de todo lo que es criticado por alguien, al final lo único que están consiguiendo es provocar una especie de “efecto Streisand” y poner el foco precisamente en esas criticas que tanto les molestan. Lo que podría haber sido simplemente la opinión negativa de unos pocos, de pronto se magnifica y esta en el punto de mira de todo el mundo, consiguiendo que de la impresión de que la opinión negativa de esos pocos parezca muchísimo mas numerosa e importante de lo que realmente es, que seguro que no soy el único que se ha encontrado con mas de un articulo de opinión, o estado de Facebook o Tweet en este sentido que o bien no pone ni un solo ejemplo de esas criticas o acaban compartiendo todos la misma, ejemplificando a la perfección lo absurdo de todo esto.
Porque al final lo mejor es dejar que a cada uno le guste o le deje de gustar lo que le de la gana y que mientras no haga daño a nadie (y opinar es una de las cosas mas inofensivas que uno puede hacer por Internet) que nos dejemos todos en paz unos a otros, que todo este postureo a favor y en contra de todo ya cansa bastante. Pero claro, como ya decía al principio este articulo era un ejercicio de hipocresía enorme, y no pienso dejar ni de quejarme de cosas ni de quejarme de los que se quejan de las cosas que a mi me gustan.