IDW se ha volcado en último año y pico para crear un universo cohesionado en torno a las licencias de los juguetes de Hasbro cuyos derechos de publicación poseen. Primero fueron los G.I.Joe y los Transformers quienes comenzaron a compartir universo y a estos se les añadieron durante el crossover titulado Revolution, los protagonistas de M.A.S.K., Action Man, Los Micronautas y por supuesto ROM, el más grande de los Caballeros del Espacio. Pero había una licencia por ahí perdida que pocos parecen recordar y que, pese a la falta de un anuncio oficial, la descripción del número de Abril de G.I.Joe parece indicar que va a integrarse en el “Hasbroverse”… Los Inhumanoids. Pero sea cierto o no esta teoría/rumor, este es un momento tan bueno como cualquier otro para recordar una de las series que más me fascino y asqueo en los lejanos años noventa.
Si es que hasta el logo era malrollero
Pese a que yo no descubrí la serie hasta mediados de la década de los noventa cuando se emitió en España, los Inhumanoids eran hijos de los ochenta. Su origen lo encontramos dentro del “contenedor” titulado Super Sundays, una co-producción entre Sunbow Productions y Marvel, que incluía cuatro series cortometrajes con episodios de unos seis minutos de duración cada uno, Jem, Bigfoot and the Muscle Machines, Robotix y los Inhumanoids. De entre todas ellas solo Jem y los Inhumanoids tuvieron el éxito suficiente como para “independizarse”, editándose sus episodios para crear “películas” que más tarde se editaron de nuevo para formar series con los habituales episodios de 20 minutos de duración. Pero mientras que Jem se convirtió en un auténtico éxito alcanzando los sesenta y cinco episodios (el mundo esta loco), Inhumanoids no acabo de conectar del todo con el público y fue cancelada tras una única temporada de tan solo trece episodios.
Los ochenta en todo su esplendor
¿Pero que tenía Inhumanoids para haberme dejado un recuerdo tan imperecedero? Probablemente lo mismo que provoco que no tuviese éxito, que básicamente daba un mal rollo y un asco tremendos pero que al mismo tiempo te dejaba pegado a la pantalla incapaz de apartar la mirada. La serie contaba el descubrimiento de una serie de gigantescos y grotescos monstruos encerrados bajo tierra y toda una serie de civilizaciones subterráneas no menos extrañas y que habían mantenidos prisioneros a esos monstruos durante milenios. Pero un corrupto empresario que había descubierto la existencia de estos monstruos quería liberarlos y hacerse con su poder, lo que puso en marcha una serie de acontecimientos que provocó que estos corrieran de nuevo por una tierra que se veía indefensa ante su poder y que solo tenían ante sí a los valerosos científicos del Earth Corps y sus acorazadas armaduras.
Hay que reconocer que los diseños de las armaduras podrían haber estado mejor
La serie lo tenía todo para enganchar, a diferencia de lo habitual en otras series que mostraban episodios autoconclusivos en los que el status quo nunca cambiaba y que podías ver en cualquier orden, Los Inhumanoids presentaban una trama continuada en la que cualquier cosa era posible. Además contaba con monstruos gigantes, toda clase de grotescos seres, científicos con armaduras y vehículos blindados que les daban fantásticas habilidades… El problema es que todo daba mucho asco.
Cuantos niños huirían aterrados del televisor…
El estilo de animación era poco agradable, las criaturas poco tenían que ver con los monstruos “kirbyanos” que uno podía encontrarse en los comics o con la clase de monstruos que podíamos ver en series como He-Man, estos daban muy mal rollo. Un mal rollo al que contribuía mucho el gore que salpicaba la serie, había monstruos cadavéricos que encerraban a sus prisioneros en su cavidad torácica y que mutaban a los humanos en criaturas casi más monstruosas que ellos, otros tenían una clara inspiración “lovecraftiana” (inspiración que salpicaba también la trama de la serie). Se veían amputaciones, muertes en acido… No, no era la clásica serie infantil y estoy convencido de que si en lugar de haber descubierto esa serie en los noventa, sino cuando se estrenó en los ochenta, hubiera acabado sufriendo pesadillas.
Esta serie era material de pesadillas
El éxito inicial de los personajes que les llevo a obtener serie propia propició que Hasbro lanzase una línea de juguetes que incluía a los monstruos, los científicos y sus vehículos, e incluso contaron con una adaptación al comic dentro de la línea Star de Marvel en la que Jim Salicrup adapto la primera saga de la serie y llego a contar incluso con la colaboración de todo un clásico como Carmine Infantino en su último número. Pero el fracaso de esta y su cancelación tras tan solo quince episodios, provocada sin duda por lo demasiado diferente que era su propuesta, llevo también al cierre tanto de la línea de juguetes como del comic, que duro tan solo cuatro números. Los Inhumanoids habían nacido como un bicho raro en el que Flint Dille, su creador, había querido ofrecer algo diferente, pero no consiguió conectar con el público de una época que no estaba preparada para algo como esto.
Marvel en aquellos años publicaba cualquier cosa
Pero parece que ahora, de confirmarse los rumores, y al igual que otros muchos productos de su época, los Inhumanoids van a contar con una segunda oportunidad en forma de comic integrándose en ese “Hasbroverse” que la compañía juguetera pretende llevar al cine. Así que quien sabe, quizás algún día no muy lejano podamos ver a los Earth Corps enfrentarse a Metlar y compañía en la pantalla grande con mucho más asco, gore y detalle del que sus creadores soñaron jamás. Eso sí, viendo la trayectoria que están siguiendo IDW y Hasbro espero que no tarden mucho en devolverme a otro de mis mitos de la infancia y no tardemos mucho en ver a los Centuriones ayudar a proteger una tierra que entre Decepticons, Fantasmas del Espacio y Monstruos subterráneos, necesita más protección que nunca.
¡Con personajes diseñados por Jack Kirby y Gil Kane! ¡Esto necesita dar (de nuevo) el salto al comic!