El domingo pasado se conmemoraba una fecha importantísima para los aficionados al comic de superhéroes, el 30º Aniversario (eso debe estar mal, no ha podido pasar tanto tiempo) del nacimiento de la Liga de la Justicia Internacional, el mítico comic que nos mostró el lado más humano y divertido de los héroes de DC. Y aunque ya hablamos, y de forma muy extensa, de este comic hace la friolera de cinco años (¡Dios mío! ¡¿Cómo puedo llevar aquí atrapado tantos años?! ¡Que alguien acabe con mi sufrimiento!… ¿Estoy gritando mentalmente?) Sería injusto dejar pasar esta fecha y no recordar una vez más el que sin duda es uno de los mejores comics de superhéroes que han existido jamás.
Y treinta años después siguen siendo tan divertidos como el primer dia
Cuando en los años ochenta descubrí este comic para mí fue todo un acontecimiento porque era mi primera toma de contacto con la Liga de la Justicia. Sabía que existía el grupo, les había visto aparecer en Crisis aquí y allá entremezclados con el resto de personajes de DC y les había visto ser mencionados en comics como los Nuevos Titanes, pero eran solo eso, un nombre y poco más. Eso al final ha provocado que incluso a día de hoy me siga costando pensar en la JLA como en el principal supergrupo de DC, ya que para mí eso son la JSA, los Titanes o la Legión, mientras que la Liga de la Justicia es otra cosa muy diferente…
Esta fue de verdad una nueva Liga para una nueva época
Una diferencia que durante mucho tiempo ha cabreado a los viejos seguidores del grupo a quienes esta encarnación del grupo casi les parecía una blasfemia que ridiculizaba la historia del grupo. Aunque como Diógenes podrá atestiguar, que es quien ha tenido el valor de leerse TODA la JLA, quizás esa historia del grupo no es tan memorable como parecen entender algunos. Pero prejuicios aparte, lo que nadie racional puede negar es que la Liga de la Justicia Internacional no es solo uno de los comics de superhéroes más divertidos que se han publicado, sino uno de los más humanos.
Que le pregunten a Diógenes si la vieja Liga de la Justicia era buena…
Porque eso fue lo que hicieron J.M. DeMatteis, Keith Giffen y Kevin Maguire, mostrarnos el lado más humano de los héroes de una DC que desde siempre se había caracterizado por mostrar héroes perfectos cuyas vidas civiles eran algo secundario y casi intrascendente. Este trio de autores (más los dibujantes que llegaron después como Adam Hughes, Ty Templeton o Bart Sears) consiguieron que nos importasen el día a día de un grupo de colegas de trabajo que tenían problemas con las mudanzas, se gastaban bromas pesadas entre ellos o pasaban grandes apuros para aprender idiomas. Una humanización que consiguió que personajes como J’onn J’onzz sean hoy en día un queridísimo personaje o que incluso el mismísimo Batman dejase salir tímidamente su vena más humorística.
¡Batman ha hecho un chiste!
Pero pese a que siempre nombramos al trio de autores originales como los máximos responsables del éxito de este comic, como bien nos ha recordado este fin de semana J.M. DeMatteis, nada de esto hubiese sido posible sin el apoyo de Andrew «Andy» Helfer. El por aquel entonces veinteañero editor de la Liga de la Justicia (además de ser un guionista bastante bueno y no lo suficientemente reconocido) llevaba dos años editando la serie y junto con el propio DeMatteis y el dibujante Luke McDonnell llevaron a cabo la dramática muerte, literal en muchos casos, de lo que se conocía como la Liga de la Justicia de Detroit, un concepto poblado de personajes de nuevo cuño que nunca llego a conectar demasiado con el público (pese a que curiosamente todos ellos han acabado dando el salto a la televisión)
Cuando la gente habla de la Liga de la Justicia de DeMatteis pocos piensan en esto, y eso que no fue una mala historia
Pero tras Legends el grupo necesitaba un relanzamiento, y ahí fue donde el papel de Helfer fue clave, ya que pese que lo lógico y lo seguro hubiese sido lo contrario, se la jugó y dio todo su apoyo a la idea de DeMatteis y Giffen de apostar por un tono humorístico, que cuando se volvía dramático nos dejaba con el corazón en un puño, y que contrastaba y mucho no solo con el enfoque mas serio y clásico de otros relanzamientos de la época como los de Batman, Superman o Wonder Woman, sino que eran diametralmente opuestos a algunos de los mayores exitos de la época como Dark Knight o Watchmen.
Con lo fácil, e incluso lógico que hubiese sido ser continuistas, Helfer decidió jugársela y acertó de pleno
Un enfoque que ademas hizo de la imposibilidad de utilizar a los grandes personajes de la editorial (con la excepción del breve paso de Batman por la serie) una virtud. Pero es que como suele pasar demasiado a menudo, y es algo de lo que aquí mismo somos culpables, el papel del editor es algo importantísimo en el mundo del comic que no suele estar nada reconocido y que puede marcar la diferencia entre un gran comic y un desperdicio de papel y tinta. Así que desde aquí queremos darle las gracias a Andy Helfer por ser uno de los responsables de uno de mis comics favoritos de siempre.
La de grandes cómics que le debemos a este hombre tanto en su faceta de editor como en la de escritor
Lo triste es que no es solo esta versión del grupo está muerta y enterrada en el comic y que los intentos de revivirla como la Justice League 3001 no contasen con todo el apoyo ni de la editorial (esa que decidió que Kevin Maguire no era adecuado para dibujar el comic) ni de los lectores. También es triste que unos personajes que podrían dar pie a una grandísima película o serie de televisión y mirar de tú a tú a grandes comedias superheroicas como Guardianes de la Galaxia, no tiene hueco en ese enfoque gris y deprimente que Warner ha querido darle a su universo cinematográfico superheroico. Y aunque en la pequeña pantalla encajarían mejor, nos tenemos que conformar con una serie, Legends of Tomorrow, que a ratos parecen querer intentar ser los herederos espirituales del grupo (La relación entre White Canary, Atom y Steel no podría parecerse más a la de Black Canary Beetle y Booster) Pero parece que es con eso, y con los cameos de una versión del grupo en la serie animada de Batman: The Brave and The Bold, con lo que tristemente nos tenemos que conformar…
No es lo mismo pero con DC hay que estar acostumbrados a conformarse
Y para un análisis más detallado de la historia del grupo y de cómo DC se pasó años destruyendo el legado del mismo, aquí abajo esta enlazado el larguísimo análisis de la vida y muerte del que durante muchísimo tiempo fue mi grupo de superhéroes favorito y que siempre será para mí la mejor Liga de la Justicia que jamás ha existido.
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 1º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 2º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 3º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 4º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 5º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 6º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 7º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 8º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 9º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 10º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – 11º Parte
BWAH-HA-HA-HA: La Historia de la JLI – Epilogo