¿Que puedo decir de los 90 que no haya dicho ya? ¿Que Marvel estaba en manos de una cuadrilla de incompetentes que la llevaron a la quiebra, o que ya por entonces algunos agoreros llegaron a decir que personajes como Spiderman ya estaban pasados, y que el futuro eran los héroes de Image? Los autores de Spiderman vivían a la sombra de las cifras de ventas de McFarlane en la serie, y ni resucitar a los padres de Peter Parker ni Matanza Máxima lograban que el cabeza de red alcanzara los primeros puestos de ventas. Así que el equipo creativo de Spiderman llegó a una conclusión: el personaje debía estar roto.
Y la solución para arreglarlo pasaba por recuperar al Peter Parker que funcionaba, uno que no estaba casado, uno que no había luchado contra psicópatas como Matanza o Veneno, uno más joven e inocente. Querían recuperar al Spiderman de cuando ellos eran niños, al de los 70, contrastarlo con el actual y dar la impresión al lector de que este último iba a ser sustituido porque en realidad era un clon, un impostor. Muchos lectores se lo creyeron a pies juntillas y el interés por el personaje se disparó, porque en la memoria de muchos todavía estaban los casos de Hal Jordan o Barry Allen, héroes veteranos sustituidos por otras personas. La intención de los autores nunca fue que Peter Parker fuera «falso», y al final de la historia se suponía que todo volvería a la normalidad, pero el éxito de la serie provocó que desde arriba les llegara la orden de prorrogar la saga todo lo posible, con lo que la saga del clon se eternizaría hasta hacerla tremendamente insufrible.
The Amazing Spider-Man 397 se puede leer más o menos independientemente de todos estos eventos, y lo único que vamos a ver «raro» es la actitud de Peter Parker. El cómic empieza con un soliloquio de Kaine haciendose el misterioso y diciendo que sabe cosas sobre Peter Parker y describiéndolo como un ser solitario y dolorido, como si estuvieramos hablando de Batman y no de Spiderman. Pero claro, eran los 90 y todos se habían vuelto «edgys»…
Spiderman se esta muriendo (la verdad es que su anatomía esta tan rara que no me extraña que se esté muriendo) y tiene un acceso de surrealismo en un monólogo interno que es bastante incomprensible. Habla sobre una puerta que se le abre en la mente con un fragmento de recuerdo y una oportunidad de «hacer», tras lo cual se desmaya. Vamos, que debe de estar endrogao cosa mala. Y luego llega el Doctor Octopus diciendo que ha estado observando a Spiderman y que necesita «entenderle».
Este Octopus es raro, porque respeta a Spiderman y no se limita a detestarlo con un odio furibundo. Es un Octopus que lleva un rollo honorable y hasta recuerda un poco a los rogues de Flash, que se llevan bien con su antagonista y hasta disfrutan pegándose con Wally West (porque Barry Allen era un sosainas al que no soportaban). Octopus decide «dejar vivir» a Spiderman y lo deja tirado donde estaba mientras despierta bajo la lluvia. Mientras tanto Maciza -porque así se tradujo «Stunner» en la edición de Forum- entra en un bar buscando bronca.
Maciza revienta el bar y se pega con todos, pero un tipo con escopeta -supongo que el dueño del bar- trata de pegarle un tiro y alguien le sugiere muy violentamente para que deponga su actitud. Y nada, que Maciza y Octopus se ponen a hablar sobre lo malo que es pensar, y sobre que ella es lo mejor que le ha pasado en mucho tiempo y que se quieren como la trucha al trucho.
Maciza pone poses de fantasía adolescente de Octopus mientras este último lloriquea y se queja de la vida, y de paso los guionistas de Spiderman nos cuentan por su boca que creen que Spiderman se ha vuelto un chungo y que el pobre Octopus necesita al Spiderman de antes para mantener su humanidad. Y luego Octopus tiene un arranque de ira y le grita a alguien que vuelva, supongo que quiere que vuelva «su» Spiderman setentero… En la última viñeta vemos a Mary Jane volviendo a una casa.
Mary Jane dice que «tiene que limpiar», y que después de todo ha estado limpiando el naufragio de la vida de Peter durante meses. Éste es mi principal problema con el matrimonio de Spiderman, que algunos idiotas se pensaron que un matrimonio significaba que Mary Jane tenía que quedarse en casa preparándole la comida «a su hombre», y eso va totalmente en contra del personaje. Que Peter se deje mimar vale, pero que Mary Jane se convierta en una maruja «que de vez en cuando trabaja» pues como que no tiene ningún sentido. Para colmo de males a lo largo de los 90 se empeñaron en arruinar la carrera de ella para que él volviera a tener los problemas económicos típicos del personaje, y… Ah, sí, el cómic… Pues a Spiderman le duele la cabeza y se pega una leche bien guapa contra una chimenea. Poco más.
Spiderman le habla a Maciza de que ¿Octopus? envenena a todos a los que le importa, Maciza le pega una paliza y le dice a Octopus que ha sido tremendamente fácil. El buen doctor desenmascara a Spiderman y se le queda mirando con pena y… Se acaba el número. No sé vosotros, pero yo no me he enterado de nada.
El resumen del cómic podría ser que Spiderman está enfermo y encabronado, Octopus tiene una crisis de madurez de esas que hacen que gente entrada en años persiga a chavalillas a las que triplican en edad y Maciza es básicamente la versión Tumblr de Titania. Y eso, que Octopus echa de menos que Spiderman se ría de él. Ah, y Kaine es muy misterioso.
JM DeMatteis es un gran guionista, y en Spiderman es conocido por una pequeña historia llamada la «Última cacería de Kraven». Con los años acabaría cargándose a Harry Osborn y hasta al Doctor Octopus en esta misma historia, pero estos trabajos no tendrían ni la mitad de calidad ni repercusión y caerían en el olvido. Este cómic en realidad no tiene mucha tela que cortar, Spiderman está enfermo porque el Buitre lo ha debido de envenenar en un número anterior, pero a la vez tiene flashbacks de haber estado metido en un tanque de clonación y duda de su propia identidad. Octopus por su parte esta dudando de las decisiones que ha tomado en su vida, sabe que el final esta cerca y parece querer enmendar sus errores. Mientras tanto, Maciza es un personaje plano y andrófobo que a su vez parece tener una dependencia enfermiza de Octopus, como si este último la hubiera creado en un laboratorio.
¿A quién quiero engañar? Me acuerdo de Maciza, y me acuerdo de esta historia. Ella en realidad es una chica más bien feucha y acomplejada a la que Octopus trata de hacer feliz creándole un cuerpo de «holograma sólido» con el que sentirse fuerte y atractiva. En agradecimiento, Maciza se enamora de él y así empieza la relación enfermiza entre los dos. DeMatteis en esta historia trata de contar lo más parecido a una redención de Octopus que puede escribir, y el resultado queda totalmente ahogado entre todo el ruido de la saga del clon. Esta historia podría haber ido a alguna parte si el trabajo de Bagley no fuera tan mediocre -por no decir malo- y si el personaje de Kaine no tomara parte en la historia, pero como era la saga del clon tenía que salir el susodicho y tenía que matar a Octopus. Kaine es un Hypertormenta, uno de esos villanos sin ninguna personalidad ni interés que se cargan a otro villano mejor que ellos para demostrar su valía, pero que en último término no dejan de ser unos Poochies de la vida.
La semana que viene nos toca JM Straczynski y Mike Deodato recordándonos por qué todo lo anterior a Brand New Day no es recordado ni debe ser recordado, volveremos con The Amazing Spider-Man 514 y «Sins Past».